25

El peso e importancia de Jimin en Chanel se podía notar cuando todos en la sala de juntas lo esperaban para empezar la reunión y es que muchos podrían decir que la importancia de Jimin era por la influencia de sus padres, pero estaban equivocados, Jimin tenía mucha importancia por sus propios méritos, él nunca fue apoyado por sus padres en su sueño de convertirse modelo y es por eso que jamás le habían dado alguna ayuda para que escalara en la ardua industria, fue Jimin quien por si solo se colocó en la cima encabezando encuestas y marcas que lo querían para representarle.

Jimin entró a la sala detrás de su manager con unos lentes de sol y un cubre bocas—para así ocultar los pequeños granitos debido a la alergia que aún se asomaban por su mentón—se sentó en una silla ante la expectante mirada de todos.

—Tarde.—Espetó James, el CEO.

—Ayer tuvo un inconveniente con su alergia.—Excusó Solji.—Por lo que se le dificultó despertar en la mañana.

—Perdón.—Dijo Jimin sacándose los lentes.—Me dormí por los analgésicos.

—Que no vuelva a pasar.—Dicho aquello una secretaria les pasó un informe a todos los presentes.

Jimin observó el archivo frente a él y lo inspeccionó, la primera hoja del informe tenía los detalles sobre la semana de la moda, que sería llevada a cabo en Sevilla y Japón, pasó las hojas saltándose más detalles–pues Jimin ya conocía demasiado bien lo que se hacía ahí–llegando al informe sobre la nueva temporada de Chanel que también se llevaría a cabo en Japón, nuevamente salto algunos detalles sobre el informe hasta que un nombre particular le llamó la atención.

Jeon Jungkook, estaba escrito como un invitado especial que se les iba a unir en las sesiones de Japón.

Jimin no pudo evitar sorprenderse y llegar a atragantarse llamando la atención de todos.

—¿Te encuentras bien, Jimin?—Hablo Irene frente a él preocupada.

Jimin solo asintió volviendo su vista al papel, Baekhyun contuvo una risita pues sabía muy bien el porqué Jimin se había atragantado.

—¿Jeon Jungkook será un invitado?—Preguntó Jennie señalando el lugar donde estaba anotado el nombre.

—Ajá.—James sonrió desde su asiento.—Lo citamos una hora más tarde, para que así ustedes no se llevaran una sorpresa cuando entre a la sala.

—¿Puedo preguntar por qué tomaste esa decisión?—Nuevamente Jennie habló, dejando la carpeta en la mesa.

—Porque Jungkook tiene pinta de modelo.—Respondió.—Además su carrera está en ascenso, esta oportunidad con nosotros le va a ayudar mucho.

—Ya veo, me alegro mucho.—Sonrió Jennie volviendo a tomar la carpeta en sus manos.

Jimin observaba la pequeña conversación con mucha curiosidad. Su estómago se revolvió en nervios y confusión.

¿Por qué Jungkook no le había dicho nada?
Bien, no es como si Jimin tuviese algún derecho sobre saber de las actividades de Jungkook, pero por lo menos hubiese querido que Jungkook le informara sobre aquello.

El silencio acogedor que envolvía la sala fue interrumpido por la secretaría que anunciaba que Jungkook y su manager habían llegado, James le informó que los haga pasar.

Inconscientemente Jimin empezó a tamborilear sus muslos nervioso, en su estomago pequeñas mariposas empezaban a revolotear, estaba muy nervioso.

Cerró sus ojos y trató de calmarse, soltó un suspiro sonoro que llamó la atención de los demás presentes, sobre todo de Jennie y Baekhyun, el chico lo miraba con cara de gracia y divertido, mientras que la chica lo miraba confundida se encogió de hombros ignorando a un nervioso Jimin y nuevamente se concentró en los papeles.

—Jungkook, que bien que estén aquí.—Saludo James levantándose de su asiento para ir a recibir al cantante.

