Cap 42 ;; Besito
- ¡Tocamos tierra firme! -.
Dijo el mexicano saliendo del auto fingiendo que era un pirata, por fin habían llegado a sus hogares así que se despidieron y cada uno se fue para su casa, menos, Chile y México, los cuales, salieron a una "cita" se podría decir, aunque solamente salieron a tomar un smothie mas un waffle, así es, llegaron a las 8 de la noche, pero, el chileno haría lo que sea para pasar un tiempo con el mexicano y ser mas cariñoso que el otro.
Intentó de todo para hacerse notar que, sus sentimientos habían cambiado hacia el mexicano, aunque, sería mas fácil "declararse" pero, se pondría demasiado nervioso y empezaría a reirse por los nervios haciendo pensar que solo es una broma.
Varias veces, el de estrella agarraba la mano del mexicano haciendo que el otro solo se pusiera mas rojo que cuando tubo fiebre.
- Weon..Tú haz sido muy bueno conmigo estos días ¿Ocurre algo? -.
El chileno quería oír ese "Me gustas" de parte del de águila y decir "Tú también", quería aquello.
- Oh, no wey, no pasa nada de nada -.
El otro no dijo nada, demasiado rapido para él, no quería declararse aún, así que, no dijo nada de nada, se lo guardó y siguió con aquella "cita".
El chileno acompaño al otro hasta la puerta de su casa ¿Por que? Tenía planeado algo, algo que quizás se arrepentiría y lloraria por no saber que hacer, pero, de todas maneras lo haría.
- Bueno, adiós chilito y gracias por lo de hoy -.
- Chau y denada -.
Y así, estaban frente a frente, antes de que el mexicano entre a su casa, el chileno lo detuvo y le dio un beso en los labios, el otro solo abrió los ojos como platos algo sorprendido, cuando terminó el beso, el de estrella salió corriendo algo avergonzado y con sus mejillas hirviendo, en su interior solo maldecía haber hecho aquello
《Me va a odiar, me va a odiar, me va a odiar, me va a odiar, me va a odiar 》
Se refería al mexicano, pensaba que el de águila se iba a enojar con él por haber hecho eso, ya que, cuando escuchó entrar al mexicano a su casa, se escuchó un portazo y eso alarmó al de estrella pensando que el otro se había enfadado, pero, el otro solo entró a su casa emocionado y sin querer cerró la puerta demasiado fuerte, el mexicano se apoyó en la puerta y dio pequeños saltos de alegría, tal como un niño.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top