CAPITULO 94: charla
Razón #45: la pluma es más poderosa que la espada.
Hoy
Ahora
Marie Jane Watson estaba guardando su libros en su casillero, libro por libro, mientras en su cabeza repasaba los incidentes de los últimos meses:
El día anterior de la Expo-Stark, el día que cambió todo para nuestros protagonistas.
《"Otro día sin encontrar algún papel en alguna obra, aunque sea pequeño. Ser el árbol no era mala idea hasta este punto. ¿Utileria? Podría probar y como en una película dar a conocer su talento como actriz joven. ¿Audicionar en un programa de televisión? Quizás, pero no sabía a dónde ir. Las ofertas de empleo para poder irse a la ciudad no eran mala idea. Podría terminar la escuela viviendo con su hermana mayor en la ciudad. Y por fin dejar al ebrio de su padre atrás.
Toc toc. La puerta.
- abre! - demando su padre mientras miraba la televisión y la pelirroja entre bufido y maldiciones entre dientes fue hacia la puerta.
¿Y si consideraba el periodismo? Pensó y al abrir la puerta no había nadie solo un sobre blanco con un signo sobre el sello de este.
𝓖𝓥
En letras cursivas ese era el sello, la marca de identificación. Al otro lado del sobre estaba su dirección y por último el destinatario: Marie Jane Watson."》
Cuando conoció a la heroína de la suerte, en su forma civil:
《"Era el central Park, el día de la gran Expo-Stark, un gran evento que aunque no todo el mundo entendiera por completo la mecánica o la física o la ciencia en general era un evento que más que a la mayoría estaba intrigado y emocionado por ver. Veía en su teléfono el número que le había llegado en esa mañana. Pensaba, principalmente, en la carta que le había llegado el día anterior, una oferta de empleo. Pero algo le decía que no era precisamente como el que esperaba.
- Jesucristo...toma mi alma y haz con ella lo que quieras. - dijo la voz frustrada de una chica que iba a caminando con la vista en un cuaderno. No le tomo importancia y dio un paso adelante en la fila para el café.
Momentos después, con su café en mano comenzó a caminar, pero iba tan distraída pensando en que podría hacer cuando de repente sintió su café encima y escuchar a la chica de antes frente a ella, disculpándose.
El nombre de la chica era Marinette."》
Suspiro recordando todo y escuchó unas pisadas acercándose, giro su vista hacia donde el sonido provenía y para su sorpresa la mirada de aquella chica no era la misma a la distraída y apenada que conoció ese día en el Central Park sino que esta era seria, enfocada.
Quería respuestas. Y las iba a obtener.
Una vez frente a frente, la azabache sin rodeos comenzó la conversación- ¿y bien? ¿De qué quieres hablar?
La pelirroja estaba tan estupefacta que parecía haberla visto por primera vez, estaba estática en su lugar y tartamudeo un poco antes de comenzar a hablar lo que hizo fastidiar un poco a Marinette.
Marinette: sí estas pensando en una excusa para decirme que no fue tu intención entonces me largo.
Amenazó sin nada de paciencia cosa que no era característico de la azabache y por ende, sorprendió a ambos amigos ocultos en el salón de clases. No conocían esta fase de Marinette y dudaban que ella misma tampoco se diera cuenta de su comportamiento.
Marie Jane: t-te dire todo solo...no me golpees.
La azabache alzó una ceja. ¿Enserió eso iba a ser lo primero que le dijera en la conversación?
Marinette: no eres la víctima aquí Marie Jane. *contestó en un tono seco y la pelirroja trago saliva.* así que sí pudieras decirme porque intentaste matarme, te lo agradecería mucho.
Murmura, siendo muy visible el esfuerzo que empleaba para contener su tono de voz y no gritar. Pero por el contrario, la pelirroja necesitaba luz verde, necesitaba asegurarse.
Desde el primer día que la vio caminando fuera de un hospital le ha tenido miedo, cada momento. Era una superheroina con un traje y habilidades increíbles, soñaba a veces que iba a su casa a enfrentarla por lo que hizo, que estuvo mal, lo admitía. Pero era una persona con superfuerza y ningún mortal como ella podía contra eso.
Marie Jane: Quiero que lo digas...
Este fue el límite. Ella no tenía derecho a pedirle nada.
Se oyó un golpe seco con eco metálico en el pasillo, logrando a los dos ocultos que presenciaron el golpe dieran un salto. Y la pelirroja se encogiera en su lugar. Ella volteó su mirada molesta a la pelirroja, el golpe en el casillero de a un lado tenía una gran y profunda abolladura, la pelirroja temblaba, enserio tenía miedo a pesar de que no lo demostrará de manera tan explícita.
