“Midoriya, aquí.” Miró a Kendo extenderme un poco de carne.

“Gracias, Kendo.” Agradezco amablemente mientras agarro el trozo y lo unto con mi arroz para comer, saboreé la carne suavemente mientras todos hablaban emocionados mientras almorzabamos.

“Midoriya, aquí.” Alzó una ceja confundido al oir las mismas palabras y veo a Mineta haciéndome burla. “Ksks” Se rie entredientes antes de recibir un sape de la mujer a su lado. “Ay! ¡Eso dolio, Komori-chan!”

“Merecido.” Komori a su lado respondió con una suave sonrisa mientras llevaba su arroz a su boca y degustaba el plato de comida. Miré a Momo quien se llenaba su boca con comida de forma elegante, bufé ante su elegancia con gracia. Ella me miró y yo le alce las cejas de forma divertida. Ella tragó lo que le quedaba de comida y me dio una mueca de sonrisa. Imitando su acción agarro mis palillos para continuar degustando la comida mientras iniciamos charlas con los de la clase-b y mi propia clase.

“Por cierto, Midoriya.” Miré a Denki al llamarme. Gimo en curiosidad con la boca llena. “¿Has recibido mensajes, recientemente?” Preguntó curioso. Alcé mis cejas intrigado mientras termino de tragar.

“No, no he recibido ningún mensaje en estos tres días.” Respondí. “¿Por?” Pregunté.

“Es que una compañera de la escuela intermedia me pidió tu número cuando te vió en mi twitter.” Respondió. Llevando el arroz a su boca.

“¿En serio?” Dije algo curioso por ello. Él asintió. “Que raro, pense que no llamaba mucho la atención.”

“Bueno, despues de ser asaltado y salir en la televisión que trabajabas con Mirko, puede hacer cosas, ¿no?” Se burló Denki divertido. Imité su tono burlón queriendo divertirme.

“¿Qué? ¿Celoso?” Denki abrió sus ojos al oirme de forma juguetona y frunció su vista.

“Con que asi quieres jugar eeh?”

“Basta, Kaminari… Izuku.” Cerré mi boca cuando oí a Kyōka alzando sus jacks y acercandolos a nuestros ojos. Kaminari y yo nos miramos antes de ver a la ferviente tigresa frente a nosotros y asentimos rápidamente. “Buenos cachorros.” Bufó divertida.

××××

Me estiré después de cenar correctamente, levanté la cabeza y vi a Mandalay caminando como si buscara a alguien con un plato de curry en las manos. Tal vez debería ver qué ocurre. Caminé hacia ella, y ella pareció notarme y me miró.

“Oh, Midoriya, eres tú.” Me habló sonriendo. “¿Ocurre algo?”

“Mi pregunta es para ti, ¿buscas a alguien?” pregunté mientras caminaba a su lado, mientras los demás terminaban de cenar tranquilamente.

“Sí, busco a Kota. No sé dónde se metió.” Respondió suspirando. “Él también debería comer…” Alcé una ceja y suspiré.

“Déjalo, cuando tenga hambre volverá. Lo mejor es dejar unas sobras para él.” Respondí tomando el plato de las manos de Mandalay. Ahora que lo pienso, nunca seguí a Kota. Debería buscarlo en el bosque porque… cuando aparezca ese tipo, yo… mierda, soy un idiota.

“Eres un buen chico, Midoriya.” Dijo ella, complaciente. Reí algo avergonzado. A pesar de que me estoy acostumbrando a los elogios, aún no los acepto del todo.

“Gracias. ¿Ya cenaste, Mandalay?” Ella negó con la cabeza.

“Bueno, quería darle un poco de curry a Kota, pero… bueno, ya sabes.” Ella sonrió algo triste. Suspiré mientras la miraba a los ojos.

“Como dije, ya vendrá. Una heroína no debe tener el estómago vacío para pelear contra villanos.” Bromeé con ella mientras le entrego el plato de curry. Mandalay rió divertida ante lo que dije.

“Sí, tienes razón.” Ella agitó su mano con el plato de Kota en la otra mano. “Disfruta, que mañana seguirás entrenando. Voy a cenar.” Asentí mientras levantaba la mano. La vi irse con los profesores y sentarse a cenar con ellos.

Suspiré mientras miraba hacia el bosque. Fruncí el ceño pensando en mis acciones. Tal vez llegue tarde para el reto de valentía, pero qué más da… Voy a tratar de buscar la zona donde está Kota… ¿era una montaña, creo? Así que debo buscar dónde están las montañas. Me adentré en el bosque rápidamente, no sin antes entrar a buscar mi teléfono por si debo enviar mi ubicación por si termino perdiéndome en el inmenso bosque.

Voy caminando sin algún rumbo fijo mientras me adentro en las profundidades. Hay poca luz por la noche, pero sé que si sigo mis pasos puedo volver fácilmente. Busqué un árbol y me trepé en él para tener una mejor visión de dónde ir. Veamos… esa primera montaña a lo lejos. Si no es esa, debería buscar las otras cinco que están a la derecha. Así que supongo que iré a esa montaña. Bajando del árbol, saqué mi teléfono y envié un mensaje a Momo avisándole que fui al bosque a buscar a Kota y que le informe a Aizawa por las dudas. No quiero problemas con él más adelante.

Guardando mi teléfono, caminé por un rato. Vi la subida de la montaña mientras me acercaba más… Finalmente llegué y busqué algún indicio de cueva, pero no había nada. Suspiré. Joder, lo que me faltaba, voy a tener que ir de montaña en montaña…

××××

“Yaoyorozu,” me llamó Iida mientras me limpiaba los labios con una servilleta. Me giré para mirarlo.

“¿Sí?” pregunté con una sonrisa.

