CAPÍTULO 9
DOS SEMANAS DESPUÉS...
Corro por el campo, estoy bañada en mi sudor, hay muchos cabos corriendo por la mañana es parte de su entrenamiento, comienzan sus actividades muy temprano como siempre es en las bases militares, llegué a la base dos horas antes de mi hora de entrada, una ves que ejercite me ire a dar un baño y me reuniré con el grupo, al fin estoy en el ruedo, mis dos semanas de baja fueron más que suficiente, mi hombro esta aun un poco adolorido, me dijeron que no requería terapia ya que tenia muy buen arco de movimiento pero que dolería por un tiempo, el dolor es algo a lo que todo soldado tarde o temprano se acostumbra, estamos preparados para recibir golpes en enfrentamientos cara a cara, para lastimarnos en los campos de batalla, para recibir disparos de enemigos, no es algo nuevo, una herida no me va a matar, no sin antes terminar por lo que estoy aquí.
Después de que el Coronel se fuera aquella noche de mi casa, después de dejarme acostada en mi cama y de haberle contado todo lo que ocurrió años atrás no volví a tener pesadillas, fue como si hubiese liberado un poco los fantasmas del pasado, se que no estoy curada y que quizá nunca lo este, pero siento que por fin estoy yendo hacia al frente, nunca voy a dejar de temer a todo lo que pase, por que nadie debe de pasar por algo tan horrible como eso, y cada uno lo supera a su tiempo y si no lo hace también esta bien, todos cargamos fantasmas y lidiamos con ellos de la manera que mejor nos resulta.
Termino de correr, cojo mi mochila y me dirijo a los aseos, esta dodo vacío, tomo una larga ducha con agua tibia, aquí el agua nunca es caliente, son demasiadas personas las que deben de bañarse a diario, si bien nos va nos toca un minuto de agua caliente por cabeza, pero una ducha siempre es reconfortante este como este el agua, solo uno quiere que barra todo aquello que arrastra en el día.
No hay nadie en los vestidores, tomo mi uniforme, me visto de prisa, no quiero estar tarde con el equipo y antes debo pasar a desayunar, he notado que mi buen apetito a regresado, me siento extraña estando aquí aún pero cada día que pasa siento que la misión esta cada vez más cerca de finalizar, que después podre irme, me ire a un lugar tranquilo, lejos de todo y de todos, esa es mi meta en la vida, hacer pagar a los que acabaron con los míos y a aquellos que me lastimaron, y después irme lejos y no dar vuelta atrás jamás, siempre he pensado que si estoy lejos de las personas las protejo de mi y eso es lo que quiero hacer.
Me termino de vestir y cepillo mi cabello, esta tan corto que no puedo hacerme una coleta completa, me hago media cola y coloco la gorra negra del unirme, salgo y visualizo mucho movimiento ya en los pasillos, deben de ir todos a desayunar, entro al comedor y efectivamente, todos están aquí, no veo a nadie de mi equipo, tomo una charola y pido mi desayuno, me siento en una mesa que esta vacía, no conozco a nadie más y es lo mejor, entre menos lazos haga menos me costara dejar todo esto atrás, estoy tan acostumbrada a moverme de sitio que aprendí que lo mejor era no formar lazos, después era más duro desatar esos lazos que me unían a los lugares, tarde o temprano siempre abandonaba esos lugares, y esta vez no será distinta.
Termino de comer y me voy al aseo a lavar mis dientes, tenemos reunion en unos minutos y muero por entrar del todo a la misión, estar de baja estas semanas fue horrible, Isla no dejaba de comportarse como toda una mama conmigo y Renn no dejaba de regañarme cuando quería cargar cosas estando el, todos fueron un dolor de cabeza pero fue algo lindo, se que todos estaban ocupados con sus cosas y aun así me daban de su tiempo,
Llego antes de lo acordado a la sala de reuniones, nadie ha llegado aun, reviso mi celular en lo que ellos llegan, tengo muchos mensajes recibidos, no he querido entrar a mi correo desde que recibí aquel extraño mensaje, siento que todo esto que pasa tiene que ver aun con lo que ocurrió años atrás, no tengo pruebas aun pero algo no me huele bien de todo lo que ha pasado, Rusos, Turcos, trafico de armas, topos en las organizaciones, es lo mismo que ocurría años atrás, con la excepción que en ese entonces éramos un grupo de soldados novatos en una misión de reconocimiento y de obtención de información, ahora somos un equipo especializado que vamos en busca de los responsables.
-Miren a quien tenemos ya entre los vivos- Zach es el primero en saludarme, el no es de abrazar mucho a sus compañeros y es algo que agradezco mucho, se sienta a mi lado y comienza a hablar de que necesita vacaciones, que quiere ir a Hawái ya que tiene tiempo sin tomarse un descanso, yo lo escucho atenta, no conozco mucho de ellos, no me he dado el tiempo de escucharlos realmente, y creo que lo he hecho por protegerme de el dolor que resulta cuando las cosas no salen tan bien como uno lo desea.
