#Maratón

Actualización 1/3

Capítulo 34: El regreso de Sheila (Parte I)

NARRA IAN

Escuché el sonido del motor cuando se apaga afuera de la casa y apreté los ojos despertando, ¿qué hora era?

Noemí estaba acostada sobre mí en el mueble, ambos desnudos después de haber follado como 3 veces en todo el día y estábamos agotados, miré la pantalla de mi teléfono eran casi las 9 de la noche, tenía como 20 llamadas perdidas de Sheila y varios mensajes que decían que ya había aterrizado.

Mierda.

No la había ido a buscar al aeropuerto.

Me levanté dejando a Noe a un lado del mueble con delicadeza y miré por la ventana como Sheila se bajaba para arreglar sus maletas.

Dejé de respirar.

Joder, mi esposa estaba aquí.

Me apresuré hacia Noemí y empecé a moverla por los hombros mientras decía:

—¡Despierta, Noe!

Ella abrió los ojos algo confundida y yo empecé a recoger la ropa que teníamos alrededor de la sala con rapidez sintiendo que el tiempo estaba contra mí, en cuanto Sheila entrara por esa puerta todo iba a ser un completo desastre.

—¡¿Qué pasó?! —dijo Noe sobresaltada en su ensoñación mirándome como si se me hubiera soltado un tornillo.

—Llegó tu madre. —dije sintiendo el corazón en la boca.

De este error no sabía como iba a salir todo, no tenía claro lo que hablaría con Sheila, o lo que hablaría con Noe, lo que era seguro es que todo era un desastre y que si mi esposa nos encontraba así, iba a ser catastrófico.

¿Por qué fui tan impulsivo para casarme? ¿por qué compliqué tantos las cosas?

Ahora que veía el rollo en el que estaba metido, notaba la impulsividad de mis actos.

—¿Mi madre? —repitió Noe adormilada.

—Párate. —le dije mientras subía a la habitación rapidamente con mis ropas, era preferible que la encontrara incluso sola que conmigo al lado.

NARRA NOE

Cuando vi a Ian correr hacia las escaleras, fue que reaccioné y tomando mis prendas rápidamente fui a mi cuarto, fueron días que solo nos entregamos el uno al otro, que follamos por toda la casa sin agotarnos, solo sintiendo, sin saber las consecuencias de nada.

Que bueno fue vivir en la fantasía pero que malo era volver a la horrorosa realidad.

Me terminé de colocar la camisa cuando la escuché la puerta principal y luego la voz de Ian y mi madre cuando empezaron a saludarse.

—¡Amor!

—¡Amor!

Salí de mi habitación para asomarme a las escaleras y verlos, quería ver con mis propios ojos si todo fue producto de mi imaginación este tiempo que vivimos juntos e Ian fue solo mío...

Lo veía en sus ojos vidriosos, la manera de ver a mi madre con adoración y felicidad, él la eligió a ella y yo solo me metí en el medio queriendo desde el primer instante separarlos, como si siempre hubiera querido acapararlo para mí.

Lo tuve por un breve tiempo; toda su atención, pero sabía que era prestado, que yo era solo una distracción mientras su realidad lo esperaba.

Se besaron de manera apasionada con leves sonrisas que hicieron mis mejillas enrojecer de celos, porque veía que ambos estaban desbordando felicidad al reencontrarse.

¿Por qué estaba tan celosa?

Era mi madre... por Dios.

—Te extrañe tanto... —susurró Ian sobre su boca, él pegó su frente a la de ella.

—Yo más joder como te amo y ahora que estoy aquí nada nos va a separar —susurró mi madre.

Tragué pesadamente saliva sintiéndome la peor persona del mundo.

Se abrazaron y por un instante la mirada de Ian se tropezó con la mía, mis ojos se cristalizaron y una lágrima se escurrió por mi mejilla...

Entré en la realidad de que yo era la otra, me había convertido en la villana de una romántica historia de amor de dos almas enamoradas.

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HOLAAAAAAAAAAAAA CHICASSS!!! Hoy actualización porque Gloria me envió un correo electronico preguntandome que cuando actualizaría esta historia, gracias por leer conejita, así que para no decepcionarla subo una maratón :D recuerda votar :D