“¿Has visto a Midoriya?” Alcé una ceja intrigada ante las palabras de mi compañero de clase.

“No…” respondí, dudosa. “La última vez que lo vi fue cuando estaba hablando con Mineta y Denki en la cena.” Era extraño, Izuku… ¿no estaba? ¿Dónde se había metido esta vez?

“Oh, comprendo. Es que quería hablar con él sobre unas cosas que me preocupan de su comportamiento… sobre todo con lo sucedido ayer.” Iida se rascó la nuca. Abrí los ojos al recordar el día de ayer, que calienta mi corazón con felicidad. “Eh… Yaoyorozu, ¿por qué te tocas los labios?” Me avergoncé ligeramente. No me di cuenta de que había hecho un movimiento casi inconsciente, casi podía saborear sus labios nuevamente con solo recordarlo.

Tosí ligeramente para aclararme y hablé con un tono tranquilo para que no notara mi nerviosismo momentáneo. “No es nada.” Llevé la mano a mi muslo, sentándome rectamente para responderle. “Pero no te preocupes, ayer hablé con Midoriya.”

“¿Oh, lo hiciste? ¿Qué le sucedía?” Preguntó acomodándose las gafas. Cerré los labios y le sonreí.

“No puedo decírtelo, es algo que me compartió solo a mí… pero puedo decirte que con que lo sigas apoyando en todo lo harás feliz.” Iida parpadeó un poco antes de abrir los labios para decirme algo, pero se abstuvo. En cambio, hizo otra pregunta.

“Ejemp… entonces, no tengo más preguntas, pero aún así es extraño.” Lo miré mientras se sentaba a mi lado, alzando la mano de forma robótica. Gimoteé de curiosidad ante sus palabras. “Es raro que Midoriya haya desaparecido repentinamente. ¿No revisaste si dejó algún mensaje o si le mandó un mensaje a alguien?” Preguntó. Es verdad, es posible que haya dejado algún mensaje en el grupo en el que estamos la clase o en el grupo donde estamos Kyōka, Kaminari, Mineta y yo.

“Déjame revisar.” Me levanté de mi asiento mientras caminaba hacia el interior de las instalaciones. Entré al dormitorio de chicas y busqué entre mi mochila mi teléfono. Regresé mientras desbloqueaba el teléfono, viendo a Iida acercarse esperando alguna respuesta. “Oh…” De hecho, me había enviado un mensaje hace media hora.

“¿Entonces?” Preguntó mientras salíamos de las instalaciones. Asentí mientras entraba al mensaje.

“De hecho, sí salió, fue a buscar a alguien llamado Kota… creo que es el hijo de una de las Pussycats, o… me estoy equivocando, es el niño que vimos antes.” Le respondí. No recuerdo exactamente qué era para las Pussycats, pero era el niño jovencito.

“Oh, ya veo,” respondió diligentemente Iida.

“Déjame avisarle a Aizawa-sensei. Me dijo que le avisara.” Iida asintió ante mis palabras, y con eso me dirigí a la mesa cercana en la que ya estaban terminando de cenar nuestros profesores. “Aizawa-sensei…” llamé a nuestro profesor, quien me miró junto a los demás.

“¿Yaoyorozu? ¿Qué pasa?” Mandalay preguntó por Aizawa.

“Midoriya fue al bosque a buscar a Kota asi que tardará un rato en volver, me dijo que les dijera eso.” Aizawa gruñó algo como un ‘mocoso’ para luego suspirar.

“Mira que dijo que debía comer primero…” Mandalay se llevó la mano a su sien sonriendo. “Ese chico realmente se preocupa por los demás, ¿eh?” Miré a Mandalay algo confundida. ¿A qué se refería?

“¡Bueno, gatita, no pasa nada, aparte ya empezaremos con la prueba de valentia! ¡Asi que no pasa nada si llega un poco tarde!” Mire a Pixie-bob y asentí. Es verdad, él estará bien…

Es fuerte.

××××

"¡Ahora que todos tienen el estómago lleno y los platos limpios, es hora...!" Pixie-Bob alzó su voz con una gran sonrisa. Bufé con gracia mientras miraba a Mina agitar sus brazos. Esa idiota...

"¡De la prueba de valor! ¡Yei!" Mina se agitaba emocionada junto al idiota eléctrico, Kaminari, mientras Tsuyu croaba ligeramente, algo emocionada de la misma forma. Iida simplemente agitaba sus brazos tratando de controlar el entusiasmo de nuestra compañera rosada.

"Antes de eso..." pude escuchar la voz de Aizawa-sensei, y vi cómo Mina y Denki se quedaron quietos en su propio lugar, preocupados ante la voz de nuestro intimidante profesor... diablos... "Lamento decirles... que los de las clases extras vendrán conmigo." Uy... Eso tuvo que doler... te recordaré, Mina... qué divertido es su rostro.

"¡¡¡NO PUEDE SER!!!" Gritó indignada la rosada. Bufé riendo ligeramente.

"No te rías de ellos, Kyōka." Vi a Yaoyorozu acercándose, pero noté que tenía una ligera mueca de sonrisa.

"Keh, tú también te estás riendo internamente." Ella negó con su cabeza divertida. No le tengo realmente rencor por quitarme a Izuku, pero sí me duele un poco que me lo haya arrebatado... aunque bueno, define poco... me destroza que mi propia amiga me haya quitado de mis ojos a quien quería...

"Ah sí, ¿e Izuku?" Pregunté. Vi su rostro arrugarse. ¿Qué le sucede?

"Sigue por el bosque, no ha enviado un mensaje aún. Es posible que llegue algo tarde." Ella se llevó la mano al mentón y asentí ante sus palabras. Tiene sentido. "Me está empezando a preocupar un poco."

