―No puedes estar aquí― murmuro, mi mente se acelera, ―Algo debe estar mal.

Adalynn sonríe maravillosamente y mi nivel de ansiedad se reduce a casi nada al verla. Es tan hermosa como la recuerdo, a pesar de que solo han pasado un siglo o dos desde la última vez que la vi.

Ella toma un mechón de mi cabello y lo coloca detrás de mis orejas, ―Siempre sacas conclusiones precipitadas. ¿Quizás solo debes de disfrutar el momento?

Ni siquiera necesito la advertencia en este punto, ya estoy completamente deslumbrada. Sabía que era ella quien estaba jugando con mi temperatura tan pronto como sucedió la segunda vez. Tiene toda la razón al decir que no hay nada que pueda hacer al respecto; es solo algo menor que sucede cuando sus emociones se disparan. Como una poderosa bruja, estoy familiarizada con el concepto, pero los recuerdos que crea mi propia magia son mucho más cómodos.

Mis brazos se aferran a los de ella con fuerza, pero ella es tan frágil que me preocupa romperla. Su sonrisa es interminable, y sus penetrantes ojos azules miran los míos con amor. Ella es exactamente la misma, incluso su ropa es una versión indemne de la que llevaba el día de su muerte. Alejo el recuerdo al instante y me concentro en la mujer que tengo delante.

―Eres simplemente ... magnífica― Ella respira, ―¡esta década te queda hermosa!

Me sonrojo, ―hay tantas cosas que te encantarían, Ady.

―Creeme lo sé― Adalynn asegura sin molestarse en ocultar que me ha estado espiando desde el más allá sobrenatural.

De mala gana la dejo ir para que pueda realizar el hechizo que le enseñé hace tantos años. Alivia un suspiro cuando su vestido anticuado se disuelve en un par de mis leggings y una blusa de flores que le queda mucho mejor a ella que a mí.

Me apoyo en la pared de ladrillos, esperando. Cuando suelta sus trenzas anticuadas de sus alfileres, noto que el broche de flores de margarita que le compré cuando era niña se suelta de su cabello. Me acerco y lo agarro, instintivamente, antes de tirar algunos de sus largos rizos negros en un peinado a la mitad que le he hecho tantas veces antes. El alfiler encaja perfectamente en su lugar en la parte posterior de su cabeza y mi sonrisa solo crece con el grato recuerdo.

―Deberías perseguir la carrera como estilista― dice tranquilamente, ―No recuerdo un momento en el que no me usarás como tu modelo personal. ¿Cómo lo solucionas ahora?

Niego con la cabeza. ―No necesito una solución. Solo amo más tu cabello que el mío.

Adalynn pone los ojos en blanco y toma mi mano. Su piel está fría al tacto, pero puedo sentir cada pequeño movimiento que hace a pesar de que no está aquí en persona. Ella parece leer mi mente y hace un gesto hacia el restaurante detrás de nosotros.

―Damon y Alaric están aquí con un espíritu de hombre lobo, pero no siento ninguna hostilidad― Cierra los ojos, concentrándose más fuerte, ―Estoy captando las auras de los vampiros en la plaza del pueblo, pero algunos de tus otros amigos están manejando eso mientras hablamos.

Parpadeo extrañada ante la palabra "amigos". Sus ojos se abren rápidamente ante la reacción, pero no dice nada al respecto. Hasta donde yo sé, las únicas personas en Mystic Falls que incluso me quieren como amiga son los dos bebedores diurnos en el edificio detrás de nosotras.

Adalynn tiene la capacidad mejorada de leer las intenciones de los sobrenaturales hasta un par de millas de distancia. Ella es en realidad quien me ayudó a desarrollar mi propio sensor visual para identificar quién es qué especie, pero no se acerca ni siquiera a lo que ella es capaz de hacer.

―¿Que hacemos ahora?― Pregunto en voz alta.

―Preferiblemente, me encantaría probar una hamburguesa con queso.

Es mi turno de poner los ojos en blanco, ―Hablo en serio.

―¡Yo también!― Se ríe mientras da un paso hacia el restaurante, ―Bonnie llamará si necesita ayuda para arreglar esto. Ella es completamente capaz, puedo sentirlo.

