El fin de semana no podía ir peor, Jimin acababa de descubrir que no habían bares, al menos que valieran la pena. Solo pequeños establecimientos donde vendían vodka barato y apenas se podía bailar por lo pequeños que eran.

— Vamos a ir.

Hoseok voltea a verlo.

— ¿Estás seguro? Jungkook dice que son lugares de mala muerte.

— ¿Por qué le haces caso a tu hermano en todo? Parece tu padre. – Jimin se tira sobre la cama de Hoseok — Tienes diecinueve años, estás en la universidad y nunca has probado el alcohol o ido a un club. Que desperdicio de vida.

— Jungkook cree qu-

— Hoseok, no nos importa qué crea Jungkook, importa lo que tú quieras. Es tu momento de experimentar y crear recuerdos que puedas contar cuando seas viejo.

Su amigo lo piensa unos momentos, unos largos momentos en realidad. Se toma tanto tiempo que Jimin se convence a sí mismo de que tendrá que ir solo.

— Muy bien, iremos.

— ¿A dónde irán?

La repentina voz de Jungkook hace que ambos griten.

— Demonios Jeon, ¿no conoces la privacidad?— Jimin se lleva una mano al pecho mientras el mayor ingresa en la habitación.

— Responde Hoseok.

Jimin hace una mueca al ver a su amigo encogerse, malditos niveles de superioridad.

— No tienes por qué decirle Hoseok. – Se interpone en su mirada, Jungkook alza una ceja claramente molesto — Tu hermano tiene derecho a tener secretos, a salir cuando quiera sin pedirte permiso.

— Esto es entre familia Park, no te metas.

Jimin respira profundo, observa a Hoseok esperando que haga algo, pero solo se queda callado. Molesto, toma su mochila y camina a la salida, chocando con el cuerpo de Jungkook, logrando que se mueva solo unos centímetros, pero eso basta.

— Jimin.

Hoseok trata de ir tras él pero Jungkook lo detiene, era patético.

Al salir de la casa el cielo ya está oscuro. Jimin se abraza a sí mismo cuando el viento fresco golpea su cuerpo, no se había dado cuenta lo tarde que era.

Había pasado toda la tarde convenciendo a Hoseok para salir, el chico le tenía más miedo a su hermano que a sus padres, era increíble lo sobre protector que era Jungkook y lo peor de todo era que utilizaba su posición de Alfa para salirse con la suya y manipular a Hoseok a su antojo.

En estos momentos agradecía no ser un híbrido, tienen tantas reglas, no tenía idea cómo podían vivir así.

— Park.

Da un grito cuando escucha su apellido y ve unos ojos rojos entre la oscuridad. Se echa hacia atrás en pánico dispuesto a correr, sin embargo es Jeon quien sale de entre las sombras, está aliviado por una parte, solo un poco.

— Necesitas dejar esta mierda o me moriré de un infarto. — Reclama en voz alta, sonando más molesto de lo que quería.

— Eres un exagerado. Anda ven, te llevaré a tu casa.

— No gracias.

Jimin se da la vuelta y sigue derecho por la acera, sin embargo Jungkook se interpone en su camino con un movimiento sobrenaturalmente rápido.

— No seas terco por una vez en tu vida, son las once y tu casa queda muy lejos, sube al auto.— Jungkook hace el afán de sujetarlo del brazo pero Jimin retrocede.

— Yo no soy tu hermano, a mi no me das órdenes.

— Deja esa mierda Park, y sube al maldito auto antes de que me arrepienta.

Jungkook da un paso y Jimin lo retrocede. Así están hasta que lo acorrala contra algo. Cuando se da cuenta contra qué había chocado, Jimin se maldice en voz baja.

— No voy a subir. Prefiero congelarme a ir contigo.

Jeon sonríe cínico cuando lo ve abrazarse al momento en que el viento vuelve a golpearlos.

— Que lástima – Jungkook se acerca hasta que sus cuerpos se están tocando, su boca quedando a la altura de su oreja — Yo podría mantenerte caliente.

Jimin se queda sin aire ante sus palabras, siente el corazón en los oídos latir con tanta fuerza que no duda que Jeon lo esté escuchando.

— Estás demasiado cerca.

— ¿Nervioso?

La burla en su voz termina por colmar su paciencia, empuja al híbrido por el pecho tomándolo desprevenido y se echa a caminar con prisa. Había tenido suficiente por hoy, solo quería llegar a casa y relajarse, Jungkook siempre lo dejaba ansioso y con un humor agrío.

Sin embargo, el suelo desaparece bajo sus pies. Jimin vuelve a gritar cuando se da cuenta que Jungkook lo había cargado en su hombro sin ninguna dificultad.

— ¡Bájame! — Jimin golpea su espalda con todas sus fuerzas. — ¡Te dije que me bajes! Imbécil, te aprovechas solo porque tienes poderes pero seguro no serías esta mierda pretenciosa y-

Jungkook lo avienta dentro del auto, luego mete medio cuerpo y le sujeta de la barbilla.

Los dedos presionan su carne con fuerza pero el pulgar da una leve caricia que lo hace temblar. Jungkook parece ido viendo donde su mano está lastimándolo, hace un sonido ronco desde el fondo de su garganta y finalmente le mira a los ojos.

— Escucha, hago esto porque Hoseok te quiere demasiado, así que hazme la tarea fácil y quédate dentro.

— No tengo porqué hacértelo fácil cuando tú no se la dejas fácil a él.

