"Me pregunto, ¿eres mi mejor amigo?. Siento como un río corriendo por mi mente, quiero preguntarte si todo esto está solo en mi cabeza. Mi corazón late con fuerza esta noche, me pregunto si tú eres demasiado buena para ser verdad. Y estaría bien si te acercase más."

- V (Sweet Night)

Jungkook sabía que no sería fácil tomar sus cosas y marcharse. En los últimos días trató de apartar a su hermana casi a cada instante de su cabeza. Yuqi no podía quedarse sola, y él estaba dispuesto a encontrar una alternativa que no implicase arrastrar a su madre lejos de su hogar porque después de todo ella seguía siendo su madre. Alguien a quién él quería y respetaba, pero ver a su hermana llorar complicaba todo mucho más.

-¿Por qué tenemos que irnos? Me gusta esta casa.

Jungkook sabía que Yuqi, al igual que él mismo, necesitaba aferrarse a la tranquilidad de un hogar certero. Por eso su mente era un revoltijo de dudas mientras guardaba algunas prendas de ropa deportiva en su maleta.

-Yuq , ¿mamá te ha dicho el motivo de que yo no haya estado en casa estos dos últimos días? - su hermana no era una niña tonta. Ella podría saber que había algo extraño en el hecho de que él esperase a la marcha de su madre para regresar a casa - ¿Te ha explicado algo al menos?

Su hermana suspiró y negó dejándose caer sobre la cama de Jungkook. Lo observó casi reclamando esa explicación que nadie le había dado todavía. Realmente era difícil enfrentarse a aquellos ojos acristalados sin sentir que todas y cada una de sus decisiones comenzaban a tambalearse por completo.

-Supongo que tengo que explicártelo entonces. - sabía que era necesario y sin embargo lo asustaba poder ser rechazado también por ella. Incluso si su hermana tenía en la cabeza todas esas historias sobre ships y fanservice, él mejor que nadie sabía que esta no se planteaba realmente la posibilidad de que alguno de los idol que admiraba fuese realmente homosexual. - Yuq, tú sabes que estuve saliendo con una chica. - Su hermana asintió. - La cosa es que no sentía nada realmente cercano al romanticismo a su lado, han estado pasando algunas cosas que me han ayudado a entender que quizás se deba a que en general estaba enfocando mi vida hacia un lugar que no me hacía feliz. Sé que puede sonar precipitado pero creo que me gustan los hombres y creo que ya me gustaban antes de que mamá me inculcase sus ideas en ciertos aspectos. - Jungkook hizo una pausa casi esperando ver alguna mueca en la expresión de su hermana. Pero todo lo que vio fue a la persona que quería mirándolo sin reacción alguna - Soy gay. O bisexual. No lo sé. Hasta el momento solo sé que me gusta el entrenador Kim, estoy intentando algo con él y me hace feliz sin ningún tipo de duda.

Una pequeña sonrisa que descolocó a Jungkook se asomó a los labios de su hermana.

-El entrenador Kim es guapo. Quedaréis bien en las fotos. - dijo simplemente - ¿Entonces Swimmers estaba en lo cierto?

Jungkook dejó escapar un pequeño bufido recordando sus expericiencias con aquella maldita revista y un periodista en particular que parecía haberse pegado a la causa de demostrar que él era homosexual y Jin su pareja.

Se limitó a asentir mientras jugueteaba con sus propias manos.

-¿No vas a decirme nada? - Jungkook habría esperado algo más que la simple mirada de su hermana, al menos un poco de shock inicial... pero esta solo se había limpiado las lágrimas para dejar que una sonrisa se asomase a sus labios.

-Oh, vamos. Cuando eras más pequeño recuerdo que querías casarte con Rain y mamá te prohibió ver sus presentaciones musicales o cualquier cosa que lo implicara. No preguntes cómo puedo recordarlo, yo solo me quedaba a tu lado y miraba la pantalla como si estuviese viendo la cosa más entretenida del mundo. - Yuq sonrió - O eso me ha contado Sejin, él dice que eres la razón por la que empecé a obsesionarme un poco con el tema de los idols. Así que de alguna forma me lo imaginaba, solo estaba esperando a que tú lo empezases a percibir.

Jungkook sonrió levemente antes de mirar a su hermana alarmado. ¿Su manager podría estar sospechando algo acerca de todo eso? Incluso si se conocían desde que él era solo un niño que empezaba a dejar caer sus pies contra el agua de las piscinas, pensar en el hecho de que este hubiese sospechado sobre su sexualidad durante un tiempo... sencillamente lo ahogaba la idea.

-¿Crees que Sejin lo sabe? - su hermana no contestó - Yuq contéstame.

-Quizás y solo quizás yo escuche mientras mamá y él discutían sobre reemplazar al entrenador Kim. - su hermana levantó la mirada para clavar sus ojos sobre su mirada - Pero Sejin defendió a Jin, le explicó que ahora mismo es el único entrenador con el que estás avanzando desde hace mucho tiempo.

