No puede ser...

Observaba como el cuervo de ayer, se encontraba otra vez en la ventana de mi sala, ademas de que la andaba picoteando un poco, Reina ya le daba igual, mientras que Pongo le gruñía y ladraba sentado enfrente de la ventana, suspire y simplemente fui a prepararme el desayuno intentando ignorar a aquel cuervo, por que volvió? Debe de haber una razón...y no una tonta como la que dijo mi madre ayer.

Le di sus croquetas a Reina y Pongo, y ellos de inmediato vinieron para comer, volví a dirigir mi vista hacia el cuervo y este seguía ahí, ok admito que me dio algo de pena verlo ahí mientras los perros comían, saque mi teléfono e investigue un poco lo que comían, bueno...al parecer comen lombrices, insectos y otros animales pequeños, semillas y frutas, eso es parte de su dieta. Sin embargo, también comen basura, carroña, y polluelos que roban de los nidos de otras aves...eso es aterrador.
Busque algo de semillas y por suerte tenía, saque un poco para colocarla en una pequeña bandeja y acercarme a la ventana, el cuervo no quitaba su mirada de mi para nada, suspire y abrí la ventana, haciendo que el se hiciera aun lado.

Ok, escucha, aun me das algo de...nervios, pero eso no quiere decir que te deje sin comer...me imagino que ni has comido —suspire y le deje la bandeja cerca suyo— toma, espero que con esto puedas alimentarte bien.

El miro curioso la bandeja y empezó a comer las semillas, yo solo suspiré y decidí dejar la ventana abierta, tal vez el no era tan malo como siempre lo imaginaba, volví a la cocina para seguir preparando mi desayuno, al terminar ordene la mesa y me senté para ver un rato mi celular, por si tenía algún mensaje o notificación, cheque los mensajes y si los tenía, era de mi jefe quien me entrego trabajo que hacer, unos simples diseños, acepte el trabajo, lo cual me dijo que eran para este fin de semana, era miércoles, por lo tanto tengo tiempo para entregarlo.

Mire a Reina quien ya había terminado de comer, Pongo aun no, mire al cuervo quien seguía comiendo igual de tranquilo, creo que se podría decir que ahora tengo a un nuevo compañero...nah, no se sabe de todos modos, ahora que lo recuerdo las fotos, al terminar el desayuno, fui a mi habitación a por el libro, saque las fotos de mi bolso y saque algo de cinta junto a tijeras, me regrese de nuevo abajo y observe que el cuervo ya no estaba en la ventana, mire que en la bandeja las semillas ya no estaban, supongo que termino de comer y se fue de inmediato, yo solo alce los hombros, hasta que escucho a Pongo ladrar.

Observe la sala y ahí los vi, Pongo jugando con el cuervo, mientras que este simplemente daba saltos cuando esquivaba los mordiscos se Pongo, oh wow...ya se hicieron amigos!? No puede ser, observe a Reina quien solo estaba echada en el suelo dormida, vale madre, suspire y fui a la mesa de nuevo, quería colocar las fotos de una vez en el libro, no quería que se me juntaran y que luego no quisiera ponerlas por flojera, eso si, les echaría un ojo debes en cuando a esos dos, si permito que Pongo juegue con el cuervo, mientras no lo picotee de mas todo bien, supongo.

Yyy termine, la última foto —suspire hojeando el libro, mirando cada foto.

Dure un buen rato colocando todas las fotos en los espacios, pero al menos valió la pena, dirigí mi mirada a los animales, Reina seguía dormida pero en otro lugar diferente, Pongo andaba tomando agua de su tazón y el cuervo también pero del tazón de Reina...que bruta soy, le di comida pero no agua.

Vaya idiota soy... —negué con la cabeza.

Aunque, ahora que lo recordaba, el cuervo estará en el libro? Rápidamente me puse a hojear el libro en busca de algún cuervo y logre encontrarlo, obvio en la sección de aves, fui por mi cámara rápidamente y al bajar, la encendí preparándola.

