"Tal vez soy el mejor error que has cometido. Suena tan jodidamente hermoso cuando dices mi nombre y estoy rezando a un Dios, un Dios en el que no creo. Cuanto más escondo mis cicatrices, más fácil sangro... Pero tal vez soy lo peor, lo peor que has tenido. Te digo que eres bella y luego te apuñalo por la espalda. Estás rezando para que sea el único, pero tal vez soy una maldición. Cuanto más tratas de arreglarme. Cuanto más lo haces, peor. ¿Podrías amarme en mi peor momento? ¿Podrías amarme aunque eso duela?"

-My Worst

(BLACKBEAR)

Yoongi cruzó los brazos alrededor de su pecho mientras sus ojos se mantenían quietos sobre la figura de Taehyung y Jimin. Los dos chicos estaban paseando por la playa con Yeontan y Holly a su alrededor.

La imagen resultaba realmente bonita y el pensamiento de poder tener a dos personas en su vida que estuvieran dispuestas a entenderlo como ser humano y persona era tan alentadora... Él ciertamente no podía decir que estaba enamorado de Park Jimin todavía pero sí podría afirmar en voz alta que este le gustaba si alguien le preguntase. Podría afirmar también que quería intentarlo y que ansiaba borrar las expresiones de tristeza que de vez en cuando se colaban entre las bonitas sonrisas del nadador. Y quizás sus amores eran complicados y estaban llenos hasta el borde de pasados difíciles de afrontar, pero el suyo propio lo estaba.

Min Yoongi nunca lograría dar su corazón de una forma tan sincera y ágil como lo hacía Kim Taehyung, pero al menos ahora que mantenía una relación estable con un chico que nunca le ocultaba aquello que sentía, comenzaba a aprender acerca de cómo afrontar ciertos sentimientos. Ahora, al fin, entendía que el amor estaba ahí para que él pudiese disfrutarlo, sentirlo e incluso probarlo. Ahora sabía que arriesgarse no estaba del todo mal y que las experiencias del pasado debían ser enterradas bajo tierra o arena para que no dificultasen su vida o la de aquellos que amaba en el futuro.

Si las cosas con Jimin iban mal más adelante, entonces ese sería un problema del futuro. Su presente era diferente, las cosas que ahora le importaban no debían estar ligadas a las posibilidades de las probabilidades de ser lastimado o de lo contrario jamás podría llegar a vivir del modo en el que lo deseaba. Libre. Libre y sin miedos.

-¡Yoon! - Taehyung alzó la mano a lo lejos, llamándolo para invitarlo a unirse a esa interminable carrera torpe que las muletas provocaban cada una de las veces en las que el base trataba de hundirlas en la arena para seguir los pasos del nadador. - ¡Ven aquí!

En otro momento de su vida Min Yoongi habría rechazado completamente la idea de introducir a alguien más en su relación amorosa, porque en otro momento de su vida él había estado con personas en las que no confiaba. Con personas a las que ni siquiera les dedicaba el maldito beneficio de la duda. Personas que no habían mostrado jamás la misma paciencia implacable de la que Tae era prácticamente dueño y señor.

Y en otro momento de su vida también habría sospechado por el simple hecho de poder ser feliz, él tenía mala suerte y eso era malditamente común en su existencia. Todo le salía mal. Excepto ellos dos. Ellos dos parecían una decisión buena, adecuada y algo que el destino mismo les había empujado a aceptar.

-¡Yoongi! - la voz de Jimin fue una mezcla entre risa y reclamo. - ¡¿No te aburres ahí sentado?!

Él no se levantó de inmediato. El entrenador Min se tomó al menos cinco minutos más para observar el torpe juego de sus dos novios antes de finalmente caminar hacia estos. Cuando el viento sopló haciendo que el agua de las olas que chocaban contra la orilla tropezase contra sus pieles, Taehyung y Jimin se dejaron caer sobre la arena y él simplemente se tumbó entre estos.

El cielo era de un azul oscuro esa tarde primaveral y las nubes llenaban el firmamento con multitud de formas diferentes.

-¿No parece eso una tortuga? - Jimin alzó la mano, señalando con sus dedos uno de los muchos nimbos esponjosos.

