Jin mira con enojo al hombre de piel canela que estaba sentado frente a él; como un rey en su trono, pero lo que realmente molestaba al castaño era la estúpida sonrisa con hoyuelos que parecía burlarse de su persona.

—Quiero que me dejes ir ¡Ahora mismo! —señala con enojo—, no tienes ningún maldito derecho a tratarme así, no soy un objeto.

—Cariño, no puedo dejarte ir. Te recuerdo que hice un trato con tu hermanito Jungkook. —le recuerda, entre tanto, enciende un cigarro.

—¿Es en serio? —pregunta incrédulo— Nadie en el mundo con dos dedos de frente cree que se pueda comprar a una persona a cambio de un helado, no seas ridículo.

—No soy ridículo, soy un hombre de negocio que mantiene su palabra y si fue una broma de tu hermano, pues déjame decirte que le salió mal. Tú te quedarás conmigo.

El castaño niega con la cabeza y se levanta de la silla.

—Te lo voy a volver a repetir, no soy un objeto y si supones que no daré pelea, te equivocas.

—Pareces un cachorrito enojado. —suelta una risa jovial—. Y yo solo te lo diré una vez más, eres mío y yo haré contigo lo que quiera, tendrás que aceptarlo, lo quieras o no. Estarás a mi lado... O encima de mí, como quieras.

Jin lo mira patidifuso y con sus mejillas teñidas de carmesí.

—Esto debe ser una jodida broma.

—¿Me ves como alguien que hace bromas? —alza una ceja—. Solo tiene dos opciones cariño, irte y amanecer con la boca llena de mosca y tus intestinos como comida para perro o quedarte aquí y vivir como un rey, y lo mejor es que tendrás mi verga en tu boca.

—Maldito patán, no soy una puta a la que trataras como muñeca. ¡Quiero irme! —el castaño tiembla de ira, en su cuello se hace notar sus venas y Namjoon solo sonríe divertido.

Bueno, ya ve que no se aburrirá con su nueva adquisición.

Asiente. —Por eso te di dos opciones, tú decides. Aquí nada es obligado, puedo darte tiempo si lo necesitas.

—Eso a mí no me beneficia en nada, —grita, acercándose con intención de golpearlo, pero se detiene cuando los guardaespaldas avanza hacia él— maldito inútil, ni puedes defenderte por ti mismo.

Harto de la situación, el castaño decide salir del despacho para encontrar a su hermano, pero antes de cerrar la puerta puede escuchar claramente las palabras del moreno.

—Tienes hasta la mañana para decirme tu decisión, cachorrito.

Jin rueda los ojos y se encamina por los pasillos en busca de la voz de su hermano. Va a largarse de aquí, cueste lo que cueste.

Namjoon mira la puerta por dónde salió el chico y acariciando su labio inferior con el dedo, suelta una pequeña risa. Ese chico realmente es algo.

—Déjenlo que ande por el hotel, pero que no bajé del piso quince. Y armen las maletas, nos regresamos a Corea. —ordena Namjoon levantándose de su asiento, se gira hacia su guardaespaldas personal—. Estás a cargo de Jin; si algo le pasa, estás muerto. Te recomiendo no perderlo de vista.

Exhala un vaho de humo y sale de la habitación que ocupa como oficina en su estadía allí.

En otra habitación de dos pisos más abajo está Jungkook murmurando una canción, mientras hace zapping y mueve los pies dentro de la cobija que lo arropa hasta la cintura.

—¿Cuándo te callas?

—Cuando me dejes ver a mi hermano. —responde dándole una mirada al peli negro. Es más guapo de lo que pensaba el rubio y lo comprobó cuando este se sacó la chaqueta de vestir negra y se arremangó la camisa hasta los antebrazos.

Tiene brazos fuertes, como le gustan. Se relame los labios y vuelve a voltear hacia la pantalla.

—Eso no depende de mí, y deja un jodido canal.

—No quiero, déjame en paz y vete. —chilla cual chiquillo— me está dando hambre, pide comida.

—No soy tu cachifa.

—Pero me tienes encerrado aquí, así que haz lo que te digo.

—Ya me estás hartando, mocoso impertinente.

—No me importa~ —canturrea divertido. Cuando ve que el hombre se levanta del sofá y camina hacia él, Jungkook se levanta en la cama y le arquea una ceja desde arriba— Te acercas y voy a arrancarte la cabeza.

—Si pudiera ponerte las manos encimas, estarías chillando. —le señala con el dedo. Taehyung vuelve a sentarse en el sofá y recuesta la cabeza del mismo mientras cierra los ojos. Siente su celular vibrar y cuando lo va a tomar en la mesita que tiene enfrente, otra mano lo intercepta y agarra por él— Dame eso, me estoy cansando de tus jueguitos.