-Estas tratando de pervertir a mi pequeña, si es eso déjame enseñarte como se hace de la manera correcta- Isla llega con su explosiva actitud, Zach solo la mira y se ríe, ellos tienen tanta química, me agradan bastante, suelo ver de lejos como personas se unen para ser felices, como muestran su cariño, lo he visto, amigos que regresaron de la guerra que ahora son hombre padres de familia, personas que jamás pensé que se repondrían de una perdida ahora los veo felices, y me da gusto todo eso, por que todos merecemos una segunda oportunidad para ser felices..
A los minutos entran el resto del equipo, el Coronel al cual no había visto desde aquel día solo comienza a hablar, no me esperaba un saludo de bienvenida pero me siento extraña, nos dice a grandes rasgos en que consiste la misión, parece que tiene mucho apuro en deshacerse de esto, tenemos tiempo para prepararnos, todos están mas en sintonía, debo de ponerme a su nivel en cuanto antes, Renn me mira y asiente, creo que sabe que me siento algo perdida con todo lo que están tratando.
Al finalizar todos se van a lo suyo, me quedo sentada y Renn se acerca a mi, el esta algo distinto hoy, creo que se ha cortado el cabello, no lo se, luce extrañamente familiar a alguien que conocí, esa mirada tranquila pero que guarda un secreto.
-De vuelta al ruedo- asiento, toma asiento a mi lado, estamos solos en esta sala y extrañamente no me siento amenazada con su presencia, por el contrario, siempre que el esta a mi alrededor me siento segura, es algo muy curioso, su sola presencia me envía señales de paz, es como silo conociera de siempre.
-Si, estoy algo oxidada aun con todos estos temas que trataron, me pondré en ello rápido, quiero estar al nivel de todos y poder ser de ayuda- saca de su bolsillo algo, me lo tiende, parece ser una chocolatina, lo observo y el se encoge de hombros.
-Nunca esta de más un dulce temprano, relájate, toma las cosas con calma, si necesitas apoyo en algo házmelo saber, somos equipo, estamos para apoyarnos- asiento, abro la chocolatina, me resulta de una marca conocida pero no se de donde, la meto en mi boca y cierro los ojos por el exquisito sabor.
-Gracias Renn, quiero que entiendas una cosa que te dire, mi llegada aquí les resulto algo sospechosa, pero quiero que sepas que no he venido aquí a hacerles un mal, solo quiero ayudarles, solo pido que tengas confianza en mi, que si en un futuro cercano salen cosas que te hagan dudar de mi no lo hagas, soy de los buenos- el me mira extrañado, se que soltarle eso debe dejarlo más pensativo, solo pido que tenga fe en mi, si las cosas se salen de control quiero que todos ellos sepan que nunca les oculte mi verdadera misión por que fuese una traidora, siempre ha sido para proteger a aquellos que no están involucrados, no quiero cargar mas muertes sobre mi conciencia.
-Por que habría que sospechar de ti, creo que escondes algo, no se que es pero no es mi problema, se que das todo por tu trabajo y me quedo mas que claro que también lo haces por nosotros, entonces no debes de sentirte asustada de que un día te de la espalda, no lo haré, eres una de las nuestras y te voy a proteger siempre- lo miro y ahora entiendo que es lo que me parecía familiar de el, es tan parecido a Levent, piensa mucho como el, tranquilo todo el tiempo pero con un aura de paz que trasmite a los demás, el me recuerda mucho a el.
Salimos de la sala de reuniones, el se despide por que tiene que hacer algo antes de regresar a su casa y yo solo me despido por que quiero hacer mas anotaciones de nuestra próxima misión, me dirijo al patio, ahí podre pensar mas a fondo y ver todo lo que estuvo pasando en mi ausencia, tengo un grueso folder en mis manos, necesito llegar al fondo de todo estoy centrarme.
-Sloan, a mi oficina- el Coronel me ve en el pasillo, entra por una puerta que deduzco debe ser su oficina, entro a su oficina, ahora que lo pienso no había estado aquí anteriormente, siempre nos vemos en las salas de juntas o en las misiones.
-Estoy poniéndome al tanto de la misión Coronel- estoy de pie, frente a el, guardando la compostura, el me observa de esa forma que hace que me sienta muy pequeña, pero no lo hace para mostrar su rango o su poder, solo me ve de esa forma y no dice nada mas. -Le aseguro que para mañana tendrá mi reporte de lo que se espera dela misión- sigo hablando a la espera de que el me diga la verdadera razón por la cual me hizo venir aquí.
-Pensaste en lo que hablamos- siento como el aire que retenía por estar erguida se sale y le veo algo descolocada, para eso me llamo aquí, para hablar de cosas que no tienen nada que ver con la misión.
-De lo que hablo en esa sala- el niega con su cabeza, sus ojos están puestos en mi, no los aparta y se que es algo extraño de mi parte pero mi corazón esta inquieto, no por miedo o nerviosismo, es por algo mas que no puedo interpretar, quiero despejar todas las dudas, pero el siempre me lo pone todo tan difícil.
-Sabes bien de lo que te hablo- miro mis botas, tenerlo frente a mi tan imponente y preguntándome sobre lo de la otra noche me causa ansiedad, si, lo estuve pensando mucho, todos mis pensamientos siempre iban a donde mismo, a su propuesta, pero siempre había algo que me detenía y aun no se que es ese algo.