-¿Dónde ves una tortuga? - Taehyung frunció el ceño. - Creo que se parece más a una pelota de basket. ¿Qué opina el entrenador?

Yoongi tan solo sonrió, ojos llenos de diversión y el corazón rebotando dentro de su pecho. Estaba feliz, malditamente feliz incluso si le carcomía un poco la idea de enfrentarse a sus padres cuando el viaje a Busan terminase.

Kim Taehyung había puesto su vida patas arriba.

Park Jimin parecía dispuesto a hacer lo mismo, porque cada día que pasaban juntos ese muchacho comenzaba a revelar con mayor claridad la personalidad que durante años había tenido que esconder bajo el manto de las sonrisas falsas que la prensa le exigía. Jimin era juguetón, atractivo, vital y amoroso.

-Yo no veo nada de eso... - el entrenador Min relamió sus labios, pensando en una buena definición de la forma que la nube ante su mirada tomaba. - Creo que se parece bastante a un corazón.

El último día de su viaje a Busan fue un borrón de besos, caricias, gemidos y necesidad. Los tres chicos se dejaron llevar por el momento que los rodeaba con calidez, quizás por eso la despedida fue un poco más complicada de lo que los tres esperaban.

-¿Qué vais a hacer cuándo lleguéis a Daegu?

Jimin estaba tumbado en el sofá de la casa de sus abuelos, piernas sobre las de Yoongi y brazos alrededor de la cintura de Taehyung quien a su vez se mantenía sentado cariñosamente sobre su regazo. Hablar era complicado cuando el base no dejaba de soplar en su oído causándole escalofríos continuamente y el entrenador masajeaba la parte interior de sus rodillas.

-Seguir con nuestra rutina. - Yoongi fue el primero en responder. - Hasta que se acabe este curso al menos... Y hablar con mis padres. Primero quiero hablarles sobre mi decisión de abandonar la carrera de medicina de forma repentina y después les presentaré a Tae.

Jimin dudó por un instante acerca de si era o no una buena idea preguntar.

-¿Qué hay de mí? ¿No somos oficialmente novios?

Yoongi asintió rápidamente, su masaje haciéndose más fuerte en las zonas que había aprendido que necesitaban ser cuidadosamente tratadas tras los entrenamientos a los que Jimin todavía se sometía por cuenta propia con el objetivo de evitar perder su forma física.

-Más adelante. - aunque sus palabras podrían haber parecido duras, estaban llenas de paciencia tranquila en el momento en el que las pronunció. - Primero vemos si lo que hay entre nosotros tres funciona y más tarde se lo contamos no solo a mis padres sino también a los de Tae y a los tuyos. Una cosa a la vez.

Jimin tragó saliva. Por un instante se había olvidado de sus padres, ellos apenas estaban comenzando a acostumbrarse a la realidad sobre su sexualidad, por lo que esperar sin duda podría suponer algo positivo para él también.

-Okay, esperaremos.

Taehyung apartó los labios del lóbulo de la oreja del nadador y observó a los dos chicos ante sus ojos.

-Esperar está bien, a veces ir poco a poco es mucho mejor que arriesgarlo todo a la primera jugada. - el base apoyó una de sus manos sobre la nuca de Jimin. - Además, mi madre también está comenzando a adaptarse a un nuevo estilo de vida y ni siquiera sabemos si a mi padre le durará mucho la buena actitud. Creo sinceramente que ir avanzando paulatinamente es la mejor opción para todos nosotros y está eso otro...

Yoongi y Jimin pusieron su atención sobre Tae.

-La prensa. - dijo finalmente el base. - Jimin tiene a periodistas persiguiéndolo ahora que ha dejado tirada a una mujer que la mayoría cree que es una fantástica entrenadora... No nos hemos podido besar o tomar de la mano en público durante la totalidad de este viaje, tal vez necesitemos unas semanas para adaptarnos a un nuevo estilo de relación antes de decirle a las personas que amamos que nosotros tres tenemos una mal vista relación poliamorosa. No creo que sea sencillo de entender para todos.

-Cierto.

Los tres se mantuvieron en silencio por un par de instantes.

