"El perfecto desconocido"

Daniel es su nombre, y es un chico que traje a casa por haberse sentido perdido en medio de la nada por tratar de ir a la suya.

Nada había ido mal con Marcela puesto que le incomodaba la presencia de Daniel casi al punto de volver a pelear conmigo, en cambio Daniel era bastante tranquilo tanto que me enamoré de él. Necesitaba una presencia tranquila que enamorara mi vida y calmara mi olas y creo que la encontré.

Rompí con Marcela y ella armando un escándalo se fue por supuesto diciéndome que me arrepentiría por elegir ese camino de aceptación sexual.

<<Nunca encontrarás a alguien como yo>> (espero no hacerlo).

Daniel las veces anteriores antes de romper mi relación con Marcela sólo, miraba, y miraba, y miraba un poco más, creo que notó lo "sano" que era lo nuestro Marcela y yo. Y con unas miradas bastó para quererlo y darme cuenta de que en realidad no era la persona gravemente rara y reservada que yo creía que él era y con tal solo su mirada hizo que yo me arrepintiera de tener a una mujer asi a mi lado.

Al diablo con las cosas "básicas" que una mujer necesita, al diablo con los bolsos caros que desechan después de otro, al carajo todo.

Y es así como un perfecto desconocido conquistó mi corazón dando a entender que era el rival de Marcela cuando su carácter callado cambió cuando rompí con ella, ya no era el chico que comía una tostada de pan tostado mirando a Marcela y a mí pelear silenciosamente ahora era dulce y precavido conmigo, Marcela no se sentía amenazada con Daniel pero creo que fue el enemigo perfecto que se salió con la suya sin mover todos los hilos.

Y si quieren saber algo sobre Daniel... No tengo casi la menor idea.

Él solo me ha dicho que tenía una familia cerca de la carretera (lo que a mí me parecía improbable) y que todo acabó de un momento a otro. Cuando tenía la oportunidad de preguntar qué había acabado él me dijo que se sentía en paz hablarlo con una primera persona, lo que me hizo feliz y entusiasta en ese momento no quise preguntar nada entonces.

Pero una cosa de la que sí sé sobre este encuentro. Es que Marcela no le tenía incomodidad a Daniel, sino a los supuestos golpes que según ella producía Daniel al dejar la ventana abierta como muestra de mala higiene , hoy en día que se originaron justo cuatro días antes de que Marcela y yo cortaramos.

Marcela se quejaba de los golpes diarios de la casa al punto de querer llamar a un exterminador de plagas, nunca la dejé hacerlo porque creí que los golpes provenían de la habitación de Daniel, la habitación de huéspedes que en ese tiempo ocupaba Daniel, así que creí que se sentiría ofendido si llamaba a un exterminador de plagas a fumigar su espacio personal lejos de la noche de la carretera.