— ¡Bora! — exclamé al ver con quien había chocado.

— Siyeon— ella se levantó de prisa y se acercó a mí, pero al mirarme a los ojos pudo ver el cambio.

— Tus ojos...

— No sé por qué cambiaron...además, no es lo único que cambio en mí— dije mirándome las manos.

— Sí, sentí que ibas demasiado rápido...— dijo y dio una sonrisa nerviosa.

— ¿Qué está sucediendo Bora? — pregunté y sentí como me desesperaba con solo pensar en todo por lo que estaba pasando.

— ... quiero huir, mi padre me comprometió, y no quiero, yo te quiero a ti— debía decírselo — yo...te amo...— me di cuenta que es la primera vez que le decía que la amaba y ella también se dio cuenta, sus ojos se humedecieron y me sonrió, necesitaba decírselo.

— Y yo te amo a ti Siyeon...— dijo y eliminó la distancia entre nosotras para así besarnos, termine dando varios pasos hacia atrás y me apoye en un árbol mientras que el nivel entre ambas subía.

— Siyeon...debes de escucharme, hay muchas cosas que debes de saber— me dijo luego de separarnos del beso y me dejo con la duda, que tanto sabía Bora.

— ¿Sobre estos cambios en mí? — y ella asintió.

Ella mordió su muñeca y comenzó a soltar sangre — ¿qué haces? — pregunte obviamente preocupada por ella.

— Necesito que confíes en mí, ¿de acuerdo? — asentí.

— Beberás mi sangre.

— ¿Tu sangre?, por qué?

— Los vampiros pueden ver los recuerdos de los demás a través de la sangre de ellos, no todos tienen esa capacidad, pero por ser su hija podrás hacerlo sin problema.

— ¿Ser su hija?, vampiros, Bora te recuerdo que yo no soy un vampiro— dije muy confundida.

— Confía en mí— dijo y me ofreció su muñeca.

Aunque me pareció un poco desagradable al comienzo, el sabor de la sangre me cautivó, hasta que de pronto comenzaron a aparecer imágenes en mi cabeza, eran recuerdos, pero no todos eran recuerdos de Bora, había recuerdos de alguien más, aquella mujer, la líder de los vampiros, mi madre Yongsun...ellas dos, recuerdos de ellas...

— Mucho gusto, soy...Moonbyul.

— El gusto es mío, soy Kim Yongsun.

...

— Ok, lo admito entonces, me gustas y deseo tanto poder besarte ahora mismo— su madre era muy directa.

— Entonces no me hago más de rogar— se besaron.

...

— Yo me opongo— ...

— Yo la amo— ...

— ¡PERO PADRE!!!

...

— Quiero ser solo tuya Moonbyul, quiero entregarme solo a ti, ser mujer junto a ti, quiero sentirte dentro de mí.

— No quiero que te arrepientas.

— No lo haré...

Yongsun y Moonbyul haciendo el amor mientras que se decía que se amaban.

...

— ella es tu hija— ...

— pero ¡cómo...CÓMO ME DICES ESO AHORA YONGSUN, TENGO UNA HIJA, CONTIGO, ¡Y AHORA ES QUE ME LO DICES!!!! — ...

— Yongsun.

— Te amo.

...

Eran muchos recuerdos, como si fuese una película, sentí como mis piernas se debilitaron y Bora me ayudo a sentarme junto con ella, pero, aun así, los recuerdos no paraban, sentí lágrimas recorrer mis mejillas, hasta que no había nada más...no más secretos...

Mis mejillas estaban llenas de lágrimas, había vivido toda mi vida una mentira...

— Siyeon...

— Déjame analizarlo todo por favor— dije aun llorando.

— Si entendí bien, ¿mi padre no es mi padre?... — pregunte, aunque ya sabía la respuesta, Bora me miro, se veía triste por mí.

— Exacto.

— Y tu madre, es qué... ¿mi padre? — había entendido, pero no estaba segura.

— Byul no es mi madre biológica, pero si, ella es tu otra madre... — joder.

— Sé que es mucho Siyeon... pero por favor entiende a tu madre, ella no tenía otra opción que ocultar la verdad, las hubiesen asesinado a ti y a ella...— explicaba y era obvio que entendía, pero era doloroso todo.