Jimin lo empuja nuevamente pero esta vez el enorme chico no se mueve, sino que termina por subirse recostándolo contra el asiento, su mano se desliza hasta el cuello y presiona. El agarre lo obliga a tensarse, el cambiaformas podría ejercer la más mínima fuerza y podría matarlo.

— No hables de cosas que no comprendes, Hoseok es frágil por naturaleza y mi deber es cuidarlo.— Aunque está molesto, su voz ha comenzado a ser ahogada.

— Es patético que piensen eso de él, no es débil, deberías enseñarle a defenderse en lugar de encerrarlo en una burbuja – Jimin jadea cuando Jeon se cierne sobre su cuerpo, empujándose entre sus piernas, si embargo se obliga a seguir hablando — ¿Qué hará cuando no estés para defenderlo? Entonces sí será inútil y todo... será t-tu culpa.

Cuando prácticamente jadea las últimas palabras, el lobo gruñe más fuerte logrando que todo a su alrededor vibre. Jimin se altera tanto que su corazón parece a punto de salirse de su pecho, Jungkook era inmenso y parecía confundido en este momento, sus ojos rojos habían aparecido para iluminar la oscuridad, pero había algo en ellos que no se veía normal, tan normal como podían ser.

Parecía desorientado.

Lo siguiente que sucede lo deja shockeado, antes de replicar nuevamente por la cercanía, Jungkook se lanza contra su boca. El lobo gime contra sus labios como si estuviera sufriendo, le sujeta el rostro con un agarre desesperado como si temiera que se alejara.

Todo está sucediendo tan rápido que Jimin apenas puede captarlo. Las manos de Jungkook están por todas partes, temblorosas y ansiosas mientras le sujetan la cintura con un poco más de fuerza de la necesaria.

Quiere alejarlo, lo intenta mientras balbucea entre el beso tratando de hacer recapacitar al lobo, pero está igual de confundido y desorientado, la forma en que Jungkook lo está besando y tocando desborda de ansias, era imposible no quedarse sin aliento y desear un poco más.

Termina aferrándose al cuerpo musculoso y pesado, derritiéndose con cada roce de esos labios suaves y húmedos que buscan nada más que devorarlo junto a esa lengua hábil que se pasea por su boca, creando chasquidos por la saliva y la salvajidad que le estremecían, dentro del auto solo podía escuchar el roce de sus jeans y los jadeos de ambos.

Entre movimientos bruscos, una rodilla de Jeon cae al suelo del auto, dejando ambas pelvis juntas, el golpe repentino de sus pollas los obliga a gemir. Ni siquiera había notado que está duro, tampoco habría imaginado que un beso sucio en el asiento trasero de un coche excitaría a Jungkook, principalmente porque era con él con quien estaba.

El lobo gruñe de nuevo antes de balancear sus caderas creando fricción, el movimiento le arranca un jadeo silencioso, el cosquilleo se expande desde su vientre hasta su polla cubierta.

Está temblando, la situación extraña y la repentina necesidad lo tenían tan sensible e inestable que su cuerpo convulsiona del placer con solo un par de besos y roces de chicos de secundaria.

El frío de hace unos momentos desaparece justo como Jungkook había prometido allá afuera, el enorme cuerpo desprendía tanto calor que lo tenía sudando en segundos.

— Jungkook.

Jimin se sorprende al escucharse a sí mismo tan agitado, su voz se había agudizado y aunque quiere sentirse a avergonzado, no puede, lo está disfrutando tanto.

Jeon lleva ambas manos a la puerta para sostener su peso, se ve gracioso en este espacio reducido. Jimin aprovecha y lleva sus manos a las caderas del mayor, arqueando la espalda debido al placer, Jungkook era muy pesado, demasiado grande como para ignorar que estaba asfixiándolo un poco por su peso.

Pero no importa, él soportaría cualquier cosa con tal de tener a este hombre así, hecho un desastre, fuera de sí, Jimin podía notarlo. Su voz había desaparecido totalmente para ser sustituida por gruñidos, dignos de un animal salvaje, dignos de Jungkook, y era jodidamente sexy.

Jimin gime más fuerte conforme se acerca al orgasmo, abraza las piernas a las caderas tratando de seguir el ritmo, pero es imposible, Jeon se mueve frenético sobre él y antes de que pueda siquiera darse cuenta, lo lleva a la cima.

Jungkook lleva una mano a su cintura y sigue presionándose mientras él tiembla con los estragos del clímax, su espalda aún arqueada y su boca abierta dejando escapar jadeos cortos y rápidos.

Lo próximo que ve es a Jeon tensarse y gemir tan profundo, como si aquello se hubiera llevado todo de sí. Sus caderas siguen empujando pero ahora es más calmado, sin embargo puede notar cómo se hincha de forma exagerada dentro de su pantalón.

— ¿Cómo puedes seguir duro?

— Es mi nudo... Tardará en bajar.

¿Nudo?

Jimin tiene ganas de indagar pero Jungkook baja del auto sin darle oportunidad, rodea para subir de piloto mientras Jimin se queda en los asientos traseros, sin decir nada, incapaz de creer lo que acababa de pasar.

Fue la adrenalina del momento ¿no?

→LYLM ♡

Holaa.

Aquí otro capítulo de esto. Disculpen si el semi smut es muy malo, lo escribo constantemente pero solo lo dejo en borradores porque siento que no se me da jaja pero espero al menos sea tolerable.

La última parte aún no me tiene muy convencida pero sentí que era lo que debía ir ahí así que.... Ajá, estoy avergonzada jajaja.

Espero estén teniendo una semana linda y si ya están en la escuela espero no les dejen tanta tarea como a mi.

Besitooos.