Capítulo 14.

... No sé porque pero, Marco siento que puedo confiar en ti, porque - mi corazón late con mucho frenesí, mis manos comienzan a sudar y siento mucho calor cargado con una ligera emoción -. Eres como un hermano...- dijo sonriendo y limpiándose las lágrimas, yo me quedé inmóvil, triste y algo se derrumbó dentro de mi - Marco...¿te ocurre algo? - me miró muy confundida y es que mi expresión cambio a uno de decepción.

- No es sólo que...- solté un suspiro y hice todo mi alborotado cabello hacia atrás - me gustaría que hablaras de tu novio con el cual...- no encontré las palabras, me sentía muy avergonzado y triste.

- ¿Con él cuál tuve mi primera relación se...- le cubrí la boca, vaya está chica no teme ni decirlo -. ¿Eso? - dijo apartando mi mano de su boca.

- Si - contesté.

- Bueno lo prometí pero, primero dime...¿cómo era tu primer amor? - pensé que iba hablar de la "relación" que tengo de mis padres...¿cómo sabe qué tuve un primer amor?.

- ¿Cómo lo supis...- la miré con sorpresa.

- Lo adivine - se está burlando de mí -. Bueno, lo supuse un tipo tan guapo… - mis mejillas ardían al oír la palabra "guapo"  -, que tuvo problemas por tratar de ser un torpe "Bad boy" y en el cual no quieres una relación seria, me hizo adivinar...a esté tipo le rompieron su corazoncito - se burló de mi.

- No me gustaría hablar de ello, por favor no me hagas contarte - (la persona que hace mucho me hizo sentir amor...es alguien que debo olvidar a toda costa) ella colocó una mano sobre mí hombro.

- Está bien, hay cosas que queremos olvidar pero...al menos...¿me contarás de tus padres? - me miró a los ojos, son de un café muy oscuros, que me hace perder en ellos.

- Bien lo haré, antes háblame de tú primer...¿amor? - le sonreí, aunque me provocó un mal sabor de boca por la última palabra que dije.

- Muy bien, pero mañana. Ya es tarde y tengo que volver a mí casa, sólo voy despedirme de todos y me voy - me sonrió -. ¡Nos vemos!

- Adiós.

(...)

Después de un martes muy atareado, al fin llegué a mi casa con Scarlett. Debo lograr que llegue manejar como una experta antes para el domingo, para que pueda vencer a una de las chicas del "rey". Al llegar a mi casa todos se abalanzaron a saludar Scarlett la señora Soledad, Isabel, Gumaro y la señora Rosa, y claro también me saludaron a mi. No logró entender, ¿cómo es que Scarlett consigue ganar el corazón de la gente muy rápido?

En el salón se encontraban Sam y Jorge comiendo galletas.

- ¡Scarlett y el Idiota! - Sam habló con la boca llena -. ¿Qué tal? - se levantó a saludarnos.

- Scar-Scarlett, ¿cómo estás? - Jorge se acercó a Scarlett, para saludarla.

- Hola Jorge - Scarlett le sonrió.

- ¡Oh! Hola Marco, ¿qué tal? - me saludo Jorge sonriente.

- Bien, gracias - traté de sonreír, pero más bien tenía expresión muy rara y salía a flote lo molesto que me encontraba.

- Marco asustas - me dijo Scarlett con miedo -. ¿Qué tal si primero comemos?

Después de que la señora Rosa nos sirviera la comida, salimos a practicar con mi amada Muñeca y comenzó el difícil trabajo de hacer que Scarlett montará a Muñeca.

- Aún no logramos que levanté un pie - dijo Sam, Scarlett trataba de mantener el equilibrio en la motocicleta, y tampoco la puede encender.

- Soy un asco, ¿no podemos conseguir a otra chica se parezca a mi? - dijo Scarlett de forma de broma.

- Vamos Scarlett, estoy seguro que lo lograrás - habló de forma animada Jorge -. Sólo mira - montó a Muñeca.

Observó como maneja la motocicleta y para mí sorpresa lo hace muy bien a Muñeca, bueno no lo hacía mejor que yo obviamente.

Regresa con muñeca dando una vuelta y frenó en frente de Scarlett. La mirada de Scarlett se quedo impresionada.

- Ves sólo debes de perderle el miedo – dijo Jorge muy emocionado.

Scarlett aplaudía emocionada - ¡Genial Jorge! - admito que no lo hizo mal, pero yo soy mejor - ¡Eres asombroso! - ella le sonrió y se puso rojo. 

