9. Sokovia I
El viaje inicia rápidamente. Clint es quien maneja el quinjet y Stark va a su lado, en un intento de calmar su mente y como copiloto, este se ha ofrecido a ir primero ante la necesidad que tiene Ultrón por acabar con él. Los gemelos se mantienen juntos, observando a los demás prepararse, al menos hasta que Banner les entrega los pequeños aditamentos que les servirán para ponerse en contacto con los demás.
Elizabeth se acerca a una parte de la nave y presiona una combinación de números, provocando que se abra un gran compartimento con todo tipo de armas, por lo que el Pietro Maximoff no puede contenerse y se acerca a ella.
—¿Utilizarás todo eso? —cuestiona con sorpresa, pasando su vista por los dispositivos y demás armas con municiones.
—No precisamente. El arsenal en realidad es de Natasha, pero no creo que se moleste de que tome unas cuantas —responde ella guardando varias cosas en su uniforme —. Si te sientes listo, puedes tomar algunas.
Pietro está a punto de aceptar, pero la mirada de advertencia de su gemela lo hace retroceder, es claro que ellos pelearán con sus poderes.
—Ultrón sabe que vamos, tal vez sea un campo de batalla, ese es nuestro trabajo, pero el pueblo de Sokovia es inocente. Nuestra prioridad, es sacarlos. Sólo quieren vivir sus vidas en paz y es algo que no podrán hacer hoy, nos esforzaremos para protegerlos y haremos lo necesario. Hallaremos lo que Ultrón construyó, encontraremos a Romanoff y despejaremos el campo, mantendremos el combate entre nosotros —les dice Steve con voz de líder —. Ultrón nos cree unos monstruos, lo que está mal en el mundo. No sólo debemos derrotarlo, sino mostrar que no es así —concluye.
Cada cual se sume en sus propios pensamientos, evocando sus mejores recuerdos o sus miedos, en un intento de encontrar la motivación correcta. Sin embargo, conforme más cerca se encuentran de Sokovia, la angustia vuelve a Elizabeth, quien baja un poco el cierre de su chaqueta, sólo lo suficiente para no sentirse asfixiada.
Wanda Maximoff la observa a la distancia. Puede que no le sea permitido leer sus pensamientos, pero está percibiendo la angustia de la joven y el sentimiento que provoca en ella no es nada lindo. Pero la gemela no es la única en notar a la chica y Steve se aleja de Banner para acercarse a la joven que está sentada al final de la nave.
—¿Estás bien, Lizzie? —cuestiona el ojiazul con ternura mientras se arrodilla frente ella, tiene la necesidad por hacerla sentir segura y verla con ese gesto de temor, le preocupa demasiado.
—Tony dijo que teme que no todos volvamos —responde en un susurro —. Y tengo el mal presentimiento de que así será. Algo va a pasar y tengo miedo —declara.
—No pasará nada, somos un equipo y todos volveremos luego de destruir a Ultrón, rescatar a Natasha y salvar a la gente de Sokovia —murmura y tímidamente toma las manos de la joven entre las suyas.
Elizabeth asiente de forma débil, a pesar de las palabras dichas por el ojiazul, la angustia no disminuye. Pero él busca reconfortarla, así que ignorando los comentarios y miradas que pueda acarrear, se aventura a cubrir a la chica con sus brazos y brindarle un abrazo, donde ella se refugia por algunos segundos.
Bruce sonríe con melancolía, al igual que Clint; mientras que Thor hace un gesto de sorpresa, pero luego sonríe al ver la mirada confundida de Visión, quien por primera vez se enfrenta a una demostración de cariño, lo cual le parece demasiado asombroso. Stark es quien de nuevo tiene mucho por decir, pero guardará esos comentarios para después, piensa en que debe hacer una lista para no olvidarlos. Los gemelos se miran entre ellos, sin saber exactamente qué hacer, pero es claro que Wanda nota la tranquilidad que Elizabeth percibe.
Unas horas más tarde llegan a Sokovia, con un plan inicial en mente que es evacuar a la mayor cantidad posible de personas y encontrar a Natasha.
Thor y Bruce parten en busca de la pelirroja, aunque ahora ya llevan un dato exacto hacia unas cuevas subterráneas. Por otro lado, los gemelos, Elizabeth, Steve y Clint, se quedan evacuando la ciudad, aunque es claro que la sokoviana lleva la delante al hacer uso de sus poderes para convencer a la gente de salir de sus hogares.
Clint logra subir un edificio para observar todo desde ahí de forma discreta. A lo lejos, visualiza a Stark volando hacia la iglesia, donde FRIDAY le notifica que Ultrón ya espera por él.
