Capítulo 30

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Muchas veces juzgamos a las personas por sus acciones sin siquiera entender el contexto de éstas. Simplemente porque no estamos de acuerdo con ellos o porque no nos gustó. Ciertamente, entender el contexto no siempre los hace merecedores del perdón, pero al menos sí de la comprensión.

Aunque solamente algunas personas irán más allá para intentar entender el por qué de las cosas, tal vez solo aquellas que verdaderamente ama.

Es muy fácil ponerse del lado de una persona y negar a la otra, y olvidar que muchas veces nos equivocamos al actuar desde el dolor o la decepción. Perdemos amigos, peleamos con familiares y luego, es demasiado tarde para arrepentirse.

La verdad es que nadie es perfecto y todos nos equivocamos más de alguna vez, y ganamos el odio de algunas personas.

─ No entiendo, ¿Por qué lo hiciste? ─ Le dijo Seokjin mientras Namjoon mantenía su vista en algún punto de la oficina de la asociación. ─ Tú no eres así.

─ Si lo soy. ─ Le dijo Namjoon.

─ Deja de mentir y dime que sucedió, por favor. ─ Le pidió el presidente.

─ ¡Es porque tengo tanto tiempo enamorado de tí! ─ Le dijo Namjoon. ─ ¡Nunca me notaste, ni siquiera una vez!

─ ¿Qué?

─ Te escuché cuando hablabas con los chicos al inicio del periodo, yo estaba haciendo el examen para entrar a la asociación, traía la prueba de mis buenas notas. Tú estabas con los chicos y ellos te preguntaron si te gustaba alguien de la universidad. Sé que no debí haber escuchado, pero tenía una gota de esperanza de que me hubieras notado aunque fuera un poco.

─ Namjoon... ─ Dijo Seokjin mirándolo con tristeza.

─ Dijiste que solamente te gustaba Hoseok, Jung Hoseok. Que era lindo y se vestía bien, dijiste que era adorable y que se miraba una persona interesante. ─ Namjoon no pudo controlar sus lágrimas. ─ ¿Sabes lo que sentí? Sé que no tenía derecho, pero aún así me dolió y me rompiste el corazón. Sabía que no era tu intención, pero no pude evitar sentir envidia de él, porque sin siquiera intentarlo tenía tu atención. Aparte de eso, él siempre andaba detrás de su amigo haciendo todo lo que éste le pidiera, sin siquiera notar que... sin siquiera notar que...

─ Ya, lo lamento tanto, Namjoon. Solamente fue un comentario, realmente no esperaba tener algo con Hoseok, ni siquiera lo conocía. ─ Explicó Seokjin.─ Fueron mis palabras descuidadas.

─ Y lo entiendo, creeme, no soy un imbécil. Intenté, realmente intenté entenderlo. Pero no podía evitar que doliera y por eso me acerqué a él. Quería entender por qué tenía tu atención, quería comprender qué me hacía falta.

─ Lo siento. ─ Le dijo Seokjin.

─ Deja de disculparte, no es tu culpa. ─ Le dijo Namjoon. ─ Ni siquiera lo sabías, fueron mis estúpidos sentimientos.

─ No son estúpidos. ─ Le dijo su novio. ─ Realmente soy feliz de que me ames.

Las mejillas de Namjoon se sonrojaron.

─ Pero, ¿por qué lo tenías que llevar tan lejos? Tanto como para decir que él está muerto, ¿Por qué, Namjoon?

─ Tenía miedo. ─ Le dijo. ─ Mientras yo estaba enfermo, enseñandote la peor parte de mí, tú te hacías cercano a Hoseok y creí que... tuve miedo de perderte. ─ Le dijo con lágrimas deslizándose por sus mejillas. ─ Creí que habiendo la oportunidad, me dejarías a mi por el chico que querías al inicio del periodo y...

─ Pero me quedé a tu lado, iba a estar a tu lado hasta el final.

─ No pude evitar sentir miedo. ─ Le dijo Namjoon. ─ Mientras yo estaba atascado con un calentador en el pecho, tú chateabas y hablabas con Hoseok.

─ Hablábamos de tí.

─ Se que no tiene sentido, pero es lo que sentí... es que... no soy nada a su lado. ─ Le dijo Namjoon. ─ Él es guapo, adorable, se maquilla, tiñe su cabello, se viste hermoso y baila, y es divertido. Hasta disfruté ser su amigo, verdaderamente lo hice aunque no quería. Yo... yo soy un nerd que ama leer libros, ni siquiera me fijé bien en la ropa que utilice hoy y ya no sé qué hacer con mi cabello morado y estas raíces.

Seokjin se rió de aquello.

─ Eres tan berrinchudo. ─ Le dijo. ─ Ni siquiera entiendo bien por qué te comparas con él.