Nuevamente Jimin estaba tan nervioso que sus mejillas se tiñeron de rojo, suerte que tenía el cubre bocas así nadie podía notarlo.

Hizo oídos sordos a la conversación que se había formado cerca de él y puso su atención en los papeles, mirándolos sin siquiera leer algo de los párrafos escritos.

—Siéntate en esta silla, Jungkook.—Ofreció James.

Jimin quiso soltar una pequeña risa, Jungkook se iba a sentar a su lado, eso aumentaba sus nervios.

¿Por qué estoy tan nervioso?

—Muchas gracias por haber venido, Jungkook. Nos alegra mucho tenerte de invitado y que seas partícipe de nuestra nueva temporada. Espero que todo sea de tu agrado en los días que la pases junto a nuestro equipo en Japón.—Hablo James con una sonrisa.—Frente a ti hay una carpeta donde está detalle a detalle sobre la temporada y tu rol en esta.

—Muchas gracias.—Sonrió.—Estoy muy seguro que todo será de mi agrado.—Por debajo de la mesa acaricio el muslo de Jimin, sorprendiendo al menor, haciendo que sus mejillas nuevamente se tiñan de rojo.

Durante unos minutos los modelos se presentaron ante Jungkook, para que así la estadía entre ellos fuera cómoda y acogedora.

La reunión acabó con ellos yendo por distintos caminos fuera de la sala de juntas, Jimin se encontraba caminando y hablando con sus amigos por los pasillos, platicando acerca de sus días y riendo por la reacción alérgica de Jimin.

—¿Como no te diste cuenta que el pastel era de café?—Preguntó Baekhyun conteniendo su risa.

—Olía delicioso, como a chocolate.—Golpeó el costado de Baekhyun haciéndolo retroceder.

—¿Quien te dio el pastel? Seguro trataba de matarte.—Rió Irene.

Antes de que Jimin respondiera fue interrumpido, Jennie había corrido hacia Irene para envolver sus brazos en la cintura de la peli-negra. Al parecer ambas se habían hecho amigas durante su colaboración.

—Hola, hola, perdón por interrumpir pero necesitaba hablar con Irene.—Sonrió Jennie.

—Tranquila.—Respondió cordialmente Jimin.

—¿Que pasó Jennie?—Hablo Irene mientras jugueteaba con los cabellos de la menor.

—¿Hoy iremos a almorzar, verdad?—Irene asintió.—¿No quieren unirse ustedes también?–Preguntó dirigiendo su vista hacia los dos chicos a su lado.

—¡Aceptó!—Grito Baekhyun.

—Yo creo qué pasó.—Dijo Jimin.

—Anda, Jimin.—Rogó Baekhyun colgándose del brazo de Jimin.—Vamos a almorzar todos~

—Aún tengo irritación en la garganta.—Rió soltando a Baekhyun de su brazo.

—¿Que te pasó?—Pregunto la castaña con curiosidad.

—Tuve una reacción alérgica tan grave que tuve que ir a la clínica.

—Oh, que mal.—Hizo un puchero—Espero que pronto te recuperes al cien.

Jimin sonrió asintiendo.

¿Por qué me intimidaba Jennie? Luce muy agradable. Pensó.

Jennie ondeo su brazo en el aire llamando a alguien, cuando dio con la persona que llamaba recordó porqué se sentía intimidado hacia su compañera.

Era por él.

Con un porte emblemático erguido se dirigió hacia el grupo que se encontraba caminando hacia su dirección, el tatuado les sonrió amablemente, sobre todo al rubio que se encontraba al medio.

Por el cubre bocas no se podía ver, pero, Jimin traía una sonrisa debajo de este que iluminaría al mundo entero.

¿No quieres acompañarnos a almorzar, Kook?—Ofreció Jennie cuando Jungkook estuvo lo suficientemente cerca de ellos.

—Tengo cosas que hacer.—Se encogió de hombros.—Tendremos muchos almuerzos juntos en Japón.—Bromeó mirando al rubio.

