summary: donde rosé necesita ayuda para practicar.

rosé g!p

...

—creo que Sana me invitó a una cita.

Jennie escuchó a su mejor amiga. Cerró la puerta del casillero y volteó a verla con el ceño fruncido.

—¿crees?— preguntó.

Chaeyoung asintió con la cabeza y sonrió tímida— sabes que no soy muy buena en esos asuntos.

Jennie se cruzó de brazos— te dijo: ¿Chaeyoung quieres salir a algún lado?

Chaeyoung entrecerró los ojos y respondió confundida: —¿sí?...

—eso es una cita— dijo con desden y empezó a caminar alejándose de su mejor amiga.

Chaeyoung la siguió a paso rápido hasta llegar a su lado. Aferrándose a sus libros en el pecho volvió a hablarle a su mejor amiga.

—¿estás segura?— preguntó nerviosa— es que... —se mordió el labio— no sé de eso, nunca he tenido una cita. Además cómo sabes si le gusto.

Jennie frenó de golpe haciendo que Chaeyoung también lo hiciera, al mirarla se dio cuenta que la chica se hallaba irritada. Le dedicó esa sonrisita linda que solía hacer cuando veía que Jennie estaba molesta o irritada o apunto de pelearse con alguien.

—esa chica se la pasa mostrandote el culo y apoyándose en ti siempre que puede en las prácticas, Chaeyoung— su voz salió con enojo— por favor, si pudiera te levantaría la falda y te haría una mamada en medio de la cancha.

Y con es volvió a caminar queriendo alejarse de su mejor amiga. Rosé sólo atinó a bajar sus libros hacía su entrepierna para taparse, se había sentido incómoda.

Jennie por otro lado estaba furiosa y muy celosa, extremadamente celosa. Sí, le gustaba Chaeyoung, pero nunca diría algo al respecto porque hablar de sentimientos es estúpido. Se paró frente a la entrada del salón y miró hacía atrás dándose cuenta que Sana estaba casi colgada al cuello de su mejor amiga y ella sólo sonreía, ¿en serio?

¿qué hago ahora? ¿entrar a clases o sacarle de encima a esa perra?

Volvió a mirar al frente y luego la desagradable escena de Sana pegada a su amiga. Bufando, decidió ignorar la situación y entrar al salón de clases.

...

Al poco rato de estar sentada, vio a Chaeyoung entrar y hacerse a su lado.

—¿ya te dieron tu mamada matutina?—preguntó con asco— yo que tú me cuidaria porque estoy segura que esa zorra tiene herpes.

Chaeyoung la miró— ¿por qué estás siendo tan grosera, Jen?— su tono de voz había salido algo bajo. Sabía que el temperamento de la chica a su lado era fuerte y que solía comportarse como una perra con muchos, pero ella no era una de ellos.

Jennie cerró los ojos y suspiró. Tenía razón, Chaeyoung ni siquiera había hecho algo para que ella se enojara. Rebuscando en su bolso, sacó un pequeño dulce y se lo tendió a su mejor amiga, quien lo recibió contenta— lo siento, Chaeng.

Chaeyoung sonrió y pasó un brazo encima de sus hombros para abrazarla— está bien, Jen.

...

El periodo académico acabó con normalidad, hoy no tuvieron entrenamiento con las porristas así que decidieron irse hacía la casa de Jennie siendo invitada por esta para que pasaran el rato como normalmente lo hacían.

Dentro de la habitación de Jennie, Rosé estaba sentada en su cama jugando con su celular esperando a su mejor amiga, le había dicho que iría a despedirse de sus padres que saldrían y que subiría algo para comer.

Su jueguito se vio interrumpido por un mensaje en su WhatsApp.

Sana, pudo leer.

Una foto de la chica con un pequeño vestido fue lo que halló al abrir el chat, sonrió porque le pareció que se veía muy bonita.

"¿te gusta? estoy comprando ropa nueva ^^"

"te ves muy bonita, sana :)"

No tuvo tiempo de seguir hablando con la chica porque Jennie entró a la habitación con bebidas y un paquete de papitas grande. Chaeyoung dejó su celular en la cama y corrió a ayudarle con las cosas.

—¿me extrañaste?— preguntó divertida Jennie. Chaeyoung asintió y se acercó a abrazarla.

Llevaban conociéndose desde niñas, su amistad había empezado desde entonces y habían mantenido una relación muy bonita. Jennie era una persona totalmente diferente cuando se trataba de Chaeyoung, dejaba de ser una perra sarcástica con afiladas cuchillas en la lengua que podían hacer llorar al mismísimo Satanás. Ella misma lo decía, la hacía mejor persona. Chaeyoung por otro lado se dedicaba a cuidar a Jennie, darle toda su atención a la chica y demostrarle todo su cariño siempre que podía.