Jungkook frunció el ceño, no había compartido una sola palabra con Sejin acerca de los rumores que envolvían el revuelo que Swimmers había causado. No se había atrevido a mirarlo a los ojos incluso cuando este había estado a su lado y había posado la mano sobre su hombro cada vez que Choi Siwon realizaba alguna pregunta demasiado puntiaguda para su propio gusto.

Y Sejin tampoco había dicho nada al respecto. El silencioso apoyo no era algo nuevo, a veces Jungkook pensaba en su padre y se encontraba comparándolo con su manager de forma inevitable, ambos eran hombres de pocas palabras que preferían actuar antes que hablar.

-¿Por qué no me sorprende? - suspiró - Ni siquiera me dijo que había hablado con mamá, él sabía que me estaba quedando con el entrenador pero jamás le dije el motivo.

Yuqi se encogió de hombros, un pequeño hipido post-llanto se escabulló de sus labios antes de forzarse a levantarse. Ella y Jungkook podrían pasarse los días discutiendo pero todavía era su hermano.

-Me quedaré aquí cuando mamá esté en casa entonces. - dijo mirándolo - E iré contigo y Jin cuando se vaya. A ella no le gustará saber que yo comparto mi tiempo con...

-Llámalo Kim. - corrigió Jungkook por acto reflejo - ... O al menos muestra un poco de respeto cuando estemos con él, no es un chico de tu edad.

Su hermana sonrió de esa forma que a veces asustaba a Jungkook, como si por su cabeza se estuviesen comenzando a desplazar ideas aterradoras.

-Tampoco es un hombre de tu edad pero has decidido comenzar a salir con él.

-¡Yuq! - protestó alzando uno de sus dedos - Primer aviso.

-¿Qué? Es la verdad, tu novio es bastante más mayor y maduro que tú. Miyeon dice que los hombres de más edad siempre son mejores porque los otros son todos demasiado infantiles y sus hormonas están excesivamente revolucionadas.

-Segundo aviso. ¿Miyeon y tú tenéis edad para saber con certeza cosas como esas? No estáis viviendo en un drama así que deja de soñar despierta.

Su hermana se limitó a sonreír levemente mientras se movía hacia la puerta de su habitación con la coleta moviéndose de un lado a otro y su ondulado cabello cayendo como una cascada sobre su nuca.

-Me mudo si me compras el último álbum de Seventeen...

-¿No te he comprado ya el último? - protestó Jungkook centrándose de nuevo en el armario. A veces agradecía que su hermana pareciese vivir su vida sin tomarle demasiada importancia al resto del mundo, estaba seguro de que en otra persona la reacción a su homosexualidad habría sido bastante más parecida a la de su madre.

-Era un mini álbum, este es un álbum. Uno de los que de verdad quiero tener en mi colección.

Jungkook asintió sin mirarla, de alguna manera siempre terminaba accediendo a comprar lo que sea que esta le pidiera. Después de todo su hermana nunca le había dado problemas, sus notas estaban bastante por encima de la media de su clase y su manera de ser parecía ser lo suficientemente pacífica como para evitar peleas estúpidas. Un par de álbumes al año no eran una petición demasiado difícil de cumplir para él.

-¿Tu hermana forma parte de tu zoo personal? - bromeó el entrenador ayudandole a colocar el terrario de los camaleones con una pequeña mueca divertida adornando sus gruesos labios.

-No podía dejarla sola tanto tiempo, a veces mi madre está fuera de casa durante casi toda la semana. Si dejase a Yuqi sola no podría dormir tranquilo nunca.

El entrenador le hizo una enseña indicando con claridad que quería que lo siguiera hacia la cocina. Jungkook posó su vista sobre el terrario para asegurarse de que se encontraba situado en un buen lugar, después miró a su hermana. Yuqi se encontraba entretenida con Peach y Mei mientras posaba la mirada sobre el televisor donde un show de música de la KBS se reproducía en directo. Kang Daniel presentaba su nueva canción por vigésima tercera vez.

Una vez en la cocina Jungkook no pudo evitar olisquear el aire sintiendo sus tripas removerse y crujir, esa mañana se había levantado temprano, todavía en cierta forma agotado tras la noche anterior. Jin no se había mostrado demasiado preocupado ante la idea de permitirle tomar un día libre y él no sabía si se debía al sentimiento que comenzaba a nacer entre los dos o simplemente a que nuevamente parecía entenderlo sin la necesidad de mediar palabra.