Su voz es fascinante, especialmente porque no la he escuchado en tanto tiempo, y su puchero está más allá de estar en desacuerdo. Ella es tan atractiva y elegante como el día en que entró en mi vida hace tanto tiempo. Es asombroso cómo el tiempo ha pasado tan rápido desde entonces, a pesar de que se ha sentido como una eternidad sin mi mejor amiga.

Adalynn me arrastra y no me molesto en resistirme. Si cree que la bruja Bennett puede manejar esto por su cuenta, entonces confiaré en su juicio. Además, ¿cuándo volveré a tener una oportunidad como esta?

El Mystic Grill no es muy diferente de cualquier otro restaurante con bar en el que he estado antes. Adalynn obviamente está fascinada con su entorno, así que no me molesto en compartir esta información con ella y arruinar la experiencia.

Hay un leve zumbido ya que la mayoría de las mesas están llenas debido al buen clima y las festividades que se llevan a cabo afuera. Miro cada rostro mientras la anfitriona nos lleva a la mesa en busca de mis amigos. Tal como había dicho Adalynn, Alaric y Damon están hablando con un hombre con el aura de un hombre lobo en el bar.

―Damon está confundido de vernos juntas― explica Adalynn una vez que la camarera se ha ido con los pedidos de bebidas. ―Parece un poco distraído. ¿Sabes por qué?

Niego con la cabeza. Para mi que Adalynn lea a los sobrenaturales en voz alta no es nada nuevo. Incluso arruga su nariz mientras examina a Damon que es un alivio volver a ver. Estoy segura de que ella sabe que él puede oírla, pero estoy segura de que a ella no podría importarle menos ese hecho. A diferencia de mí, Adalynn se ha mantenido alejada del asunto de los vampiros durante toda su vida mortal. En numerosas ocasiones, ella ha afirmado que apestan a sed de sangre y que se aferran a demasiadas emociones para que ella pueda mantenerse al día, especialmente a los más nuevos, pero siempre hizo su mejor esfuerzo a distancia cada vez que hice aliados.

―Dos aguas...― la camarera deja los vasos sudorosos sobre la mesa con cuidado. ―¿Van a cenar hoy, señoritas?

―Sí, por favor― Empiezo, ―Tomaré la ensalada de pollo y para ella la hamburguesa con queso.

―¿Con todo?― La camarera le pregunta a Adalynn, obviamente un poco confundida de que pidiera por las dos.

Los ojos de Adalynn se disparan hacia los míos con confusión. Asiento sutilmente con la cabeza en confirmación, y ella pasa el mensaje.

―Te gustará. Te lo prometo― Insisto cuando la camarera se va.

Ella sonríe, ―¿Viene con un profesor de historia? Porque mierda, Alaric es sexy.

Sigo sus ojos hasta donde Alaric y Damon se sientan en la barra. Con una mirada casual en su rostro y una bebida en la mano, Alaric se ve exactamente como lo hizo anoche cuando estábamos hablando en el sofá de la sala de Damon. Junto a él, el hombre lobo no se encuentra por ningún lado, así que estoy segura de que la atención de Damon está en nuestra conversación ahora. Mis pensamientos han demostrado ser correctos cuando sonríe un poco demasiado obvio tan pronto como las palabras salen de la boca de Adalynn.

―Cállate― siseé con un rubor avergonzado extendiéndose por mi rostro. ―¿De dónde aprendiste a hablar de esa manera?

―Tuviste una fase― Ella se ríe, sus ojos todavía están pegados. ―Damon sigue demostrando ser un imbécil arrogante.

―Es un imbécil que resulta que también es arrogante― Confirmo, sintiendo la presión subir.

―Supongo que lo vamos a averiguar― Ella susurra, ―Se dirigen hacia nosotros.

Me doy la vuelta para ver que tiene toda la razón. Alaric me mira a los ojos primero y me sonríe. Damon, por otro lado, está mirando directamente a Adalynn. La escucho susurrar algo en voz baja, pero no tengo su oído de vampiro para captarlo.

―Actúa normal― Hablo antes de que nos alcancen.

Sin pensarlo mucho o sin una invitación, Damon toma asiento frente a Adalynn y Alaric frente a mí.

―Hola señoritas― Alaric comienza, ―Permítanme disculparme por los dos por entrometernos. Damon insistió.