No pasan muchos minutos antes de que docenas de robots empiecen a emerger de la tierra y el agua, dando inicio a un ataque contra la población que busca huir y deteniendo este acto, por lo que los Vengadores deben comenzar a defenderse e intentar causar la menor cantidad de daño.
Sin embargo, algunos instantes después, se percibe un leve temblor en la tierra y de pronto, ante la sorpresa de todos, comienzan a elevarse, mejor dicho, toda Sokovia. Algunas personas ya no pueden escapar de este hecho y mejor son repelidas, pidiéndoles que se mantengan alejados de la orilla por el riesgo de caer, además de que el ataque de los robots de Ultrón no cesa.
—Pueden verlo, su gran belleza, su inevitabilidad, se alzaron sólo para caer. Ustedes, Vengadores, son mi meteoro, mi espada rauda y terrible. Y la tierra se quebrará, con el peso de su fracaso. Depúrenme de sus computadoras, pongan a mi estirpe en mi contra, no significa nada. Cuando todo haya cesado, los únicos seres vivos en el mundo serán de metal —anuncia Ultrón quien sobrevuela desde lejos, observando como su plan comienza.
Elizabeth se mantiene disparando a todo robot que pasa por su camino, mientras agradece internamente a que tomara los dispositivos mejorados por Stark que en lugar de balas lanzan rayos de energía igual de destructivos que lo que él usa en el traje de Ironman. Sin embargo, parece que no ve fin a cada robot que salen, pues estos se multiplican de forma impresionante. El panorama parece ser poco alentador, además de que varios edificios en la periferia de la ciudad, se empiezan a derrumbar ante el movimiento y la inestabilidad.
—Cap, tendrás compañía —dice Stark por medio de intercomunicador, por lo que todos lo escuchan.
—La compañía ya vino —responde el ojiazul denotando su voz cansa —. Stark, encárgate de la que la ciudad aterrice a salvo. Los demás, tenemos una misión: acabar con estas cosas. Si los golpean, regresen el golpe. Si los matan, hay que revivir —declara con decisión.
Elizabeth llega muy cerca del puente, donde es atacada por un orbe de robots que la mantienen ocupada por un buen tiempo, una vez que se despeja un poco, observa a Steve intentando detener un par de autos que están a nada de caer, sin embargo, no lo consigue. Ella escucha el grito de la mujer, pero no es idéntico al de las imágenes que ve en su mente, igual no duda en ir hacia ellos.
El Capitán Rogers pelea con un robot antes de hacer una seña e intercambiar una rápida mirada con la chica, para luego arrojarse. La joven termina con el espacio entre ellos y se tira sobre el asfalto débil.
—¡Te tengo! —exclama el rubio —. Sólo mírame —le pide a la chica que está aterrada.
Elizabeth logra visualizarlos y extiende su mano hacia aquella mujer pelirroja que se sujeta de Steve, al verla, la joven no duda en aceptar la ayuda de la Agente que logra ponerla a salvo y luego Steve sube detrás, atacando a un robot que iba sobre la Vengadora.
—¿Estás bien? —le pregunta el ojiazul a Elizabeth, quien asiente y suelta un suspiro.
Antes de que ellos vayan en búsqueda de los demás para reagruparse, una camioneta cae frente a ellos, pues Thor ha logrado rescatarla, aunque los ocupantes terminan vomitando del mareo, pero igual están vivos.
—¿Tomabas una siesta? —cuestiona Rogers al asgardiano.
—Al menos no finjo tener una cita —responde refiriéndose a él y Elizabeth, quienes le miran con seriedad.
—Debemos reunir a todos los civiles que quedan, si siguen dispersos será más complicado hacer algo, en caso de que podamos huir con todos ellos —murmura la azabache.
—¿Alguna idea? —le pregunta Thor, luego de lanzar un fuerte rayo hacia los robots.
—Podríamos llevarlos al ayuntamiento —sugiere Steve lanzando su escudo por detrás de la joven que va a su lado.
—A la orden, Capitán —bromea ella antes de adelantarse seguida del asgardiano.
Steve se apresura a conjuntar el poder de su escudo con el mjolnir de Thor, juntos logran destruir a varios robots que no les dan un segundo de descanso. Los tres combaten por largo tiempo, mientras pasa cerca de ellos un Hulk totalmente motivado y que destruye a cuanto robot se aparece en su camino. El pequeño equipo se complemente a la perfección, atacando y cubriéndose con sincronía.
—Thor —dice Ultrón cuando ve la dimensión de destrucción que ha hecho el asgardiano sobre su ejército —, estás enfadándome —murmura iniciando una lucha contra él.