Coincido completamente contigo, Yaomomo…

Vimos cómo Aizawa arrastraba a Kaminari y Mina de vuelta a las instalaciones mientras lloraban de desgracia. Iida, Tsuyu, Satō y Aoyama le siguieron. Suspiré un poco, negando con mi cabeza ante esos dos. Ahora miramos a Pixie-Bob.

"¡Bueno! ¡Escuchen todos! ¡Los de la clase B serán los que asusten primero!" La clase B tomó atención a ello. "Por lo que irán con Ragdoll, que les mostrará el camino." La clase B siguió a Ragdoll mientras seguíamos escuchando sus instrucciones. "Mientras que la Clase A saldrá en parejas cada tres minutos. En la ruta, encontrarán placas con sus nombres; de allí deben traerlas de vuelta." Bingo, pan comido.

O eso quiero decir, ya que prácticamente soy super asustadiza ante estas cosas. No por nada odio el terror, la otra vez que Izuku... oh... ¿hace cuánto que no viene a mi casa? Desde... la última vez que hablamos sobre mis sentimientos y los de él... oh... me estoy deprimiendo.

“Qué divertido…” Miré a Tokoyami al oírlo murmurar con ese tono misterioso y emocionado. Podía sentir su corazón latiendo de emoción a pesar de su rostro serio. Deberías abrirte, querido amigo emplumado…

“Los que asustan no pueden hacer contacto directo. ¡Tienen que mostrarnos lo aterradores que pueden ser con sus dones!” Pixie-Bob dijo riendo malévolamente.

“¡Por eso ganará la clase que haga mojar más pantalones con su creatividad!” Ugh… ¿Por qué lo tuvo que decir así el grandote vestido de gato?

“Ya basta. Qué asco.” Gruñí con un rostro asqueado.

Vi a Pixie-Bob levantando su mano, completamente entusiasmada, mientras sostenía unos cuantos papelitos. Alcé mi ceja cuando ella empezó a hablar. “¡Bien! ¡Vamos a sortear las parejas, ahora!” Lentamente las parejas se formaron. Miré a los demás. Vi a Yaoyorozu con un papel, parpadeando para sí misma.

“Si somos veinte… y seis están en clases… Aparte de que Izuku no llegó… espera.” Escuché a Momo y empecé a contar señalando a cada pareja. “Uno.” Miró a Shoji y Tokoyami. “Dos.” Todoroki y Bakugō. “Tres.” Me miró a mí y a mi compañera, que era Toru. “Cuatro.” Miró a Uraraka y Kirishima. “Cinco…” esta vez a Mineta y Ojiro, otro equipo. “Seis…” miró hacia Sero y Koda. “Siete…” Luego se miró a sí misma antes de parpadear. Oh, dios mío, está teniendo un ataque… y es… DIVERTIDÍSIMO. “Si somos veinte, seis están en clases e Izuku sigue en el bosque… Uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete…” Ella tuvo un jadeo. “¡Estoy sola! ¡¿Donde estás?! Izuku…”

“Ya… ya llegará…” Ojiro trató de calmarla, escuche el bufido de molestia de Bakugō cuando le puse la mano en el hombro.

“Escucha, Cola. ¡Cambia conmigo!” Gritó Bakugō para mal de mis oídos, gruñi con algo de molestia ante su voz.

“Demos lo mejor.” Mineta alzó su pulgar… keh, pensé que iba a ir a pedirle a alguien que le cambie… Esa chica del 1-b realmente le está cambiando, ¿eh?

“Que divertido.” Escuche nuevamente de Tokoyami.

××××

Suspiré mientras gruñía. ¡Perfecto! ¡Malditamente perfecto! ¡Es la tercera montaña que subo y tampoco es esta! ¿Qué montaña es? ¡Me estoy volviendo loco! ¡No sé hace cuánto estoy caminando! Me reí por no llorar de la frustración y empecé a caminar hacia la última montaña. Si no es esa, no escalo más y vuelvo al campamento, te lo juro.

El cansancio empezaba a pesarme, pero no podía rendirme aún. Kota tenía que estar en aquella montaña sí o sí, porque si no lo encuentro para cuando lleguen los villanos, que no tengo idea cuándo será, realmente voy a estar muy jodido, más si lo mata ese bastardo de mierda... Apresuré el paso un poco más rápido. El bosque se sentía más oscuro mientras avanzaba, podía sentir la creciente hierba y los robles a mi alrededor... pero ¿qué es eso que se siente tan extraño?...

¡¡¡!!! Abrí mis ojos en terror cuando giré mi rostro en el último segundo y escuché una explosión. Una bala cortó por completo mi mejilla. ¡¿Qué...?! Ni siquiera tuve tiempo de reaccionar cuando de entre los árboles apareció una figura cargando un cuchillo... Activé One for All, rodeando mi cuerpo de electricidad para iluminar y tener mejor visión mientras levantaba mi pierna y golpeaba de lleno a la figura que se abalanzaba contra mí con todas mis fuerzas. Fue impactada contra uno de los árboles y juré oír un crack. Vi el cuerpo en el árbol y era... ¡¿Toga Himiko?! Dios... ¡¿La maté?! Vi su cuello completamente quebrado y me horroricé antes de ver cómo empezó a desintegrarse... ¡Un clon...! ¿¡ERA UN CLON!?

¡¡¡Mierda!!!

Di saltos hacia atrás mientras escuchaba cuatro explosiones más. Cuatro balas salieron disparadas desde algún lugar.

“¡¡AH!!” Grité de dolor cuando una de las cuatro balas me golpeó en el hombro. ¡¿Qué diablos?! ¡¿Están… apuntándome a mí?! ¡¿Soy su jodido objetivo?!

