Ten
El pelirojo estaba sentado en la mesa de la cocina tomando un café, hace rato había mandado a Taeyong a buscar a los niños.
Haría que los dos desayunarán y luego los llevaría al centro a comprar ropa y todo lo que necesitarán, ya que habían llegado a Estados Unidos sin nada.
—¡Yuta Hyung! —Gritó Han entrando a la cocina llevando de la mano a Christopher.
—Hanji. —El japonés dejó su café y se acercó a su hermano peliblanco para alzarlo y besar sus mejillas, para después dejarlo de nuevo en el suelo y mirar al Alfa de cabello rubio. —Mucho gusto, Bangchan, soy Yuta y de ahora en adelante seré tu entrenador, eres mi elegido y serás mi sucesor al trono en un futuro y Jisung gobernará junto a tí. —El Alfa lo miró con sorpresa, ¿Por qué lo había elegido a él? Si debería de elegir a un vampiro, no a un Alfa, eso tendría más sentido.
—No entiendo... —Habló el rubio. —¿Por qué me elegiría a mí? No soy un vampiro como usted. —Han agarró su mano para demostrarle apoyo, Bangchan no se sintió incomodo porqué sentia que el vampiro de cabello blanco, él lo tenia que proteger a toda costa.
—Te elegí porqué veo en tí un gran poder, y quiero que tú aprendas a conllevarlo. —Dijo el vampiro acercándose al rubio. —Ahora tienen que desayunar los dos, HanJi quiero que después lo lleves a la sala de entrenamiento. —Miró a su hermano y este asintió con una sonrisa.
Ambos niños se sentaron en la mesa y empezaron a comer las tostadas con café, si los dos ya tomaban café, ya tenían la edad para hacerlo.
Luego de pasar un agradable momento, Han tomó la mano de Bangchan y se lo llevó al sótano.
Y así pasaron años...
Felix y Lee Know no lograron encontrar a Bangchan y a Han, así que con mucho dolor los dieron por desaparecidos.
La relación de ambos avanzó mucho más con la situación, cosa que sorprendió al vampiro, ya que él pensaba que pasaría todo lo contrario...
—El día de hoy se cumplen cinco años desde que los niños desaparecieron... —Habló Hyunjin sentado en un sofá de la sala de estar con una taza de té en sus pálidas manos, decir lo que dijo le generaba mucho dolor, todavía sentía que era su culpa...
—Si... —Respondió Changbin sentado al frente del pelirojo también con una taza de té en sus manos. —Hoy es un día difícil para Felix y MinHo...
—Tendremos que cuidar a los niños para que ellos pasen su día de dolor en paz. —El peliverde asintió en acuerdo, para después los dos levantarse e ir a la sala de entrenamiento donde estaban, Jaemin, Jeongin, Seungmin, Yuna y Winter.
—Hyung. —Habló el mayor de los niños, Jaemin, era doloroso decir que era el mayor, cuando antes lo era Bangchan... Ahora la responsabilidad de sus hermanitos y prima cae en él... Y da miedo, mucho miedo, sólo tiene catorce años hace poco cumplidos.
—¿Qué sucede, Jae? —Habló Jin acercándose al adolescente y acariciándo su cabeza.
—Hoy se cumple cinco años desde que Bangchan no está, ¿Podemos ir con nuestros padres al altar que le hicieron a Han y Chris? —Los niños ya veían a Felix cómo su otro padre, por eso mencionó "Sus padres."
El vampiro de ojos celestes se la pensó un rato, para después asentir con una sonrisa, los niños merecían ver a sus hermanos, aún que no sea de forma física.
—Podemos ir ahora mismo si quieren. —Dijo Changbin, y los niños asintieron felices.
Un castaño y un peliblanco miraban el altar de Jisung y Bangchan con dolor.
Habían pasado cinco años y todavía no podían encontrarlos.
Cada cinco de noviembre, eran días apagados y dolorosos, ese día fue que sus niños desaparecieron...
Los dos estaban tan metidos en sus pensamientos que no notaron a vários niños parados a sus lados también mirando el bello altar.
Era una bonita fuente de agua que tenía escrito los nombres de los niños ahí, alrededor había unas bonitas flores violetas y celestes, los colores favoritos de Bangchan y Jisung.
Con esas bonitas flores se creaba un camino de piedras con bonitos faroles celestes y violetas acompañándolo también.
Era una vista preciosa, porqué había un hermoso bosque donde habitaban conejos de color blanco y negro.
Estos eran los animales favoritos de ambos niños, así que Felix los criaba en el honor de los dos.
—Woah. —Exclamó Seungmin sorprendido. —Este lugar sería el favorito de HanJi si estuviera aquí, porque esto es muy él... —Dijo de forma triste la última frase, seguía extrañando a su mejor amigo.
—Tambien sería el lugar favorito de Bangchan... Este lugar también es muy él... —Dijo Jeongin abrazando a Seungmin para consolarlo mientras esté apoyaba su cabeza sobre su hombro, estos últimos años los dos se habían vuelto muy unidos, y los adultos sospechaban el porqué, lo cuál los hacía sentirse felices.
—Les trajimos comida y bebidas para que pasen toda la tarde aquí. —Dijo Changbin con una canasta de pinic en sus manos.
Todos asintieron y empezaron a organizar todo para pasar una bonita tarde en familia junto a la fuente en honor a sus niños perdidos.
Cuando de repente se escuchó una explosión en la entrada del castillo, e inmediatamente todos fueron corriéndo a ver qué era.
Sólo encontrándose con una extraña caja roja.
Felix se acercó con cuidado a observar que era.
Cuando inspeccionó que no era nada peligroso, la agarró y se acercó a su pareja con la caja en la mano.
—Hay que abrirla...
—Lo haré yo, si es algo peligroso, yo recibiré la consecuencia... —Habló Changbin y Hyunjin lo vió preocupado, así que agarró su mano y lo tranquilizó con su aroma, uno que sólo HyunJin podía sentir, ya que eran almas perdidas.
Todos miraron preocupados a Changbin, quién abrió la caja, gracias a la Luna no pasó nada, simplemente era una carta con un bonito emblema en forma de flor, junto con un collar rojo que tenía una flor roja en el centro.
—La carta dice que esto es para Winter... —Dijo extrañado, esperaba que fuera para Felix, no para la niña de once años.
La niña un poco asustada se acercó y tomó la caja, y cuándo leyó la carta, reconoció la letra y se tapó la boca sorprendida, incluso salieron lágrimas en sus ojos.
Su padre la vió preocupado, su niña estaba llorando, así que se acercó a ella y le preguntó que pasaba, así que la niña le susurró en el oído lo sucedido y él también quedó impactado y con lágrimas en sus ojos.
—¿Qué sucede Papi? —Habló Jeongin que era un niño de trece años mirando preocupado a sus familiares.
—Bangchan... La carta es de Bangchan... —Dijo la castaña con voz quebrada.
Provocando sorpresa en todos los presentes.
«Bangchan estaba vivo y quizás Jisung también»
Hola, Bangchan y Jisung ya dieron señales de vida 🌚
Voy diciendo que se vienen cositas jjs 🌝
Adiós 🤍
Janne 🤍
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