ཻུ۪۪⸙ ❬ ❍̥͙̊ ࿔ ˖۪⸙͎ ំஂchapter nine
ICONIC, enzo vogrincic
veinticuatro de enero, 2020
montevideo, uruguay

1/2
( maratoncito <3 )

           La noche transcurrió normal, me la pasé entre risas y anécdotas que contaban Bella y Rodrigo acerca de mí en la secundaria. O ventilaban cosas que yo había hecho cuando era más chiquita.

           Básicamente, me estaban quemando, pero no le dí importancia, era gracioso. En la mesa se encontraban bueno, mis amigos, Bella y Ro, después Horacio, su mujer Fabiana, Martín Barrenechea y Nicolás Branca, los responsables del películón que estamos grabando. Rogelio, Rafael... y Enzo.

             Lo noté muy callado, o era bastante tímido, o no se encontraba con la suficiente confianza como para meterse en las conversaciones. Sí, de vez en cuando charlaba y se reía junto a Rafael, Rogelio y Horacio. Pero a mí, digo- a nosotros, la juventud, no nos había dirigido palabra alguna en toda la noche.

             Igual, no es como si me importara. Ni si quiera nos llevabamos bien, lo invité más que nada por obligación. Sería el colmo que organizara una fiesta por mi cumpleaños con gente de la película, y no invitara al protagonista. Y más que nada, quería hacer lo que Nicolás me había aconsejado; llevarme mejor con Enzo. Para que las escenas salieran profesionalmente bien.

           Me dediqué a escuchar la charla interna que había entre Rafael y Enzo. El mayor me vió, así que alzó la voz un poquito para que pudiera escuchar, siguiéndome la corriente. Enzo asintió contento y le respondió — ... y bueno, desde chiquito me introduje en el teatro, que es hasta ahora lo que más disfruto hacer. Mi novia-

          Rodrigo se dió cuenta de que estaba parando la oreja, por lo que se acercó y me pellizcó el cachete. — ¿Qué onda? ¿Que tal ese asadito?

           — Rico, pero no tanto como el mio.

          Él se rió, llamando la atención de Enzo, quien todavía seguía charlando con Rafael, y ahora Horacio, que se había metido alegremente. — Paráa... el tuyo es al horno nomá', ¿qué te haces?

          Levanté los hombros. Sí, era verdad, pero no me importaba. — Yo te dije, haría el asado a la parrilla pero no me enseñás a prender el fuego. Así que te tocará aguantar mi asadito al horno. — sonreí.

          — Sí, porque Sofi la está rompiendo en la obra que hace junto a nuestros amigos. — ambos volteamos a ver de nuevo a Enzo, que nos miraba de reojo y había alzado la voz para decir eso. Rafael lo miraba extrañado, pero siguió conversando normal.

         — Momento incómodo... — susurró Bella, alternando la mirada entre Enzo, Rodrigo y yo. Alzó una ceja, como si hubiera descubierto. Como yo soy más lerda, y entiendo todo tres años después, fruncí el ceño.

            — Bueno, disculpen que interrumpa su charla, a todos. — habla Rodrigo, captando la atención de todos. — Hay una última sorpresa para la cumpleañera. — sin evitarlo, mi mirada se dirige hasta el torito, puedo jurar que rodó los ojos, como si estuviera harto. ¿Qué?

            Bella me sonrie, sacando su teléfono. — Espero que te guste, Trini. No sabés lo que costó conseguir esto. —Veo que busca algo en su galería y mi corazón se detiene cuando lo tengo en mis manos. Por la portada, ya me podía imaginar qué video estaba por reproducir. Aparecía el tipo con sonrisa hermosa, que siempre tenía un pucho en la boca, y esa mirada tan pura y achinada, sonriendo que me traía loca desde 2011. Sin pensarlo dos veces, aprieto play, con el corazón en la boca.

Shit, did you recorded that? Oh, hey, lovely. Someone told me that is your birthday. So, happy birthday, ¡Marrrti! I love you, sweetheart. Thank you so much for always stand by my side.
Im going to fly to Argentina in a couple of months! I hope see ya' there. I love you!

          Me mató.

          Con el acento británico, diciendo mi nombre. Podría desmayarme ahora y me chuparía un huevo. ¡LOUIS TOMLINSON ME HABÍA SALUDADO PARA MI CUMPLEAÑOS!

          No podía amar tanto a Astrid en este momento, deseaba que estuviera acá para abrazarla y agradecerle.

         Todos en la mesa se rieron por mi reacción, que seguramente era el rostro petrificado por la emoción. — No.... lo puedo... creer. — susurré. Pegué un chillido y solté el teléfono en la mesa, era el dia más feliz de mi vida.

          — ¿Quién era, Martu? — pregunta Horacio, curioso.

          — Un famoso que me encanta desde 2011, cantante de One Direction. Que... bueno, ya se hizo solista. — digo, dramatizando entusiasmada — ¡Se llama Louis Tomlinson!

         Una risa irónica se escucha en la mesa, nuestras miradas se dirigen a Enzo, quién está revolviendo su plato, desinteresado. Se está burlando.

        De mí.

        — Era obvio. Tenés pinta de ser una loquita psicotica por One Direction. — habla por primera vez para todos, mirándome. Este tipo me está hartando, va a llegar un momento en donde lo voy a ahorcar hasta matarlo.

       ¿Por qué lo dice como si fuera algo malo?