Marinette: diablos MJ, sí no quieres decirme quien te obligó juró por el de arriba que el próximo golpe será en tu nariz *señaló el golpe en el casillero con el ceño fruncido, enserio se veía molesta* ¿hablaras?
Marie Jane: no me mates, enserio, Peter- *dijo con voz temblorosa*
Marinette: ¿Crees qué hago esto por Peter? *preguntó confundida, el castaño que escuchaba tras la puerta de un salón ladeo la cabeza confundido y junto con Ned se miraron impactados con las manos cubriendo su boca* esto no tiene nada que ver con él.
Marie Jane: sí Peter se entera...
Intento volver a hacer su intento de amenaza pero la de coletas la interrumpió.
Marinette: sí Peter se entera me vale un bledo, porque esto es entre tu y yo y del porque intentaste matarme *señaló molesta, la otra chica tragó saliva mientras su espalda estaba contra un casillero*
Fue entonces que la pelirroja decidió rendirse y ser lo más vulnerable y abierta posible. Confesar todo probablemente le quite un peso de encima, a ambas.
Marie Jane: s-solo no quiero que me lastimes.
/Paciencia de Marinette: 90%/
Marinette: esa petición es lo único que no puedo asegurarte al cien, cabeza de jitomate.
Ned por su parte se aguanto la risa tras ese apodo que dijo con una voz tan seria que dio miedo y Peter lo regaño con la mirada.
Marie Jane: bien... hazlo. *su contraria alzó una ceja* pregúntame, eso que te mueres por preguntar.
Hubo un silencio después de eso, la de coletas suspiro con frustración mientras cerraba su puño.
Marinette: ¿por qué? ¿Por qué demonios lo hiciste?
Marie Jane: por dinero.
"¿Qué?" Fue lo que se preguntaron Peter, Ned y Marinette al momento de oír aquello.
Marinette: ¿por...por dinero? ¿Estabas... estabas dispuesta a matarme por... dinero?
/paciencia de Marinette: 40%/
Marie Jane: no exactamente. Un día antes de conocerte me llegó ésta carta a mi casa.
De su casillero, la Watson sacó un sobre blanco ya algo manchado, gris, con pocos dobleces; maltratado. Pero lo único que estaba intacto en el sobre era el sello del frente color plata.
𝓖𝓥
Se lo tendió a la Dupain quien lo vio confundida pero lo tomo de todas formas y saco con rapidez la carta dentro. Por el estilo del sobre y la calidad del papel era obvio que no había sido hecha a prisas, sino todo lo contrario, con mucho cuidado y dedicación.
Marinette: ¿Quien te lo envió?
Marie Jane: ese es el problema, no lo sé. *dice con honestidad y saca otros papeles más de su casillero.* el día que te conocí llegó esto a mi puerta, en la mañana.
Ahora le muestra una tarjeta de la misma calidad que la carta, papel grueso, incluso tenía textura y toques plateados. En un lado había una dirección y en el otro la misma insignia que la carta.
Marinette vio ambos sosteniendo un papel en cada mano. Ambos no tenían contexto, solo una indicación.
"Señorita Watson, conocemos su situación y conocemos su sueño. Sí quiere cumplirlo solo tiene que trabajar para nosotros en algo, los detalles y el precio los discutiremos en la junta de mañana. No se preocupe, le enviaremos la dirección, no llegue tarde.
- A.𝓖𝓥 "
Eso decía la carta y nada más. Mientras que la tarjeta tenía una dirección.
Central Park. En el puente.
2:00 pm
Marinette: por eso ese día estabas en el Central Park.
La pelirroja asintió retraída. - fue derecho antes de conocerte, estaba tan distraída por eso que no me fije que iba a chocar contigo. - la azabache asintió aún viendo la carta. - creía que era una broma, pero alguien que tomaba muchas molestias como las cartas y las tarjetas se lo estaba tomando enserió y quería decirle lo que pensaba sobre esto. No tenía tiempo para bromas.
Marinette: ¿Qué pasó cuando llegaste?
Marie Jane: no había nadie. En su lugar había una caja pequeña con un sobre a un lado, como ese. *señala al que trae Marinette en la mano.*
Marinette: ¿Qué había en la caja?
Marie Jane: dinero, 500 dólares para ser exactos. *la azabache alzó las cejas por la sorpresa.* y una pluma.