-Yo no se si sea correcto que lo hagamos, usted es mi superior, lo que pase puede interferir en nuestro trabajo y no quiero que eso ocurra- Ni yo me he creído una sola palabra de lo que he dicho pero espero haber sonado convincente, yo nunca haría algo que pusiera en riesgo la misión, siempre tuve bien claro que tenía que proteger a todos, y nada debía interponerse en eso, ni cuando estuve con Levent a espalda de todos puse en riesgo las misiones, siempre aparte bien las cosas.
-A otro con esas estupideces, no va a pasar nada por que no te estoy proponiendo una relaciona, no soy hombre de una sola mujer, no te ofrezco fidelidad, sentimientos y nada de eso, solo te ofrezco mi cuerpo para saciarte y para quitarte todos esos malos recuerdos, no te pido tampoco fidelidad ni que te reserves siempre para mi- escucharlo hablar tan fríamente me tensa, para el el sexo solo es eso, dos cuerpos uniéndose por pura satisfacción, por deseo, para mi el sexo antes significaba un momento intimo con la persona ala que amas, después fue algo perturbador que solo me causaba ansiedad y asco.
-No es tan fácil, no lo es para mi, que me dice que en el futuro no me pidas mas, lo que hay es todo lo que soy y lo que tengo, no puedo mas que esto- le escucho reír, y lo miro fijamente.
-No exigiré nada, no lo hare ahora no lo hare después, te dire la verdadera razón, estoy prometido con una mujer desde que nací, mis padres y los padres de ella acordaron eso, ella es una ingeniera aeronáutica, esta ahora en otro país desempeñándose, cuando acabe sus labores del servicio ambos nos casaremos, por ello no puedo ofrecerte nada en un futuro de igual forma no exigiré nada de ti- escucharlo hablar tan fríamente de eso me hela la sangre, pero entiendo su punto, si el no me exige nada no veo el problema, seriamos como dos compañeros que comparten sexo, sin ataduras, sin nada mas que simple sexo, bueno simple para el.
-Bien, pero como dijimos antes, acabara cuando lo quiera, será hasta donde pueda- el asiente, su mirada a cambiado y tiene un brillo sombrío.
-Así será, no te pido mas de lo que puedes dar, te digo que esto es algo así como una ayuda mutua, yo te ayudo a ti a dejar atrás tus miedos, yo solo quiero saciarme de tu cuerpo, eres una hermosa mujer que me descoloca con verte- asiento tímidamente, escucho que tocan la puerta y me coloco en posición, saludo antes de retirarme, en la puerta esta Pack, parece que tiene algo que hablar con Alaric, me despido y respiro pausadamente, no se si l que he aceptado es realmente algo bueno.
Al llegar a mi departamento dejo el grueso folder sobre la mesa, en el piso cerca de mi puerta hay un sobre, debe de ser lo de la renta o algo de los servicios, lo tomo y lo dejo con el resto de papeles, necesito una ducha para relajarme, estoy tensa todo el tiempo, me siento algo extraña, después de salir de esa oficina me sentí tan extrañamente joven, como si estuviese por hacer una travesura, como si fuese a colarme a altas horas de la noche en aquel cuartel para ir a ver a un chico y pasar el rato a solas.
Salgo envuelta en mi toalla, el clima en mi departamento es agradable, tomo el folder y lo abro, desdoblo la hoja, cada musculo de mi cuerpo se tensa, cada pequeño vello se eriza y siento como si fuese a dejar de respirar.
"Hace un tiempo existieron dos seres, una mujer fuerte e inteligente y un soldado duro y letal, hicieron de todo por su país, le limpiaron el camino a seres mas despiadados que a todos los que mataban, nunca se esperaron que ese mismo país los llevaría a su tumba, en su tiempo juntos procrearon a un hermoso ser, una linda creatura libre de toda culpa, pero al crecer tenia la misma inteligencia de su madre y la letalidad de su padre.
Camino por campos minados, acabo con muchos seres viles, una linda creatura de la guerra, cuando creyó salir libre de todo aquello que su país creo se topo con una bestia, una que quería mas que sangre, esa bestia tenia una cuenta pendiente con esa creatura, dicen que las deudas se heredan, y ese pequeño ser no iba a estar libre de ello.
Pero la Bestia se encariño con la creatura, la tuvo cautiva por un tiempo, los mejores días de su vida, intentaba procrear con ella, pero una noche un ser desconocido se llevo a esa creatura de su jaula, la bestia aun quiere sangre pero también quiere de vuelta a su pequeña creatura.
Estoy en camino mi dulce creatura, esta vez será para siempre"
Atte. Tu Bestia
Adjunta a la carta estaba una foto mía, una de mi viaje a Rusia, el estuvo ahí, el debió ser quien disparo, el que quiso quitar del camino a Pack, debe ser quien esta contratando a Espectro para llegar a mi, hoy mas que nunca debo estar lejos de Espectro y de todos ellos, debo acabar la misión antes de que de conmigo.
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