¡¡¡!!!!! Siento un poderoso dolor de cabeza de puro peligro de muerte y mis ojos se abren en terror cuando de entre los árboles algo gigante apareció, una masa enorme y golpeó mis costillas.

“Ugh…!” Sentí que todo el tiempo se ralentizó mientras unos grandes nudillos se hundían a través de mis costillas, escuchando mi propio esqueleto crujir y quitándome el aire por completo. Salí disparado por la fuerza, mi espalda impactó con una rama que se rompió por la fuerza del impacto y seguí rodando por unos momentos más, rebotando y chocando contra el suelo.

Mientras caía, sentí cómo la sangre se acumulaba en mi costado y tosí fuertemente. Mi respiración se dificultaba.

“AH…. ¡AH…!” Mi camisa negra estaba rasgada por la gran fuerza del golpe, pero eso no me asustó tanto como ver la sangre que brotaba fuertemente, y notar cómo un hueso de mi costilla sobresalía a través de mi piel. No puedo respirar… Dios… ¡Dios… DIOS, DUELE!

Traté de levantarme pero me era casi imposible. ¡¿Cómo no estoy desmayado?! Ese golpe… ese golpe me debería haber dejado inconsciente… ¿o es la adrenalina? A pesar del dolor intenso, sigo consciente. Escucho pasos resonantes y alzo la mirada para ver una masa de fibras musculares desprendiéndose del cuello de esa persona, con su ojo artificial y una sonrisa maquiavélica.

“Vamos… ¿Es todo? Midoriya… eres aburrido…” Escucho su voz por primera vez mientras las fibras musculares explotan entre sí y él alza su brazo. “¡¡¡DAME DIVERSIÓN!!!” retrocedo apenas para esquivar el golpe que iba dirigido a mi estómago, pero la gran ráfaga de viento que genera me envía hacia atrás con fuerza.

Muscular… esto… así no debería pasar… ¿Por qué…? ¡¿Por qué está pasando esto?! Antes de darme cuenta, Muscular aparece frente a mí y me agarra del rostro, estampándome contra cientos de árboles. Grito y lloro de dolor mientras siento cada impacto con cada vez más fuerza… tengo que contraatacar… pero… no puedo.

Escupo sangre que se filtra por las heridas en mi cabeza producto de los golpes contra los árboles. Mi cabeza… duele… pero… ¡NO ME PUEDO MORIR AQUÍ!

【... ¡¡¡100…%!!!!】

Mi brazo izquierdo se carga de pura energía y siento cómo las fibras de mis propios músculos explotan mientras aprieto mi puño y doy un golpe desesperado, derribando cientos de árboles con la fuerza del impacto, prácticamente desintegrándolos. Al mismo tiempo, mi brazo explota en chorros de sangre y los huesos se desquebrajan debido a la presión. Aprieto los labios con fuerza, solo quiero sobrevivir… fue un acto completamente desesperado, no puedo pensar claramente… No sé cuánto volé cuando sentí que choqué contra algo, una piedra. Ante el golpe, escupí sangre mientras mi cabeza se inclinaba, viendo todo borroso ante lo que ocurría en el bosque... se incendiaba... fuego... están atacando...

Claro que están atacando, maldito estúpido.

No temas... concéntrate... ¡Imposible!

“Oye… oye…” Mis ojos se movían con dificultad viendo una pequeña figura completamente asustada mirándome... “Resiste…” Su voz sonaba temblorosa como si estuviera viendo a alguien al borde de la muerte.

“Ko..ta?” Susurré con dificultad, escupiendo sangre en el proceso. El chico parecía tener lágrimas en los ojos antes de levantarme con esfuerzo mientras trataba de mantener el equilibrio, mi cabeza ladeándose por las fuertes contusiones. “Vete…” Mi voz se ahogó con la sangre.

“¡Todos!” En mi cabeza retumbó una voz, la voz de Mandalay. “Hay dos villanos aquí. Es posible que no estén solos. Si pueden, vayan al campamento. Eviten entrar en combate.” Traté de reírme ante la telepatía de Mandalay pero no salieron mis risas, es más miré a Kota que estaba escuchando la voz también en su cabeza y abrió sus ojos de terror. “Midoriya… Kota… ¡VUELVAN DE DONDE SEA QUE ESTÉN!”

“Ya… ya la escuchaste, Kota… vete…” Murmuré bajamente mientras caía de rodillas, tratando de no caer por completo sosteniéndome con mi único brazo derecho que no estaba roto.

“Per-pero… tú…”

“Vete antes de que sea demasiado tarde… Mi teléfono está roto… busca ayuda para mí… rápido… antes de que ese tipo lle-”

“Al único lugar que irán es al infierno…” Me estremecí y miré hacia Muscular que venía subiendo la montaña con una sonrisa. ¡No… NO! ¡NO PUEDO DEFENDER A KOTA EN ESTE ESTADO!