—No estoy jugando a nada. —responde el menor y cuando desliza el dedo en la pantalla, ve que se desbloquea sin pedir nada— ¿Por qué carajo tienes esto sin pin de bloqueo?

—Dame ahora mismo, Jungkook.

—Uy, sabes mi nombre. —esconde el teléfono a su espalda cuando Taehyung intenta arrebatárselo, suelta una cantarina risa y niega— Ahora necesito saber el tuyo.

—Mierda, dame. Puede ser mi jefe.

—No, no creo que lo sea. Dice Jackson. —lee caminando por la habitación— ¡Oh~! Mi hermano me está buscando.

Apaga la pantalla y le lanza el celular a su dueño, toma un albornoz que está en un buró y luego se encamina hacia la salida de la habitación, pero se detiene y luego voltea a ver el pelinegro que está tipeando en el teléfono.

—¿No me dirás tú nombre?

—Taehyung.

—Mh, bonito. Hasta nunca, Taehyung. —le saca el dedo medio como saludo y luego sale al pasillo donde camina buscando el ascensor.

—¿A dónde piensas que vas? —la voz viene de atrás, Jungkook voltea y le sonríe.

—A casa con mi hermano.

—No podrán salir del hotel, así que no lo intenten.

—Si tú lo dices, quiero ver a mi hermano, así que lo buscaré y luego nos la ingeniaremos para irnos. —cuando las puertas de la caja metálica abren, él entra. Taehyung murmura una maldición y lo sigue—. No hace falta que me sigas.

—No lo hago por gusto, es mi deber.

—No pongas de excusa eso, es tonto. Sé que soy bonito y me estás siguiendo como perrito faldero porque estás enamorado de mí, pero solo te diré que no te daré mi culo, muchacho. Ríndete. —aprieta el botón del piso 20, ya que ese es el piso que el mensaje tenía con la única de su hermano. Jungkook escucha la risa de Tae y se voltea a encararlo— ¿Qué?

—Tu ego está por las nubes, mocoso. —se acerca acorralarlo contra la pared y relamiéndose los labios, susurra: — Si quisiera follarte, solo me bastaría unos minutos-

—¿Minutos? Oh, eres precoz. —el menor suelta una risa que es callada en el momento en que una mano rodea su cuello y apretándolo contra la pared, tose un poco y luego mira al pelinegro con sorpresa—. Si me gusta lo rudo en la cama, pero no te pases.

—Te diré una cosa, deja de jugar conmigo. Mi paciencia tiene un límite y tú la estás agotando. —brama cerca del rostro del menor.

—Como si me importara mucho tu paciencia, querido. —susurra en tono plano, levanta su rodilla y golpea la entrepierna haciendo que Taehyung suelte un quejido para luego caer al suelo de rodillas.

El altavoz del ascensor anuncia que las puertas se abren y este se despide sacándole la lengua y sale, mira hacia el pasillo y ve a su hermano salir de una habitación.

—¡Jinie hyung! —chilla mientras lo abraza— pensé que habías muerto.

—¿Dónde estabas? —corresponde el abrazo y le acaricia el cabello.

—Dos pisos más abajo junto a un imbécil. ¿Y tú? ¿Sabes por qué estamos aquí privilegiados?

—No estamos privilegiados, Kook. Estamos secuestrados por un mafioso.

—¿Q-qué?

—Si, por tu culpa. —masculla, le da una palmada en el brazo y lo vuelve abrazar—. El tipo que te dio el helado es un mafioso, Jungkook. No se tomó tu intercambio como una broma.

—Mierda, la cagué.

—Sí, el jefe de este hombre —señala al guardaespaldas—, ahora dice que soy suyo y lo tengo siguiéndome a todos lados.

—Debemos irnos de aquí. —dictamina el menor y cuando voltea hacia el ascensor, frente a este está el pelinegro con el ceño fruncido y una mano en su entrepierna—. Jin, este es el precoz de Taehyung.

Jackson a sus espaldas suelta una carcajada y mira a su compañero sonrojarse mientras hace una mueca, Jungkook se ríe y entra al ascensor junto a su hermano.

De último momento se me ocurrió cambiarle el color de cabello a Taehyung, ahora es pelinegro.

En un rato actualizaré «Cartas para Seokjin» también es namjin, por si desean pasar apoyarme por ahí 🤗

Espero les guste el capítulo para que lleguen a comentar y votar. Nos vemos pronto.

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Así me imagino a los chicos en la historia. Namjoon está en el primer capítulo.