Niall.

Estaba borracho como culo, no podía levantarme ni por si acaso a ir a dar el concierto que teníamos programado para hoy, en diez minutos nos iban a sacar del hotel, pero realmente no quería, solo quería estar solo en casa, sin hacer nada. Extrañaba tanto mi vida, sin problemas, sin complicaciones, además la madre de la que era mi supuesta hija había muerto, jodida mierda. No quería seguir metiéndome en más líos y estos aparecía en mi vida.

Esa chica había arruinado mi vida, no pienso que estuvo bien lo que paso, pero en mi mente trato de pensar una y otra vez cuando me metí con ella, pero no, nada aparece en mi jodida memoria. ¿Cómo fui tan imbécil de no cuidarme?

Mi vida se fue a la mierda cuando perdí a Francia, ella era la única que me mantenía en un límite de cordura, pero desde que mi ex mejor amiga me dejo de hablar no supe como expresar todo lo que estaba sintiendo con este nuevo y agobiante mundo, mi privacidad estaba siendo totalmente alterada. Ya no podía ser simplemente yo, no podía cantar la música que me gustará, todo estaba terriblemente mal y el dinero era lo único que me estaba moviendo.

Me abracé a mi almohada, cerré los ojos para reprimir las terribles ganas que tenia de llorar, quería volver a tener dieciséis, volver al día antes de la audición, cuando Francia estaba acostada junto a mi viendo "Quiero robarme a la novia" y que solo la soportaba por su terrible obsesión con Patrick Dempsey. Recuerdo lo nervioso que estaba ese día, había creado un discurso para por fin declararme a la que era mi mejor amiga, hasta que ella fue al baño y a su celular le llego un mensaje de Robin.

"Hey bonita, entonces mañana a las siete en el cine ;)"

Recuerdo, que mi corazón se destrozó completamente, ella no sentía lo mismo, me obligue a olvidar, adicionaría solo para alejarme un tiempo, para no quebrar nuestra amistad, pero fue para peor, nunca volvimos a ser los mismos.

No podía creer tampoco que ahora tenía una hija, nunca pensé que tendría una hija así, todavía no me creo que sea mía, no la puedo querer como yo quisiera, no la siento mi familia, es una simple niña que me dice papá. Pero yo no quería eso para mi vida, yo quería ser el mejor padre del mundo, con una gran familia, donde tuviera tiempo, quería madurar más, pero, me era tremendamente imposible.

Golpeteos en la puerta hicieron que todas mis ideas se alejaran.

-Niall baja ya nos tenemos que ir- no reconocí la voz, pero creo que iba a vomitar, intente moverme, pero fue peor, ahora sí que iba a vomitar

Francia.

Mi cabeza iba a reventar en cualquier momento, ayer después de visitar a Maura quedé alterada, no pude dormir y como nunca el gobierno se dignó a mandar todas las fichas de las chicas que teníamos en el orfanato. Trataba de distraer mi mente, pero Niall seguía en ella.

"Él quiere verte Fran"

¿Cómo iba a perdonarlo? ¿Realmente cree que era así como así? Entendía su vida de famoso, entendía que tal vez podría cambiar levemente, es lo normal cuando las personas les das algo de pantalla, pero no creí que su cambio fuera así. No quería ser una resentida de mierda, pero necesite tanto a mi mejor amigo.

El solucionaba mi día solamente con sus abrazos, caí muy profundo sin él. Yo era una persona extremadamente tímida, los últimos meses de escuela fueron del terror, no solo por mis calificaciones si no todo. Mucha gente se aprovecha de lo mal que estas y vaya que si pasaba.

Mi pecho ardía recordado cada cosa que tuve que vivir y aun que intentaba hoy en día pensar positivo no podía dejar de pensar en que le paso a mi Niall. Tomé un poco más de café para comenzar otra ficha, pero fue imposible, aún más cuando finalmente ayer con mi novio no celebramos su logro, no cuando solo lo que hice fue llorar en su pecho sin explicarle nada. Me sentía tan culpable.

Un fuerte ruido en mi ventana me distrajo de mi tortura mental. Una piedra, había sido lanzada a mi oficina, no reaccione hasta que la señora Lois llegó corriendo a mi oficina, la mire y sentí miedo.

- ¿Que fue eso Fran? -miro el vidrio

-No...no lo sé -dudosa

Me levante de mi puesto, para ver la piedra que había sido lanzada, me llamo la atención que en ella traía un mensaje.

"Sabemos que viste a uno de los nuestros, mantén el silencio, preciosa o acabaremos con lo que quedo pendiente aquella noche" - P

Quede petrificada ¿Que mierda era todo esto?

Estaba sentada mirando como Max esperaba nuestros cafés, este nuevo Starbucks era realmente necesario en Mullingar, era totalmente renovado, a comparación del antiguo que estaba en el centro comercial, en este se sentía un ambiente agradable, mantenía una temperatura perfecta y la suave música de fondo podía relajarte, pero ni lo cómodo de este lugar me quitaba los nervios que sentía al recordar lo sucedido hoy en el trabajo. Ellos sabían de mí, ellos sabían dónde trabajaba y seguramente sabían dónde vivía, eso me asustada.

