Efecto del alcohol
- Solo sera un fin de semana, ___ - insistió mi mejor amiga.
- Un fin de semana con el idiota mayor. - rodee los ojos y seguí caminando por el pasillo.
- El ni siquiera nos va a molestar. - de reojo vi que hacia ojos de cachorro abandonado.
- Parece que no conoces a tu hermano. - me detuve en la puerta principal del colegio y la mire.
Hayle tenia toda la semana rogándome para que la acompañara a su viaje de fin de semana. Y debo admitir que me moría por ir. Playa, chicos, mi mejor amiga, sin adultos, el único problema es que a esta ecuación se sumaba su hermano mayor. Harry.
Hablando de ese simio, esperaba a Hayle junto a su auto con una sonrisa de galán característica de el.
- Creo que ya te vas, Hayle - le dije a mi mejor amiga con la vista clavada en Harry.
Harry al sentir mi mirada guiño un ojo en mi dirección, de mi parte solo recibió una seña de la cual mi abuela no estaría orgullosa.
- Tu también puedes venir, dulzura. - levanto un poco la voz para que lo escuchara.
- Prefiero que me pase por encima un camión. - le sonreí falsamente.
- Mañana nos vamos, ¿Lo pensaras? - Hayle agito sus largas pestañas intentando lucir adorable.
Asentí fastidiada y camine en la dirección contraria. No había mucho que pensar, no le daría a Harry Styles el gusto de fastidiarme el inicio de vacaciones.
- Anne llamo - mi madre rompió el silencio que había al comer. - Dijo que espera que fueras a pasar el fin de semana con Hayle y Harry. - sonrió.
- Hayle hará hasta lo imposible por que yo vaya. - lleve a mi boca un poco de brocoli. - No lo haré. - hable con la boca llena.
- No hables con la boca llena y claro que iras. - Esa sonrisa clásica malvada de mi madre estaba en su rostro y ni siquiera lo había notado.
- ¿De que hablas? - la mire sorprendida.
- Te hace falta salir, tienes que darme nietos. - Limpio la comisura de sus labios con una servilleta.
- ¡Tengo veinte años, mamá! - dije escandalizada.
- Los bebés no se hacen en un día, tranquila - beso mi frente y salio del comedor victoriosa.
Tenia que estar bromeando, ¿Acababa de decir que me obligaría a ir? Claro que no.
- Te ves linda con tu ropa de playa, dulzura. - Harry me recibió con sus característicos comentarios.
- Vete al demonio. - lo hice a un lado y subí mis maletas a la camioneta de los Styles.
- ¡___! - grito mi mejor amiga con emoción. - Sera el mejor fin de semana de nuestras vidas. - un poco mas de emoción y Hayle saldría disparada de su asiento.
El viaje en la camioneta fue todo menos tranquilo. Harry y Hayle peleaban mucho mas solo porque sus padres no venían con nosotros. Y yo quedaba en el medio.
- Podemos compartir habitación, Ángel. - Harry me miraba por el retrovisor.
- Es la mejor idea del mundo, Harry. - Dije con fingida emoción. - Nos pintaremos las uñas y hablaremos de chicos. - di un grito agudo.
- Y tendríamos sexo. - imito mi grito y luego estallo en carcajadas.
- ___ preferiría suicidarse antes de hacerlo. - Dijo Hayle comiendo una bolsa de frituras.
- Exacto - Mire fijamente a Harry por el retrovisor.
Eran solo dos días, dos días de soportar a Harry pero tenia a Hayle y eso no era tan malo.
Su casa en la playa era hermosa y muy grande. Según Harry igual que su miembro, Es un idiota.
- Ya sabes cual es mi habitación, nena. - me guiño un ojo y se dirigió a las escaleras - Y ya sabes, grande y hermosa. - hizo un gesto gracioso con las cejas haciéndome sonreír.
Saque la sonrisa de mi cara y volví a mi misma expresión de siempre.
Me di media vuelta y observe la playa, era un hermoso paisaje. Sera mejor que no deje que Harry me arruine el fin de semana.
- ¡Fiesta! - dijo Hayle mientras bailaba sobre la cama. - Vamos a ser anfitrionas de una fiesta, ¿Podrías emocionarte un poco? - bajo de la cama de un salto.
- Fiesta - rodee los ojos mientras me colocaba mis aretes.
Hayle había olvidado mencionar que la primera noche había planeado una gran fiesta a la cual asistirían todos los chicos que vivían en los alrededores. No estaba nada mal.
