La coreana se dirigía hacia su madre para preguntarle si podía salir con su mejor amiga.

Apenas llegó a la habitación en donde se encontraba su madre, la vió rezando en la mesa del comedor para después poder alimentarse.

—Mamá, ¿puedo salir con una amiga? - preguntó en voz baja la menor con miedo de interrumpirla, su madre volteo a verla.

—¿Con qué amiga?

—Sana - Jihyo pudo ver como la cara de su madre cambiaba al escuchar el nombre de la Japonesa.

—Ya sabes lo que pienso respecto a ella, Park. - Respondió seriamente mientras volvía a mirar a su plato lleno de comida.

—Pero mamá... ¿Que tiene de malo en que salga a pasear con ella?

—No quiero que se te peguen sus cosas, Park, entiéndelo.

—No se me va a pegar nada mamá! Por favor, si pasa algo te llamaré, por favor... - Su madre rodaba sus ojos al escucharla y volteo a verla sin antes suspirar.

—Está bien, pero te quiero aquí antes de las siete. - Terminó por decir su madre y antes de que pudiera notarlo Jihyo salió corriendo a su habitación para alistarse.