―Solo tenía curiosidad por saber quién es la amiga fantasmal de Clara, Ric― Damon interrumpe.

Adalynn le lanza una mirada extraña. Él la devuelve con una sonrisa.

―Esta es Adalynn. Es una vieja amiga mía, Damon, así que sé amable.

Finalmente me mira a los ojos y su expresión se suaviza instantáneamente y vuelve a la normalidad. No me importa decirle directamente que no aprecio su comportamiento. No estoy exactamente segura de dónde viene, pero, de nuevo, nunca lo he visto interactuar con una bruja que no fuera Gloria o yo.

―Hola, Adalynn― Él enfatiza su nombre mientras lo dice. ―¿Qué te trae a Mystic Falls?"

Ella sonríe y hace un gesto en mi dirección, ―Alguien debe cuidar de Clara. Ella se mete constantemente en problemas, ya sabes.

―Sí lo sabemos― Alaric dice con una sonrisa. ―Tenemos mucha suerte de tenerla aquí.

―Eso es muy lindo― Ella responde, su mirada optimista sobre Damon nunca vacila, ―Me pregunto, entonces, por qué Damon quiere sacarla de la ciudad cuando Mikael, la mato hace 500 años.

Inmediatamente puse mi cabeza en mis manos, avergonzada. Escucho a Alaric tomar aire y eso de alguna manera me hace sentir aún peor. Ella tiene razón en todo eso, pero no he tenido la oportunidad de hablar con Damon sobre esto todavía, así que su franqueza es demasiado para mí. Estoy segura de que ha estado espiando por el tiempo suficiente para saber que no he tenido esta conversación con él, pero eso no parece reprimirla.

―¿Qué?― Alaric demanda, volviéndose entre nosotros dos, ―¿De qué estás hablando?

Adalynn abre la boca de nuevo, pero la hago callar con una mirada, y parece encogerse en su silla.

Damon permanece callado mientras Alaric continúa interrogando. Le digo que tiene razón y que podemos hablar de ello más tarde, pero eso solo parece satisfacerlo temporalmente.

―De repente me alegro de no estar aquí después de la puesta del sol― Adalynn finalmente anuncia cuando la camarera llega con nuestra comida. ―Lo siento, Clara y Alaric. Obviamente, ese no era mi secreto para contar.

Para mí, esto no era un secreto en absoluto. Las historias que le he contado a Damon sobre mi tiempo con Klaus eran ciertas, pero en realidad nunca dije el nombre de mi agresor o cómo se relacionaba con Klaus cada vez que les contaba. No es su culpa, simplemente nunca pude hablar de lo que sucedió, ya que todavía me duele hasta el día de hoy. Quizás esto signifique que finalmente puedo dejarlo ahora que todos lo saben.

―Tu intromisión es molesta, pero necesaria, Ady― Lo admito.

Repito sus palabras en mi cabeza sabiendo que había algo más sobre lo que quería comentar. Atardecer, sí. Dijo que ya se habrá ido para entonces, que está a una hora de distancia si recuerdo bien la hora.

Damon se levanta de su asiento sin decir una palabra más y nos deja. Alaric sigue su ejemplo, excusándolos torpemente a ambos en el camino.

―De hecho, me gusta― Adalynn admite cuando están fuera del alcance del oído. ―El verdaderamente sintió un remordimiento total. Yo llamaría a eso una victoria.

―¿Estás hablando de Damon?― Le pregunto, cogiendo una patata frita de su plato, ―¿Acabas de decir que te gusta?

―Sí, siempre he disfrutado viéndolos a los dos más que a nadie. Es una dulce amistad― Ella responde.

Niego con la cabeza, ―Uno, consigue un pasatiempo diferente y dos, podrías haberme engañado con la forma en que se miraron el uno al otro todo el tiempo. Pensé que ustedes dos realmente se atacarían el uno al otro aquí mismo en medio del restaurante.

―Mmm― Ella arrulla, ―Seré honesta, resultó ser más como un anhelo y reencuentro sexual el uno por el otro. Definitivamente hice todo lo posible por ser sutil, pero él es tan...

―¡¿Qué?!

La habitación se congela a mi alrededor y de repente quiero vomitar. ¿Damon y Adalynn? No, nunca en mil millones de años los habría juntado, incluso si fuera casual. Caray, ni siquiera quiero pensar en que ella esté con nadie más.