-La prensa siempre es una mierda e incluso sin razones formarán rumores en mi contra, tengo un buen contrato de exclusivas firmado con Swimmers debido a ello. La revista se encargará de cubrir mis espaldas a cambio de noticias frescas si alguna vez lo necesito, no os controléis por mi culpa. Cuando sintáis que queréis tomaros de la mano o besaros mientras estamos juntos... Hacedlo.

-Es un asunto de tres. - Yoongi afirmó. - Tú eres parte de esos besos y esos roces de manos. En esta sociedad nadie ve como algo bueno las muestras de afecto en publico, ni siquiera importa un poco si se trata de una pareja heterosexual o homosexual. Durante un tiempo yo tampoco fui el mayor fan de ese tipo de actos...

-Y ciertamente Yoongi y yo hemos tenido que ocultarnos en muchas ocasiones para evitar que alguien nos reconociese teniendo una cita. La zona de Daegu en la que vivimos es pequeña y Bellum es el único escape para nosotros dos. Creo que podremos evitar que esos periodistas consigan algo malo sobre ti, ya tienes suficiente con que no hayan dejado de llamarte en todo lo que va de semana.

Jimin se mantuvo en silencio por unos instantes, de vez en cuando todavía necesitaba parpadear para asegurarse de lo que pasaba ante su mirada no fuese a desaparecer de la nada. Esos dos muchachos le habían dado una oportunidad e incluso parecían dispuestos a adaptarse a su modo de vida para escabullirse de los rumores falsos o aumentados que la prensa podía llegar a sembrar de vez en cuando.

-Gracias... Gracias a los dos, por querer empezar algo conmigo sin saber con certeza tan siquiera si tiene futuro y por estar dispuestos a modificar levemente vuestra rutina para ayudarme a evitar la persecución de la prensa. No os hacéis una idea de lo mucho que eso significa para alguien como yo. - Jimin alzó su mirada hacia la repisa de la ventana en la que Sammy dormitaba con un ojo medio abierto para observar cada movimiento que Yeontan o Holly realizasen cerca de ella. - Creo que si los tres ponemos un poco de empeño en que las cosas fluyan, entonces lo harán.

-Ser positivo es peligroso... - Yoongi no pudo evitar decir aquello. - Pero supongo que las probabilidades de que esto sea un éxito o un fracaso están al cincuenta y cincuenta.

-Así que simplemente podemos salir de esta relación odiándonos o permanecer en ella amándonos. - el base parloteó. - Aunque espero que si no funciona al menos podamos encontrar un modo para seguir en contacto... No me gustaría veros a ninguno de los dos sufriendo.

Una vez más, los tres muchachos solo necesitaron mirarse para llegar a un acuerdo tácito. Poner todo de su parte para que las cosas fluyeran de forma adecuada, ese sería el primer objetivo de muchos.

2 meses después :

-¡No! ¡No tienes la menor idea de lo que supone para mí eso!

Taehyung se mantuvo quieto y sentado en su zona del sofá con Hoseok a su lado, los dos estaban observando con cierta precaución el modo en el que Jimin y Yoongi no parecían dispuestos a dejar ir esa pelea absurda después de haberse pasado la tarde completa gritando. Incluso Sammy parecía un poco nerviosa mientras se restregaba contra las piernas de su amo en busca de lograr alcanzar algo de la calma habitual de este. Todos los planes para esa noche en Bellum habían quedado completamente cancelados.

-¡¿Y tú sabes lo que significa para mi?! ¿¡ Te has molestado en entenderlo al menos una miserable vez !? - Jimin se agachó para alcanzar a Sammy pero esta se escabulló de los brazos del nadador para huir hacia el lugar en el que Hoseok y Tae seguían observando lo que ocurría con ojos atentos y bocas mudas. - Ya sé que no soy Kim Taehyung y también sé que nunca podrás confiar en mí del mismo modo en el que confías en él pero se supone que yo también soy tu pareja, así que de vez en cuando voy a necesitar que creas en mis palabras. Y de vez en cuando también voy a necesitar que te quites de encima ese asqueroso muro de inseguridad que siempre pones a tu alrededor porque está comenzando a afectar a mi vida el que no sepas expresar lo que tu corazón siente con dos simples palabras.

