ACTO I (Segunda Escena)
Escena II: La ignorancia de la promoción de quinto de secundaria hacia Igaro en plena formación religiosa
Fecha: 2 de marzo del 2019 (Tarde)
Lugar: El patio principal – Primer piso− Colegio Cartas de la Cruz (Pueblo Libre)
Personajes:
· Igaro Linte Butino
· Danulo Munto
· Leanjo Rufa
· Gufilo Batila
· Ista Nultez
(Descripción del lugar: El patio principal es un espacio amplio que consta de los siguientes aspectos. En el lado izquierdo del escenario, se muestran dos arcos de fútbol coloreados de color blanco que se hallan encima de un piso coloreado con verde, varias líneas rojas y muchas líneas blancas. En el piso, se hallan varias bolsas que contienen comida podrida y vómitos de color blanco. Al frente de los arcos, se halla un aro de baloncesto para los deportistas. En el lado derecho del escenario, se observa el mismo piso descrito. Encima del piso, se encuentra un altar religioso que contiene una escultura de María y el niño Jesús. A los dos lados del altar, se encuentran estantes de madera que sirven para hablar con el micrófono. Estos estantes servían para llevar a cabo las ceremonias religiosas cada lunes.)
(Se abre el telón) (Ingresa Igaro Linte caminando al escenario por el pasillo izquierdo)
(Ingresa Ista Nultez caminando al escenario por el pasillo derecho)
Igaro: (incómodo) Buenos días, maestra. Me da gusto verla, pero espero que no me ponga tardanza por llegar un poco atrasado. Me dirigí en un autobús hacia el colegio con mi pasaje, pero hubo un montón de tráfico como si los carros fueran tortugas andantes en la pista. Perdón si ya comenzó su clase o la de otro profesor.
Ista: (estricta) Buenos días, Igaro. Has llegado veinte minutos tarde, pero esta vez te salvaste de llevar una papeleta. La formación no ha empezado, porque ningún alumno ha llegado además de ti. Recuerda que a partir de hoy te entregarán tu agenda y la tendrás que llevar todos los días que toquen venir a este colegio.
Igaro: (incómodo) Está bien, profesora. Solo le recalco que tuve problemas para venirme en autobús, porque los autos se demoraban en transitar por la pista. A mí no me importa que mis compañeros lleguen o no. Yo me iré al comedor para comprarme un snack o lo que sea, porque no he desayunado.
Ista: (estricta) Claro que no, jovencito. Usted se va a quedar aquí parado para esperar a sus compañeros. ¿No está enterado de que son una promoción y deben permanecer unidos hasta que egresen de este colegio? Le pido tener un poco de compañerismo con los demás a través de su paciencia para esperar a todos por su llegada a este centro educativo.
Igaro: (incómodo) Profesora, ¿Me puede dejar comprar tan solo una botella de agua? ¿Por favor? Le pido que entienda el hambre que tengo por desayunar. Seguro usted no tendrá apetito, pero yo lo tengo y además ya me dan ganas de ir al baño. Si pudiera entenderme, no estaría en discordia conmigo y me dejaría ir.
Ista: (estricta) No me faltes el respeto, Igaro. Si me vuelves a responder como lo estás haciendo, te ganarás una cita con la directora y le explicarás tu altanera actitud en frente de ella. Espero que tu pantalón negro no se mache con tu orina, porque tendrás que aguantarte hasta que acabe la formación.
(Ingresa Danulo Munto caminando al escenario por el pasillo izquierdo)
Danulo: (amable) Hola, Igaro. ¿La formación ya comenzó o todavía no empieza? Te noto muy nervioso, porque no me dices nada. Espero que no te pase nada malo en tu vida. Dime por favor si es que la profesora ya llegó. Solo deseo que me respondas para escucharte.
(Igaro empieza a mover sus manos de forma temblorosa)
Igaro: (nervioso) ¿Yo? La profesora ya llegó y ando esperando junto a ella. Si quieres podemos hablar de nuestras vacaciones o de otro tema. No quiero hacerte sentir mal en ningún momento así que propón de que podemos hablar. Si quieres puedo abrazarte, porque eres de los pocos chicos que me da confianza.
Danulo: (grosero) No te confundas, Igaro. Tú y yo no somos amigos como para que me interese tu vida. Eres tan anormal que ni siquiera sabes comportarte como un joven varonil de tu edad. Hablas como una chica, porque un hombre jamás es tan inseguro o infantil como tú. Asimismo, te sugiero que madures de una vez.