- ¿Están listas, señoritas? - Harry nos recibió en la cocina con un vaso rojo en su mano. - No beban nada que les ofrezca un extraño. - dio un sorbo a su bebida.
- Iré a poner algo de música. - Dijo Hayle con entusiasmo y se fue dejándonos solos.
Sentí la mirada de Harry recorrerme de pies a cabeza con lentitud, me removí incomoda.
- ¿Terminaste? - cruce los brazos tratando de esconderme
- No, ¿y tu? - recargo su peso en la barra de la cocina.
Hice lo mismo con Harry, esta noche vestía una camisa gris, sus botas cafés y los clásicos pantalones negros rasgados. Odiaba que luciera tan bien con algo tan sencillo.
- Desaparece de mi vista. - tome uno de los vasos que Harry había preparado.
Styles dejo su vaso a un lado y dio unos pasos acercándose a mi, mas de lo normal.
- No tienes porque estar tan a la defensiva, dulzura - susurro en su oído.
Cerre los ojos al sentir el calor de su cuerpo demasiado cerca del mio. Tenia un ligero aroma a alcohol pero su colonia lo cubría casi todo.
- Nos vemos. - dejo un beso en mi mejilla y se alejo desapareciendo de la cocina.
Abrí lentamente los ojos, tenia la piel de gallina y su perfume se había quedado en mi nariz dejándome aturdida.
La fiesta había resultado una gran idea, parecía ser que todos los adolescentes de la ciudad estaban aquí. Hayle y yo nos la estábamos pasando de maravilla.
- Luego entramos a su casa y robamos a su hamster. - Hayle les narraba una historia al grupo de chicos que nos rodeaba pero yo ya no prestaba atención.
Me sentía incomoda ya que el grupo con el que Harry se encontraba estaba justo enfrente y el no dejaba de mirarme. No tenia ninguna exprecion en el rostro solo me miraba casi sin pestañear.
Ambos estábamos algo ebrios, lo sabia por sus ojos brillosos y oscuros.
- ¿Recuerdas, ___? - Dijo Hayle llamando mi atención.
- Ah. - aparte la vista de Harry para ver a su hermana. - Si, lo recuerdo. - sonreí ligeramente.
Hayle siguió con su anécdota así que yo volví mi atención a Styles pero el ya no estaba ahí. Di el ultimo sorbo a mi vaso y me levante de mi lugar.
Al entrar a la cocina destape una botella y di un largo sorbo.
- ¿Que tal la fiesta? - sentí su cálido aliento viajar por mi cuello.
Baje con lentitud la botella y me di media vuelta. Harry tenia ambos brazos a mis costados dejándome atrapada entre sus brazos.
Toda mi vida lo había visto como el idiota hermano mayor de mi mejor amiga pero esta noche con el cabello revuelto y las copas de mas que ambos llevábamos encima no se veía tan mal.
- Bastante interesante - levante el rostro provocando que nuestras narices se rozaran.
Nadie hablo, solos nos miramos a los ojos mientras el aliento del otro nos golpeaba en los labios. Solo hacia falta un centímetro mas y sentiría sus labios sobre los míos. Sentía la sangre hervir por todo mi cuerpo y mi respiración agitarse. Una parte de mi que seguía sobria no podía creer que me estuviera muriendo por besar a Harry Styles.
- Lo mismo digo - Harry hablo con lentitud provocando un pequeño roce de nuestros labios.
Sus manos se posaron sobre mi cintura, su tacto estaba quemándome. Así que deje que mis manos vagaran por su amplio pecho hasta llegar a su cuello. Al llegar ahí estampe mis labios con los suyos. Era un beso voraz, sus labios y los míos se movían con rudeza. Sentí su cálida lengua pedir permiso para entrar así que entre abrí los labios dándole libre acceso. Su pecho estaba tan pegado al mio que lo sentí gruñir cuando nos separamos buscando oxigeno.
- Caracoles. - la voz de Styles se escuchaba mas ronca de lo usual.
Ambos rompimos en carcajadas al analizar lo que el castaño acababa de decir.
- Esto no volverá a pasar. - Tome un vaso lleno esta vez y le di un trago.
- Y ni lo mencionaremos. - dijo el castaño.
Nos sonreímos mutuamente y nos fuimos en diferentes direcciones.
Para ser un idiota no besaba nada mal pero esto no volvería a pasar.
Espero les gustara! :) Subire pronto la segunda parte.
Preguntas randooooom
¿Que harian si encuentran a su debilidad en la cocina? Yo se que harian ;)
Besoooos
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