         Aprieto con fuerza el tenedor en mi mano, hasta que siento a Rodrigo colocar la suya encima, negando con la cabeza. — No tiene nada de malo ser fan de One Direction, tampoco. — defiende.

          La mesa se torna en un silencio incómodo, gracias al estúpido comentario de Enzo. Ruedo los ojos, ignorándolo, tratando de disolver este ambiente tan pesado. — ¿Qué tal la están pasando?

          — Re bien, Martu. Gracias, por esto, la verdad, lo necesitábamos. Hace cuánto no celebraba un cumpleaños durante el rodaje de una película. — le sonrío a Rafael. Me caía bien, era argentino, jaja. Pero tenía ese porte amable y tierno que te hacía querer abrazarlo y contarle todos tus problemas.

         — Perdón, tu amiga, Bella... ¿Te dijo Trini?

         Las dos nos miramos y reímos, asiento, recordando el por qué del apodo. — Es algo que tenemos desde que yo tenía dieciseis

         Martín Barrenechea asiente, sonriendo. Se sumerge en una conversación con Nicolás, supongo que seria, por como le cambió la cara. Seguro hablaban de la película.

         Necesito saber la razón de porque la están atrasando tanto.

         — Bue, bue... ¿Dónde es ahora? — pregunta Horacio haciendo una pistolita con sus manos. Le había enseñado esa seña y ahora no se la podía despegar, era un genio. Todos nos reímos, y es verdad. ¿Qué haríamos ahora?

            — Propongo ir a algún boliche. — dice Rodrigo, y nos damos la mano. Pensamos lo mismo, al mismo tiempo. Por algo éramos amigos.

          — Me parece que ese plan aplicaría para ustedes cuatro nomas eh... — dice Rafa, señalando a Enzo, a Bella, a Ro y a mí. Siempre trataba de incluirlo a Enzo, parecía su hijo. Ay, Enzo. ¿Quedaba mal si solamente me iba de joda con mis amigos?

           Sí, quedaría para el ojete y nos llevaríamos peor. — Bueno, dejen que la juventud disfrute. Nosotros los ancianos un té y al sobre. — jode Barrenechea, sacándome una sonrisa.

         — Eh, pero ustedes pueden ir. Horacio, Rogelio, y ¡Nico! Yo los re veo en la pista, eh. — los mencionados ríen negando con la cabeza. Hablaba en serio, ¿qué impedía que estos cuatro potros entraran al boliche?

         Miro mi teléfono, viendo la hora. 00:40. Estaba por levantarlo de la mesa cuando escucho a Rodrigo dirigirse a Enzo por primera vez en toda la noche. Ojalá le haya entrado en la cabeza lo que le mencioné, o el postre de la noche sería "Rodrigo a la Parrilla". — Crack, ¿Conoces algún boliche por acá, cerca?

        — Eh- puede ser el "Jackson Bar" — dice, observando su celular. — Es buenísimo.

       Rodrigo asiente, mirándonos a Bella y a mí.

        — Hoy se sale a bellaquear. — mi amiga niega con la cabeza, y yo hago un puchero.

       — Dale, Arabellaaaaaa.

       — No te pongas la gorra.

       — No, tengo que rendir pasado mañana teoría y no sé un carajo. — nos sonríe, un poco triste. Igual, sé que se está haciendo, porque no le gusta salir de joda. Si lo hace, es porque literalmente hay que poner un gatillo en su cabeza, o porque está de muy buen humor. Ojalá no se le chifle el moño y quiera llamarlo a Agustín. ¡Que llame al pelirrojo de la otra vez!

        — Le digo a Rafael que les pase la dirección, así van. — dice Enzo. Una parte de mí suspira aliviada, porque no quiero que mi primera salida en el año junto a mi mejor amigo de toda la vida y... el tipo con el que me llevo para el ojete.

       No creo que sea una buena mezcla.

       — Claro, te entiendo. — dije, pero a la misma vez, Rodrigo me interrumpió.

       — Vos conocés este lugar, genio. Llevanos.

         Me quedo estática. Realmente se me habían pasado las ganas de salir a bailar, y lo único que quería hacer era ahorcar a Rodrigo por dos cosas. Haber invitado a Enzo a la cena, y por haberlo invitado para que salga de joda con nosotros. El torito lo debe haber notado, porque niega con la cabeza, excusándose con que debe despertarse mañana. Pero Rafael lo interrumpe, diciendo que habían vuelto a atrasar por dos semanas más las grabaciones de la película.

        — Vayan a divertirse. — se encoge de hombros Martín, tomando un sorbo de su vaso. Nicolás asiente en acuerdo, levantándose de la mesa y despidiéndose de nosotros.

█▓▒░ nota ░▒▓█

Hola a todooooos, ¿cómo andan? Yo, re desaparecida, sorryyyyyy. Me operaron el paladar y estuve sedada pero las ideas no dejaban de surgir jajaksjf.

Les traigo este maratoncito de dos capítulos, pasen al siguiente <3

Se vienen cositas😈  lo mejor de todo, es que Martu y Enzo están en la época y PAÍS 🇺🇾de Rombai, Márama y Toco Para Vos. Así que, la jodita va a estar con todo!

Los quiero mucho, gracias por los 18k son los mejores. Jamás creí que la historia llegaría a este punto. GRACIAS, GRACIAS, MÁS, POR FAVOR. <3

Voten y comenten si les gustó, nos leemos en el siguiente capítulo, deslicen que les hice un maratón para compensar 💋💋💋