Hoy era un día que solo ocurría cada cien años. ¿Por qué? Pues la querida de Riley faltó a clases debido a que estaba enferma, o más bien tenía miedo de encontrarse con el vaquerito.

Después de tener una plática con mamá, sin contarle que el chico era Lucas, decidí que eliminaría mis sentimientos hacia él. Riley merecía feliz y se que podía dejar de gustar de Lucas.

Pan comido.

—Hey Maya, ¿dónde está Riley? — apareció Farkle de la nada y lo miré con una sonrisa pícara. —¿Qué? ¿Por qué sonríes así?

—Ella te gusta ¿cierto? Estás enamorado. — dije alargando la "o" mientras le despeinaba el cabello.

Al parecer Lucas escuchó lo último por lo que vino con nosotros con una gran sonrisa.

—¿Es cierto? ¿De quién? — nos miró con curiosidad y pude ver cómo su sonrisa disminuía un poco. —¿De Maya?

Antes de que Farkle respondiera le tomé la mano y miré a Lucas.

—Así es, ambos estamos enamorados y es por eso que somos novios. — dije sin pensarlo.

Genial, ahora estoy mintiéndole a Lucas. ¿Qué acabo de hacer?

El silencio entre los tres era bastante incómodo, cosa que me ponía más nerviosa. Para tratar de sonar más convincente tomé de las mejillas a Farkle y lo besé. Pude sentir su pulso latir más rápido al igual que el mío, debía admitir que besaba bien. Luego de unos minutos nos separamos ambos completamente sonrojados.

Lucas se quedó quieto, se veía bastante sorprendido. Por unos minutos nadie habló hasta que el vaquero rompió el silencio.

—Eso fue muy.... apasionado. — comentó y se fue al salón de clases sin decir una palabra más.

—Hazlo de nuevo. — dijo Farkle haciendo una trompa con sus labios y me carcajeé . Luego se recompuso y me miró. —¿Por qué lo hiciste? Aunque estuvo muy bien para ser el primero.

—Te recuerdo que tu primer beso fue con Riley. — sonreí y encogí los hombros. —No lo sé, solo entremos a clases.

Había tenido mi primer beso con Farkle.

Ya me imaginaba la reacción de Riley cuando le cuente que me besé con Farkle. Comenzará a decir sus típicos ¡yay! y saltará por todos lados hasta que se calme.

Recordé la conversación que tuve con Farkle. Como miró a Riley en el tren de la forma en que yo miro a Lucas. ¿Será que....?

Sentí que tocaban mi espalda y volteé llevando mi atención a Lucas.

—Tenemos que hablar. — me dijo con seriedad en su voz por lo cual fruncí el ceño y me encogí de hombros volviendo a mirar al profesor.

¿Tenemos que hablar? Eso sonó como si fuera a romper conmigo. Reí ante mi pensamiento y el profesor me miró muy serio.

—¿Tiene algo que contarnos señorita Hart? — todos me miraron y por respuesta me mordí el labio. —Bueno, detención por una hora.

—Pero....

—Una palabra más y serán dos horas. — reclamó mirándome fijamente.

Odiaba al profesor Collins. Por alguna razón que desconocía, siempre buscaba la forma de meterme en problemas.

☀︎︎

Estábamos en la cafetería y la comida que servían hoy se veía de todo menos comestible. ¿Puré de que cosa? En fin, me comeré una manzana junto al jugo.

—Entonces...., ¿son novios? — preguntó Lucas una vez más, aumentando mis ganas de tirarle el jugo en su perfecta cara.

—En realidad somos esposos, pero eso es para otro día. — al decir eso Lucas se atragantó con su comida y yo reí junto a Farkle. — Es broma, pero sí, ya te dijimos más de una vez que sí somos.

—Maya y yo estamos destinados a estar juntos. Por dentro sabía que se moría por mi, solo es algo tímida. ¿Verdad que si mi amor? — dijo Farkle acercándose para darme un beso, pero en cambio le puse la manzana en la boca para que dejara de hablar.

Reí falsamente y despeiné su cabello castaño mientras le dedicaba una mirada asesina. Luego miré a Lucas con fingida inocencia.

—Ha ha, así nos demostramos nuestro amor. En fin, cambiemos de tema. — dije para después tomar un sorbo de mi jugo.

—Extraño a Riley. No es lo mismo sin ella. — respondió Farkle con tristeza en su voz. — ¿Estás segura de que no le pasa nada más? Recuerdo que yo igual falté a clases, cuando estaba siendo molestado por ese chico.

—Si algo así le pasa a mi Riley se las verán conmigo. — comentó Lucas en un tono serio.

Mi Riley. Eso dolió más de lo que pensaba.

—Tranquilo Huckleberry, nuestra Riley esta perfectamente bien. Solo tenía dolor de estómago, eso es todo. — dije haciendo énfasis en "nuestra". — Y es mejor que no esté, no quiero que sepa que estaré en detención de nuevo. Ese profesor siempre tiene una excusa para molestarme.

—Es cierto que no te has metido en tantos problemas estos días, y eso es bueno. Significa que estas creciendo y madurando. — añadió Lucas

Al escuchar sus palabras sonreí sintiendo orgullo por mi misma.

—Si bueno, parece que ese profesor no quiere que madure. — me crucé de brazos suspirando.

Nuestra conversación se hizo corta debido a que el timbre dio fin a la hora de almuerzo. Fuimos a la clase de Cory, la cual a veces no parecía ser de historia.

Mientras íbamos de camino algo me detuvo. Una mano agarró de mi brazo y sentí una electricidad recorrer mi cuerpo. ¿Estaba siendo electrocutada?

—¿Sucede algo, vaquero? —pregunté volteándolo a ver. Éste seguía sujetando de mi brazo, y yo por mi parte no hice nada para que me soltara.

—Yo solo quería..... —se detuvo por unos segundos hasta que continuó. — Quería felicitarte por tu relación con Farkle. Se que ambos son geniales y quiero que seas feliz.

—¿Te preocupas por mi, Huckleberry? — dije en tono juguetón.

—¿Cómo no lo haría? Eres muy importante para mi y no dejaría que nadie te lastimara. Bueno, vayamos a clase antes de que se nos haga tarde.

Asentí y seguí detrás de él.

Si solo supieras que eres tú el que me lastimas, Lucas Friar.

"I don't think they would understand it."