Dice y busca entre sus cosas hasta sacar una pluma negra, elegante, con plata y una joya esmeralda pequeña en un extremo y en la tapa tenia un colgante, una pequeña pluma azul de ave.
Marinette: ¿una pluma? *Watson le da la pluma*
Marie Jane: con la descripción grabada: "la pluma es más poderosa que la espada."
En efecto, con letras doradas y de la misma caligrafía que el sello de la carta.
Marinette: ¿y la carta, qué decía?
Marie Jane le tiende esta luego de sacarla de su mochila.
"Ahora que sé que te interesa, aquí 300 dolares por adelantado, el resto lo negociaremos cuando hayas terminado. ¿Te gusta el periodismo? Te encargo en descubrir la verdad detrás de una."
Y del otro lado de la carta había una sola oración.
"Descubre la identidad de Spider-Man y Ladybug."
En eso Marinette vio espantada a la pelirroja. Peter le había dicho que Jane no sabía nada pero ¿y sí si?. Mientras que Peter y Ned se miraban confundidos sin entender al no escuchar nada. ¿Qué había pasado?
Marinette: ¿por esto?
Marie Jane: en ese entonces Chatnoir no estaba así que él no estaba incluido en el paquete. *Marinette seguía con su misma expresión que la hizo seguir hablando.* luego de eso lo tomé un poco más enserio, trate de buscar algo en ese Ladyblog pero mi búsqueda se vio interrumpida por el ataque de robostus a la ciudad.
Marinette: y también el mismo día que caí en coma... *dice mirando algún punto en el suelo*
Todo de alguna manera iba cobrando sentido.
Marie Jane: dos semana después conocí a Peter. *esto no hizo más que llamar la atención de la de coletas.* toda la ciudad estaba en reparación por los daños de las máquinas y lo conocí en el restaurante. Se veía destrozado...
El mencionado trago saliva escuchando toda la conversación y Ned lo observa con algo de culpa.
Marie Jane: esa misma semana me llego una nueva carta, donde mencionaban que querían verme en persona.
Marinette: ¿y que hiciste?
Marie Jane: fui, obviamente. Sino no estaríamos en este lío.
Marinette: pues que gran decisión tomaste. *se queja con sarcasmo viéndola con el ceño fruncido. *
Marie Jane: aún no sabía quién eras. En ese entonces y dijeron que ya no necesitaban que investigará más ya que ya lo sabían pero aun así, necesitaban a alguien que hiciera el trabajo sucio.
Marinette: entonces... te dieron la tarea de matarme.
Marie Jane: más o menos.
Marinette: ¿más o menos?
《"La citaron un viernes, en la noche. Así que saliendo del apartamento de su hermana mayor por una ventana logro salir y caminar hasta el lugar donde la habían citado frente a la escuela Midtown High.
Estuvo quizás una media hora esperando sentada en un pequeño rincón de una jardinera y conforme los minutos pasaban caminaba en círculos o alrededor de un faro de luz. Cada segundo una pregunta nueva surgía en su cabeza, y estaba dispuesta a que todas ellas las respondieran.
Entonces a los 45 minutos donde consideraba irse llegó una camioneta lujosa donde un hombre de tez oscura, lentes oscuros y traje elegante salió del asiento del conductor y le entregó un maletín.
Marie Jane: ¿q-que es esto?
El hombre no dijo nada. Del asiento del copiloto salió otro hombre esta vez de tez clara y con la misma vestimenta que su compañero le entrego una carta.
Marie Jane: ¿porque tanto misterio?
- tu paga la recibirás una vez que hayas completado la tarea. - dice el primer hombre sin ningún gesto o entonación que no fuera neutra. -
- si haces esto, estás aceptando los términos del contrato que está en ese sobre. - dice por su parte el segundo hombre y la pelirroja siente escalofríos. -
Marie Jane: ¿por qué yo? No soy nadie. Solo soy una pobre chica de 17 años.
- por eso mismo eres la indicada, niña. - dice el moreno. - las instrucciones están ahí.
Y con eso dicho ambos hombres volvieron a la camioneta y dejaron el maletín plateado a un lado de la joven. Al momento de que la camioneta arranco la pelirroja abrió con desesperación el sobre que le habían dejado, con el mismo sello que las cartas anteriores:
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Con la misma presentación y diseño que las anteriores. La primera hoja era un contrato, no era muy formal, era corto y muy probablemente ilegal, solo con un párrafo.
"Si haces esto, tendrás que abstenerte a las consecuencias si te atrapan. Todo esto es simple, si haces lo que pedimos te pagamos y te dejamos en paz por el resto de tu vida y obtendrás una gran cantidad por el trabajo bien hecho.
