"Chico, has estado dando vueltas en mi mente y no me importa, por cada pequeña cosa y por todas las pequeñas cosas que has hecho. Percibí algo distinto cuando te conocí. Algo sobre ti me hace quererte, no podría callarlo o callarte tan siquiera. Robotando en las paredes como si te necesitase. Así que dime si estás cayendo como yo estoy cayendo por tí." 

- ECHO (KATIE)

Esa mañana las nubes dejaban paso a un sol leve que iluminaba la cara de Jungkook a medida que la risa se escabullía de sus labios, como motivo de su carrera acelerada contra su entrenador y el perro de este. Aquello se sentía realmente bien, a su alrededor los problemas que sabía que no podría ignorar para siempre parecían quedar relevados a un simple detalle sin importancia.

Sus pasos se detuvieron cerca del banco, el lugar en el que siempre detenían su pequeño entrenamiento mañanero. Tras dar un trago a su botella de agua Jungkook dejó caer su cabeza escuchando la música que todavía sonaba en uno de los auriculares inalambricos que se había encargado de quitarle a su entrenador en algún momento entre el inicio de su entrenamiento y la carrera divertida entre ambos. El sonido en sus oídos parecía crear un atmósfera perfecta mientras sus ojos se mantenían cerrados en el intento de sentir plenamente el ambiente fresco del amanecer. Muchos creerían que era extraño, sin embargo a veces a Jungkook le gustaba madrugar.

El sonido calmado, el ambiente de la mañana y el sol invernal anaranjado atravesando las hojas de los árboles del parque Songpa Naru. Aquella rutina era una de sus favoritas y se sentiría completamente diferente si decidieran correr a otra hora. Con más gente, más ruido y menos intimidad. Aquel momento era suyo, de los tres.

El ladrido de una emocionada Peach hizo sonreír a Jungkook quién se enderezó sobre el banco en el que se había sentado para extender su brazo hacía el palo que la perrita había dejado caer a sus pies esperando un poco de diversión. Kook lanzó el palo con una amplia sonrisa y observó como el precioso animal alzaba la carrera hacia este para a continuación repetir el proceso.

—¿Qué le ocurrió? - Jungkook estaba de pie frente a Jin jugueteando con el palo de la perrita y lanzandolo para que esta corriese a buscarlo.

—Cuando la adopte dijeron que los cazadores la abandonaron a su suerte en medio de un bosque, no saben si las cicatrices son de antes o durante pero teniendo en cuenta que cuando la traje a casa desconfiaba de todas las personas... Creo que ya la habían golpeado antes de abandonarla.

Jungkook dejó escapar una de esas miradas tristes acompañadas por una voz en forma de rabieta y labios con puchero. Y Jin sonrió felizmente, no podía imaginar algo más bonito que aquello. Su niño era precioso.

—Eso es bueno Peach - Jungkook se agachó y acarició la barbilla de la galga - No es bueno confiar en las personas.

A veces Seokjin pensaba que Peach había aceptado rápido a Jungkook porque podía notar en él esa soledad e inseguridad que a menudo el chico trataba de esconder. Los tres eran muy parecidos, quizás el destino estaba jugando a juntar a aquellos que llevaban toda su vida creyendo que acabarían bajo tierra solos y sin nadie que llorase por ellos.

—Os parecéis un poco - Jin sonrió antes de llevarse la botella de agua a la boca.

Jungkook dejó escapar una carcajada tranquila antes de subirse a horcajadas sobre su cintura para acurrucarse tranquilamente. Ambos llevaban ropa de abrigo pero no les impedía sentir la calidez que alcanzaban cada vez que compartían un poco de espacio. Su movimiento había sido automatico y tan precipitado que ambos tuvieron que mirarse por unos instantes antes de suspirar tranquilos.

El jardín repleto de árboles de Songpa Naru ya podía considerarse un refugio para ellos, allí no había prensa sensacionalista ni gente que los juzgara con la mirada. Allí sólo eran ellos demostrándose amor. Al menos tendrían algunos minutos a solas antes siquiera de que cualquier curioso pudiese acercarse a comprobar quienes eran ellos dos.

—Nos parecemos un poco - admitió Jungkook después de unos minutos - ¿Podemos volver a casa ya? El entrenamiento ha estado bastante bien... Solo quiero darme una ducha de agua caliente y comer algo mientras vemos una película.