- Mu-muchas gracias, no soy tan bueno –  soltando una risa nerviosa.

- Bueno ahora me toca a mí - dije montando a Muñeca.

- ¡Uy! Que malote - se burló Sam.

Hice caso omiso a su comentario, aceleré como un loco, nada mejor que la velocidad y mi Muñeca y yo somos uno. La cara de Scarlet se iluminó con gran asombro, eso subió mi ego debo admitir y hice algunas acrobacias; realicé un "wheelie" levantando ambos brazos sin tomar el manubrio y cerré con un bonito "drift", Sam gritaba como una loca y Scarlett estaba muy impresionada.

- ¡Hiciste un wheelie y terminaste con precioso drift! - Scarlett me miraba con brillo en sus ojos - ¡Eres genial, en mi vida conocí a un tipo tan genial como tú! - me alababa, se sentía bien.

- Vez sin miedo Scarlett, es cuestión de perderle el miedo, mantener el equilibrio y le das tu estilo, y dominarás cualquier motocicleta - le dije acariciando su cabeza, ella asintió.

- Bien, me toca a mí - dijo Scarlett emocionada.

Al fin tomando más confianza, se movió en la motocicleta, mantuvo el equilibrio perfecto avanzaba cada vez más rápido, y daba la vueltas perfectamente. ¡Dios no creí que se volviera tan buena!. “Derrapaba” excelente, cuando Sam y Jorge se vayan, tal vez llegue a ser mejor que yo.

Iba cada vez más rápido, comenzamos asustarnos todos.

- ¡Scarlett! - gritó Jorge estaba a punto de chocar - ¡Detente!

- Se va a matar - habló asustada Sam - ¡Scarlett cuidado! - gritó desesperada.

Parecía no escuchar a Jorge y a Sam.

(¡FRENA, SCARLETT!) - ¡FRENA! - grité, ella pareció escucharme, giró la motocicleta y logró frenar.

Corrimos para hablar con ella y saber si encontraba bien.

- ¡Scarlett! - se acercó Sam a ella -. ¿Te encuentras bien?

- ¿Qué fue lo qué pasó? - le pregunto Jorge, Scarlett estaba asustada, me vio al rostro y se fue corriendo - ¡Scarlett! - estábamos muy exaltados por lo que ocurrió.

- Yo iré por ella - dije corrí atrás de ella. Se detuvo hasta en el garaje de Muñeca y se quedó inmóvil - Scarlett...¿estás bien? - le dije y ella comenzó a llorar.

- Per-perdón por poco...y lo lamento tanto - trataba de limpiarse las lágrimas.

La abracé, acariciando su cabeza con mucha ternura.

- Tranquila, lo importante es que no te ocurrió nada - le sonreí -. ¿Qué fue lo que ocurrió? - le pregunté, ella miró hacia el piso.

- Me creerás una loca - dijo sin verme al rostro y cruzada de brazos.

- Yo sólo estoy para escuchar y no te juzgaré - levanté su rostro para que me viera a los ojos y que confiará en mi.

- Escuché a Bogart...mi exnovio - decía mientras jugaba con sus dedos, (¿Qué dijo?) -. Él se supone que ya está muerto...

- ¿Muerto? - dije exaltado.

- Sí - contesto - es...una historia muy larga - dijo.

- No tengo nada que hacer - me estiré -. Vamos cuéntame – me senté en el césped y ella hizo lo mismo.

Soltó un suspiro – “ Mi familia me sacó de la escuela una vez que termine el primer año de secundaria, porque nos mudamos. Me enviaron a la secundaria más cercana de mi nueva casa. No me fue nada bien puesto que yo no sabía hacer amigos, era tímida, demasiado, me volví solitaria, las chicas se reían a mis espaldas y los niños me ignoraban, yo sólo me enfoque en mis estudios. Aunque no era nada nuevo para mi, no me era fácil acercarme a alguien.

>>Todo cambio cuando una vez al irme a calificar, él se encontraba en la fila, justo en frente de mi y comenzó hablarme. Al principio lo creí un presumido de lo peor, pero poco me hizo darme cuenta lo simpático, amable y divertido que era. Mi hermano que es dos años menor que yo, lo iba esperar en la hora de la salida en el edificio de los primeros y él también se encontraba ahí, porque también tenía un hermanito que igualmente cursaba en el mismo grupo que el de mi hermano...