Capítulo 20: la boda de mi madre

Capítulo 20: la boda de mi madre

NOEMÍ

Mi madre parecía feliz ante mi rostro lleno de incredulidad y miedo.

¿Se iba a casar tan rápido? Si ayer estaban en una fiesta y todo iba marchando normal hasta que Ian nos descubrió a Theo y a mí en medio de nuestro momento íntimo.

¿Sería por eso que apresuraban las cosas? ¿por mí?

—¿Por qué decidieron adelantar la boda? —dije con las manos temblorosas.

No entendía por qué me afectaba tanto, sentía mi corazón taquicárdico al pensar en que oficialmente se casaran.

—Ian insistió —dijo mi madre pareciendo completamente feliz—, estaba harto de esperar y anoche... ¡ah! fue mágico, queremos que su primo esté, entonces ya vamos a casarnos.

¿Anoche fue mágico?

Apreté los labios, ¿iban a usar a Theo como excusa porque se iba hoy? Tenía demasiadas interrogantes, es decir me esforzaba mucho para no pensar en Ian follándose a mi madre, pero que mi mamá se expresara así, me hacía pensar que todo era por su capricho, que mientras se lo metía a ella, él pensaba en mí.

No basta, ¿pero por qué piensas eso Noe?

Debía dejar de lado el hecho de querer vengarme de él y pensar que a él le afectaba, es decir, si le afectara tanto, no se casaría con mi madre y estaría conmigo.

Así de simple.

Espera... ¿conmigo? No. Yo había renunciado a él.

Maldita sea, tenía mi cabeza revuelta.

—¿Pero tan rápido? —murmuré.

Sentía una horrible presión en el pecho.

—Sí —dijo mi madre—, de igual forma, siento que es mi esposo.

Claro, ya vivían juntos.

—¿Entonces para qué legalizarlo? —pregunté.

—Noemí... —dijo mi madre pareciendo de repente agotada de mi cuestionamiento.

—¿Tienen un acuerdo pre-nupcial? —pregunté, para alguien como mi madre que era importante y con dinero, eso de no hacer un acuerdo pre-nupcial no me gustaba nada, si se divorciaban Ian podía quedarse con todo.

—No, porque no nos vamos a divorciar —dijo mi madre con firmeza— y además todo lo mío es suyo y vicerversa.

Eso me parecía una estupidez.

Alcé una ceja.

—De seguro eso dijiste de papá —repliqué—, que no se iban a divorciar.

Mi madre le cambió el gesto a uno algo enfadado.

—En primera —dijo—, tu padre y yo nunca nos casamos, solo me apoyó contigo porque salí embarazada, pero apenas vio la oportunidad se fue.

Claro a mi me habían tenido por una noche descontrolada, luego no tuvo más opción que hacerse cargo de mí, pero no me quejaba, crecí rodeada de amor.

—¿No te voy a convencer de no casarte? —pregunté exponiendo mi última esperanza.

—No. —replicó.

Mi madre era tan terca como una mula.

—Oh, bueno, voy a ver que me pongo —dije dandome por vencida y levanándome de la cama sin querer nadar contra la corriente.

Ya sabía que esto iba a pasar, que mi ex del instituto estaba por casarse con mi madre, solo que, no creí que lo harían conmigo aquí, creí que solo sería una navidad llena de paz, no una navidad terrorífica y llena de sentimientos.

Estaba empezando a odiar diciembre, estaba empezando a arrepentirme por haber venido.

Me bañé y salimos hacia la prefectura, Theo estaba atento conmigo por lo de ayer, Ian al contrario estaba muy distante, podía notar que miraba a Theo con molestia pero fingida amistosidad.

¿Acaso estaba resentido? ¿se iba a casar por venganza a nosotros o... a mí?

Si lo hacía por eso, entonces era un completo idiota.

Después de que se casaron, sentí que todo era extraño y diferente, ahora era el señor y la señora Song Biché, el apellido de Ian y de mi madre.

Theo se fue, y ellos se iban a ir de luna de miel por la mañana, así que esta noche nos quedaríamos solo los tres, yo me encerré en mi habitación con los audifonos a todo volumen escuchando música mientras unas estúpidas lágrimas de las cuales ni siquiera sabía el significado se asomaban.

¿Por qué me dolía?

No lograba comprenderlo.

Solo sé que me quedé dormida.

***

A la mañana siguiente, me levanté al escuchar mucho ruido en la sala, bajé pasando una mano por mis ojos hinchados y me sobresalté al ver solo a mi mamá con la maleta y lista para irse, pero en cambio Ian vestía solo sus cortos pantalones y tenía aspecto de recién levantado.

—¿Ya se van a la luna de miel? —pregunté confusa.

—No. —dijo mi madre con una triste sonrisa.

—¿Por qué? ¿qué ocurrió? —dije sin comprender qué ocurrió anoche o si ya se iban a divorciar.

Si se iban a divorciar, iba a ser un completo alivio para mí.

—Me adelantaron el viaje de negocios —dijo mi madre soltando un suspiro—, pero esta bien porque volveré antes y podemos irnos de luna de miel para navidad.

Me la quedé mirando incrédula, ¿para navidad?

—Un momento —dije—, ¿por cuanto tiempo te irás?

—Solo una semana —dijo mi madre.

Me quedé sin respiración, ¿me iba a dejar una semana sola con Ian?

¡¿Qué?!

.

.

.

.

.

*************

Protegeme señor con tu espiritu... protegeme señor con tu espiritu... JAJAJAJJA! Esto se encendió. Ahora lo que viene es candela :D En otras noticias, fui al odontologo y me dejó una liga vieja rosada entre las nuevas plateadas, o sea realmente no entiendo qué le pasa, lo bueno es que pronto me quitarán los frenos :D.

Instagram, facebook, twitter: Ysaris Areinamo

Nos leemos pronto.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top