Vi que Kota se quedó quieto viendo el rostro del hombre mientras las lágrimas salían más fuerte de su parte… no… ¡NO TENGAS UNA ESCENA AHORA! ¡MALDITA SEA! Gruñí. “¡¡¡CORRE, IDIOTA!!!” Aun así, mi voz no le llegó. Siento que todo se tambalea frente a mis ojos cuando veo a Muscular frente a Kota para aplastarlo contra el suelo. No sé en qué momento llegué y salté empujando al niño que empezó a caer rodando abajo por el camino de la montaña. Sin embargo, recibí el golpe en mi espalda sintiendo crujir mi columna vertebral y fui azotado contra el suelo. Mi cabeza cayó contra las rocas, mi mirada se ponía más borrosa a cada segundo. No siento mis piernas…

“Pronto iré por él…” escuché el susurró de Muscular mientras yo solo miro borrosamente hacia todo el humo del bosque. “Dime… me dijeron que eras fuerte, pero al final no resultaste ser tanto como decían…” Siento unas manos agarrando la parte detrás de mi cabeza alzando mientras mi cuerpo no responde, solo se balancea por la inercia. “Vas a morir… me encargaron que te matara… y sueltas tanta sangre… ¡Es fabuloso!” Escucho su risa cuando me empuja contra el suelo mi rostro, el suelo se empapa de sangre. “¡Dime! ¡Dime! ¡¿CÓMO SE SIENTE?! ¡POR QUE A MI ME ENCANTA!” Me azota una vez más contra el suelo, mi cuerpo reacciona temblando mientras siento cómo las pequeñas rocas se empiezan a incrustar sobre mi rostro, ojo y frente.No puedo sentir nada… yo…

¿Estoy muriendo?

Otro azote más y escucho la carne crujir junto a lo que creo que es mi craneo…

Mamá…

Recordé a mi madre… luego un borrón de tambien a Inko, quien era la madre de este cuerpo… Lo siento… Lo siento Mamá… Lo siento Inko…

“¡MUÉSTRAME…” escucho el grito de Muscular alzando mi cabeza con más fuerza y apretando más fuerte mi cráneo. “¡¡¡TU SANGRE!!!”

Lo siento… Momo.

La sangre salpicó todo el lugar mientras siento el atisbo de vida… esfumarse.

××××

Agité mi rostro, mi flequillo se movió mirando hacia algún lado del bosque, como si sintiera un jalón en mi corazón, como si algo se me hubiera arrebatado por unos instantes.

“¡Yaoyorozu!” Miré hacia Mandalay con preocupación y apreté los dientes. “Llévate a los demás, como vicepresidenta, lleva a los demás a las instalaciones.” Asentí y fruncí el ceño mientras miraba a Sero y Koda, quienes eran los únicos que no habían entrado aún en el bosque.

“V-Vicepresidenta,” dijo Sero preocupado. Apreté los labios al ver el terror en sus ojos. Yo también estoy asustada, no, estoy completamente aterrada, pero debo pensar con lógica y calma. Recuerda tu entrenamiento con Edgeshot. Fruncí el ceño y saqué valor en mi voz.

“Vamos rápido,” grité mientras desplazaba a mis compañeros y corríamos hacia las instalaciones. Con cada paso que dábamos entre la carrera escuché los jadeos repetitivos de Sero y Koda.

“¡¿Por qué?! ¡¿Por qué justo ahora?! ¿¡No se habían asegurado antes de que no supieran la ubicación?” Oír los lamentos de Sero mientras corríamos me hizo apretar el puño y temblar ligeramente, empecé a recordar el incidente de la U.S.J., estábamos tan vulnerables, pero no... ¡Sobreviviremos! ¡Mantente enfocada, Yaoyorozu Momo!

××××

“¡Profesor!” Miré hacia mis estudiantes después de oír las palabras del tipo que se convirtió en barro. Pasé junto a Yaoyorozu, Sero y Koda, quienes se giraron para verme. “¡Entren rápido! ¡Vuelvo enseguida!” grité, sudando de preocupación. ¿Dijeron que si me preocupaban mis estudiantes? ¿Van por ellos? ¿Cuál es su objetivo? Mientras corría, sentía que el sudor goteaba más de mi barbilla. Midoriya… ¿dónde estás? Pensé en mi alumno más complicado y recordé las palabras de esta mañana. Gruñí, debería haberle dicho a Ragdoll que usara su don para revisar anomalías, no tuve que haberlo pospuesto para mañana.

Mientras me acercaba, vi lo que parecía ser una espada con muchas espadas a punto de rebanar a Mandalay. Lancé mis vendas atrapando a Mandalay y tirando de ella con fuerza. “¡Mandalay!”

“Eraser… head.” El que parecía un lagarto abrió su boca sonriendo. “¡Tú! ¡Tú sí eres un héroe verdadero como los que dice el señor Stain!” ¿Stain? ¿Seguidores de Stain?

“¡Eraser!” Levanté mi mano frenando los gritos de mi compañera y le hablé sin mirarla a los ojos. “Ragdoll no contesta…” ¿Qué? ¡¿No contesta?! Aprieto los dientes.

“Entendido, muévete, yo me encargo con Tiger de estos tipos. Parece que están apuntando a los estudiantes. Diles que, por nombre de Eraser Head, se les permite combatir.” Ordené. Mandalay abrió la boca, sorprendida. “Aceptaré cualquier tipo de castigo, pero hay que minimizar las pérdidas.” Ella asintió mientras enviaba la información a cada estudiante rápidamente. Pero ese no es el problema. Necesito… “Mandalay.” Ella me miró mientras yo avanzaba junto a Tiger para evitar que Pixie-bob muriera a manos de ese otro sujeto. “Encuentra a Midoriya, hace tiempo que no lo vemos… ¡ENCUÉNTRALO!” Mi voz salió casi desesperada. No tenía noticias de Midoriya hace horas aparte del mensaje de Yaoyorozu y me está poniendo más ansioso de lo que debería. Ella asintió rápidamente antes de salir del lugar adentrandose más en el bosque, intentaron matarla pero lo evité rápidamente con una de mis vendas. No voy a dejar que escapen esta vez… bastardos.

