ACTO II (Treceava Escena)

Escena XIII: La interrupción en la clase de Matemáticas en el aula del quinto B por parte de Velina Lone

Fecha: 2 de marzo del 2019 (Tarde)

Lugar: El salón del quinto A –Segundo piso− Colegio Cartas de la Cruz

Personajes:

· Velina Lone

· Alboho Vulmeno

· Luley Linte

· Samita Murtoli

· Leonto Sunte

· Dirulo Gimo

· Leanjo Rufa

(Descripción del lugar: El salón del quinto B es un aula amplia que posee las siguientes características. En el lado izquierdo del escenario, se muestran varias carpetas de color blanco y negro junto con sus sillas de colores blancos y negros. Atrás de las carpetas, se puede mostrar los lockers que sirven para almacenar los objetos de los estudiantes. En el lado derecho del escenario, podemos apreciar una pizarra blanca y, al lado izquierdo de ella, se encuentra el escritorio del tutor o docente. Arriba de la pizarra, se cuenta con un panel multimedia que sirve para realizar presentaciones en Power Point. Al lado derecho de las carpetas, se puede observar cuatro ventanas abiertas que se hallan cubiertas de una cortina azul.)

(Se abre el telón) (Ingresa Alboho Vulmeno caminando al escenario por el pasillo izquierdo)

(Alboho Vulmeno lleva unas fichas de matemáticas y una escuadra de madera en su mano izquierda. Alboho Vulmeno lleva unas diez páginas de hojas bond en su mano derecha) 

(Alboho Vulmeno se dirige al escritorio y espera parado hasta que los demás estudiantes lleguen)

(Ingresa Luley Linte y Samita Murtoli caminando al escenario por el pasillo izquierdo)

Luley: (alegre) Samita, quisiera que el recreo durara un poco más, porque disfruto estar contigo. No me gusta pasar tiempo en casa, ya que mi hermano lo complica todo. Me siento avergonzada de tener un chico tan anormal dentro de mi casa. Ojalá fuera una hija única y espero que no vaya a mi propia universidad.

Samita: (sonriente) Luley, Igaro es el único que necesita terapia en toda la promoción. Realmente necesita alejarse de nosotros ese chico, porque nos va a contagiar de su actitud femenina. Mejor hablemos de artistas guapos como Niall Horan o BTS. Si te molesta Igaro, entonces todas las chicas iremos para reclamarle cualquier cosa.

Alboho: (serio) Buenas tardes, señoritas. Les recuerdo que la clase comenzará en unos instantes, porque sus compañeros varones no se dignan en regresar al salón. Espero haber aclarado sus dudas, porque no lo repetiré una vez más. Todavía están jóvenes para mandarse solas al igual que el resto del salón.

Luley: (alegre) De acuerdo, profesor. Tal vez tengas ganas de ir al baño, pero no quiero interrumpir su clase de una manera inesperada. Mi amiga Samita le cuesta aprobar los exámenes de matemáticas, porque no entiende ningún contenido relacionado con los números. ¿Le podría ofrecer algunas clases particulares a Samita? 

(Samita agacha la cabeza y comienza a derramar lágrimas de su rostro)

Samita: (entristecida) Luley, en realidad me van mal en otras materias. Sin embargo, prefiero enfocarme en resolver mis asuntos con mis calificaciones antes de que termine el año. Cuando era pequeña, no podía contar con las manos, porque me ponía nerviosa. Perdón, pero no puedo aguantar más. 

(Samita Murtoli levanta su cabeza y sigue llorando sin cesar)

(Alboho pone su brazo sobre el hombro y Samita pone el hombro en el profesor)

Alboho: (cariñoso) Samita, tranquila, porque trataré de encontrar una forma de ayudarte en el curso. Cuando era joven, solía destacarme por poseer habilidades numéricas, pero nunca me creía como un excelente alumno a pesar de los reconocimientos que obtenía. Definitivamente, hubiera deseado tener alguien que me hubiera apoyado en ese momento.

(Ingresan Leonto Sunte y Leanjo Rufa caminando al escenario por el pasillo izquierdo) 

(Leonto Sunte lleva un celular en su mano izquierda que muestra el juego de Candy Crush)

Leonto: (desanimado) Leanjo, mi celular no tiene muchos datos para seguir jugando. Mi celular tiene poca batería y no sé qué hacer. ¿Tienes algún cargador que me puedas prestar? Me angustia pensar en no poder jugar por mucho tiempo. Es como si me desconectara del mundo.

Leanjo: (comprensivo) Leonto, ¿Por qué le tomas tanta importancia a los videojuegos? A veces suenas muy repetitivo con ese gusto y no te fijas en otras cosas como los deportes o los cursos. En mi caso, me agrada aprender idiomas, pero no me concentro solo en eso.

Leonto: (desanimado) Si no tengo un juego para pasar el tiempo, me siento solo o incomprendido. Cuando me encuentro en la calle, no suelo dirigirme hacia las personas, porque me siento raro entre el grupo de gente. No soy tan extrovertido cuando no estoy jugando.

Leanjo: (comprensivo) Entiendo tu preocupación, amigo. Es complicado integrarte a la sociedad, pero es necesario para sobrevivir. En el mundo profesional, vas a necesitar trabajar en equipo. Nunca subestimes a una persona, porque todos tenemos potencial en cumplir lo que deseamos. Te voy a abrazar para que veas cuánto te quiero, Leonto.

(Leanjo pone su brazo sobre el hombro de Leonto)

Leonto: (desanimado) Me siento mejor, Leanjo. Aunque quisiera que mi celular permaneciera prendido durante varias horas. Además, las clases de esta escuela son repetitivas y a veces me canso de escuchar las mismas lecciones de vida o los temas redundantes una y otra vez.