Ambos se miraron cómplices, con las miradas de Baekhyun e Irene pegadas a ellos, una juguetona y otra seria.

—¿Ustedes se conocen?—Preguntó Baekhyun curioso.

Jennie soltó la cintura de Irene para asentir golpeando la cadera de Jungkook con la suya.

—Sip, es mi cuñado.—Sonrió Jennie.

Aquello dejaba desconcertados a Baekhyun e Irene, la vida privada de todos ellos era un secreto que pocos sabrían, tal vez por eso no debieron sorprenderse de no saber qué Kim Jennie su compañera de trabajo fuera la hermana de Kim Taehyung el novio del amante de su mejor amigo. Vaya que eso hacía revolver sus estómagos de angustia.

Tragaron angustiados les preocupaba lo que pudiese pasar en un futuro con Jimin.

🍒

—¿Por qué no me dijiste que ibas a unirte a nosotros?—Preguntó Jimin en el regazo de Jungkook.

—Porque no me estoy uniendo a ustedes.—Sonrió recostándose en el respaldar.—Solo es una colaboración. Además, yo no fui quien acepto.

—¿Ah no?—Sonrió.

—Nop.—Acarició el muslo del rubio, sonriendo.—Fue mi empresa la que acepto.

—¿Entonces tú no querías aceptar?

—Quería.—Acarició el cubre bocas que aún cubría el rostro del menor.—Pero me lo estaba pensando mucho y es por eso que ellos aceptaron antes que yo.

Jimin asintió sonriendo.

Jungkook siguió acariciando el rostro de Jimin, tomó el cubre bocas que le impedía tocar la piel suave del menor. Cuando tomó el pedazo de tela entre sus manos lo arrojó al lado del asiento de copiloto. Ya pudiendo tocar la piel lechosa recibió un manotazo al intentar tocar uno de los granitos.

—No hagas eso, lo infectarás con tus manos sucias.

—Estas manos sucias que te hacen maravillas.—Jugueteo con sus cejas haciendo reír a Jimin.

El tatuado se distrajo con el sonido de la risa de Jimin y en cómo sus ojos se volvían dos medías lunas, acaricio con suavidad las manos de Jimin y luego llevo una de estas a sus labios, para besarla.

—Eres muy bonito.—Susurró contra la mano de Jimin, esperando no ser oído, pues aquello salió de forma inconsciente.

Pero fue oído, causando un estrago en Jimin, provocando que su estómago sea infestado por mariposas que revoloteaban por todo lado y que el color carmín se colara en sus mejillas.

Jungkook le sonrió de forma tierna a Jimin mientras acercaba sus labios hacia los labios contrarios. Esos labios que le encantaban pues siempre tenían el sabor de unas cerezas, siendo igual de dulces que estás y teniendo el color.

Apegaron sus cuerpos ante su suave beso mientras sus mejillas se coloreaban de carmín y pequeñas risitas eran soltadas por el pequeño espacio que compartían.

Jungkook agradeció en polarizar las ventanas de su auto, así nadie vería que tenía compañía. El auto estaba en el estacionamiento de la empresa, habían llegado ahí porque la manager de Jimin tenía cosas urgentes que hacer y Jimin necesitaba ser llevado a su casa.

Aunque lo menos que estuviesen haciendo ahora era conducir hacia el hogar del menor no se quejaban, podrían estar horas probando los labios del contrario.

Horas y horas.

Se separaron por la falta de aire, Jimin recostó su cabeza en el pecho de Jungkook sintiendo como el tatuado acariciaba su espalda baja y olía ligeramente su cuello, sonrió contra el pecho.

Una bonita escena la cual se ganaría los suspiros de los demás, si tan solo estuviese bien.

Pero, se sentía bien para ellos.




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capítulo narrado pq siii y pq en los próximos capítulos será el desarrollo de su estadía en japón 🥴

nos vemos a la próxima u3u

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