××××

Tengo barro en mis manos, corro lo más fuerte que puedo mientras siento mis lágrimas salir. Ese señor… ese chico… ¿¡Por qué?! ¡A pesar de que no sabía nada! ¡M-me salvó! ¡Pero el señor…! Mi voz se agita a cada segundo mientras corro a través del inmenso bosque tratando de regresar. Siento un poco de sangre cayendo de mi cabeza; mi gorra la perdí hace tiempo. Grito y lloro. “¡Tía! ¡TÍA!” Llamo a mi única pariente. A pesar de que es una heroína, la necesitaba. ¡Necesito buscarle ayuda a ese buen señor! Y… ese tipo… Mamá… papá… siento que se hace interminable el bosque. Cuando pude ver a lo lejos a alguien corriendo… los mocos se me acumulan en mi nariz mientras trato de gritar. “¡Tia! ¡TIA”

“¡KOTA!” Gritó mi tía, abrazándome y acurrucándome en su pecho mientras lloraba fuertemente. “Gracias a Dios estás bien…” susurró aliviada. Tengo que decirle.

“Mamá… papá… ese tipo… ese tipo está aquí, tía…” Traté de hablar, pero mis palabras salieron incomprendidas por mis mocos y lágrimas. Tengo que calmarme, pero no puedo; tengo miedo… tengo miedo por el señor después de haberme salvado.

“Kota, Kota, respira…” Ella me guió lentamente mientras trataba de seguir sus instrucciones. “¿Qué tipo? ¿Qué ocurre?”

“El señor… de pelo verde.” Traté de decir. Ella abrió los ojos como si comprendiera lo que quería decir. “¡El señor estaba mal… muy… muy mal!” Lloré. “¡Apareció… apareció el que mató a mamá y papá!” El rostro de mi tía se contorsionó de terror.

“Te encontré…” algo nos encontró… no… ¡É-el… ¡ES ESE TIPO! siento como me cargan y siento una gran ráfaga de viento. “Corres mucho pequeñín…” escuche su risa desagradable.

“Muscular…” Susurró mi tía, molesta y apretando sus puños, pero ella estaba temblando. Tía… “¿Dónde está Midoriya?” Es… es el nombre del señor del pelo verde.

“Puajaja~ ¿Midoriya?...” Alzó las manos, pude ver manchas de sangre en ellas… No… el señor… el héroe que me salvó… “Yo maté… a Midoriya Izuku.”

“... Mierda.” Escuché a mi tía maldecir apretando los dientes. Siento una voz en mi cabeza, la voz de mi tía. “Kota… corre… sigue recto por allí y te encontrarás con Aizawa.” No… tía… ¡No quiero perderte a ti también!

“No puedo… No puedo, tía…” Veo su rostro temblar, pero me dio una sonrisa, aunque sus lágrimas se arrimaban…

“¡HAZME CASO, KOTA!” Ni siquiera pude ver cuando mi tía fue azotada contra un árbol por el golpe. Miré hacia donde fue mi tía y la sangre chorreaba de ella… no…

“¡TÍA!” Grité llorando mientras corría hacia ella.

“Kekekeh~” Miré al hombre que se acercaba frente a mis ojos y el miedo me invadió… nada… No puedo hacer nada. Siento cómo mi tía se levanta con dificultad y me aparta poniéndose enfrente. “Oh… incluso así das la vida por los civiles… qué emoción… ¿Crees que lo protegerás?”

“Kota… vete.” Escuché un susurro débil de mi tía. No… no puedo.

“T-tía…” Siento que ya no puedo decir otras palabras, solo ver cómo mi tía es brutalmente atacada…

“Juguemos…” Miré al hombre mientras agarraba a mi tía, que apenas se podía mantener de pie. “Chico… ¡Decide!” No… no… ¡NO! Las lágrimas se acumulan. “¿Brazo izquierdo o derecho?” Las palabras se atoran en mi garganta. Grave error antes de escuchar los gritos de mi tía. “No contestaste~ entonces decidí romperle el derecho!” Caigo de trasero llorando al ver toda la escena. “¿Cuál? ¡¿Cuál sigue?! ¡Vamos, contesta! ¡¿Será su pierna esta vez?!”

Yo… Yo… No puedo… no puedo más…

××××

“Minoru…” Abrí los ojos con debilidad. Veía borroso. “¡Minoru!” Desperté del sueño y vi el rostro de mi novia, que me sostenía entre sus brazos mientras el humo tóxico se dispersaba a nuestro alrededor. “Estoy… estoy usando antídotos en hongos… puedes respirar.”

“Kinoko…” susurré antes de levantarme, tocándome la cabeza y viendo a algunos de mis compañeros. “¿Qué ocurre? Villanos… ¡¿Villanos nos atacan?!” Pregunté, presa del pánico.

“S-si… Nos están atacando… hice antídotos y los puse dentro de los demás, pero no durará mucho los efectos a lo mucho 5 minutos o 10.” Komori me respondió preocupada. “Eraserhead nos dio permiso para luchar. Pero tengo miedo… Tengo miedo Minoru…” Me preocupa, yo.. yo tengo que actuar como un hombre, mi novia está estresada y asustada, tengo… ¡TENGO QUE ACTUAR!

“Tranquila…” trate de calmarla. Recordando las lecciones de Midoriya. “¡Kinoko! Tranquila, vas a sobrevivir.” Ella me miró confundida. Noté mi error y trague saliva, estoy igual de nervioso. “¡Vamos a sobrevivir! ¡Tranquila! Piensa… piensa…” murmuré mirando hacia abajo, el humo era algo denso, por lo que no podía ver correctamente. “Encontremos a los demás…” esta vez mire a Ojiro quien estaba despertando también.

“Aghh… diablos…” Ojiro se tocó la cabeza. “¿Nos… nos están atacando?” Preguntó, tratando de reorganizar sus ideas.

“Ojiro… sí, sí nos están atacando. Si no fuera por Kinoko, seguiríamos durmiendo hasta… hasta morir.” Susurré lo último. Ojiro pareció notar mi ansiedad y parecía que se la contagié, ya que su rostro se puso azul del miedo.