Después de un rato de haber estado charlando Jennie decidió sacar el tema que tanto le había molestando durante el día.

—¿y cuándo será la cita con esa chica?— preguntó tratando de fingir desinterés.

—el fin de semana— respondió desinteresada— dijo que la recogiera ese día.

Jennie luchó contra todas sus fuerzas para evitar voltear los ojos— ni me parece tan linda— dijo de la nada— hay chicas realmente bonitas, ella se ve tan insulsa.

Chaeyoung tomó su celular y entró al chat de la chica para mostrarle la foto que había enviado— a mí me parece que es bonita, mira— le enseñó.

Jennie tomó el celular con recelo y, sin poder evitarlo, volteó sus ojos.

—nah, no es la gran cosa— tiró el aparato en la cama.

Rosé decidió ignorarla y le preguntó.

—¿y si intenta besarme?

Esa pregunta había hecho que Jennie se quisiera lanzar del segundo piso de su casa y llevarse a Chaeyoung con ella. Acaba de recordar que su mejor amiga nunca había besado a alguien, que tenía nula experiencia en todo ese campo.

Bueno, hablar de sentimientos es estúpido, pero intentar cosas nuevas no, ¿cierto?

—podrías practicar— sugirió Jennie.

—¡contigo!— dijo entusiasmada Chaeyoung.

Jennie, sin querer demorar las cosas, simplemente asintió.

—bien, lo primero que debes hacer es mostrar calma, ¿vale?— indicó Jennie. Tomó a Chaeyoung de las manos e hizo que se parará frente a ella. Puso las palmas sobre los hombros de la rubia y apretó ligeramente— esa zorr- Sana, tiene que sentir seguridad en ti. No querrás que sepa que eres una virgen inexperta, ¿no?— Chaeyoung asintió, dándole la razón a su mejor amiga— ahora nos besaremos.

Jennie posó sus manos en el cuello de Chaeyoung y la acercó a ella haciendo que la chica se inclinara y le dio un pequeño beso. La rubia al abrir los ojos miró a su mejor amiga son una sonrisa, pero notó algo distinto en los de ella. Bajó la vista a sus labios y se acercó nuevamente, esta vez tomándola de la cintura.

Otro besito. Y otro y otro más.

Jennie, se relamió los labios y esta vez decidió subir el nivel de intensidad en los besos.

La lengua húmeda de Jennie había hecho a Chaeyoung apretar la cintura de su amiga y así mismo, acercarla a su cuerpo buscando alivianar su palpitante miembro que se había despertado. Ser una adolescente hormonal le estaba pagando caro.

Jennie gimió al sentir el bulto en su abdomen, sonido que hizo que Chaeyoung se alejara de ella con una velocidad impresionante y se tapara la entrepierna con las manos.

—joder, Jen. Per-perdón— trató de disculparse totalmente avergonzada.

Jennie se acercó a ella y tomó sus manos retirándolas de su entrepierna.

—no tienes nada de que avergonzarte, Chaeng. Es normal— acarició su mandíbula— eso significa que te gusta como beso, ¿no?

Chaeyoung asintió, se sentía hipnotizada— besas muy bien— dijo en voz baja— tu lengua, mm... tu lengua es muy suave.

Jennie sonrió con picardía. Bajó su vista hacía el bulto prominente que se marcaba en el jean de su mejor amiga— ¿necesitas ayuda?

Chaeyoung siguió la vista de su mejor amiga y la levantó rápidamente— yo— tragó con pesadez— yo puedo hacerlo— sonrió ligeramente. Jennie notó que sus ojos estaban brillantes debido a la excitación.  

—pero estoy acá, yo puedo hacerme cargo. Después de todo yo lo desperté.

Chaeyoung quedó helada, nunca creyó que su mejor amiga se le insinuaría de esa forma. Pero quién era ella para negarse, menos siendo que tiene un pequeño gran enamoramiento por ella, así que si podía conseguir algo de toda esta situación, lo tomaría.

—vale— dijo en un hilo de voz.

Jennie se acercó para besarla nuevamente, esta vez bajando sus manos hacía el jean de la chica. Tomo la correa y la quitó, empezando a desabotonar el pantalón y bajar el cierre, colando su mano para acariciar la erección por encima del boxer.

—mierda— gimió Chaeyoung.

Jennie la acercó a su boca nuevamente por el cuello y le regaló otro de esos besos que habían hecho que su mejor amiga se excitara. Chaeyoung estaba en las nubes, entre la lengua y dientes de Jennie en su boca y la mano acariciando su miembro no sabía qué era mejor.

La rubia dio un salto cuando sintió la mano de Jennie entrar en su boxer y apretar sus testículos para luego agarrar su longitud y empezar un movimiento de arriba hacía abajo.

—estás muy dura— gimió Jennie— me encanta...