-¡¿Qué tienen de simples esas dos palabras?! ¿Crees que si me fuerzas a decirte que te quiero o te amo estarás consiguiendo un poco de sinceridad? Ni siquiera tú eres tan estúpido. ¿Y en dos meses? ¿Acaso estás demente? No hay una maldita forma en la que yo pueda decirle a alguien que lo quiero después de tan solo dos meses.

Pero de nuevo, con Taehyung los tiempos habían fluido con una absurda facilidad y eso era lo que parecía desesperar al atleta. Park Jimin quería una confirmación, algo por parte de Yoongi que le hiciera saber que ellos estaban en una relación que los tres querían y no en una en la que tan solo un par se sentían a gusto. Podría sonar absurdo para muchos pero para él, era importante aclarar ciertos puntos que no habían vuelto a surgir desde aquel viaje a Busan en el que decidieron intentarlo.

Cada fin de semana se trasladaba al apartamento que Yoongi y Taehyung todavía compartían en Daegu, él acudía a los partidos de baloncesto que tan importantes eran para ellos e incluso había comenzado a acompañarlos a las visitas médicas de Tae ahora que su pierna estaba casi recuperada por completo. Sin muletas que fueran necesarias para aliviar la presión de caminar sobre su rodilla, ni nada de lo que preocuparse afortunadamente.

Park Jimin besaba constantemente al base, se sumía en sus abrazos y adoraba a los dos chicos que debería llamar "novios" con total tranquilidad. El problema quizás estaba en que con Yoongi las cosas siempre parecían estar varios niveles por debajo de lo que lo estaban con Tae. Podía abrazar al entrenador Min y podía besarlo también, las manos de este respondían a sus caricias cuando las ansiaba pero en cuanto a las tan necesitadas palabras... Las malditas palabras eran el problema de ese muchacho. Porque él no necesitaba un "te quiero" o un "te amo", Jimin lo que necesitaba era que le confirmase que estaba a gusto compartiendo una experiencia de vida a su lado.

-¡Vete a la mierda, Yoongi! - Jimin ni siquiera supo que estaba sosteniendo su botella de agua con fuerza hasta que hizo que el líquido desbordase, cayendo sobre sus manos y la alfombra mullida de la sala de estar. - Si tú no puedes decirme que me quieres incluso cuando yo te lo digo a diario, si ni siquiera puedes escribirlo... Entonces mis intentos no sirven para nada. No estoy pidiéndote que me digas esas malditas palabras literalmente, solo necesito que cuando llegue a casa después de una semana lejos... No solo sea el abrazo lo que me reciba sino también el cariño a través de tu voz. Para mí no es tanto, no debería serlo si realmente estás feliz de tenerme cerca.

Porque lo más complicado de esa relación era que Jimin los amaba a los dos por igual y aún así de vez en cuando sentía celos de Taehyung, porque el base lograba que Yoongi le pusiera apodos cariñosos o lo llenase de ánimo a través de palabras bonitas cuando atravesaba un momento complicado.

-Lo que no sirve es que estés tratando de forzar las cosas. - Yoongi señaló con uno de sus dedos a Jimin. - Esto no es una piscina, aquí no puedes competir con alguno de nosotros y usar tus trucos para ser más o menos rápido.

-¿Trucos? ¿Acaso sabes una mierda de natación a pesar de todos esos vídeos que sigues viendo a escondidas? ¡Han pasado dos meses desde que iniciamos nuestra relación y nunca te has atrevido a pedirme ayuda con tu aprendizaje sobre el deporte que yo adoro!

¿Es que acaso no era suficiente con tratar de entenderlo? Yoongi no podía comprender a Park Jimin, incluso si su interior se quemaba con la necesidad de calmar la tristeza en los ojos de este. Sin importar cuánto ansiaba atraerlo a él y a su base hacia un sincero abrazo para prometerles que todo estaría bien y que tan solo necesitaba un poco más de tiempo antes de lograr confesar abiertamente sus sentimientos, todavía no era capaz de dar su brazo a torcer por algo de lo que no estaba plenamente seguro e incluso si creía estarlo... Todavía resultaba complicado, porque inseguridad y sentimientos de amor eran la peor de las combinaciones. Él sí lo sabía mejor que nadie. Mejor que Jimin e incluso mejor que Taehyung o el fiel amigo de este, mejor que Namjoon, mejor que Seokjin y Jungkook... Para otras personas podría parecer sencillo decir un par de palabras pero no para él.