Buscaba la manera correcta en mi cabeza, para poder decírselo a Max, para que no se preocupara de sobremanera, pero hasta yo estaba así, estaba cagada de miedo, ¿Cómo le trasmitía que todo estaría bien?

Mi chico llego con mi latte, movía su cabeza, seguramente tenía una canción en su mente, me sonrío dejando ver sus lindos hoyuelos y recién notaba como se había cortado su cabello. Era tan guapo.

-Gracias-hable bajito-...me gusta el nuevo corte-sonrió

-Ya sabes, la ceremonia es dentro de poco-bebió su frap- ¿Qué pasó? -me miro a los ojos

- ¿Qué? - pregunté ¿De verdad este hombre me conocía tan bien?

-Se nota que estas incómoda cariño, algo paso ¿Tuviste problemas en el trabajo?, sabes que puedes decirme lo que sea nena- dejo su bebida para tomarme las manos

-Max...-no me di cuenta cuando ya había comenzado a llorar- tengo miedo-trataba de calmarme, pero era imposible, recordando el claro mensaje que había entrado a mi oficina de manera tan violenta

-Nena... tranquila-termino por abrazarme- Hey estoy yo para cuidarte, si tuviste otra vez esos sueños sabes que no son reales, estamos aquí, tu y yo, ya sabes nada pasar-lo interrumpí

-Me amenazaron Max- se me escapó un sollozo- En....en el trabajo llegó una amenaza-dije por fin, sentí como mi novio se tensó de inmediato,

- ¿Qué? -él ahora trataba de procesar lo que le había dicho

- Hoy estaba terminando papeleo, cuando-trataba de calmar mi respiración- una piedra quebró mi ventana de la oficina, ellos saben que los vi Max, saben dónde mierda trabajo, tal vez saben hasta donde esta nuestro hogar- ya estaba escondiendo mi rostro en su pecho

-Hijos de puta- soltó- pueden hacer esa mierda, te lo prometo amor, nada ni nadie te hará daño, yo estoy para protegerte, creo que igual sería sensato ir a la policía a dejar constancia, tal vez podrían poner un policía para que cuide el lugar...

- ¿Sabes que quiero? Volver a ese maldito día y haberme quedado esperando en la pizzería

-Tranquila amor, estás conmigo, sabes que ambos somos el mejor equipo y tú eres una chica fuerte-limpió mis lagrimas- tienes que mantenerte firme, por ti, por tus padres, por tu hermano y la pequeña que ahora te adora, eres una persona excepcional, no sabes cuánto te amo- me beso la frente- saldremos de esta y ningún idiota podrá impedirlo

Miré a Max y agradecí tener a este ángel conmigo, no podía estar con nadie más que él, terminamos nuestros cafés, para luego ir en camino a casa.

"Bueno, bueno gente, eso fue Losing my religion" escuché la radio "antes de pasar a la canción de este artista, nos llegó la noticia que el famoso Niall Horan integrante de One Direction no se presentó para el concierto de ayer en la noche, varias personas dicen que estaba terriblemente borracho" mi corazón se estrujó "espero que el chico retome el rumbo que alguna vez tuvo ¿Tu qué opinas?"

¿Qué le habían hecho a Niall?

Antes de seguir pensando en él, Ayleen vino a mi mente, el miedo me tenía paranoica para ir a verla ahora libremente, tendría que dejar de visitarla por lo menos un tiempo, no quería que esos malditos psicópatas llegarán a la niña. Me había prometido protegerla y creó que aun que ella me odie, tendría que hacerlo. Miré a Max, el noto mi vista fija en él para estirar su mano y llegar a mi muslo, sentí sus caricias, creo que era momento de ser egoísta un poco y ver por nosotros.

-Te amo-solté

-Yo más Fran-sonrió

-Pero lo digo en serio, gracias por lograr que estuviera más tranquila, pensé que te pondrías como una señora histérica-me reí

-Estoy como señora histérica, pero eso te haría peor a ti-rio- pero tranquila, amor, ahora pensemos que vamos a hacer luego de mi ceremonia de graduación

- ¿Íbamos a ir a cenar con tus padres no?

- Sí, pero eso no es para todo lo que queda de tarde...-hubo un silencio- A la mierda no me aguanto- se estaciono fuera de nuestro edificio, lo mire extrañada

- ¿Qué pasa?

-Lo iba hacer, en el almuerzo con mi familia, pero sabes lo ansioso que soy- saco de sus jeans una pequeña caja

-Max...- esto no podía estar pasando

-Se que somos jóvenes, pero sé que eres la mujer de mi vida, no estamos pasando por el mejor momento, pero creo que toda esta mierda se va a solucionar-creo que me pondría a llorar, mi corazón estaba palpitando a mil por hora- no puedo imaginarme a nadie más que tu envejeciendo a mi lado, creó que soy un afortunado haber conquistado a una chica tan guapa, tan buena e inteligente, eres fuerte amor y realmente quiero aprender más de ti lo que me resta de vida- sip, ya estaba llorando- ¿Te casarías conmigo Francia?

Creo que me desmayé