Capítulo 20.

Hoy es el día. El día en el que Scarlett le pateara el trasero al rey, ella a logrado a tener un perfecto control en manejar a Muñeca, aunque conmigo arriba junto con ella le cuesta subir la velocidad y mantener el equilibrio, siento que esa chica podrá poner en su lugar a la zorra del rey. Confío en ella...bueno, tal vez si tengo miedo de morir en manos de ella en la motocicleta, sé qué dije que iba muy bien pero, si no logra mantener el equilibrio en la competencia, terminaremos muertos. Cosa que espero que no suceda.

Momentos antes de las comida Sam y Jorge, llegaron. Sam llegó con cargando una caja muy feliz.

- ¡Hola Marco! - dijeron Sam y Jorge al mismo tiempo, supongo que Sam debe estar muy contenta. Se acercó a mí señalando la caja muy entusiasmada.

- ¿Qué tienes ahí? - le pregunté señalando la caja con la mirada.

- Pensé que nunca lo dirías - abrió la caja muy alegré, abrió la caja y sacó unas chamarras de cuero, de color negro - ¡¿Están geniales, no?!

- Mejor que eso - tomé una de las chamarras, de verdad que estaban increíble y más porque eran de color negro -. ¿Dónde las conseguiste? - levanté una ceja en forma de intriga.

- Pedí que me lo fabricarán, unos amigos de mi padre y bueno sólo bastó con la mirada para saber las medidas de cada uno de nosotros - contestó, tomé una de las chamarras que era más pequeña.

- ¿Está es para Scarlett? - pregunté mirándola fijamente.

- Si, me lo agradeces luego - sonrió. ¡DIOS CON ESTÁ CHAMARRA SCARLETT SE VERA MUY BIEN!

- Yo creó que las chamarras, están muy geniales, ¿no? - comenzó a hablar Jorge.

- ¡Lo sé! ¡Están muy geniales! - estás chamarras son un clásico de estilo.

- La chamarra de Scarlett está muy sexy, ¿No lo crees? - me susurro Jorge para que Sam no lo oyera, yo también lo había notado -. Scarlett se verá genial en ella - dijo en voz más audible, por qué Sam nos miraba raro.

- Escuchen pervertidos, Scarlett es mi amiga y no permitiré que un par de estúpidos adolescentes le hagan daño, ¿entendido? - habló Sam con voz amenazante, Jorge y yo asentimos temerosos ante la amenaza de Sam -. Bien, espero conseguir una novia, no quiero seguir tratando con niños como ustedes.

- ¿Te refieres a nosotros? - preguntó Jorge, que estúpida pregunta Jorge.

- ¿Tú qué crees? - lo miró con una mirada de obviedad.

- Tranquilízate Sam, no le haremos nada seremos buenos niños - dije con algo de miedo ante su agresividad. Sam miró a la cara de no creerme.

- Joven Marco - era la voz de Soledad.

- ¿Qué sucede Soledad? - le pregunté con amabilidad.

- Scarlett ya llegó y está esperando en el salón del té - dijo con cortesía y una ligera emoción reflejada en su rostro.

- ¡Qué bien ya llegó! - exclamó Sam muy feliz.

- Gracias Soledad, iremos en un segundo - le indique.

- Muy me retiro joven Marco, con su permiso - se retiró.

- Propio - hablamos los tres al mismo tiempo.

Llegamos al salón del té y Scarlett se entraba en el sillón esperándonos.

- Hola chicos - nos saludo con una sonrisa. Se veía bastante genial, pantalones de color verde militar, una playera roja con un grabado de un corazón real, que tenía tachado la palabra de "Love", su cabello lo había sujetado completamente con dos palillos y en su cuello tenía una gargantilla de color negro.

- Te ves estupenda Scarlett - dijo Sam.

- Gracias - dijo Scarlett algo sonrojada.

- ¡Tú blusa es genial Scarlett! - exclamó ultra sonrojado Jorge -. Di-digo te ves, excepcional ma-mas bien sensacional y...¡Ya no sé qué decir! - decir notaba a leguas su sonrojo y nerviosismo.