Sí, despertar pronto para hacer ejercicio era realmente bueno. Sobretodo ahora que se sentía debil y expuesto hacia sus propias acciones y sentimientos.

—Vayamos a casa entonces niño - Seokjin tomó la mano de Jungkook antes de silbar para que Peach los siguiese. Los días como ese llenaban su corazón de esperanza y felicidad pero sabía que estar con un atleta no sería fácil de ninguna manera.

—Te he conseguido un fotógrafo decente de Swimmers pero hay un pequeño problema.

Jungkook levantó la mirada de las pesas cuando escuchó algo caer en el suelo a su lado y miró a su entrenador confundido.

—¿Qué ocurre? - su vista llegó hasta la vieja revista que Jin había dejado caer a su lado y sus manos quemaron un poco cuando observó la fotografía de la portada - ¿Eres tú con ... dieciocho? Creí que habías entrado en las Olimpiadas con veinte años...

—Swimmers quiere que imites esa fotografía para tu propia portada. Sejin ha aceptado pero no sé si es bueno que hagas algo así , no después de lo que hicieron con tu portada de la última ocasión. Te llamaron iceberg y tergiversaron tus palabras.

-Me gusta la idea de imitar tu portada, podría ser interesante Kim. ¿Qué es lo peor que podría ocurrir? No soy un atleta cobarde.

A pesar de aquella charla que ambos habían compartido días atrás, el entrenador Kim no se encontraba completamente feliz con el hecho de encontrarse en las oficinas de la revista Swimmers observando como todos a su alrededor se movían con prisa para preparar los elementos necesarios para que no existiera fallo alguno en la sesión fotográfica.

-Por favor, vamos a empezar. - el fotógrafo sostuvo sobre sus manos la cámara con una mueca de aburrimiento - ¿Qué es lo que os está llevando tanto tiempo? Solo es un chico guapo, cualquier cosa va a verse bien en él. Llevo esperando una hora...

Jin chasqueó la lengua mientras observaba a Jungkook, Sejin a su lado tampoco parecía convencido con todas esas joyas alrededor del chico quien miraba a los estilistas como si estuviera a punto de perder la paciencia a medida que estos seguían pidiéndole que se cambiase de conjunto.

—No va a funcionar, a mí me llenaron de cosas llamativas porque creyeron que eso pegaba con mi imagen pero Jungkook tiene fama de chico frío ante la prensa. En su última portada para Swimmers lo llamaron iceberg, detesto ese apodo y no creo que una portada con Jungkook lleno de joyas ayude.

Sejin asintió mirando al atleta que se encontraba a unos centímetros de ellos probándose un nuevo y llamativo abrigo.

—Diles que le quiten todo eso - Jin modificó su tono para expresar seriedad mientras captaba la atención del manager de Jungkook - Sin abrigos caros o joyas brillantes. Hay cosas que destacan en él, su cabello o... su cuerpo. Jeon no necesita más.

Sejin se bloqueó por unos instantes antes de negar con la cabeza contrariado. ¿Acaso no sería incluso peor si llegaban a la redacción de la revista y comenzaban a darle órdenes a quienes simplemente estaban realizando su trabajo en función de las órdenes que habían recibido?

—No podemos empezar con restricciones Kim, se supone que hemos firmado un contrato.

Jin maldijo antes de señalar a los estilistas.

—Ni siquiera a ellos les convence, hay mejores formas de imitar mi portada. Hablaré con el fotógrafo, él tiene la última palabra después de todo.

Sejin suspiró molesto observando la escena ante sus ojos, sabía que Kim Seokjin era bueno en su trabajo pero de la misma manera él lo era en el suyo y temía que lo único que conseguirían cambiando por completo el concepto de portada establecido sería precisamente obtener la fama de personas excesivamente controladoras. Jungkook no necesitaba que nadie lo hiciese verse como un presumido muchacho que no quería hacer lo que debía.

Kim estaba pensando con el corazón y olvidando su propia cabeza.

Jungkook realmente no podía concentrarse durante la sesión de fotos con aquellos ojos conocidos siguiendo cada uno de sus movimientos.

