🪭 ⊹ ᨘ  CAPÍTULO UNO ! 𓂃
⸰ 𖥔 New York, 2014 ! ⭑𓄹

OMISCIENTE :

LA FAMILIA DE LOS DOS PEQUEÑOS CAMINABAN LENTAMENTE SOBRE EL PARQUE DE DIVERSIONES, el cual justo era el cumpleaños de la pequeña castaña, cumplía sus siete años mientras que su mejor amigo tenía una solo doce años.

Los dos iban agarrados de sus manos con sus sonrisas pequeñas mientras veían todas las atracciones o incluso los puestos de peluches o comida.

El rubio no apartaba la mirada de ella, sus hermosas pecas, que resaltaban bastante su hermosa cara, su nariz perfecta, su pelo ondulado brilloso mientras sonreía.

Nichole sabía que era muchísimo más mayor que ella, pero sus sentimientos no se iban, tan solo mirarla sentía como si ella fuera la única ante sus ojos.

La abuela de la pecosa veía la escena del rubio mirando a su nieta con una sonrisa en la cara, ella sabía que los sentimientos del rubio hacía la castaña eran algo más que una amistad, pero eran demasiado pequeños como para saberlo.

La pecosa vestía con un vestido precioso de cuadros, con colores no muy llamativos con sus botas negras y su pelo sedoso suelto con un lazo negro. Mientras tanto iba convidada con su mejor amigo, el cual tenía un pantalón vaquero negro junto a una camiseta del mismo estampado que ella pero algo más neutro y sus zapatillas blancas. A su familia les parecía muy lindo que fueran combinados.

——¿A qué te quieres montar? ——hablo el rubio mirándola.

——No se ——encogió sus hombros ——Lo único que se es que yo quiero algodón de azúcar.

——Yo también quiero ——la castaña lo miro ——Mamá, ¿podemos ir a por algodón de azúcar?.

——Claro cariño, vamos.

Toda la familia se fue hacia el puesto de algodones de azúcar para comprarles uno a cada uno.

——Yo me lo comeré antes  ——bromeó el rubio.

——Claro que no, yo lo haré antes.

——Claro ——mintió para sonreír bajo.

——Ya verás como si.

Enseguida les dieron sus algodones de azúcar y rápidamente atacarlos, parecía que si tenían hambre, mientras caminaban hacia alguna atracción que ellos quisiesen mientras comían sus algodones de azúcar felices.

——¡Yo quiero montar allí! ——señaló unas camas elásticas.

——Pues haya vamos.

Los dos corrieron sin pensarlos dos veces antes que sus manos se unan de nuevo sin corte de pelo para llegar al puesto de las cama elásticas, enseguida se quitaron sus zapatos para saltar en la colchoneta.

La familia los veían con una sonrisa o incluso les grababan, tanto que grabaron cuando la castaña se tiró encima de él. Los dos se divertían, reían. Pero eso no duraría mucho cuando se enterase que dentro de poco se separarían. Uy

Después de estar horas en las colchonetas, siguieron montando en más cosas pero a Nicholas se le ocurrió algo.

——Ven, vamos ——la arrastró hacia un puesto de peluches.

La castaña lo miro raro al verlos ahí parados, pero enseguida empezó a tirar anillas hacia unas botellas, quería conseguirle un peluche.

——Nick, no hace falta ——intento pararlo.

——No, si hace falta Luna ——la miro antes de seguir tirando.

La pecosa sonrió para apoyarse en él para ver como todo lo que lanzaba tocaba las botellas.

——¡Sí! ——festejó alegremente.

——¿Cual quieren?.

Los dos se vieron para ver un peluche gigante color chocolate, era un oso, a los dos les encantaban los osos por eso era perfecto.

——Ese, por favor —–dijeron a la vez.

La chica rubia les dio el peluche grande a la castaña para ella abrazarlo mientras sonreía a su mejor amigo.

——Feliz cumple Luna ——hablo el acercándose a ella.

——No hacía falta esto Nick.

——No digas eso, te mereces el mundo entero ——dijo antes de agarrar su cara——Te quiero.

La castaña cerró sus ojos para sentir el tacto de sus labios en la frente, el rubio sonrió después del pequeño beso en la frente.

Después del ese emotivo momento, toda la familia optó por cenar allí, cada uno se pidió lo que quería, los dos pequeños pidieron unos hot dogs con patatas fritas.

——¿Está bueno niños? ——preguntó el padre del rubio.

——Sí ——dijeron ambos mientras disfrutaban de sus hot dogs.

Mientras cenaban, todos hablaban o reían de diversas conversaciones menos los dos pequeños los cuales hablaban entre ellos mientras comían su comida.

——¿Ves eso? ——dijo con ilusión la castaña señalando una cabina de fotos.

——¡Sí! ¿Quieres ir? ——la castaña sonrió brevemente.

——Mamá, ¿podemos ir?.

——Claro, pero tener cuidado ——los dos asintieron.

Los dos juntaron sus manos por tercera vez para correr hacia la cabina de fotos, pero antes la madre de la pecosa les dio dinero.

——Ponte aquí a mi lado ——dijo el rubio.

La castaña sonrió nerviosa para ponerse en sus piernas, metió el dinero necesario en la máquina para comenzar.

El primer flash saltó por lo tanto no le dieron tiempo a posar, eso hizo que se rieran y justo salió el segundo flash, el tercero salieron los dos sonriendo a la cámara mientras la castaña se apoyaba en su hombro, en el cuarto ella salió mirándolo mientras él sonreía, el quinto los dos mirándose sonriendo, el sexto salió ella mirando a la cámara con morros mientras él la miraba sonriendo, el sexto ella salía con una gran sonrisa mientras él besaba su mejilla y la octava salía ella besando esta vez su mejilla mientras sonreía.

——Vamos a verlas ——hablo ella con emoción para salir.

El rubio sonrió de nuevo para seguirla hacia afuera, vio como tenía las fotos en sus manos mientras sonreía.

——Saliste bonita ——le dijo el rubio viendo las fotos.

——Tu también.

——¿Con cual te quieres quedar?.

——Amm.. no sé ——contestó la castaña ——¿Tú cuáles te quieres quedar?.

——Con estas ——señaló cuatro.

Ella les dio las que él dijo rápidamente antes de coger su mano para ir con sus familias, cualquiera diría que eran novios pero eran muy pequeños.

——¿Qué tal las fotos niños? ——preguntaron.

——Miren.

Les ensañaron todas lentamente, a la abuela de la pecosa les pareció muy tierno las dos últimas.

——Quedaron muy tiernos ——acaricio la cara de su hija.

Los dos sonrieron de par a par para sentarse para seguir comiendo patatas, pero la madre de ella miraba con algo de preocupación a los padres del rubio. ¿Como se suponía que les diría todo?.

continuará.