- ¿Cuánto falta para que Yusaku se de cuenta que no hemos regresado? - pregunto Takeru con un suspiro. 

Ambos se vieron el uno al otro. Podían pasar años antes que su compañero se diera cuenta que no habían regresado. Por suerte para Takeru aun quedaba bastante historia que contar, lo suficiente como para esperar a la hora de cierre de la empresa, que la pareja del de cabello bicolor se enfadara al darse cuenta que su novio no ha regresado y lo iría a buscar para golpearlo por dejarlo plantado en la entrada del edificio esperando para que lo llevara a su casa. 

Astral comenzaba a preocuparse porque no había podido comunicarse con Yuma, no había forma para decirle que llegaría tarde a casa. 

- Así que... después de eso comenzaron a salir en secreto ¿cierto? - pregunto Takeru volviendo a sentarse en el suelo.

- No... no podíamos tener una relación por mi compromiso con Akari, ninguno de nosotros teníamos el valor para... avanzar de ninguna forma... 

- ¿No se besaron ni nada? 

Astral negó. 

- Aun estaba amenazado por Akari... y no quería jugar con Yuma... si no lograba romper el compromiso prefería que... él no pensará que había tratado de jugar con él.

*-.-*-.-*-.-*

El primer año de Universidad de Astral y Akari había sido tranquilo, ambos llevaban su compromiso como siempre lo habían llevado, con la misma indiferencia que en un principio aunque con Akari siendo más protectora con Yuma acercándose al asaltacunas de su prometido.

Y aunque eso pudiera soñar muy mal, Tsukumo Akari sabía que Astral no tenía malas intenciones con Yuma. Incluso el hecho de ir en contra de las tradiciones de su familia al estar tomando supresores (porque si, lo había descubierto un día al revisar su mochila) era algo que se lo confirmaba. Aun así, no significaba que bajaría la guardia dejando a Astral cerca de su hermano menor. Claro, Akari no intervenía cuando veía cómo su prometido lo ayudaba en ciertas clases o cuando este le llevaba algún regalo pequeño. 

Fue a principios de otoño cuando su rutina se vio arruinada. 

- Llevaremos a cabo la boda en primavera - anuncio su madre mientras buscaba algo de ropa para su hijo menor - esta noche tendremos la fiesta de compromiso oficial, nos acompañaran varios socios de tu padre, así que necesito que seas amable, Astral ¿entendido? 

- Si... 

Nunca se había negado a nada que decían sus padres. Simplemente aceptó todo lo que su madre decía obedientemente, se puso el traje que ella había preparado aunque no le gustaba, fue a la aburrida fiesta donde anunciarian el compromiso al que estaba obligado, fue amable con los socios de su padre que no le agradaban y hacían comentarios innecesarios acerca de los Omegas o de la suerte que tenía de estar comprometido con una Alfa como Akari. Iba a soportar todo en silencio. 

- Quiero romper el compromiso - al menos hasta que Akari le dijo eso estando en privado - pero si sigues actuando como la marioneta de tus padres no podré hacer mucho. 

- ¿Qué?

- Vamos... cualquiera notaría que estas enamorado de Yuma, no eres bueno ocultándolo. Pero no te preocupes, nuestros padres son algo idiotas al no darse cuenta... y Yuma no se da cuenta de sus propios sentimientos, aun es muy joven. 

- Creí que me habías dicho que no me acercará a Yuma por lo ocurrido...

- Y no me hiciste caso. En su lugar buscaste una receta de supresores para Alfa con la intención que eso no volviera a suceder.

Astral estaba sorprendido. Veía a Akari que estaba frente suya cruzada de brazos, recostada en la pared viéndolo fijamente, esperando su respuesta. 

- Yo... 

- No tienes que responder ahora. Sé que es complicado tomar una decisión cuando nunca has tomado una en tu vida... pero asegúrate de tomar una decisión antes que llegue la primavera.

Akari se despidió con su mano mientras caminaba hacía otra parte del salón donde se encontraban celebrando. Soltó un suspiro mientras veía la copa de champagne que sostenía en sus manos, no estaba seguro de lo que tenía que hacer. Realmente estaba enamorado de Yuma, sabía que era su destinado, pero enamorarse y arruinar todo lo que sus padres habían planeado para su futuro era algo que salía de sus manos. 

Sintió como alguien lo abrazaba por la cintura, no se sorprendió al ver al Omega más joven a su lado.

- Yuma - llamo cariñosamente poniendo su mano en el cabello del menor. 

- No te había felicitado por el compromiso con mi hermana - dijo alejándose un poco - digo... sé que están comprometidos desde hace mucho, pero... ahora es oficial ¿no? incluso hay una fecha para la boda. Así que... felicidades, supongo que ahora seremos cuñados. 

- ¿Estas bien con mi boda con Akari? - pregunto mientras veía preocupado a Yuma.

El menor de ojos carmesí no dijo nada inmediatamente, se acerco al balcón y se sentó en la orilla de este, estaban en un primer piso, no había más de unos dos metros de caída y varios arbustos que podían amortiguar la caída, de todas formas, Astral se acerco para poder sujetar al Omega si llegaba a suceder algo. No quería que se lastimará. 

- No es como si pueda oponerme o algo... estamos hablando de mi hermana, una Alfa, además, fue una decisión entre nuestros padres... No es como si... me escucharan si... dijera algo... 

Sabía que era cierto. 

No había algo que Yuma dijera para que sus padres pudieran cambiar de opinión. Podían dar el discurso más inspirador del mundo que su padre simplemente haría oídos sordos al tratarse de un Omega. Pensó en lo que le había dicho Akari unos minutos antes, no sabía como iba a ser capaz de enfrentarse a sus padres. Primero estaba la diferencia de edad, Yuma a penas estaba comenzando la secundaria cuando él ya se encontraba en la universidad. Y luego estaba el hecho que el menor era un Omega y sus padres estaban en contra que él contrajera matrimonio con un Omega por considerarlos inferiores. También podrían agregar la actitud enérgica y algo aniñada de Yuma que muchos consideraban poco atractiva, aunque era algo que Astral amaba del menor. 

Estos puntos daban lugar a sus padres a protestar que más que una relación de pareja, Astral tendría que actuar como la niñera de Yuma por el resto de su vida. 

Sonrió a la vez que tomaba la mano de Yuma, beso rápidamente el dorso de la mano del menor provocando un sonrojo en este. 

- Si fuera posible... ¿aceptarías casarte conmigo? 

La pregunta fue demasiado repentina, la cara de Yuma estaba completamente roja. Comenzó a moverse nerviosamente mientras decía frases sin conectar. Para Astral era algo tierno... al menos hasta que Yuma casi saltaba del barandal y ambos cayeron hacía los arbustos que se encontraban abajo del balcón donde se encontraban. 

*-.-*-.-*-.-*

- ¿En verdad se cayeron? - pregunto viendo a su compañero. 

- Fue... algo inesperado... Yuma no se lastimo, pero yo termine con un brazo roto por haber caído sobre un grifo donde conectaban la manguera para regar las plantas... 

- Que mala suerte... 

- Si 

Miro la puerta que se encontraba cerrada a su lado. Mientras contaba la historia comenzaba a impacientarse para regresar a casa donde seguramente su novio lo esperaba con la cena lista, entre más se acercaba al final de la historia de como se volvieron pareja sus deseos de verlo eran mayores. 

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A este punto Astral solo quiere salir e irse a su casa xD y Takeru esta igual de ansioso, pero le gusta el chisme.