Habían pasado unos días desde el incidente en la bodega. Era el día de la inauguración del parque de atracciones de Kaibaland y, aunque habían pasado algunos inconvenientes por una especie de hackeo, la noche de la presentación paso normalmente. Habían presentado parte del trabajo que habían realizado para Kaiba corp(1) (o más bien su jefe de grupo, Fujiki Yusaku, lo había hecho mientras ellos dos se quedaban de pie atrás de este) y habían pasado algo de tiempo en la fiesta. 

Claro que había llevado a Yuma como su pareja. Aun era incómodo para ambos las miradas que muchos les daban al darse cuenta de la diferencia de edad, no ayudaba en nada que el Omega menor aparentara menos edad de la que realmente tenía. Era incómodo, más nada a lo que debieran tomarle importancia además de los molestos comentarios que surgían de vez en cuando. Dieron un recorrido al parque aprovechando algunas de las atracciones que continuaron abiertas por la noche en favor a la inauguración del parque y regresaron al hotel por ahí de la media noche. 

El Omega se encontraba tan cansado que se había negado incluso a caminar hasta el hotel. 

- Estoy agotado - se quejo mientras era cargado en la espalda del mayor.

- Había olvidado que, a pesar de tu tamaño, pesas más de lo que aparentas - suspiro Astral dejando a Yuma en la cama. 

- ¡Claro que no! - se quejo haciendo un puchero mientras halaba a su pareja para que se acostara a su lado. 

Sabía que su novio lo decía solo para fastidiarlo, la dulce sonrisa de este que era acentuada por las festivas luces fuera del cuarto de hotel provocadas por los fuegos artificiales se lo confirmaban. Odiaba tanto como Astral se podía ver como un ser casi celestial con aquella iluminación, con los fuegos artificiales reflejándose en sus ojos heterocromáticos. 

Habían pasado tantos años desde la primera vez que se vieron y la mirada de Astral siempre lo atrapaba como la primera vez, aquella vez que solo era un niño de 5 años y se había sentido atraído por aquel niño que se encontraba indefenso bajo la lluvia, con un color de ojos tan peculiar. 

- Nunca lo hicimos oficial - hablo el mayor de repente. 

- eh? 

- Nunca... hemos hecho nuestro compromiso oficial... - continuo sentándose a la orilla de la cama - y... no quería comprar esto con el dinero de mi familia, no quiero que ellos estén involucrados en esto... por eso... 

Del bolsillo de su saco había sacado una pequeña caja de terciopelo. Los fuegos artificiales fuera de la habitación se reflejaban en las delgadas líneas de ópalo azul del anillo(2) que el Alfa mayor sostenía en sus manos mientras mantenía aquella suave sonrisa en su rostro. Sus palabras fueron un suave susurro.

- ¿te casarias conmigo?

- Idiota - susurro abrazando al mayor, poniéndose de rodillas sobre la cama para ocultar su sonrojado rostro en el cuello del mayor - ¿en verdad aun tienes que hacer esa pregunta? 

- Es una formalidad - susurro correspondiendo al abrazo - ¿debo asumir que es un sí?

- ¡Idiota! - volvió a repetir. 

Astral rió suavemente. 

- Observación No.39... a Yuma le avergüenza aceptar que estamos oficialmente comprometidos.

- ¡Deja de hacer tus tontas observaciones! - se quejo alejándose y haciendo un puchero - no me avergüenzo de nada... y creí que ya lo habías dejado ¿cuando llegaste a la 39(3)? 

- Nunca he dejado de hacerlas. 

- Ya... es un habito muy extraño, deberías dejarlo.

- ¿No te gusta?

- ... - el silencio otorga - supongo que... esta bien si las haces cuando estamos solos... 

Astral volvió a sonreír. Acercó al menor para volver a abrazarlo mientras con una de sus manos colocaba el anillo en su dedo anular, beso el dorso de la mano de Yuma. Cerro los ojos y dejo que el aroma a fresas lo embriagará como la primera vez que se encontró con el Omega, beso una parte cerca de la clavícula del Omega provocando en este un escalofrío. 

- A-Astral... No te dejaré ir... es una promesa - susurró recostándose en el hombro del Alfa - así que, no me dejes, tonto. 

- Nunca lo haría. 

Aunque tuviera que volver a enfrentar a su familia o la sociedad que los veía como otro matrimonio arreglado, aunque todos estos expresaran su descontento ante aquella relación... nunca se alejaría de Yuma. Porque estaba seguro que su destino era estar juntos. 

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(1) Referencia a los capítulos 185 "Comienza el Kc Grand Prix" y 186 "El comienzo de la conspiración" de Yu-Gi-Oh! Duel Monster y el capítulo 34 "Together" de... Together xD por cierto, me di cuenta mientras escribía que aun tengo los capítulos 185 y 186 descargados desde que escribí ese capítulo de Together.

(2) Realmente no sabía bien que tipo de anillo le daría Astral a Yuma, creo que fue por eso que me tarde el doble en este capítulo... pero la verdad es que el ópalo me hace pensar, entre muchas otras, en esta escena: 

(Que alguien se atreva a decirme que la keyshipping no es canon después de ver esta escena ♡)

(3) Según la información de la Wiki de Yu-Gi-Oh!, la última observación que hizo Astral fue la 22 en el capítulo 11 de la segunda temporada en la versión original y era: "Ocasionalmente los humanos no son honestos en expresar sus sentimientos... sea como sea, los amigos son algo buenos". Elegí que fuera el número 39 por hacer referencia a Número 39: Kibo ou Hope (Utopia) y también un cómic keyshipping que comencé a leer en Devianart que se llama de la misma forma, Observation No. 39 de StellaB, el arte esta precioso y la historia esta comenzando, por si desean buscarlo esta en inglés. 

Creo que esta vez tuve más notas xD lo más gracioso es que esta forma de aclarar los puntos me recuerda un poco a cuando cito en un trabajo, el trauma (?). Bueno, llegamos al final, si soy honesta no me convence tanto pero... es un Spin Off, tampoco se esperaba demasiado de esto ¿cierto? 

En otras noticias, ya estoy preparando un fic original 100% dirigido a la Keyshipping simplemente porque los amo y no hay mucho material de ellos lastimosamente. Claro, es posible que no salga pronto porque quiero terminar con lo que he comenzado, así que... no esperen nada de mi n.n'

Eso es todo, gracias por leer y hasta la otra!