Las 12 de la noche, toda la villa dormía, esa noche su lindo novio iba a visitarla...cuando llego Moxy lo recibió con los  brazos abiertos, habían pasado tantos días sin verse.

Lou la tomó de la mano y se dejó guiar hacia la habitación rosa de la chica, la cual olía a fresas y a algunas bellas flores s que posiblemente eran del mismo color que ella.

La ventana estaba abierta.

La dejó sobre su pelvis, entre sus piernas, ahí descansaba ella, mirándolo con las mejillas pintadas de rosado.

El rubio tenía su mano derecha descansando sobre su mejilla, acariciando suavemente su tela, esa tela que hacían sentir que sus manos se adentraban al cielo, Lou tenía la mirada impregnada de timidez y nervios.

-eres muy hermosa, Moxy.-Confeso a lo bajo con una voz suave y coqueta,sus mejillas rápidamente se tornaron rojas.

-por qué te avergüenzas de decirte lo mucho que me amas?.-la UglyDoll rosada preguntó con un tono un tanto maternal y le levantó la mirada, haciendo que sus ojos y los ojos oceánicos de Lou hicieran contacto.

-tu sabes que esto es algo bastante nuevo para mí...jamas me había sentido tan feliz con alguien...De verdad te amo...tu me haces feliz.-Lou admitió con sinceridad.

Moxy sonrió tiernamente, desviando la mirada de vergüenza, agradeciendo que ahora mismo estaban en la oscuridad y que Lou no podría verla sonrojada, con su corazón latiendo rápidamente contra su pequeño pecho y con su mano sobre el pecho de su pareja y sentir ese tambor donde su corazón debe estar, la alegro por completo.

-eres mi vida Moxy. No puedo evitar amarte aunque yo e intentado no hacerlo,siempre lo haré. El cielo sabe que yo no puedo evitar querer tenerte aquí, sobre mi, entregándome tu amor y alma.

-yo esperaba que tu sintieras lo mismo...y estoy eternamente Agradecida de saber que fue así...

Las manos de Lou se dirigieron otra vez al rostro de Moxy, con una mirada penosa, tenía sus ojos medio abiertos, mirando con cautela sus labios, Suspiro suavemente y cerró los ojos y unió sus labios, formando. Un coordinado vaivén, en cuanto Moxy correspondió, se atrevió a darle un toque francés a este beso.

El prototipo pasó sus manos por la espalda de la Muñeca Rosada, acariciando esa tela suave y rosada que tanto disfrutaba sentir y su otra mano sostenía firmemente su trasero, haciendo que esta diera un brinco y moviera su parte trasera de manera algo atrevída, prendiendolo más, la apego más a su cuerpo, mientras que por otro lado, Moxy acarició su cabellera rubia, dejándola muy despeinada, cosa que aparentemente a Lou ya no le importaba.

Empezaron a besarse con más intensidad y pasión, rodando sus cuerpos en un coordinado movimiento, Lou acariandola a ella y Moxy a él, sus curiosas manos le ayudaron  quitarle aquel saco negro y no perdió más tiempo, la aventó lejos, se apartó de los labios del rubio y le quizo pañuelo para luego depositar húmedos besos en el cuello de este.

"Aaah Moxy~" escuchaba ella.

"Ahh Lou~" escuchaba el.

El amor se sentía en el aire mientras esos dos compartían ese apasionado beso.

Lou se sentía en el cielo, se sentía tan vivo en ese momento, si bien no era la primera vez que compartía momentos íntimos con Moxy, cada vez que los tenían,se sentían cada vez más reales y bellos, momentos que mantendría en su mente durante muchos años, posiblemente hasta la eternidad, a su lado todo temor y ansiedad desaparecia.

Se apartaron un momento para agarrar aire..

Suspiro con pesadez aún teniendo sus ojos cerrados y su respiración agitada se comvinaba con la de su amada Muffin Rosada.

Lou beso su frente.