— Yo...

— Quiero verla...— Bora abrió sus ojos en señal de sorpresa –quiero encontrarme con ella...—

— ¿Ir a verla? — supongo que pregunto por si acaso, yo negué con mi cabeza y le aclaré.

— Quiero ir a ver a Moon Byul.

...

POV GENERAL

Habían llegado, tanto Siyeon como Bora estaban nerviosas, ambas por distintas razones, Bora temía que Siyeon dijese algo que lastimase a Byul, aunque lo dudaba esperaba que no sucediera de todos modos. La hibrida por su lado se preguntaba cómo era ella, había escuchado muchas cosas, pero todo era en temas de guerra, de cuan fuerte era, y como llegaba a imponerse en medio de las peleas como había visto anteriormente... También había visto que era hermosa, su madre se enamoró de la correcta, según vio en las memorias de Bora, Moon Byul era una gran mujer.

— Wheein...— la nombrada se giró llevándose la sorpresa de quien acompañaba a Bora.

— Bora...Byul está en su oficina— era obvio porque estaban allí.

Moonbyul le había contado que le mostró todo a Bora, y viendo a Siyeon allí supuso que Bora le había mostrado a ella. Las chicas pasaron por su lado, Siyeon la miro y se acordó de los recuerdos en su cabeza, ella era la mejor amiga de Moonbyul y fue una gran amiga de su madre también.

Ya frente a la puerta Bora tomo de las manos a Siyeon y la miro a los ojos.

— Ya estamos aquí...

— Si...

— Venga...

Bora tocó la puerta de modo en que lo hacía desde niña para que Moonbyul supiera quien era, y segundos después se sintió la voz de Byul.

— Adelante Sua, sabes que puedes entrar sin problem...— la mujer se quedó sin palabras al ver quien entraba con Bora de la mano.

— Hola...soy Si...

— Siyeon...— completó Moonbyul quien no parecía creerse que su hija estuviera allí frente a ella.

— Yo...— Moonbyul avanzó lentamente hasta donde estaban ambas chicas...

— Yo...Bora, ella me lo mostro todo...— dijo mirando a la chica que la tenía tomada de la mano.

— Mi madre y usted...— definitivamente Byul sentía que estaba soñando.

— ¿Puedo? — preguntó Moonbyul con su mano estirada, en busca de tocarla, a lo que Siyeon respondió asintiendo.

La peli plateada se acercó a Siyeon y Bora dio dos pasos atrás dándoles espacio. La mayor de la habitación comenzó a sentir sus ojos humedecerse mientras que sonreía observando de cerca de su hija.

— Eres muy parecida a tu madre— dijo y una pequeña lágrima se le escapo, Siyeon asintió, pese a que quería ser fuerte, ella sentía un nudo en la garganta.

— Tus ojos son como los de ellas, oscuros y profundos, que provocan un mar de sensaciones— dijo y Siyeon sonrió con un poco de vergüenza.

— Ella...muchas veces la escuche decir, que había algo en mí que le recordaba a otra mujer, ahora entiendo a quién— dijo y le dio una pequeña sonrisa a Moonbyul.

— ¿Puedo...abrazarte? — preguntó la mayor y Siyeon no hablo, solo se limitó a colocar sus manos en la espalda de Moonbyul, quien era un poco más baja que ella, así Byul logró abrazar por primera vez a su hija biológica y no pudo contener más las lágrimas.

En silencio comenzó a llorar mientras acariciaba la cabeza de su hija, quien luego de ver en los recuerdos de Bora hacia los de Byul, ella sabía todo lo que ella y su madre Sun pasaron y cuanto se amaron, sabía que su madre Byul también la amo desde que supo quién era, de cómo sufrió por la muerte de Yongsun y por no haber podido verla el día planeado.

Luego del emotivo abrazo, sin que ellas se dieran cuenta mientras que se sumergían en preguntas Sua se retiró dejándolas a sola, poniéndose al día entre ellas, había sido todo maravilloso, su madre Byul estaba en todo su derecho de pasar un rato a solas con Siyeon...solo quedaba que todo mejorara de ahora en adelante.