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—¿Minnie?—Dio un ligero toque a la puerta mientras la abría.

Se adentró al baño y sintió como su corazón tocaba el piso, en una esquina del baño Jimin se encontraba durmiendo mientras se abrazaba en posición fetal.

Con pasos rápidos fue hasta donde su amigo y arrodillándose frente a él le dio unas palmaditas sus mejillas para que así pudiese despertar, abriendo los ojos de forma lenta y con la vista borrosa miró los ojos preocupados de su amiga.

—Minnie, vamos a tu cama.—Pidió mientras trataba de levantarlo del frío piso.

Jimin se negó, lo único que hizo fue hundir aún más su cabeza entre sus rodillas, no quería salir de allí, había encontrado un pequeño refugio.

—Minnie...vas a enfermarte.

—No me importa.

Nada lo hacía, estaba tan roto que no le importaba llegar a quedar internado en una cama de hospital. Solo quería que todo dejara de doler.

Irene se rindió en querer alzar a Jimin y se sentó frente suyo, acarició sus cabellos dándole ánimos para que le contase lo que había inundado sus ojos en tristeza.

—¿Soy un cualquiera?—Murmuró, la pregunta era más para él que para la mujer frente a él.

—¿Qué? ¿Quien te dijo eso?

—Todo el mundo...—Suspiró.—Si todos coinciden en algo es porque es cierto ¿no?

—Claro que no, Jimin.

—Es que lo soy, solo mira todo lo que han escrito de mi, solo lee todos los comentarios despectivos que me han dado todo este tiempo...

—No.—Levantó la cabeza de Jimin, sacándola de entre sus rodillas, sus pequeños ojos estaban ahogados en lágrimas.—Tú no eres nada de lo que ellos dicen que eres, ellos no te conocen, Jimin. Ellos solo conocen lo que los demás han tratado de decir sobre ti.

Fue un diminuto hilo que Irene jalo.

Uno para desarmar a Jimin.

Cual alma despechada comenzó a llorar de forma incontrolable, comenzó a sollozar frente a su amiga mientras esta trataba de abrazarlo.

—Y-yo ya no puedo, Irene. T-todo se vino abajo, y-yo...

—Tranquilo, vamos a tu habitación, vas a resfriarte si estás aquí.

—No quiero estar aquí, nunca quise estar aquí. Sácame de esta casa.—Sollozo.—N-no quiero estar en la casa de los pa-padres que nunca se preocuparon por mi.

—Está bien.—Asintió tomándolo entre sus brazos.

Jimin a duras penas podía caminar erguido o de forma correcta, sus piernas se enredaban cada vez más y los sollozos no dejaban de inundarle. Con mucho esfuerzo bajaron por las escaleras mientras se sostenía de Irene.

Baekhyun y Jisoo los esperaban al final de las escaleras, preocupados por el estado de Jimin, prefirieron no hacer ni una pregunta pues el rostro de Irene les resolvía cualquier duda.

Salieron lo más rápido de la casa de sus padres y se subieron al auto de Irene, Jimin aún no les dirigía la palabra, solamente miraba a la ventana mientras se abrazaba y seguía llorando.

Parecía que las lágrimas eran infinitas e iban a inundar el auto.

Con una rapidez que agradecía Jimin habían llegado a su casa, todos se adentraron a esta para cuidar de Jimin, quien ahora podía caminar erguido mientras los sollozos eran acallados al morder sus labios.

—I-ire a bañarme, pueden comer lo que quieran.—Dijo dándoles la espalda y yendo directo al baño.

Cuando llego a este se miró al espejo, viendo sus ojos hinchados, su nariz roja y sus labios mordidos, sintió pena por si mismo. Nunca creyó ver su reflejo de esa forma.

Nunca creyó sentir doler su corazón de la forma que dolía ahora.

Parecía que no podía dejar de llorar, mientras se desprendía de sus prendas aún lloraba, dentro de la ducha mientras el agua le mojaba el cuerpo las lágrimas parecían ser infinitas.

Tallo su cuerpo recordando cada una de las palabras de ayer por la noche, recordando los únicos cumplidos que había recibido y estos durante noches pasionales, recordando lo único que las personas querían y buscaban de él. Y tal vez recordando aquel lugar donde creía que todo era diferente, donde creía que alguien veía más allá de su cuerpo o su apariencia.

Pero nuevamente las inseguridades le bombardearon diciéndole que ni él había visto algo más allá del cuerpo y apariencia de Jimin.

Lo hacía más dramático llorar en la ducha abrazado contra las paredes de mármol, era dramático, pero era también muy triste.

Jimin no encontraba consuelo, solo quería terminar con el dolor que le iba consumiendo pelo a pelo, subiendo desde la punta de sus dedos hasta su cuello llegándole a ahorcar, quitándole la respiración.

Cansado y con el ánimo por el suelo, salió del baño con una bata, al entrar a su cuarto sus amigos se encontraban allí. Mirándolo con preocupación.

Porque la persona que veían frente a ellos no era Park Jimin. La persona que estaba frente a ellos era alguien a quien le habían arrebatado el brillo.

Abrazaron a Jimin mientras este se desmoronaba en sus brazos, dejándose envolver por sus cálidos brazos que le daban el consuelo que necesitaba.

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taehyung:

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después de tanto tiempo he vueltoooooo, jeje en este tiempo de mini hiatus pensé en hacer una maratón, maybe a la próxima semana o idk 

gracias por esperar ♡

perdón por el capítulo algo meh, pero no todo puede ser lleno de emociones o algo así jeje

quería avisarles que hice una playlist en spotify, es algo así como el soundtrack(? del au, está en mi tablero de conversaciones busquen ahí para leer con musiquilla jeje

nos vemos mañana ♡