<borrador>

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Asunto: Te amo

Fecha: xx/xx/2019

¿Sabes algo? Gracias a ti, descubrí lo que es vivir.

Cuando murió mi abuela Rio, la única persona en mi familia que podíamos decir que me amaba sin importar que, creo que lloré más porque todos lloraban qué porque quería hacerlo. Tu sabes lo mucho que la amaba, pero en ese momento solo sentí el deseo de llorar cuando todos lo hicieron... no se si me di a explicar, pero tampoco importa.

Estuve viviendo su luto por casi un mes, la verdad es que fue más porque mi mamá me dejó tranquilo todo ese tiempo y, gracias al imbécil de Takeru, nadie quería hablarme por no saber que decirme. O tal vez lo hice porque no supe manejar mis propias emociones y creí que el tiempo me haría sentir realmente triste.

Pero no, no pasó nada. No llegue a sentir esa tristeza que todos creían que sentía.

Recuerdo que tampoco la sentí cuando supe del incidente de mi madre y murió pocas horas después. Aunque ese fue uno de los pocos momentos "memorables" en donde creo que podría decir que llegue a extrañarla... tal vez por la presión familiar o quien sabe.

Pero en esas dos ocasiones no pude llegar a una tristeza tan profunda como creí, y eso que la diferencia fue de apenas medio año. Aún espero llorar por sus muertes y piensa que ya casi pasaron dos meses desde lo de mi madre, y aún así no puedo encontrar la tristeza, el dolor o algo así.

Y tal vez fue la búsqueda de ese mismo dolor que hizo que tomara ese cutter y me intentara suicidar hace unas semanas; exactamente como cuando quise saltar de ese edificio cuando tenía 15.

Estaba desesperado, deprimido y estresado por cómo estaba mi vida... digo, tenía 15 años, era un fracaso escolar, la decepción andante de mi madre y toda la familia, mi supuesta pareja más estable (si, ese pervertido siete años mayor que yo que me "ayudó" a entender mi bisexualidad) me había dejado; para ese momento creí que simplemente podría terminar todo y saltar... si, saltar del techo del edificio donde vive mi hermano. Era muy simple, solo debía subir, escalar la valla de metal y saltar al vacío...

Pero no pude. Por alguna razón, aún quería, y quiero, vivir. Aún tenía esperanza de que todo estaría bien en mi vida, de que algún día... mi madre me diría que está orgullosa de mi; de mi padre disculpándose por, tecnicamente, abandonarme desde niño; de que mis compañeros ya no dejarían flores en mi escritorio o me usaran para hacer sus tareas ofreciéndome una falsa amistad... de que por fin alguien me quería de verdad.

Espero entiendas como se rompió mi optimismo cuando cumplí 18 y eso no pasó e incluso, no te lo conté en su momento y creo hice bien, volvieron a olvidar mi cumpleaños... Esta vez porque Takeru anunció su compromiso con la arpía esa y como iba a estudiar medicina. De nuevo, los únicos que se acordaron de que existo fueron mi hermano, mi abuela y tu.

Claro, no pasó mucho tiempo para que yo volviera a decepcionar a todos... pero esta vez decepcioné también a mi hermano, Shoichi, y a mi abuela... mientras que Takeru consiguió entrar como si nada a la universidad, yo no pude... de seguro leyeron mi solicitud, se rieron y dijeron que no valía la pena. Aunque no lo dijeron, yo sé que ellos estaban decepcionados de mí.

Creo que eso siempre me va a pesar, el que mi abuela jamás me verá entrar a la universidad.

Obviamente tuve que conseguir trabajo, ya que mi mamá dijo que o buscaba un empleo o me corría de la casa, solo conseguí uno de vendedor en una tienda cercana a mi casa; era divertido escuchar a mi tía Mizu comentar que le faltaba personal en su pastelería y cuando mi abuela sugería que podía contratarme, ella respondía "Es que necesito gente... preparada.", la indirecta directa, válgame la redundancia, de que no me quería en su tienda era obvia pero a Takeru, en cuanto se lo pidió supuestamente para ayudar a sus padres a costearse sus estudios, lo contrató de inmediato como vendedor, aunque mi primo en su vida había visto una caja registradora.

Cómo sabes aún trabajo ahí, me siguen pagando una miseria y mi padre solo me ayuda porque legalmente la casa de mi abuela es mía. (Al parecer me dejó como heredero de su casa y otras cosas que solo podré reclamar cuando tenga 21. Mientras que mi madre les dejo todo a Shoichi y Jinn, y si, ambos vendieron la casa donde vivimos gran parte de nuestra vida como si nada mientras yo tenía que empacar todas mis cosas y mudarme con mi padre porque no puedo valerme por mi mismo).

Mi vida colapsaba, colapsaba de un modo tan rápido que yo no podía respirar y eso afectaba nuestra relación indirectamente, sabía que era irritante, que hacía mal en ignorarte y mandarte al diablo cuando solo querías apoyarme... y aún así me soportaste todo. Perdóname un día, por favor, perdóname... enserio perdóname, Ryoken.

Había días donde no quería levantarme de la cama, solo quería dormir y jamás despertar, quería dormir y llorar hasta hartarme; pero no podía y aún no puedo. Porque si lloro entonces es porque simplemente soy débil y armó dramas por todo. Al menos en mis sueños, podía decir que yo era feliz.

Y eso solo era porque soñaba que estabas conmigo... que estabas conmigo viendo las estrellas.

A veces me pregunto cómo puedo levantarme de la cama y trabajar, aunque no me quede de otra, tal vez mi tristeza merma como el mar y me dé ánimos entre sueños.

Aunque en realidad solo no me muero porque quiero verte realizar tus sueños.

Te conozco, te conozco tan bien, que sé perfectamente que te matarías para seguirme en cuanto muera. Y no quiero eso.

Quiero que cumplas tus sueños aunque yo me quede atrapado en la horrible tristeza y porquería que es mi vida... y por eso, este email se quedará entre mis borradores...