—Está bien - Jin le sonrió al niño bonito y le ofreció una botella de agua antes de comenzar a masajear sus hombros mientras este descansaba - La foto de portada a veces sale de una casualidad. Si te sientes tímido o cohibido mírame, Sejin y yo estaremos animandote niño.

Maldita sea, mirarlo era lo único que había estado haciendo todo ese tiempo y precisamente por eso su concentración se encontraba completamente enterrada. El entrenador no vestía su habitual ropa de deporte ese día, en su lugar portaba un par de vaqueros rajados por las rodillas y una camiseta negra que realzaba sus trabajados pectorales así como la amplitud de sus hombros. Todo su cuerpo de nadador olímpico siendo enmarcado por completo.

Jungkook se estaba sorprendiendo a sí mismo con su capacidad para admirar el cuerpo de otro hombre, Kim era su pareja ahora pero de alguna manera todavía seguía obteniendo todos esos pensamientos pervertidos con sorpresa... porque definitivamente él había pensado al menos un par de veces en la última hora, que le gustaría probar la piel de Jin en la zona donde su camiseta se posaba. Aquel maldito cuello atraía su atención incluso cuando Seokjin solo se estiraba levemente cansado por mantenerse de pie demasiado tiempo.

-Es fácil decirlo... - suspiró antes de escuchar el llamado de una de las estilistas, esta había estado sosteniendo aquella caja con tatuajes permanentes por al menos veinte minutos y todos podían notar la duda.

-Está bien, te verás caliente con un tatuaje incluso si es falso - habló en voz baja el entrenador en un intento de aportar un poco de tranquilidad a su chico. Pero eso aumentó de nuevo los nervios de Kook quien se relamió los labios antes de mirarlo directamente - ¿Qué ocurre?

-¿Tienes un fetiche con el prototipo de chico malo o algo así?

Jin sonrió.

-Oh, quizás sea eso... pensándolo bien, mi primer amor cuando todavía no quería reconocer mi sexualidad se acercaba bastante al prototipo. Con todos esos piercings y su reluciente Harley Davidson 883 - bromeó de nuevo el entrenador - Si él hubiese tenido diez años menos o yo diez años más....

Un pequeño golpe de parte de su atleta hizo que la sonrisa animada del entrenador aumentase un poco más.

-Eres más bien un niño malo, no se pega Jungkookie - Jin sonrió - Quizás incluso te veas tierno con un tatuaje.

Jungkook se vió a sí mismo obligado a suspirar, no sabía si el hecho de que el entrenador pareciese sentir ternura por él era algo bueno o malo. ¿Todos quieren causar deseo en sus parejas no? Aunque por supuesto muchas chicas apostaban por mostrarse adorables....

-¿Es malo? - susurró antes de moverse - Lo de ser tierno...

Jin frunció el ceño.

-Eres tierno a veces, no veo ningún tipo de problema en ello.

Jungkook rodó los ojos sintiéndose demasiado expuesto ante su entrenador de nuevo.

-Quiero decir... se supone que las parejas se atraen más en sentido de... En realidad yo... ¿te parezco sexy?

Si Seokjin no estuviera bebiendo un preciado vaso de café bombón probablemente hubiese escupido el líquido ante la duda de su bonito novio.

-Una cosa no tiene nada que ver con la otra. A veces eres tierno pero me gustas en general, con todo... y por supuesto que me siento atraído de esa forma también Jungkookie.

Un suspiro de alivio escaló hasta los labios de Jungkook quién sonrió felizmente antes de correr hacia la estilista que sostenía los tatuajes de pega.

-Me gusta este - Kook sonrió levemente obteniendo el tatuaje con bonitas letras cursivas. Cry Baby - A las chicas les gustará. - se excusó de forma automática.

Lo cierto es que solo quería que le gustase a una persona.

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Holiiiiiiii!!!!

Actualización antes de tiempo porque nuevamente mañana tendré un día bastante ocupado baes, espero de veras que os haya gustado.

Os recuerdo de nuevo que para editar la portada he usado un edit de una editora de Instagram al que le he cambiado varias cosas pero he dejado su marca de agua ya que es necesario teniendo en cuanta sus trabajazos. Créditos siempre.

Quiero que me dejéis saber si queréis leer la entrevista de Swimmers en modo de parte especial de la fic, no como cap sino casi como una parte extra.

Un beso, Mel