Taehyung nunca lo había presionado de esa forma, su base le había permitido ir entendiendo las cosas poco a poco hasta que las palabras fluyeron con naturalidad desde sus cuerdas vocales hasta sus labios pero Park era diferente... Park parecía necesitar escuchar que era querido continuamente y él no podría darle aquello nunca. O al menos no en un periodo de tiempo que combinase con las exigencias de este.

-¡Se ha acabado! - Jimin dejó la botella de agua vacía a un lado y recorrió el salón en un par de zancadas rápidas hacia la zona en la que había dejado su pequeña maleta. No iba a pasar un fin de semana en esa casa si Min Yoongi no era capaz de decirle que al menos lo apreciaba un poco más de lo que lo había hecho cuando los tres comenzaron esa relación. - Tae... Lo siento por esto, cariño.

Jimin sintió el dolor recorrer su garganta y el miedo en los ojos de Taehyung cuando sujetó la maleta de mano y casi derramó todas las lágrimas que había estado tratando de frenar, en una interminable lluvia salada causada por todo lo que esa situación implicaba.

-No puedo soportarlo más. Ese idiota puede pensar que estoy mentalmente inestable pero debería saber a estas alturas que las personas inseguras necesitamos algo que reafirme nuestras decisiones. Debería saberlo porque él ha estado en el mismo maldito sitio que yo estoy ahora y si no quiere admitirlo entonces creo que nunca vamos a lograr algo más que esta extraña amistad con derecho a roce a la que nos hemos empeñado en ponerle la etiqueta de noviazgo. Te quiero y sé que me quieres, sin embargo no puedo decir lo mismo de él.

Yoongi no dijo o hizo nada y eso destrozó a Jimin más de lo que creyó que podría hacerlo. Dos meses, llevaban dos meses encontrándose cada fin de semana sin excepciones y dos meses enterrándose juntos en la sensación del hogar y el cariño en cada una de esas ocasiones. Los momentos que podían estar los tres sin una distancia malditamente dolorosa de por medio eran sin duda los que más había disfrutado en años. Pero en ese periodo de tiempo Jimin no había llegado a obtener algo de Yoongi que le hiciera saber que él lo quería ahí de la misma forma en la que lo hacía Tae. Nada más allá de la charla en Busan cuando decidieron intentarlo, aquello había sido lo más cercano al amor que este le había dado se dejaba a un lado los actos físicos.

Sabía que presionarlo no sería la mejor forma de obtener un avance sincero y estable, pero a veces esperar era tan complicado que las lágrimas parecían presionar desde el mismísimo interior de su pecho.

-¿Por qué no tratáis de respirar un poco los dos? - Taehyung fue quién se levantó, una de sus manos abierta para atrapar la de Yoongi y la otra estirada para alcanzar a Jimin. Siempre ejerciendo de calma entre las dos tempestades que Park y Min suponían cuando se enfadaban. - Estos dos meses han sido los mejores de mi vida y sé que para vosotros también, no está siendo sencillo pero al menos deberíamos tener en cuenta lo bien que funcionamos cuando podemos...

-El problema es que no funcionamos. - Jimin negó.- No funciona si ni siquiera sé lo que uno de mis novios siente por mí. Él fácilmente podría querer que salga de su vida para siempre.

-No quiero eso, mocoso. - Yoongi bufó, cansado de escuchar las interminables protestas de Park. - Eres un infantil, estúpido e insoportable chico que no tiene la menor idea de lo duro que es sufrir un desengaño amoroso. Si estoy manejando mis sentimientos con cuidado es para protegerte a ti también, no solo a mí o a Taehyung.

-¡Lo soy porque nunca he podido tener una relación en toda mi vida y ahora que la tengo ni siquiera sé si uno de mis novios estará feliz de verme cuando llegue el fin de semana!

¿Así que era eso? Taehyung sonrió un poco.

-Creeme, Yoongi está feliz de verte. Cada viernes me hace pasear por el supermercado durante al menos dos horas hasta conseguir todos esos alimentos para tu dieta de atleta. - Taehyung rodeó con su brazo la cintura de Jimin en un movimiento que a esas alturas se había vuelto familiar para el nadador. - No es una forma habitual de demostrar amor pero él es así, lo suyo no son las palabras sino las acciones. Solo necesitas prestar un poco de atención a los pequeños detalles.

