Capítulo 1

Las cosas en Karmaland estaban llevando un ritmo bastante mal, debido a que los científicos habían previsto que dentro de unas horas iban a caer meteoritos, los ciudadanos estaban viendo donde podían esconderse para salvar sus vidas, mientras que los héroes ya tenían en sitios ocultos sus búnkeres, mientras terminaban de arreglar algunas cosas, tan solo uno de ellos estaba sumergido en su mundo mirando las fotos de su álbum antes de irse al búnker junto a sus cuatro compañeros y sus familias.

El peli azabache miraba con cariño todas las fotos que había tomado antes de ese suceso, el dolor de su pecho significaba solo una cosa, un sentimiento profundo que nunca admitiria, cerro los ojos por un momento liberando un suspiro y cerro el álbum para despues guardarlo en su mochila, cuando escucho al alcalde decir que tan solo quedaban unos minutos fue hacia él ascensor para bajar al búnker donde se encontró con sus compañeros, estos se metieron en la misma habitación estaban todos en contacto con sus móviles para saber si sobrevivían todos. Los minutos pasaron y el impacto se hizo inminente se escucharon los gritos de algunas personas del pueblo, además del grito de uno de sus compañeros, todos estaban preocupados y cuando pudieron salir y dirigirse al pueblo vieron un gran agujero negro que absorbía las partes del pueblo, también había grietas que llegaban a dividir la tierra, allí se encontraban los ocho héroes.

-Chicos...Mangel no pudo llegar a tiempo al búnker-Dijo el pelo naranja bajando la mirada al igual que su voz, sus compañeros le miraron sorprendidos y algunos se negaron a creerlo pero cuando vieron a alguien de color verde y con quemaduras vieron que no solo no se había salvado sino que le ocurrió algo peor, ahora su amigo y compañero les pegaba sin motivo.

-Por favor héroes vayanse, nosotros nos ocuparemos del joven Mangel- Un científico miro a los héroes antes de lanzar un dardo al ahora mutante, los héroes se preocuparon de su le harían a su compañero, un grupo grande de científicos se lo llevaron mientras que otros estudiaban el agujero negro.

Los héroes tan solo se quedaron allí sin saber que hacer se sentían mal por no poder hacer algo mas por su amigo, tan solo fueron a revisar sus casas antes de reunirse para hablar de que harían, pero uno de los científicos detuvo a uno de los héroes.

-Joven Vegetta...tenemos una persona nos entrego esta carta para usted-El pelo azabache agarro la carta con algo de confusión,  sin embargo cuando le iba preguntar al científico quien se la dio, este ya se había ido con los demás, abrió el sobre con cuidado y saco la carta para poder leerla.

Querido Vegetta:

Quería decirte que desde hace mucho te he estado observando parece que has hecho muchas cosas por este pueblo que te asigne proteger, recuerda que siempre miro tu progreso aunque no entiendo porque no les cuentas a tus compañeros de nosotros y de lo que te ocurre ¿No que sois amigos? Bueno no me entre tendré mucho solo quería decirte que te visitare en algunos momentos donde estés a solas y además para comentarte de él futuro de Karmaland

Atte: E***

Apretó sus labios con algo de fuerza al leer la carta y se apresuro hacia su casa para poder encontrarse a aquella persona, fue a su habitación y suspiro cansado apoyándose en el marco de la puerta.

-Hola Samu-La chica de cabellos negros y rizados con una corona de flores adornando su cabello y con túnica verde pastel de vestido se levanto de la cama para acercarse al amante del morado, le dio un ligero abrazo antes de poder hablar-Te ves muy lindo

-Gracias...entonces dime ¿que pasa?-Dijo el ojo morado intentando cambiar de tema para poder evitar avergonzarse mas

-Bueno...vi todo lo que paso y la verdad es su hay una manera de salvar Karmaland...y es llenado al pasado antes de que cayeran los meteoritos-La chica vo como el brillo de los ojos morados del chico volvían a deslumbrar-Samu...sabes que no cambiara nada de lo que estas pensando...él seguirá casado y tu hijo...

-¿Podrás revivirlo?-Interrumpió con un poco de esperanza en su voz, aquel pequeño de cabello castaño, sudadera blanca con flechas negras y pantalones azules era él único que unía a aquellos chicos además de una apuesta donde tenían que casarse, pero para él de morado era algo mas, era un rayo de esperanza porque el amor que sentía por su compañero de mascara de oso era muy fuerte. La chica sonrió dulcemente y acaricio él cabello del azabache para poderle decir su respuesta, pero en ese momento tocaron el timbre y se escucho la puerta abrirse, en ese momento la chica desapareció.

-Vegettita tenemos que ir con Cerdus- Reconocía esa voz, esa voz que hacia que su corazón latiera con rapidez-¿Que haces allí parado?

-N-nada tan solo....están preparándome para ir- Sonrió algo nervioso y decidió caminar delante de Rubius para que no viera su sonrojo-Vamos Doblas o llegaremos tarde.

Cuando se fueron la chica volvió a aparecer y miro por la ventana como se iban los dos chicos en sus chocobos, fruncio el ceño con algo de rabiay se cruzo los brazos.

-Rubius...ojala no hubieras aparecido...así no tendría que hacer esto.

La chica miro por último vez por donde se habían ido los dos chicos y tan solo suspiro, tan solo esperaba que todo saliera bien, miro su libro de letras de oro y miro como unas frases desaparecían.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top