Las suaves luces doradas se podían ver saliendo de la cueva donde residían los dos, Todavía estaba oscuro y la luna llena brillaba tan intensamente.

Es como si estuviera ansioso por algo. Gimientes y gemidos rompieron entonces el silencio de la noche,Ying Kong Shi se sorprendió por el beso. Estaba a punto de alejarse, pero Yan Da profundizó el beso. Trazó sus labios con su lengua, burlándose.
Ying Kong Shi a pesar de sus protestas gimió de placer. Luego cedió y cerró los ojos. Él abrió los labios y le dio permiso. Yan Da tomó la invitación.

Con su lengua, ella trazó el interior de su boca. Entonces ella le acarició la lengua para que jugara con ella. Terminando el beso con una mordida suave en el labio inferior de Ying Kong Shi, ella lo soltó y dejó que respiraran por un tiempo.

Ying Kong Shi podía sentir su corazón latiendo rápido, también podía sentir emociones diferentes trepando en su corazón Cariño, incertidumbre, lujuria y anhelo. Estaba desgarrado. Su mente le decía que esto no podía suceder. Sus tribus están en guerra, eso le Dolia

"Sólo por esta noche," su mente proporcionó. "Sólo por esta noche, somos sólo Ying Kong Shi y Yan Da. No es el príncipe de la tribu de hielo ni la princesa de la tribu de fuego."

Con ese pensamiento, cambió su posición para que estuviera encima de ella. Luego besó a Yan Da suavemente pero profundamente, transmitiendo los sentimientos que no podía decir en voz alta.

Profundamente en su pasión, los dos no notaron los vientos dorados de luz que salían de su cuerpo, tejiéndolos y entrelazándolos. A medida que alcanzaban su punto máximo, sus cuerpos estaban nuevamente envueltos por la luz dorada.

A diferencia de antes, sin embargo, esta vez la luz dorada era más sólida y brillante. En el cielo, la luna llena brillaba más intensamente. Si tuviera una cara, se podría decir que sonreía feliz y contento. "Un toque inició el vínculo, un beso lo hizo más fuerte. Su amor lo hizo solidificado, haciéndolo irrompible
pero este amor está destinado, ¿no lo ves? "La cueva en la que estaban en zumbido de acuerdo.

No era una cueva ordinaria.Si Ying Kong Shi, no estaba preocupado por distraído por Yan Da que podría haberlo notado antes. Antes de la primera luz de la mañana, Ying Kong Shi ya estaba despierto y decidió que era mejor que se fuera antes de que Yan Da se despertara.

No se arrepintio de lo que pasó anoche, en realidad lo amó y lo apreció, y cerró el puño: «Sólo las circunstancias eran diferentes». el penso
"Yan Da," susurró suavemente y sinceramente a la princesa del fuego durmiente. "Lo siento, sé que esto te hará daño, pero tengo que ir Antes de irme sin embargo, él le colocó un suave beso suave en su muñeca lentamente, tres pétalos de flor de cerezo se formaron en dicha muñeca. el la eligio como su compañera.