- ¿No crees que fuiste demasiado rudo con tu hijo? -.

-  Nah -.

Dijo el soviético entrando de nuevo a la casa mientras le hablaba al mas conocido como "Pinochet" ósea que, era Chile en su época de dictadura, estaban teniendo una pequeña "reunión", nada malo la verdad, solo charlaban y reían, tal como una película.

De repente entró Confederación Argentina con Imperio del Brazil azotando la pobre puerta

- ¿Que mi-

- ¡No hay tiempo de explicar nos llevamos a Pino -.

Pino, un pequeño apodo que le decían por ser amigos, espera, ¿Amigos? Bueno, si, los malvados también pueden tener amigos ¿O no?

Bueno, Confederación agarró a Pino y se fueron en un auto, esos autos de antes, que ahora les llaman "vintage", se llevaron a Pino porque si, no hay explicación, solo dijeron "¿Y si traemos a Pino?" Y todos dijeron que si, entonces..

- ¡Ya trajimos a Pino! -.

Sacaron al de menor estatura del auto como si fuese un secuestrado y lo metieron a la casa con los demás, estaba el Imperio Mexicano, Imperio Japones, Gran Colombia, Nazi, etc.

El Imperio Mexicano organizó una fiesta, si, desde mucho antes era así de fiestero, ya era de noche, ya que, tardaron demasiado en ir a buscar a Pino y traerlo, así que, estaba todo oscuro, solamente se veían las luces de colores que se movían para todos lados y el parlante el cual, también tenía luz de colorines.

- Bueno, ahora si estamos todos, solo nos faltabas vos -.

Dijo Confederación poniéndole su corona de flores en la cabeza al menor, le quedaba algo grande así que se la tenía que acomodar cada dos por tres

- Cuidame la corona, intenta que el señor perfecto no te la agarre -.

Con "El señor perfecto" se refería a Imperio del Brasil, casi siempre se creía mejor que todos, por eso mismo, no podía ver algo mas bonito que el mismo, lo que sea mas bonito que él, lo rompería, bueno, ¿Que pasaría si se ve en un espejo?

Confederación se despidió de Pino con tierno beso en la mejilla (aun que se tubo que agachar para darle aquel beso), se despidió y se fue con Imperio Mexicano a tomar cerveza.

De repente, sintió que le quitaban aquella corona, algo enojado le gritó al de mayor estatura

- ¡Hey! ¡Eso es mio aweonao! -.

- No, es de Confe -.

- Pero me dijo que se la cuide inútil -.

- Ah...Bueno, quitamela duende -.

Y así fue, como el Imperio del Brasil fue perseguido por el pequeño Pinochet por toda la casa, el Imperio del Brasil le encantaba ver al enano enojado, se veía como una de esas chicas del anime que vio con Imperio Japones.