Leanjo: (comprensivo) Querido amigo, creo que podremos conversar después sobre mi problema, ya que infiero que el profesor no desea escuchar nuestra conversación personal dentro de su clase. Lo dejamos para después, Leonto.

(Alboho golpea la pizarra y todos los alumnos lo observan, ya que se escucha muy fuerte)

Alboho: (comprensivo) Señor Leonto, observo que anda muy entristecido en la sesión de hoy. ¿Ha pasado algo o puedo continuar con la clase? Sé que solo soy tu maestro, pero también cuentas conmigo para lo que necesites. Recuerda que debe haber una mente sana para poder aprender.

(Leonto respira profundamente y se logra calmar) 

Leonto: (calmado) Profesor, me tomaré la molestia de explicarle que no deseo hacerle perder su tiempo en solucionar mi problema. Si me pondrá papeleta, le doy permiso para que llame a la profesora Ista. En caso de que ella me llame la atención, entonces la obedeceré. Además, mi rol como estudiante es acatar las órdenes del colegio.

Alboho: (serio) Leonto, sería una buena idea que te compraras una botella de agua. Ustedes no pueden comprar en el comedor, pero les autorizo para hacerlo en este momento. Aprovechen, porque si la madre Murta se entera voy a estar en serios problemas. A ella no le agrada que los alumnos anden vagando por el colegio cuando toca clase.

Leanjo: (amable) Profesor, mi amigo parece que prefiere dejar sus problemas de lado para enfocarse en la clase. Necesita un poco de atención, pero en otro momento. Si fuera en otra ocasión, entonces seguro mi compañero logra sentirse con más confianza para revelarle sus malestares personales. 

Alboho: (serio) Leanjo, cumples un rol fundamental en el bienestar de Leonto. Todos solemos tener momentos inestables, pero es importante saber controlarlos. Necesito que seas el soporte de apoyo para tu amigo. Si de verdad lo quieres, debes tener paciencia con su malestar.

Leonto: (comprensivo) Maestro, tal vez haya alguna manera de alargar la clase para que Leonto se distraiga de sus problemas personales. Lo quiero, pero también respeto que usted continúe impartiendo su curso hacia los demás miembros del salón. Asimismo, considero que los chicos quizás se encuentren aburridos por esperar a que empiece la clase. 

(Alboho se dirige a la pizarra y después al escritorio) (Alboho deja las fichas, su escuadra de madera y las hojas bond encima del escritorio)

Alboho: (serio) Chicos, ya comenzamos la clase. El día de hoy tocaremos el tema de las figuras geométricas. Presten atención, porque les tomaré una práctica en una semana sobre esas figuras. Les repartiré estas fichas para que vayan llenando sus nombres y apellidos.

(Ingresa Dirulo Gimo caminando al escenario por el pasillo izquierdo)

Dirulo: (incómodo) Profesor, ¿Puedo pasar al salón de clases? Soy consciente de que estoy llegando tarde, pero no quiero tener conflictos graves con usted. Sería una buena opción que entrara sin molestarle mucho.

Alboho: (comprensivo) Dirulo, no es una molestia. Solo te recalco que debes llegar temprano, porque la puntualidad es un valor importante para nuestra vida. Si alguna vez tienes una entrevista laboral, llegar tarde no será una buena opción.

Dirulo: (incómodo) Maestro, lo lamento por llegar atrasado, pero no se volverá a repetir. Le prometo que la próxima vez vendré antes de que el timbre suene. Me demoré, porque estaba almorzando lo que mi madre me envió. Ella buscaba a la directora, pero no estaba.

Alboho: (comprensivo) Me parece extraño que la madre Murta no se encuentre presente, porque siempre para atendiendo a los padres de familia. Quizás le pasó algo y bueno puedes pasar al aula, Dirulo. Tal vez le habrá ocurrido algún evento a la madre Murta.

Dirulo: (incómodo) Gracias, profesor. Me mantendré callado mientras continúa explicando la lección de hoy. De esta manera, usted podrá seguir enseñando con tranquilidad mientras me encargo de prestar atención a lo que diga.

(Luley, Samita, Leanjo, Leonto y Dirulo se dirigen a sus carpetas)

(Leonto y Leanjo se sientan adelante enfrente del escritorio del profesor Alboho)

(Luley y Samita se sientan al lado derecho de los chicos) (Dirulo se sienta detrás de las chicas)

(Alboho Vulmeno coge las fichas blancas y se dirige a cada carpeta para entregar una ficha a cada uno de los chicos y chicas)

Alboho: (serio) En esta ocasión, hablaremos de los triángulos. Existen tres tipos de clasificaciones como según la longitud de sus lados y sus ángulos. En el caso de los lados, podemos encontrar a los triángulos equiláteros, isósceles y escalenos. En el caso de los ángulos, se pueden hallar triángulos rectángulos, obtusángulos y acutángulos.   

(Ingresa Velina Lone caminando al escenario por el pasillo izquierdo)

Velina: (amable) Profesor, la directora ha sido secuestrada por un chico que se hace llamar el Brujo. Necesito la ayuda de todos los chicos para detener este secuestro de una vez por todas. Esperemos que la madre Murta no fallezca o termine en el hospital.

Alboho: (serio) Velina, gracias por avisar. Alumnos, acompañemos a Velina para la oficina de la directora Murta para detener esta posible terrible situación. Levántese de sus carpetas y vámonos de una vez.

(Luley Linte, Samita Murtoli, Leanjo Rufa, Leonto Sunte, Dirulo Gimo y Alboho Vulmeno se retiran caminando del escenario por el pasillo izquierdo)

(Velina Lonel y Alboho Vulmeno se retiran caminando del escenario por el pasillo izquierdo)

(Cierre del telón) (Fin de la escena XIII)

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