Eh, oye cuervo —lo llame, logrando captar su atención— quieto —lo enfoque y le tome la foto— je listo.

La foto salió y espere a que se secara, para que la imagen se enfocara, lo cual a los minutos se dejo ver, sonreí al resultado ya que se miraba bien la foto, de la nada el cuervo se me puso aun lado llegando a asustarme un poco, supongo que quería ver la foto, así que se la acerque para que la mirara.

Te tome una foto, lo necesito para un libro —le sonreí un poco.

El solo miraba, hasta que me miro a mi e hizo su sonido característico, lo cual hizo que me alejara un poco ya que no me lo esperaba, pero en fin, fui a la mesa y deje la foto en el libro, para pegarlo en el lugar donde debe estar, suspire ya satisfecha y otra vez el cuervo se me acerco para ver el libro curioso, yo solo lo mire en silencio y hojee las paginas para que también mirara, lo cual hacia, me sorprende bastante, es decir, escuche que los cuervos son inteligentes pero tampoco pensé que fuera de mas, en fin.

Me levante para lavar los trastes sucios, abrí la puerta del patio para dejar que Pongo y Reina salieran, el cuervo los siguió, supongo que también jugara con ellos, no lo se, yo seguí con lo mío, al terminar ordene todo y fui también al patio para sentarme en una silla, reproduje música en mi pequeña bocina para relajar un poco el ambiente y me recargue mirando el cielo tranquila.

Hasta que de la nada siento que algo se posa en mis piernas, haciendo que me asuste un poco, baje la mirada y ahí estaba el cuervo encima de mis piernas mirándome, haciendo que me pusiera nerviosa.

...e-eh...necesitas algo?... —pregunte un poco nerviosa, alejando un poco mi rostro.

Capaz y me sacaba los ojos, quien sabe, pero todo lo contrario, se me acerco mas y de la nada...se poso en mi pecho, quedándose ahí acurrucado...ok? Esto es...raro, bastante, ósea, se que tengo el pecho algo...grande, pero tampoco pensé que serviría como cama para las aves...pero que pendejada estoy diciendo?
El cuervo solo se quedó ahí reposado, yo algo insegura acerque mi mano a este, lo cual noto pero no hizo nada, simplemente dejo que acercara mi mano y lo acaricia suavemente en su cabeza, el solo cerro los ojos a gusto por las caricias, eso me hizo sonreír, sacándome una pequeña risa.

Vaya, eres adorable...aunque algo aprovechado, creo que me equivoque contigo después de todo —seguí acariciandolo.

Mire que Pongo y Reina ahora jugaban entre ellos, eso hizo que sonriera mas, ya todo estaba tranquilo y me estaba relajando de mas.

Gracias al ambiente tan tranquilo y cálido, la joven poco a poco se quedaba dormida recargada en la silla, el cuervo lo noto, haciendo que se acurrucara mas en ella soltando leves ronroneos¿, al final los dos terminaron durmiendo, Reina y Pongo seguía no jugando desde la casa y el patio, sin percatarse que su dueña y el tercer animal se habían quedado dormidos.

Mientras todo eso ocurría, la joven no se dio cuenta de que aquella escena fue observada por dos pequeñas aves que estaban posadas en la rama de un árbol, su mirada demostraba curiosidad y algo de confusión, por ver al cuervo tan cómodo estando acurrucado en el pecho de la humana.

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Tercer capituló terminado!

Perdón si fue algo corto, pero por el momento lo dejaré hasta aquí, ya mas adelante las cosas empezaran a ponerse interesantes, poco a poco, recuerden.

Por el momento no hay mucho que aclarar, así que ya si alguien tiene alguna duda, con gusto coméntenla para responderla.

Nos vemos en el siguiente capituló chicos!

Bye!✨

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