- No te preocupes Jorge si te entendí - Scarlett soltó una leve risa.

- ¿En serio?

- Si, y muchas gracias - le sonrió. Jorge se puso feliz, y yo me encontraba incómodo ante está escena. Sam me dio un ligero golpe en brazo.

- ¿Qué? - le pregunté molestó.

- Dile algo lindo, idiota - me contestó.

- Scarlett - le hablé y ella me miró con duda -. Te ves muy guapa el día de hoy - dije un poco avergonzado.

- Gracias Marco.

- Bien, Scarlett mira esto - Sam le mostró las chamarras y a Scarlett le brillaron los ojos.

- ¡Chamarras de cuero! - tomó una de ellas -. Excelentes costuras, los cortes son perfectos, se ve la calidad del trabajo - examinó toda la chamarra totalmente, sabía que la calidad de las chamarras era impecable y es impresionante ver cómo se interesaba mucho por ello -. Además que sea de color negro, hace que sea un clásico están muy chingonas - tomó la chamarra pequeña y la examinó -. ¿Está es mía no es así?

- Si, ¿Que te parece? - le pregunto Sam sonriendo. Scarlett se la probó y se miró en un espejo de cuerpo completo que tenía el salón del té.

- ¡Me encanta! - gritó alegré -. Tienes un buen ojo Sam, supiste exactamente mis medidas... ¡Se ve genial! - la verdad es que se veía muy sexy en la chamarra, marcaba la cintura y hacía resaltar sus pechos a la perfección. Mientras no apartaba la vista de ella, Scarlett tomó una de las chamarras y me sonrió -. Este es tuyo Marco.

- ¡Wow! Scarlett adivinaste que chamarra es para Marco, eres increíble. De seguro tienes un mejor ojo que yo - exclamó Sam.

- Bueno, Marco tiene hombros anchos y una increíble percha - dijo Scarlett algo sonrojada.

Scarlett me dio la chamarra, me coloque y la verdad está genial.

- Se te ve bien hermanito - dijo Sam sonriente y ella también se puso su chamarra.

- Ya lo creó - dije presumiendo.

Jorge también se puso la chamarra también, y creó que estaba feliz al verse con la chamarra.

- ¡Me veo genial! - dijo Jorge admirándose en el espejo.

- Bien vámonos - dijo Sam. Llegamos a la cochera y saqué a Muñeca, Sam y Jorge tomaron sus motocicletas también.

- ¿Ustedes también tienen motocicletas? - preguntó Scarlett muy sorprendida.

- Pues claro, al crecer como hermanos, Marco y yo casi compartimos los mismos gustos - dijo Sam subiéndose a su motocicleta -. Y con estas bellezas, es todo un lujo que nos damos.

- A mí me encantan las motocicletas, en el Kingdom al rey le gusta organizar carreras y a mí me encanta participar en ellas - dijo Jorge arrancando la motocicleta.

Yo me subí en muñeca - Vamos Scarlett - le extendí un casco y ella se lo puso sin protestar -. Bien ahora, sube - le indique que se subiera conmigo.

- ¿Estás seguro? - preguntó algo dudosa.

- ¿Confías en mí, no es cierto? - la miré a los ojos.

- Si - no dudó en contestar.

- Pues se buena novia y abrázate fuerte de tu novio falso - le dije.

- Muy bien - soltó una pequeña risa, se subió y se abrazó fuerte de mi.

- Sujétate bien - arrancamos las motocicletas rumbo al Kingdom.

Sin retroceder y sin temor alguno nos dirigimos a hacía el Kingdom. Pensando en tantas posibilidades, el rey es como yo una persona al cual no le gusta perder y dudo mucho que quiera dejarnos ir tan fácil... Si no tengo otra alternativa tendré que demostrarle a ese rubio como peleó, a él y a todos sus "lame botas". Scarlett se esforzó al máximo por este día, para poder vencer al rey y a la zorra que esté con él. Llegamos al Kingdom en cuanto nos vieron nos dieron el acceso para entrar. Nos guiaron hasta la pista de la competencia, había mucha gente gritando hacía el rey, y las tipas se dedicaban mandarle besos.