―Apestas a curiosidad― tararea melódicamente. ―Fue hace mucho tiempo y obviamente nunca volverá a suceder. Él ni siquiera quiere que lo sepas ahora que nos ha visto juntas. Sus emociones eran bastante cómicas, en realidad.

Dejé escapar un suspiro contenido, ―No quiero saber nada al respecto. Todo esto fue antes de que yo lo conociera, así que supongo que no debería sorprenderme demasiado que él tuviera una vida antes que yo. Y que tú no me hubieras contado todo.

Mi tono es un poco sarcástico, pero no parece molestarla. Es extraño aprender algo nuevo sobre ella, ya que ha sido mi compañera más cercana y desde hace mucho tiempo. Nuestra relación es tan fácil y sin el drama normal, creo que es porque la amo más que a cualquier otra cosa en el mundo.

―Ya sabes todo lo demás, ahora cuéntame sobre ti antes de que se nos acabe el tiempo.

Nuestros dos platos están perfectamente limpios. Ni siquiera recuerdo haber comido; He estado tan absorta en su presencia.

―¿Listo para la cuenta?― Pregunta la camarera, apareciendo de la nada. Asiento cortésmente y ella se escabulle a buscarlo.

―Sabes todo sobre mi― Le recuerdo a Adalynn después de pagar la cuenta con un generoso billete de cien dólares; es todo lo que tengo. ―Salgamos de aquí antes de que me digas que te enganchaste con el camarero mientras yo no miraba.

―Dos veces― corrige con una risa y me sigue hasta la puerta.

El evento en el exterior sigue siendo fuerte, pero trato de no concentrarme demasiado en la multitud de personas. El sol cuelga bajo en el cielo y parece que mi tiempo con ella terminará pronto.

―Háblame de Klaus― Ella sugiere, incómodamente, ―¿Hay algo que deba saber sobre él que tengas tanto miedo de contarme?

―No― digo con firmeza. ―Y él no es quien crees que es. Me temo que ha cambiado para peor.

Vuelve a tomar mi mano y nos lleva de vuelta al callejón. Parece el más discreto para cuando ella parpadea y desaparece, así que no me molesto en discutir.

―Realmente no lo crees.

―Lo hago. Mucho.

Ella niega con la cabeza, ―Tienes el corazón roto. Puedo sentirlo irradiando de ti cada vez que él entra en una habitación. Tú eres quien me enseñó a nunca perder la esperanza. Sigue tu propio consejo.

Una brisa llega hasta nosotros y miro con nostalgia a la chica que tengo delante. Su corazón es joven y ligero, pero su sabiduría está más allá de todo lo que yo misma podría haberle enseñado.

―Intentaré― Estoy de acuerdo, y lo digo en serio.

Lágrimas reales ensucian mi rostro ahora. No recuerdo la última vez que lloré, pero esta parece una buena oportunidad para sacar esas emociones antes de que las guarde de nuevo para cuando ella se haya ido. Las limpias con sus suaves dedos y el olor nada sorprendente de margaritas flota en mi nariz. Sus ojos permanecen secos, pero la forma en que expresa sus emociones no es como la de cualquier otra persona en este planeta. Es delicado y hermoso.

―¿Me haces otro favor?― Ella susurra y yo asiento rápidamente. ―Tienes que prometerlo. Es algo muy importante.

Sonrío a través de mis lágrimas, ―Lo que sea. Lo prometo.

―Diles la verdad, por favor. Tú lo sabes tan bien como yo ... todos necesitan saber lo que realmente sucedió hace 500 años. Él merece saberlo.

Exhalo aliviada. Nunca había dicho una palabra sobre lo que sucedió entre los Mikaelson y yo. Por alguna razón, me siento aliviada al escuchar que ella ya sabe sobre mi pasado, sobre su pasado.

―Te amo más que a nada, Adalynn― Respiro, acercándola más a mí.

Tomo una última bocanada de las dulces margaritas y continúo apretando mi agarre. Nunca, nunca quiero que ella me deje de nuevo.

―Yo también te amo, madre.

Y luego ella ya no estaba.

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DI NO A LOS LECTORES FANTASMA.

Todos los derechos y créditos reservados a la autora original: catching_raindrops

OMG, ¿veían venir eso? Espérense a lo que viene...

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