“C-comprendo… Gracias… Kinoko.” Ella negó con su cabeza.

“No pasa nada.” Ella trató de parecer fuerte, pero sus hermosos ojos tenían lágrimas asomándose. Limpié sus lágrimas como pude y miré a Ojiro.

“Ojiro… ¿puedes… confías en mí?” Pregunté, teniendo el valor de mirarlo. Pareció notar mi vacilación pero también mi valentía, y me dio una sonrisa en comprensión. “Bien… debemos buscar entonces a los demás, a este paso morirán.” No había pensado más allá, no había un plan concreto para seguir, no era tan inteligente como Yaoyorozu o Midoriya o incluso tan lógico como lo es Kyōka… pero… ¡Pero tengo que pensar correctamente! ¡Debo pensar como un héroe! “¿Están… de acuerdo?”

“Te seguiré a donde sea, amor…” Kinoko me expresó con una sonrisa.

“Lo que dijo ella, sin el amor.” Ojiro respondió con algo de diversión, tratando de aligerar el ambiente. Entonces alcé mis manos y miré hacia cualquier rumbo en específico de la neblina. “¡Vamos! ¡Encontremos a todos!” Dije, tratando de parecer confiado. Los tres empezamos a movernos y vimos una gran mano gigante y luego… ¡Kendo! ¡La amiga de Midoriya!

“¡Chicos… no respiren…!”

“Tranquila, podemos aguantar por 10… 5 minutos.” Ojiro trató de tranquilizarla. Kinoko la vi sacando pequeños hongos y se los dio a nuestros compañeros.

“Aquí… Itsuka.” Kinoko murmuró. “Son antídotos temporales para poder respirar este… gas tóxico. Por 5 a 10 minutos.” Respondió rápidamente, ella asintió antes de llevárselo a la boca y masticarlo sintiendo el efecto inmediato. Sacó a la chica de cabello negro que tapaba su boca y nariz y nos miró. Repetimos el proceso con ella.

Mientras avanzábamos, nos encontramos con… Kirishima de metal, no recuerdo su nombre, y así fuimos repitiendo el proceso con los pocos que nos encontrábamos. Kendo y el Kirishima de metal decidieron confrontar al causante de la neblina, y Kinoko les dejó tres antídotos temporales mientras nosotros salimos a buscar más personas… pude oír a lo lejos gritos… de una mujer. Y no específicamente de una mujer gimiendo. Por instinto me decía que no vaya, pero… ¡Soy un héroe en entrenamiento! Tengo… ¡Tengo que salvar a las personas! Corrí lo más rápido que pude mientras Ojiro me seguía. Kinoko quedó atrás, le dije que volviera lo más rápido hacia el campamento… no quiero que le pase nada…

“¡Mineta! ¡Cuidado!” Escuché los gritos de Ojiro, me empujó y fue golpeado por algo… eso…

“¿Q… qué…? ¿U-un Nomu? ¿Aquí…? ¡¿Por qué?!” pregunté sorprendido. Vi a Ojiro salir del árbol destruido, sangrando un poco. Aprete los dientes y corrí contra el nomu.

“¡Mineta! ¡Espera!” Ojiro trató de detenerme. El Nomu movió su brazo para golpearme, pero con mi baja estatura lo esquivé. Rápidamente saqué partes de mi cabello y las pegué entre sí, inmovilizando al Nomu con rapidez. Puede que no sea fuerte… ¡pero puedo adherirme a cualquier cosa!

“Tranquilo… estoy bien… ¿y tú?” Pregunté mirando a Ojiro. No sé cómo no estoy muriendo del miedo; tal vez es porque no quiero decepcionar a Kinoko.

“Sí, eso… wow, Mineta.” Dejé sin palabras a Ojiro mientras observábamos al Nomu que intentaba moverse en vano. “¿Cómo aprendiste a moverte así?”

“Le doy gracias a entrenar con Midoriya…” mencioné respirando agitado, parece que no, pero realmente estoy cansado. Entre el entrenamiento del dia de hoy y ahora, no se como puedo mantenerme de pie.

“Veo…” cuando Ojiro dijo esas palabras, escuchamos gritos nuevamente. “Vamos…” dijo Ojiro rápidamente.

××××

“¡Basta…! ¡Basta!” Grité y lloré mientras veía a mi tía sangrar incontrolablemente. Solo escuchar sus gritos me hacía desesperar.

“Hahaha~ ¡AHAHAHA!” Este bastardo empezó a reír como un loco, disfrutando mi dolor y el de mi tía. “¡Esa es la expresión! ¡Amo esa expresión! ¡Y ahora, como la cereza del pastel!” Levanté la mirada y vi cómo Muscular agarraba a mi tía del estómago… no…

Basta…

“¡¡¡DETENTE!!!” Grité, usando mi don para tirarle agua. Él se quedó confundido.

“¿Agua…? ¿Ese… ese es tu don? ¡Qué débil!” Escuché crujidos de huesos. Vi a mi tía llorar, y luego escuché una voz telepática.

“Kota… cierra los ojos… por favor.” Tía… ¡TÍA SHINO!

“¡Mandalay!”

“¡¿Hah?!” Preguntó confundido el hombre cuando oímos nuevas voces. Un coletazo impactó en el rostro del hombre que se estaba divirtiendo con mi tía. El golpe lo hizo soltarla y mi tía cayó repentinamente.

“¡BASTARDO DE MIERDA! ¡¿CÓMO TE ATREVES A HACERLE ESO A LA HERMOSA MANDALAY?!” Otro chico apareció, llorando lágrimas de furia mientras lanzaba… ¿su cabello?

