Segunda Actualización del día ❤
Ya solo queda un capitulo más de ésta bella historia. ❄💖

Espero les haya gustado mucho!

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─ Ya ha pasado un tiempo. ─ Dijo Yoongi al ver que esa mañana no había tormenta de nieve.

Taehyung estaba a su lado en la cama, pues compartían ya que les daba miedo que Jimin fuera a matarlo. Aunque últimamente el dios de la lava parecía simplemente ignorar la presencia de este, lo cual ambos agradecían. No había mucho que hacer más que esperar a que la tormenta cesara para poder viajar de regreso, pues Hoseok ya no se encontraba en aquel lugar.

─ Tal vez hoy podamos viajar de vuelta. ─ Comentó Taehyung.─ También creo que ya es tiempo de llamar al padre de Hoseok y hacerle saber que murió... de ICE Heart.

─ Creo que también deberíamos decirle a Namjoon. ─ Le dijo Yoongi. ─ Ya sabes, después de todo, Hoseok lo hizo por él.

Taehyung suspiró.

─ Supongo que será más fácil llamar a Namjoon primero. ─ Dijo.

Yoongi asintió y tomó su celular para marcar aquel número que ya no lo tenía bloqueado.

─ ¿Hola?

─ Hola, Nam. ─ Dijo Yoongi.

Mientras comenzaban a hablar alguien tocaba la puerta, de la habitación, Yoongi le hizo señas a Taehyung para que fuera a ver y éste se levantó para poder ir a abrir.

─ ¿Cómo está? ¿Cómo sigue Hoseok?

─ De eso te quería hablar, ¿Estás solo? ─ Preguntó Yoongi.

─ Seokjin está conmigo, estamos en su dormitorio... estudiando. ─ Comentó Namjoon con algo de pena, pues era cierto que si estaban estudiando, pero pasaba que probablemente Yoongi no le creería.

─ Él murió hace algunos días. ─ Le dijo Yoongi.

─ ¡Murió! ─ De fondo se escuchó a Seokjin gritando: "¡¿Qué?! ¡¿Murió?!"

─ ¡Está vivo! ─ Gritó Taehyung, pues Jimin había venido a contarles.

─ ¡¿Qué?! ¡¿Está vivo?! ─ Preguntó Yoongi al teléfono.

─ ¡¿Está vivo?! ─ Preguntó Namjoon y de fondo se escuchó a Seokjin gritando: ¡¿Está vivo?!

Taehyung comenzó a reír pues no podía contener la alegría.

─ ¡Está vivo! ─ Gritó y Yoongi los miraba incrédulo.

─ Parece que está vivo.─ Dijo Yoongi al teléfono.

─ Está vivo. ─ Le dijo Namjoon a Seokjin que ya había comenzado a llorar. ─ Idiota, nos asustaste. ─ Se quejó Namjoon.

─ Ya no tiene ICE Heart. ─ Le dijo Taehyung.

─¡¿Ya no tiene ICE Heart?! ─ Preguntó Yoongi.

─ ¡¿Ya no tiene ICE Heart?! ─ Preguntó Namjoon y de fondo se escuchó a Seokjin gritando: "¡¿Ya no tiene ICE Heart?!"

Taehyung asintió y Yoongi sonrió.

─ Ya no tiene ICE Heart. ─ Confirmó al teléfono.

─ ¡Wow! ¡Esas si son buenas noticias! ¡De estar muerto a no tener ICE Heart! ─ Dijo un feliz Namjoon y Seokjin se escuchaba feliz al fondo.

─ Ahora es el dios de las estrellas. ─ Comentó Taehyung.

─ ¡¿Ahora es el dios de las estrellas?! ─ Preguntó Yoongi, bastante asombrado.

─ ¡¿Ahora es el dios de las estrellas?! ─ Preguntó Namjoon y de fondo se escuchó a Seokjin gritando: "¡¿Ahora es el dios de las estrellas?!"

─ ¡Basta! Tenemos que dejar de hacer esto. ─ Dijo Yoongi molesto haciendo a todos reír.