Se había separado de su mejor amiga para admirarla. Tenía la boca entreabierta, soltando pequeños jadeos, sus ojos estaban aún cerrados y tenía las mejillas sonrojadas. Se veía hermosa. Jennie sonrió y le tocó el rostro con la otra mano provocando que la mirara.

Sin decir ni una palabra, le indicó que mirara hacía abajo. Chaeyoung rápidamente comprendió y quedó hipnotizada con la vista que tenía.

—¿se siente bien?— preguntó Jennie. Rosé asintió— bueno, bebé. Siéntate sobre la cama.

Sacando su mano provocando que Chaeyoung lloriqueara, empujó ligeramente a la chica haciéndola sentarse. Se arrodilló frente a ella y agarró la pretina del jean para ayudarle a bajarlo, Chaeyoung levantando sus caderas para hacer más fácil la tarea. Cuando quedó tan sólo en boxer, Jennie se paró nuevamente y le acarició la cara.

—tócate como yo estaba haciéndolo— le ordenó.

Chaeyoung obedeció rápidamente, metiendo su mano dentro de la ropa interior y agarrando con firmeza su miembro. Empezó a bajar y subir con rapidez, Jennie al notar esto la detuvo.

—hazlo despacio, bebé— se sentó a su lado y le bajó el boxer sacando toda su longitud y sus testículos. Se mordió la lengua al verlo. Puso su mano sobre la de Chaeyoung y guió sus movimientos. Se separó de ella al ver que mantenía el ritmo que quería.

Chaeyoung se hallaba en el cielo. ¿O el infierno? No estaba segura, pero la estaba pasando de maravilla. Ya se había masturbado antes, pero por obvias razones esta vez se trataba de algo mucho más excitante. Se acomodó mejor abriendo hasta donde más podía sus piernas y colocó su brazo libre de apoyo en la cama echándose ligeramente hacía atrás.

—mírame— escuchó la suave pero autoritaria voz de su mejor amiga. Al abrir sus ojos la vio parada frente a ella nuevamente— ¿ya te habías masturbado antes?— Chaeyoung asintió— ¿en qué pensabas?

Totalmente llevada por la excitación, sin timidez respondió: — en ti— tragó con fuerza y detuvo su mano para apretar su miembro. Volvió a retomar el ritmo— cuando me toco, a veces pongo alguna porno— gimió— y siempre me aseguro que la chica sea parecida a ti.

—eres una pervertida, Chaeng— sonrió encantada— quién diría con esa carita de niña buena eres así.

Chaeyoung miró a Jennie pidiendo por ayuda, se supone que le había dicho que ella se encargaría pero ahí la tenía masturbándose para ella.

—Jen, por favor— le suplicó.

—¿quieres que te toque?— preguntó con maldad.

Chaeyoung asintió desesperada.

—cancela la cita que tienes con esa tipa.

Chaeyoung volvió a asentir. Creyó que al fin la tocaría pero sólo se halló con Jennie pasándole el celular.

—cancelale en llamada y ni se te ocurra parar.

Con las pocas fuerzas que tenía, Chaeyoung agarró su celular y le marcó a Sana.

—hola, Sana— gimió al ver a Jennie sacarse la camisa de su uniforme de porristas dejándola mirar el bonito brasier que llevaba— es que, me pegué con algo— río sin gracia.

Jennie le dedicó su típica sonrisa de arpía y se desabrochó el brasier, dejando sus pechos libres. Se acercó a Chaeyoung y le tomó la mano que tenía en su miembro para hacer que le tocara el torso.

—sí, sí. Acá estoy, perdón— La mano de Jennie seguía guiando la suya, apretando sus pechos— no podré salir contigo, perdón.

Jennie, harta, se sentó sobre el regazo de Chaeyoung acercándose lo suficiente para que sus pechos estuvieran en la cara de la chica.

—es que— tragó saliva— estaré ocup—

Jennie le sacó el celular y se lo puso en la oreja.

—no quiere salir contigo porque teme contagiarse de alguna ets, zorra— y sin más colgó. Lanzó el celular a su cama y agarró el rostro de Chaeyoung para besarla con necesidad. Dejó su boca para bajar hasta su cuello y besarlo.

—eso fue algo rudo— dijo Chaeyoung.

—no me importa.

Recostó el torso de la chica y se puso de rodillas en el suelo entre sus piernas, tomó nuevamente su miembro y le pasó la lengua. Chaeyoung se tapó la cara con su antebrazo y gimió.

—mírame— le ordenó nuevamente. Como pudo, la rubia se apoyó en sus antebrazos para mirar a su mejor amiga. La forma en la que metía su miembro a su boca y lo chupaba o lamía la tenía extasiada— me dijiste que mi lengua era suave, ¿no?— lamió desde sus testículos hasta su glande.