- Que bueno que pudieron venir - habló el rey mirando a Scarlett y ella lo retaba con la mirada -. Les presento a Estela - señaló a una chica de cabello negro, piel bronceada, ojos cafés claros y vistiendo con un falda demasiado corta y una blusa pegada, que hacían mostrar casi todo su busto...como toda una zorra -. Ella será la que compite con la hermosa Scarlett - le guiñó el ojo, Scarlett y yo le dimos miradas asesinas -. Sam, tú y Jorge pueden ir allí - señaló unos asientos vacíos que se encontraban sobre las gradas -. Tendrán una excelente vista para la carrera, los reservé exclusivamente para ustedes - se peino hacía atrás.

- Muy bien - contestó Sam -. Suerte Scarlett, aunque yo sé que no la necesitas - le dio confianza y le guiñó el ojo -. Vamos Jorge - tomó a Jorge de la camisa y lo jalo.

- ¡Suerte chicos! - gritó Jorge mientras se dejaba ser arrastrado por Sam.

Nos miramos entre los cuatro y no eran miradas para nada agradables, la tensión se lograba percibir.

- Bien iré por mi motocicleta, espérame aquí Estela nena, ahora vuelvo - habló el rey y se fue por su motocicleta. Estela mirada de manera muy despectiva a Scarlett, la miró y se río.

- En serio - habló Estela -. Pensé que podrías ser un poco intimidante pero, ni eso - le dijo a Scarlett -. ¿Te crees cool? - la miró a los ojos intimidándola -. Te ves ridícula, será fácil hacerte perder "muñequita" - chasqueando la lengua y se burló de ella. Esa tipa era odiosa y la quería golpear no me importa que sea mujer, Scarlett notó mis intenciones y me detuvo.

- Créeme no pretendo nada y tampoco buscó pelea - dijo Scarlett tomando una actitud sería.

- Cobarde - le dijo Estela -. Qué malo que tengas una novia tan fea como ella - me habló a mi, señalando a Scarlett.

Scarlett la tomó del cuello de la blusa.

- Al menos yo no tengo que vestirme de...- miró su ropa -. "Aventurera" para levantar desesperadamente el interés de alguien - la soltó de un empujón que casi hace tirar a la tipa -. Y no creas que no me gustan las peleas, sólo provócame otro poco más y verás que tú lindo rostro terminará mal para ti - Scarlett trono sus dedos de manera amenazante. La tipa se alejó de nosotros molesta y pretendiendo que tenía dignidad.

- ¿Así que también puedes ser ruda? - le dije en tono burlón.

- ¿Quieres terminar con el rostro irreconocible? - me miró molesta y mostrando sus puños.

- No gracias - pasé saliva en seco -. Es solo que me sorprendió.

- A mi también me sorprendió mi actitud, pero - miró sus manos -. Me gusta saber que ya no podré ser intimidada tan fácil.

El rey salió con su motocicleta y toda la gente lo aclamaba como si fuera un héroe, las chicas gritaban más fuerte y de forma muy chillona.

- ¡Romeo! - llamó al tipo de lentes - ¡Recuérdanos las reglas! Por favor - sonrió.

- Primera regla: solo la novia de Marco y Estela podrán manejar la motocicletas, con las motocicletas del rey y del joven Marco - se acomodó los anteojos y prosiguió -. Segunda regla: sin trampas obviamente. Será una carrera limpia en la que sólo habrá una pista, así que nada de atajos - señalo la pista -. Tercera regla: ambos Marco y el rey estarán atados alrededor de la cintura de las chicas pero, no podrán indicarles que hacer, quien lo haga será castigado por esa falta, ¡Dicho esto! - aumento el tono de su voz - ¡Suban a las motocicletas! - Scarlett y Estela se subieron a las motocicletas. El rey y yo nos colocamos detrás de ellas, nos amarraron las manos.

Sentía como Scarlett exhalaba muy nerviosa.

- Tranquila...- le hablé en voz baja para que solo ella me escuchará -. Demuéstrale a esa tipa quién es la "muñequita"

- Lo haré...