La heroina conocida como ladybug cayó en un coma profundo, pero suponemos que no estará mucho tiempo así, tiene poderes y su curación es más rápida que cualquier humano normal. No la queremos despierta. Tu asegúrate que no lo haga.
Su nombre es: Marinette Dupain-Stark."
Y junto con el "contrato" había unq imagen, reconoció a la chica con la que pasó esa tarde, antes de que todo comenzará. En el segundo papel estaban redactadas las instrucciones:
"Una dosis cada dos semanas, tendrás que hacerlo rápido, en cada frasco esta la fecha en la que lo debes establecer, es solo un piquete, o varios. No tienes porque saber lo que contiene si todo sale bien.
Pasillo 13, habitación 211."
Al terminar de leer, con velocidad se agacho a ver lo que había adentro del maletín. 15 frascos, con 15 jeringas. Cada frasco un poco más alto que el anterior.
Trago saliva sin entender muy bien lo que le estaba pasando."》
Marinette: entonces... estas diciéndome que-
Marie Jane: que no soy una super villana con un maquiabélico plan-
Marinette: ¡no! *reclama ofendida* Estas diciéndome que tuviste otra opción, pero... ¡no! ¡Decidiste hacer el trabajo sucio solo por dinero!
Marie Jane: bueno, ¿¡qué querías que hiciera, Marinette?! ¡Quería salir de mi casa, quería salir del agujero en donde estaba, con un padre borracho y hundida en deudas! ¡Perdón, pero no todos hemos sido adoptados por un vengador! Oh, aún mejor, por Tony Stark!
La azabache cerró su puño con tal fuerza que clavó sus uñas en la palma de su mano, pero el dolor no era un problema; el problema, sería no romperle un brazo a su contraria.
Marinette: ¡si! *ruge abatida* ¡¿Pero tienes idea de cuál fue el costo?! *el recuerdo le formaba un nudo en la garganta, uno que le era dolorosamente familiar y con lágrimas amenazando con salir continuó* ¡Vi a mis padres ser atravesados por múltiples balas frente a mi! ¡A ambos! ¡ese día lo perdí todo, mi hogar, la normalidad, mi familia!
Marie Jane: pero aun así la vida te ha tratado demasiado bien, tan solo mírate Stark, eres una superheroina, con capacidades que cualquiera desearía tener, eres imparable. Yo apenas pude hacerte daño, y porque estabas demasiado débil para entonces.
Reclama también comenzando a enojarse.
Marinette: ¿imparable? ¿Enserió, crees eso? *pregunta atónita con una lágrima asomándose en uno de sus ojos* Yo no pedí nada de esto.
Y el castaño Parker se sintió tan identificado con aquella frase.
Marinette: yo no pedí estos poderes, yo no pedí esta responsabilidad.
Watson tragó saliva.
Marinette: no tuve elección...
Entonces el sentimiento de culpa estaba más que presente en la conciencia de MJ. Y Peter bajó la mirada, recordando los viejos días, al igual que viejas lecciones.
Marinette: ...hasta la última dosis. *la expresión de la pelirroja cambió.* el coma en el que estaba era algo involucrado con magia...
Peter: ¿magia? *formó con sus labios, sin hablar, confundido viendo a Ned quien asentía atento estando al corriente de todo el asunto.*
Marinette: mi elección fue vivir, vivir con la responsabilidad de ser Ladybug. Aun cuando eso significaba tener todo lo que jamás pasaría. Pero al despertar... noté que a lo único a lo que había regresado... *saca su teléfono de su bolso* era a enfrentar.... esto:
Y mostró el video que Alya había filmado ese día en el hospital. La pelirroja desvía la mirada avergonzada, sabía que había hecho mal, muy mal, el daño estaba hecho y no había marcha atrás.
Marie Jane: bueno, y que quieres que te diga? No se quienes son estos tipos ni porque te querían muerta.
Marinette: ¡Quiero una disculpa! *grita por fin explotando de ira* quiero que te disculpes, ¿¡sabes el daño psicológico que te causa que alguien vaya a drogarte mientras estás inconsciente y qué casi te asesina?!
Marie Jane suspiro con pesadez, vergüenza y arrepentimiento.- lo siento. *Marinette iba a abrir la boca para reclamar su desgano pero la pelirroja continuo.* se que hice mal, lo siento mucho. No debí tomar el trabajo, no debí investigarte ni mucho menos mantente en coma. Era sencillo, era... fácil, no hacía preguntas, no había consecuencias, y solo era inyectar algo. Lo lamento mucho Marinette.