Chaeyoung asintió— muy suave— habló bajito.

Jennie se aseguró de guardarse la imagen de Chaeyoung exitada y vulnerable en su mente, la atesoraria. Su rostro sonrojado y brillante debido al sudor le daba una apariencia muy sexy. Y ni hablar de los labios hinchados y entreabiertos y sus ojos oscuros.

—Jen...— gimió.

Jennie se separó de su miembro y se puso de pie, haciendo lloriqueara nuevamente a Chaeyoung, ya era la segunda vez que la dejaba al borde.

—tranquila, bebé— se subió sobre ella— te vas a corre dentro de mí, ¿entendido? quiero que me dejes muy llena— Chaeyoung asintió.

Jennie se subió la falda de su uniforme de porrista y se hizo a un lado sus panties. Se había asegurado de quitarse el short que solían ponerse para evitar accidentes.

Tomó el pene de Chaeyoung y puso el glade en su entrada. Gimieron al sentir como se abría paso por el apretado sitio.

—Jen— tomó las sábanas y las apretó.

—eres muy grande— gimió Jennie. Chaeyoung apretó aún más las sábanas.

Cuando ya estuvo totalmente dentro suyo, Jennie soltó el aire que no sabía que tenía retenido y esperó hasta acostumbrarse.

—eres, eres muy apretada, Jen— habló Chaeyoung, su voz suave y ronca hizo estragos en el interior de Jennie.

—te encanta como te aprieto, ¿no?— Jennie bajó hacía el rostro de su mejor amiga y le dejó besos por toda su mandíbula y cuello, Chaeyoung hizo un sonido de aprobación— lo tienes muy grande, Chaeng. Me estás dejando muy abierta, bebé.

—mierda— gimió— Jen, no aguanto. Si sigues hablándome así me correré.

Aún dándole besitos, Jennie empezó a moverse sobre Chaeyoung. Era movimientos leves, apenas para que la rubia pudiera sentirla. Se separó lo suficiente para poder verla y apoyó sus manos en el pecho de su mejor amiga marcando un ritmo más rápido.

Chaeyoung sentía el culo de Jennie robotar sobre sí mientras su pene entraba y salía de la apretada vagina de su mejor amiga. Todo se sentía tan húmedo y calientito, podría estar dentro de ella horas. Abrió sus ojos al escuchar a Jennie gemir mucho más alto que antes y sintió desfallecer a ver su rostro excitado. Jennie le sonrió y agarró sus manos colocandoselas sobre sus pechos.

—juega con mis tetas.

Chaeyoung apretó sus pechos con ambas manos, con sus dedos agarrando los pezones para acariciarlos. Jennie se enderezó y puso sus manos sobre las de su mejor amiga, moviéndose hacía adelante y hacías tras.

—me encanta como te siento tan dentro de mí, Chaeng— separó las manos de las dos de sus pechos y entrelazó sus dedos. Volvió a bajar, sin soltar sus manos, y la beso con deseo, al separarse le dijo:— muévete ahora tú.

Chaeyoung apoyó sus pies en la cama y empezó a mover sus caderas hacía arriba y abajo, Jennie tan sólo mantenía el equilibrio, dejando que fuera la rubia quien hiciera el trabajo ahora.

—Jen, no aguanto— lloriqueó. Sentía su miembro más duro y caliente, sabía que estaba a punto de eyacular. Las paredes vaginales de Jennie se apretaron contra el miembro de Chaeyoung—eso se sintió muy rico— habló Chaeyoung como pudo.

Otro apretón más que dió bienvenida al orgasmo de Jennie, quien se desplomó sobre el cuerpo sudoroso de Chaeyoung. Y otras tres estocadas más para que la rubia de enterrará lo más profundo dentro de su mejor amiga y eyaculara dentro de ella.

Gimieron, Jennie al sentir el espeso líquido blanco llenandola y Chaeyoung porque al fin había logrado liberarse después de tanto rato.

Jennie se enderezó sentándose sobre el regazo de Chaeyoung con el miembro aun duro de su mejor amiga muy dentro de ella. A propósito lo apretó mirando divertida la reacción de la rubia debajo de ella.

—me encantó que te corrieras dentro de mí— le dio un besito en los labios. Chaeyoung suspiró complacida. Se sentía feliz de tener a Jennie de es forma— estás dura, al parecer no puedes manter eso lejos de mí— se burló.

Chaeyoung se cubrió el rostro con las manos, avergonzada y dijo:— es que me gustas demasiado...

Jennie sonrió feliz y se acostó sobre ella nuevamente para abrazarla.

—puede que tal vez me gustes un poquito— admitió con algo de pena— ahora recupera fuerzas que esto va para largo— dijo rápidamente antes de que Chaeyoung se pusiera sentimental con ella.

...

hice el intento ukiyotfw