El chico de la cola atrapó a mi tía rápidamente mientras caía sobre su cola frente a mí. Miré a los chicos… no, héroes frente a mí.

“¡MINETA!” Gritó el chico de la cola, mientras el más pequeño corría rápidamente, usando su propio cabello como trampolín, pegándolo al suelo y saltando mientras lo pisaba.

"Mocosos… y más mocosos…" El hombre se rió mientras se recuperaba del golpe. Vi cómo el señor de la cola larga sostenía el cuerpo sangrante de mi tía y miraba al frente. El señor de la cola temblaba solo con verlo; su presencia era intimidante. "¡MÁS DIVERSIÓN!" Gritó mientras se lanzaba contra nosotros cargando su brazo derecho de fibras musculares, pero se detuvo de golpe cuando vimos su brazo izquierdo con un largo hilo de pelotas abultadas en el suelo hasta su brazo. El héroe más pequeño corrió hacia nosotros. "¿Qué mierda es esto?" gruñó con molestia.

"Vámonos, rápido", dijo el señor pequeño con mucha preocupación. Escuché su respiración agitada. "Si no estaba distraído, no lograría inmovilizarlo." Me miró a mí esta vez. "¡Corre! ¡Los llevaremos al campamento!" El señor de la cola asintió mientras corríamos. El señor pequeño me cargó mientras avanzábamos, y luego me soltó cuando notó algo. Un gran trozo de tierra golpeó al héroe pequeño.

"¡Mineta!" El señor de la cola gritó a medio camino mientras yo miraba aterrorizado. Soy… soy tan inútil. Pero… pero confío en ellos. Están salvando a mi única pariente, así que por favor, no te mueras señor enano.

"Estoy… estoy bien…" El señor estaba a salvo aunque sangraba profundamente.

"¿Dónde van? ¿Mocosos?" Escuchamos otra voz y un fuego azul inundó nuestros ojos… un señor aterrador con muchos parches en su rostro apareció. "Muscular…" miró al hombre que gruñía tratando de quitarse el pegamento.

"¡Esta mierda no sale!" El hombre se quejó. El señor de la cola no podía escapar por el muro de llamas que había y el señor pequeño… no, Mineta, miraba apretando los dientes. Espera… yo… yo puedo ayudar…

Levanté mis manos llorando hacia el muro de llamas y usé mi don, tratando de apagarlo. El señor de la cola pareció sorprendido, mientras que el de parches chasqueó la lengua. Vi cómo levantó su brazo lanzando fuego hacia mí. Me aterró ver esas llamas acercarse. El señor pequeño saltó y me salvó una vez más, pero las llamas lo consumieron.

"¡Señor!"

"¡Mineta!" Gritó preocupado… el señor de la cola sosteniendo a mi tía.

Del fuego salió el señor, sangrando completamente mientras su cabello se incendiaba junto a su cuerpo y nos gritó llorando.

"¡Escapen! ¡Puedo… puedo detenerlos!" Señor…

"Mineta… no…"

"¡Ojiro!" Está…

Está dando la vida por nosotros…

"¡Qué mocoso tan molesto!" Muscular gritó mientras el de parches le quemaba el cabello que lo inmovilizaba.

"Mineta…" apretó sus labios el señor llamado Ojiro y aguantó las lágrimas cuando me miró. "¡¡Chico, rápido!!" Yo… yo…

"AHHH!!!" Mis lloros se interrumpieron mientras oía gritar a Mineta. Apagué una parte del fuego logrando una salida y el señor de la cola me tomó con él mientras tenía a mi tía en sus brazos corriendo…

Señor Mineta…

××××

Lancé todo mi cabello mientras el dolor me inundaba, las quemaduras dolían… dolían mucho. Ese tipo tan aterrador estaba libre… ¡MIERDA!

“¡¡¡MUERE MOCOSO!!!” Ni siquiera pude verlo cuando apareció frente a mí, pero apreté los dientes mientras saltaba para esquivar el ataque. Usé su brazo como impulso mientras mis lágrimas fluían. Tengo tanto miedo… “¿¡Eh?!!” Pegué cada parte de mi cabello sangrante en la espalda del gran hombre mientras me deslizaba por la tierra. Vi al hombre parchado sonriendo macabramente y lanzando su fuego hacia mí. Pensé rápidamente una idea y usé mis cabellos como un muro, dios… estoy perdiendo mucha sangre…

Kinoko… Midoriya, Kaminari, Yaoyorozu, Jirō, todos…

Apreté los labios mientras trataba de detener a ambos para que no persiguieran a mis compañeros. Yo… yo…

“Un héroe… ¡SIEMPRE SUPERA SUS LÍMITES! ¡Y DA LA VIDA POR OTROS!” Escuché la voz de All Might en mi cabeza, recordando sus palabras del USJ.

Fruncí el ceño y grité.

“¡¡¡PLUS ULTRA!!!” Grité lleno de lágrimas, frenando a ambos con mi cabello pegado como pude, pero el tipo grande me agarró de la pierna en el último segundo y lo último que vi… fue su brazo apunto de machacarme la cabeza.

Lo siento… no pude ir más allá, chicos… Kinoko… te amo.

Mi mente perdió todo rastro de vida cuando di mi último suspiro.

××××

El cielo se tiñó de carmesí mientras un reloj sonaba en la distancia. En lo profundo del bosque, en una montaña, la sangre goteaba por el precipicio. El cuerpo de Midoriya Izuku yacía sin vida, con la mitad de su cerebro expuesto y completamente cubierto de sangre. El color de sus ojos reflejaba el bosque ardiendo en llamas.

Entonces, un dedo del cuerpo inerte de Midoriya tembló.

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Fin de capitulo.

Leiste... 6700 palabras.

Autor: OneforFanfics/Kaz.