-Jungkook, es tu casa. - Seokjin miró al chico ante sus ojos, este parecía entretenido y completamente ajeno a sus palabras. Con delicadeza sostuvo su barbilla logrando al fin intercambiar una mirada con este - Es tu casa, estás dándosela a tu madre y lo entiendo pero ella no puede decidir si tú tienes derecho a vivir allí o no. Si quieres quedarte aquí, sabes que no voy a negarme. Si quieres que Yuqi se quede, adelante. Ninguno de los dos me suponéis una molestia, pero no me gustaría que más adelante te sientas culpable por una cosa que claramente no debería hacerte sentir de esa forma. - Jin acarició la piel de Jungkook bajo su mano y le sonrió notando como los ojos del muchacho parecían entristecerse un poco. - Tienes un hogar aquí pero eso no significa que debas dejar ir el tuyo.

-¿No se supone que el hogar está donde sea que estén las personas que uno ama?

Jin sonrió y soltó la barbilla del nadador para rodear la cintura de este con sus brazos. Jungkook era un muchacho mucho más cálido de lo que jamás había pensado, sus sentimientos eran puros y su fidelidad hacia aquellos que amaba lograba que su corazón latiera con fuerza. Jeon lo hacía sentirse como un adolescente de nuevo.

-El hogar está donde sea que tú te sientas bien, es por eso que me preocupa que lo estés dejando todo de una forma repentina cuando llevas tanto tiempo apegado a un modo de vida. - Jin le dedicó una sonrisa antes de posar su frente sobre la de este, podía notar la forma automática en la que el chico había posado las manos sobre su pecho, entreabriendo los labios expectante. - Eres una persona libre y puedes escoger aquello que creas más adecuado, pero si quieres mi consejo tal vez deberías tomarte un tiempo para pensar y decidir. Quizás de esa forma puedas caminar con más seguridad en la vida que tú mismo estás viviendo.

Jungkook asintió buscando con sus ojos la mirada de Jin. El entrenador era un poco más alto que él, pero incluso aquello se sentía bien. Le gustaba la forma en la que los brazos del otro, y su cuerpo entero, parecían envolverlo por completo.

-En realidad... puede sonar masoquista pero creo que me gustaría volver a intentar hablar con mi madre... Sigo queriendo estar contigo pero la idea de perderla para siempre es dolorosa.

Jin asintió al instante, Jungkook notó como nuevamente su personalidad abierta le permitía sacarse un peso de encima.

-Es tu madre niño, lo raro sería que te diese exactamente igual perderla para siempre. Que quieras volver a hablar con ella, que intentes de nuevo que te acepte tal y como eres, es algo completamente natural.

Jungkook movió sus manos, las yemas de sus dedos sintiendo la piel del entrenador mientras envolvía su nuca con ambos brazos aumentando la cercanía entre ambos y colgándose levemente de este en un intento por obtener toda su atención. Otra de las cosas que tanto le gustaban del entrenador Kim residía en su mirada, a veces él la notaba tan fuertemente depositada sobre sus ojos que sentía el impulso de bajar la cabeza avergonzado.

Cuando Seokjin lo miraba así para él resultaba mucho más íntimo que el propio acto del sexo.

-Gracias por aceptar la propuesta de Sejin. Eres el mejor entrenador y...

-Para el mejor nadador. - completó la frase Jin recordando el modo en el que Jeon solía hablar cuando se conocieron por primera vez.

Jungkook se limitó a sonreír, moviendo levemente su cuerpo en un tímido vaivén automático que el entrenador continuó posando las manos sobre sus caderas. Una danza tan sumamente lenta que si los dos no estuviesen encerrados en la mirada del contrario parecería incluso absurda.

-Ya, a parte de eso... eres una persona increíble. Se supone que los chicos como yo nos sentimos perdidos descubriendo algo como que somos homosexuales, pero tú lo has hecho tan fácil que casi me resulta absurdo. ¿De verdad existes en este mundo?

El entrenador le dedicó una sonrisa socarrona antes de inclinarse para romper la distancia. Cuando sus labios se rozaron en un beso tan lento como necesitado y cariñoso, ambos sintieron que estaban en el lugar correcto.

-Sí. Kim Seokjin existe en este mundo. - bromeó alzándolo en brazos para a continuación sentarlo sobre la encimera de la cocina. Sus manos se posaron a ambos lados de las caderas del nadador, y una vez más Jungkook no pudo evitar posar las manos sobre el pecho de este. - Ahora deja que esta hermosa persona te alimente a ti y a tu hermana.

Las tripas de Jungkook crujieron en respuesta.

-No veo ningún tipo de falla en su lógica entrenador Kim.

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Holiiiii!!!!!

Sorpresa supongo ;)

Los viernes me encargo de los caniles en la protectora con la que colaboro así que suelo llegar a casa algo cansada después de dejar listos a los perros y por eso muchas veces no logro inspirarme, así que obtendréis cap algunos jueves de madrugada.

Una hermosa persona, que ahora mencionaré, creó una muy bien hecha reseña sobre I Hate U Mr.Handsome. Sería genial si os pasáis a leerla o dejarle algún voto, por esa misma razón este cap esta dedicado a : 

@glossedaegu 

En serio, pasaos por su perfil a darle un poco de amor.

Un beso, Mel ;)