(Igaro apreta sus puños y hace temblar sus brazos para expresar su disconformidad)
Igaro: (enojado) Danulo, mejor resérvate tus palabras para que no te golpee con mi mano. No querrás conocer mi carácter, porque estoy a punto de explotar toda mi rabia hacia ti. ¿Qué tiene malo ser diferente a los demás chicos? Mis intentos por hablar bonito no son femeninos así que estás totalmente errado.
Danulo: (grosero) ¿En serio? ¡Vamos a ver qué opinan los demás de tu conducta afeminada! ¿Acaso vas a llorar como lo hiciste en quinto de primaria? ¿Otra vez? ¿Sabes que nadie de la secundaria puede aguantarte y por eso todo el mundo te quiere lejos de sus vidas? La directora quiere contratar una psicóloga para curar tu anormalidad, Igaro.
Igaro: (enojado) ¿Y crees que seguiré apartado de los demás por mi supuesta personalidad femenina? ¡No entiendo por qué te enojas tanto conmigo si yo no te hecho nada! ¡Ahorita me dan ganas de pegarte una paliza en tu cara hasta que te salga sangre de tu nariz!
Danulo: (grosero) No seas tan idiota, Igaro. Ni siquiera te interesa hacer deporte como para que sepas defenderte. Solo paras escribiendo como una mujer anciana mientras todos los demás chicos estamos siendo hombres de verdad. ¡Un chico de nuestra edad debe aspirar a tener un cuerpo de un musculoso atleta capaz de conquistar a varias mujeres!
Igaro: (enojado) ¿Perdón? Yo ni siquiera tengo interés en conseguirme novia, porque solo veo a las mujeres como amigas. Tampoco me gustan los hombres, porque a veces me recuerdan a varones machistas como tú. Yo solo anhelo sobrevivir este último año de secundaria para poder recrear los momentos felices que nunca tuve en esta escuela.
(Ingresa Gufilo Batila caminando al escenario por el pasillo izquierdo)
Gufilo: (burlón) Hola, Igarete. Espero que no te olvides de pasar por el baño de mujeres para que te laves tu cara con agua y jabón. No se te olvide ir a la peluquería para quizás adquirir una peluca falsa para verte más marica, Igarita. Ni siquiera pareces un chico de verdad, porque vive una mujer dentro de ti.
Igaro: (enojado) ¿Tú también quieres que te haga daño? ¡Ojalá te encuentres preparado para recibir mi ira! Cuando estemos en el salón, les voy a insultar cuántas veces me dé la gana. Empiece a hablarme bien o conocerán toda mi rabia que no les conviene en que la llegué a mostrar.
(Gufilo se toca su corbata con sus manos y luego coloca sus manos en los bolsillos de su pantalón negro)
Gufilo: (serio) Igarete, compórtate como un caballero y hablemos como jóvenes de quinto grado de secundaria. Tu carácter infantil e impulsivo te limita a crecer o integrarte a la promoción. Nadie quiere estar al lado de un chico tan raro como tú, porque das lástima por ser tan diferente de todos los chicos.
Igaro: (enojado) Gufilo, ¿Acaso nadie te dice que eres tan denigrante con tus comentarios? Apuesto a que no sabes la definición de la palabra empatía, porque no sabes ponerte en mi lugar. Simplemente atacas como si tuvieras toda la razón en lo que dices, ya que no sabes tolerar las diferencias que mantengo contigo.
Gufilo: (serio) Igaro, siempre me molesta tu carácter maricón acerca de mí. Me hablas como si fueses una morra tóxica con ganas de molestar. Mejor cambia tu forma de hablar, ya que te hace ver menos joven de la edad que tienes. Si fueses un poco más maduro como yo, estarías de acuerdo conmigo.
Igaro: (enojado) Cuando termine la formación, no te quejes que me encuentre observándote con una cara fea. Me dan ganas de vomitar cada vez que mencionas algunas de tus frases que me irritan. Deberías a aprender en tolerar el comportamiento de los demás.
Ista: (serio) Chicos, creo que no habrá oración así que partiremos al aula. Nuestro salón se encuentra en el segundo piso y es el quinto C. Recuerden que no pueden tener celulares mientras las clases comiencen ni cuando yo estoy presente.
(Ista Nultez se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo)
(Danulo Munto se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo)
(Gufilo Batila se retira caminando del escenario por el pasillo derecho)
(Igaro Linte Butino se retira caminando del escenario por el pasillo derecho)
(Cierre del telón) (Fin de la escena II)
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top