─ ¡Porque te gusta!

─ No me gusta, tú me gustas. Con pelo morado y sin pelo morado. Solo cortalo. ─ Le dijo Jin. ─ Tu cabello café es adorable, no hagas ésto y discúlpate con Hoseok.

─ Me da vergüenza. Yo... ─ Namjoon suspiró. ─ ni siquiera entiendo bien por qué lo hice, no quería hacerlo. Tenía miedo. No creo que me perdone.

─ No creo que merezcas que te perdone. ─ Le dijo su novio acariciando su mejilla.

Ambos se miraron a los ojos y suspiraron. ¿Qué iban a hacer en esa situación? Seokjin simplemente no podía dejarlo sólo.

─ Podemos hablar con él juntos. ─ Ofreció. ─ No estarás solo.

Namjoon mordió su labio y asintió.

─La próxima vez habla conmigo antes de hacer algo así. ─ Le pidió Seokjin. ─ No seas tan inseguro, eres un gran chico.

─ Cielos. ─ Dijo Namjoon mordiendo su labio inferior.─ Debo decirle a todos que mentí, ¿No es así?

Seokjin asintió y Namjoon sacó su celular. Sería más fácil así, de todas formas la vergüenza la iba a pasar.

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Choi reía mientras Jungkook hacía un berrinche por no poder alcanzar a golpear la fruta que deseaba bajar del árbol con una piedra. Ésta saltaba intentando alcanzarla y giraba alrededor del árbol buscando cómo escalarlo.

Choi se sentó en el suelo lleno de hojas y abrazó su piernas colocando su cabeza en sus rodillas para descansar y suspirar. Jungkook se giró para verlo con una sonrisa.

─ Ven, hazme banquito con las manos. ─ Le pidió.

─ No quiero.─ Le dijo Choi.

─ ¿Qué? ¿Por qué? ─ Preguntó Jungkook frunciendo el ceño.

─ Te vi pisar caca. ─ Le contestó éste.

─ ¡Eso no es cierto! ─ Se defendió Jungkook.─ Ven aquí, Choi.

Choi se levantó riendo y comenzó a retroceder mientras aguantaba la risa al ver venir a Jungkook.

─ ¡Ocupo banquito!

─ ¡Que no! ─ Gritó Choi comenzando a correr entre los árboles.

Jungkook los siguió intentando alcanzarlo, pero las piernas de Choi eran más altas y ágiles, dejándolo un poco atrás. Choi llegó a la orilla del río y sus ojos se abrieron por el susto. Regresó corriendo a los árboles y chocó de frente con Jungkook.

─ ¡Auuu! ¡¿Qué haces?! ─ Se quejó Jungkook sobando su cabeza por el golpe.

Choi tomó su cabeza y tapó su boca con la mano, lo jaló hacia unos arbustos y allí soltó la boca del chico. Jungkook escupió e hizo mala cara.

─ Te huelen feo las manos. ─ Le dijo.

─ ¡Mentira! ─ Se defendió Choi en un susurro.

─ ¿Qué pasa? ¿De quién nos escondemos? ─ Preguntó Jungkook.

─ Kim Tae Hyung. ─ Dijo Choi enfatizando cada silaba.

─ ¿Y ese quién es? ─ Preguntó Jungkook frunciendo el ceño.

─ Iba a ser mi amigo, pero se alejó cuando se dió cuenta de los rumores. ─ Dijo Choi suspirando.

Jungkook se molestó aún más por verlo triste por ello.

─ Ya no lo necesitas. ─ Le dijo Jungkook y Choi le sonrió volviendo a abrazar sus piernas y a recostar su cabeza en sus rodillas. ─ Ahora me tienes a mi. Tu mejor amigo.

Choi rió un poco tapando su boca.

Entonces Jungkook quitó la mano y se inclinó dando un pequeño beso en los labios. Choi se sorprendió y parapdeó varias veces sintiendo sus mejillas quemar.

─ ¿Qué? ─ Preguntó a Jungkook.

─ Mamá y papá dicen que son mejores amigos. ─ Le dijo Jungkook. ─ Así se saludan.

─ ¿Q-Quieres que seamnos como tus padres? ─ Preguntó Choi con sus mejillas sonrojadas.

─ ¿Viejos? ─ Preguntó Jungkook haciendo reir a Choi.

─ Olvidalo. ─ Le dijo Choi pensando que tal vez Jungkook realmente no sabía lo que hacía.

Tal vez cuando fueran más grandes. Sonrió y volvió a descansar su cabeza en sus rodillas.

─ ¿Nos quedaremos escondidos aquí todo el día? ─ Preguntó Jungkook. ─ Quiero mi fruta.

Choi rió suavecito.

─ De todas formas no te haré banquito. ─ Le dijo y Jungkook volvió a fruncir el ceño.

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