Taehyung asintió y Yoongi sonrió.

─ Hoseok es el dios de las estrellas. ─ Le dijo a Namjoon.

─ Woaaa, entonces cada vez que veamos las estrellas, Hoseok tendrá que ver en ello. Increíble. ─ Dijo bastante feliz.

─ Bueno, adiós. ─ Dijo Yoongi y cortó la llamada sin más.

Taehyung lo miró con una sonrisa, pues Yoongi se cansaba rápido de hablar con la gente.

─ ¿Por qué me miras así? ─ Preguntó Yoongi.

─ Por nada. ─ Le dijo Taehyung. ─ ¿Deberíamos ir a buscar a Hoseok?

─ No. ─ Le respondió Yoongi. ─ Estoy seguro que estará un rato ocupado con su no novio dios del hielo.

Ambos comenzaron a reír y se miraron entre ellos con mejillas sonrojadas.

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Jungkook empujó a Hoseok contra la puerta de su habitación, acorralandolo mientras éste lo miraba algo sorprendido. Al parecer, aunque fuera un dios, Jungkook sería capaz de sorprenderlo de ésta forma.

─ Veremos que tan diferente es. ─ Le susurró Jungkook al oído mientras comenzaba a deslizar su mano por el cuerpo de Hoseok hasta llegar a la cinturilla de su pantalón.

Hoseok tragó saliva.

─ Debe serlo. ─ Le dijo sintiendo sus mejillas calientes y sorprendiendose de que sintiera ésto. Al parecer no era tan diferente como él había creído.

─ Tus ojos son diferentes.─ Le mencionó Jungkook, pues éstos mostraban profundas galaxias, así como los propios mostraban una tormenta de nieve.

Hoseok gimió cuando Jungkook metió su mano en el pantalón y tomó su miembro.Ambos se vieron a los ojos.

─ Quiero saber si tiemblas de placer.─ Le dijo Jungkook y Hoseok cerró sus ojos con fuerza mientras sentía la mano de Jungkook subir y bajar.

El dios del hielo sonrió al verlo temblar y suspiró aliviado, pues amaba ver a Hoseok así. El dios de las estrellas jadeaba con cada caricia y su cuerpo temblaba en anticipación a la siguiente. Jungkook se inclinó y besó sus labios, abrió su boca y dejó su lengua acariciar la contraria, tomando sus gemidos ahogados hasta que Hoseok se corrió apoyándose en la puerta de la habitación.

Sus piernas se tambalearon un poco y Jungkook lo tomó de la cintura con un brazo para que ambos se deslizaran al suelo.

─ Hoseok, sigues siendo tan hermoso. ─ Le dijo y el contrario sonrió mirándolo a los ojos. ─ Te extrañé tanto.

Jungkook quitó la ropa del camino mientras Hoseok recuperaba el aliento entre jadeos y suspiros enamorados. El dios del hielo dirigió su mano a la entrada de Hoseok y comenzó a acariciarlo.

─ ¿Podríamos llegar a la cama? ─ Preguntó Hoseok con una sonrisa mientras Jungkook negaba y mordía su labio inferior.

Tomó a Hoseok de la cintura y lo atrajo a su regazo, el contrario gimió cuando Jungkook lo ayudó a bajar sobre su miembro. Ambos se abrazaron entonces, mientras respiraban profundo, agradeciendo no haberse perdido el uno al otro.

Hoseok descubrió que ahora podía moverse sin cansarse, Jungkook sostuvo su cintura de todas formas, pues quería sentir su cuerpo temblar de placer. Quería sentir la piel de Hoseok.

El dios de las estrellas terminó primero entre espasmos y gemidos de placer. Jungkook lo observó terminar con una sonrisa enamorada mientras jadeaba, no tardó en llegar también y terminó adentro de Hoseok.

Luego lo cargó hacia la cama, aunque sabía que este no lo necesitaba ya. Aún así quería cargarlo y ambos se acostaron juntos en la cama.

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