Jimin gruñó, estaba cansado de todo eso. Sabía que Yoongi era detallista con él a su propia forma pero incluso Hoseok lo era a pesar de que no suponía otra cosa que un buen amigo. Le gustaban los pequeños actos de Min pero todavía quería palabras sinceras por parte de uno de sus novios, no siempre... Tan solo... Le bastaba con escucharlo de vez en cuando, tal vez un recibimiento al mes en el que el beso de saludo fuera acompañado por algo tan sencillo como : "Tenía muchas ganas de verte" o "Te he extrañado".

-No me sirve.- sentenció. - Estoy cansado de esperar y no me sirve. Simple y sencillamente no estoy dispuesto a seguir poniendo mi corazón sobre la mesa para vosotros dos si no obtengo al menos un cinco por ciento de lo que yo doy. Yoongi no es el único que tiene miedo a ser dañado aquí.

Taehyung no se había enfrentado a algo así nunca, sin embargo trató de mantener la calma e intentó por todos los medios que se le ocurrieron equilibrar un poco la discusión entre los dos chicos. No consiguió mucho, así que tras varios minutos de dudas y reproches él simplemente dijo lo primero que se le pasó por la cabeza.

-Bien, entonces no tengas una relación con Yoon. Puedes besarme y tocarme a mí pero no a él si no te apetece hacerlo, Yoongi y yo seguiremos juntos al igual que tú y yo pero vosotros dos... - Oh, la idea era confusa pero Taehyung esperaba que pudiese significar un empujón para Yoongi. Una semana no era realmente suficiente para echar de menos a una persona, pero tal vez verla y no poder abrazarla podría hacer un poco de fuerza sobre los verdaderos sentimientos de su entrenador. Solo quizás, podría ser un modo de que este obtuviera ideas más claras acerca de lo que sentía y quería de Jimin. - Vosotros dos no seréis nada. Yo y tú sí, yo y él sí. Vosotros dos, no. Es un poco complicado de hecho.

La mano de Yoongi rodeó la de Taehyung con más fuerza de la habitual y sus ojos buscaron los del base en un intento por saber si acaso este estaba bromeando, no se suponía que ese fin de semana tuviese que terminar con él teniendo un novio menos. No quería a Park fuera de su vida, solo necesitaba que este fuese un poco más paciente y quizás que dejase de quejarse en cada una de las ocasiones en las que esas dos palabras no le llegaban de vuelta cuando él las decía o escribía.

-Bien. Hagámoslo de esa forma entonces. - Jimin necesitó todo el valor que pudo reunir para aceptar la idea de Tae.

-Bien... - Taehyung dudó un poco antes de devolverle el fuerte agarre a Yoongi. - Vamos a Bellum, apuesto a que Namjoon estará cansado de esperar en el coche.

El plan era... Bueno, ni siquiera él mismo conocía el plan que estaba comenzando a trazar de forma torpe y precipitada, pero esperaba que el hecho de "echar de menos" pudiese ser un buen incentivo para que Yoongi pusiera algunos sentimientos por delante de las posibilidades de ser dañado. A veces ni siquiera él mismo comprendía completamente a su entrenador a pesar de lo mucho que lo amaba.

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Hii!!

Hola personitas, os confirmo que queda otro capítulo antes del final de esta historia o quizás incluso dos o tres más. ¿Qué es lo que me ha hecho cambiar de opinión? Bien, como muches sabréis, hace unos días os deje un formulario sobre mis historias en mi perfil para que pudieseis dar opiniones y consejos. Vi un comentario en el que se especificaba que en esta historia a Taegi le di sus tiempos pero con Taegimin he ido demasiado rápido y pensándolo bien... También lo creo. Dos caps más no harán una gran diferencia pero estoy tratando de hacer las cosas más realistas a través de un conflicto que debería haber surgido hace mucho entre Yoon y Jimin. Espero que os guste el capítulo y espero que os guste la siguiente semana la forma en la que cerraré viejos traumas del pasado con Yoongi.

Os quiero,

un beso

Mel

💜