Moxy beso su mejilla.

Lou beso su otra mejilla.

Moxy beso su frente.

Y unieron sus labios una vez más.

Aquel beso empezó a ponerse más intenso, entre aquellas caricias, suspiros, gemidos y respiración agitada, mientras que Moxy sentía como Lou apretaba su trasero y espalda y de inmediato la acomodo sobre él, ocultando su cabeza y restregando su rostro contra su pecho, Moxy por el otro lado, paso sus rosadas manos por aquello hilos de oro que el prototipo poseía sobre su cabeza y empezó a darle pequeños besos en su frente y cabella, sintiendo como Lou la sostenía fuertemente de su cadena apegándola lo más que podía a él.

Moxy aprovechaba todo lo que podía cuando veía que Lou estaba indefenso entre sus brazos, de hecho, era de sus momentos favoritos, cuando despues de horas de trabajo como líder de los muñecos perfectos, este llegaba a ella para desahogarse, para sentirse querido y amado, recordando de nuevo ese bello momento de su vida donde el rubio llego arrepentido y de rodillas le confeso llorando que ya no podía evitar guardar esos culposos sentimientos hacia ella.

Podía recordar la primera vez que unió labios con él, aunque no era tan apasionado como estos besos que se estaban dando ahora mismo, ese iba a ocupar un lugar muy especial en su corazón.

Acaricio una última vez su frente y le dejo último beso, Lou levanto otra vez la mirada y la empujo hacia abajo, dejándola ahí mismo debajo de él, dio su mejor intento de beso francés y le indico a Moxy que le ayudara a quitarse ese molesto pantalón, cosa que con gusto ella hizo.

Sus manos pasearon por las de ella, trazando caminos con sus dedos y en el momento donde Lou dio la primera estocada…las apretó con fuerza.

Moxy emotivo un fuerte sonido de placer y esto guió a Lou a seguir haciendo aquello, pero con movimientos más profundos y fuertes, cosa que a su amada le encantaba y empezó a mover sus pequeñas piernas y cadera indicando que fuera más rápido.

Los besos y el amor no cesaron durante esa noche, se entregaban con todo cuerpo y alma, mientras los gemidos de placer de ambos inundaban la rosada habitación de Moxy.

Moxy llenando su rostro de besos y Lou acariciándole el rostro con sus bello besos en su rostro y cuello y hasta incluso en su pecho.

Y aunque era maravilloso aumentar la velocidad y sentir el cálido interior de ella, procuraba ir con cuidado y delicadeza, lo menos que deseaba era lastimarla.

Y es que era inevitable para el negarse a ese afecto que ella le tenía, se le era imposible lastimarla y odiarla como lo solía hacer, primero el muerto a volver a lastimarla y Moxy estaba consciente de ello, sabía que ningún muñeco de la villa la iba a amar como ese Prettydoll la amaba a ella.

Lou no podía evitar amarla. Aunque había intentado no hacerlo. No podía evitar quererla

Sabía que moriría sin ella.

No falto mucho para que ambos llegaran a su limite. Gemidos, llanto, gritos de placer todo eso se esfumo en aquella habitación, ambos dejando ir sus fluidos.

Se dejaron caer a la cama cansados pero muy sonrientes.

A su lado termino esa noche, con la respiración tan agitada como la suya, sonriendo alegremente hacia bella.

-te amo…-susurro el muñeco rubio para luego besarle su frente y ponerla entre su pecho para que descansara.-mi pequeña Muffin Rosada.

-yo también te amo. Mi rubio perfecto…-fue lo ultimo que dijo antes de caer dormida hasta el siguiente día.

Lou agradecía que solamente la luna y las estrellas fueron presentes y testigos de aquel acto de amor entre ellos dos, así seguiría amando libremente a su bella Uglydoll.

No podía evitar estar equivocado en la oscuridad ni podía evitar que los océanos se separen. Porque estaba abrumado en esta guerra de corazones

F I N.