Y por fin la vio. Por fin marinette vio; no a la villana que la acosaba en pesadillas, no aquella que creía maldita por haberse quedado con el amor de Peter, no la mala chica que deseaba quitarle todo y quedárselo por satisfacción, toda esa idea que con las semanas se había formado en su mente se esfumó; por fin vio a quien era en realidad, una adolescente ingenua y desesperada.
Se habían aprovechado de ella y sin querer la volvieron la mala del cuento (aunque de cierto modo si lo era, un poco).
Pero luego en el video de Alya, Jane se dio cuenta de una cosa: la hora.
En primer plano estaban Marinette y la figura misteriosa pero al fondo estaba un reloj, marcando las 7 con 35 minutos.
Marie Jane: espera un momento. *dice tomando el celular de la azabache para mirarlo con más detenimiento* esto no...no puede ser.
Dice para después revisar el día en el que se grabo el video.
Marinette: si, también yo dije lo mismo, gracias por el trauma. *dice con sarcasmo y una sonrisa fingida.*
Marie Jane: em... no, no, la hora. No puede ser, no puede ser que sea yo.
Marinette: marie Jane eres tu, las cámaras te captan saliendo de la habitación y es tu cara.
Marie Jane: n-no lo sé, pero esa no soy yo! Yo a esa hora estaba con Peter y May. Teníamos una cena, donde iba a conocer a la tía de Peter, y además la dosis, la última dosis sería el día después de ese.
Ned y Peter abrieron sus ojos al máximo y se miraron con pánico entre los dos.
"Estaba cenando con Peter??" Peegunta en su mente con cierta porción de celos pero luego cayó en cuenta de lo que decía.
Marie Jane: no puedo estar en dos lugares a la vez...*dice sacando de su casillero el último frasco, con la fecha que se debía haber puesto, el último frasco.
Marinette, entendiendo la situación su expresión cambió a una entre asustada e impactada por la noticia. - alguien quería aumentar mi dosis...
Recuerda al espectro que la persiguió en aquel sueño, no debía haber estado en ese momento, cuando se dio cuenta de que todo era un sueño el peligro fue demasiado apresurado. Entendiendo todo, sus músculos se tensaron.
Marie Jane: creo que creyeron que no terminaría el "tratamiento".
Marinette: ¿les diste alguna vez una razón para dudar?
Marie Jane: sí *asiente dándose cuenta* Peter.
Fue entonces que de repente:
El teléfono de Peter comenzó a sonar.
Adrien
Peter: carajo. *maldijo con voz baja intentando apretar el botón de colgar solo que le temblaban los dedos de la impresión.
Ned: ¡apagalo! *exige en susurro*
Marie Jane: ese tono de llamada...
La azabache giro su vista hacia el pasillo mirando las puertas de los salones, pero para cuando Peter logró colgar algo azotó la ciudad como un golpe sonico.
Marinette miro a la pelirroja con seriedad- todavía no acabamos.
Advierte para salir corriendo hacia la puerta principal de la escuela, patinandose un poco por el suelo. Siendo observada por la pelirroja que por curiosidad corrió hasta las escaleras de la escuela hasta el techo.
Marinette, al estar en la entrada de la escuela observo como en el cielo había un robot en forma de dragón y un sujeto con guitarra tocando melodias demasiado destructivas, las ondas sonicas hacían tanto daño como para derribar pedazos de edificios, sus cristales e incluso personas.
En uno de sus ataques el que parecía ser un roquero tocó una melodía con los decibelios demasiado altos, a alguien con super oído no le sentaba muy bien.
"Aggg siento como si un cohete despegará sobre mi cabeza!!"
Cubriéndose los oídos ve como aquel villano volaba por la ciudad destruyendola con ondas sonoras y con ella, también sus oídos, los cuales ahora sangraban.
"Será un concierto doloroso..." pensó marinette viendo como sus oídos comenzaban a dolerle demasiado."pero no pienso perdérmelo."
Y con ese pensamiento Marinette corrió hacia un callejón con el traje de ladybug recorriendo por completo hasta tener el yoyo en su mano y al final del callejón salto con ayuda del yoyo a gran altura, lista para perseguir a ese roquero rufián.
No importaba todas las revelaciones que en su mente abundaban.
Continuará.
Jeje, yo también tengo ese tono de llamada ^^'
Y
uff, cuantas revelaciones, ni yo me las esperaba xd
Hasta aquí mi reporte Joaquin.
~Esta patata se despide.~
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