Miller y Rogers se quedan solos en aquel sitio, por lo que pelean espalda contra espalda para cubrirse de todos los robots que parecen ahora sobrepasarlos en fuerza, pues en número es claro que lo hicieron minutos atrás. La joven es alcanzada por uno de ellos y la apartan del Capitán, aunque rápidamente se defiende, sin embargo, no ve venir a uno de ellos que se acerca del lado contrario.
—¡Elizabeth! —exclama el ojiazul lanzando su escudo hacia ella, el cual repele el ataque y luego ella lo toma para defenderse, disparando detrás su arma de rayos.
Cuando ve que el ojiazul se acerca a ella, le devuelve el escudo el cual Steve utiliza con maestría. Ambos retoman su pelea en equipo, como si hubieran sido entrenados juntos y cada cual conociera los movimientos del otro.
—Área despejada —les notifica Clint por el comunicador que comparten.
—No lo está —responde el ojiazul quien se encuentra destruyendo un robot —. No lo está para nada aquí.
—Necesitamos refuerzos, Barton —agrega Elizabeth quien se encuentra encima de un auto luchando contra otro de aquellos seres de metal.
—Okay, voy hacia ustedes —dice el arquero.
Los policías se han unido al par de Vengadores que pelean en aquella zona, se refugian detrás de sus patrullas mientras también dan batalla. Pero pocos segundos después de la solicitud de Rogers y Miller, llega un borrón azul que deja a Wanda Maximoff al centro y esta empieza a pelear contra ellos junto a su hermano gemelo.
Elizabeth se aleja un poco de Steve para cubrir más perímetro y mejorar el ataque contra los robots, por lo que Pietro la conduce hacia el extremo contrario. Por suerte, luego de varios minutos, logran despejar aquella área.
Steve se acerca a los policías y les dice el pequeño plan que tienen acerca de los civiles y estos rápidamente ponen manos a la obra.
—Vengadores, estamos llevando a los civiles al ayuntamiento —dice el ojiazul por el intercomunicador —. Intenten reunirse ahí —agrega.
Elizabeth evacúa a las personas mientras va al encuentro del resto, viendo que Wanda imita sus acciones y Pietro sigue presionando a la gente para que se apresure. Luego de dejar esto en manos de la policía, ellos se reagrupan cerca del ayuntamiento.
—Rogers —dice la pelirroja caminando hacia ellos.
—Romanoff —responde Steve.
—¿Esa es mi chaqueta? —cuestiona al ver a la gemela que sigue a Steve.
—Ella está con nosotros —la excusa el ojiazul.
—Eso sigue sin explicar lo de la chaqueta —reitera ella, mientras que detrás viene acercándose Clint.
—Lo siento, error mío —murmura Elizabeth quien llega seguida del sokoviano —. Tómalo como un escarmiento por ponerte en riesgo y dejarnos preocupados.
—¿Desde cuándo los patos les tiran a las escopetas? —de nuevo pregunta la espía con una ceja alzada.
—Pelear con estos robots no nos está llevando a ningún lado —declara el Capitán devolviendo la atención a la pelea.
—El aire se está haciendo pesado, si vamos más arriba, la gente se desmayará —agrega el arquero, luego de entregar parte de algunas armas a Natasha, las cuales se complementan con las que Elizabeth también le comparte.
—Hay gente en la ciudad que se sigue escondiendo —susurra Wanda con evidente preocupación.
—Allá vamos —responde Steve —. Barton —dice él enviando al arquero.
—Tengo unas cuantas —declara refiriéndose a las flechas.
—¿Y nosotros? —pregunta Elizabeth al ojiazul.
El rostro de Steve se suaviza al escuchar la voz de la joven que se acerca a él, este se gira hacia ella recibiendo una tímida sonrisa. Natasha abre los ojos llena de sorpresa, pues es claro que ella sospecha a que se debe esa cercanía.
—Lizzie... —murmura Rogers.
—¿Lizzie? Un momento, ¿de qué me perdí mientras estuve cautiva? Necesito una explicación de ambos —reclama la pelirroja, provocando que ellos tomen de nuevo su distancia.
—Por ahora necesitamos destruir a los robots, Romanoff —responde Steve retomando su aura seria.
—¿Hoy? ¿Combatimos robots hoy? ¿O les queda mejor el próximo mes? —cuestiona Pietro Maximoff pasando junto al Capitán a quien le lanza un brazo mecánico.
—Andando —repite él y ambas mujeres se adelantan.
La lucha se reanuda con ellos cuatro al frente mientras Wanda y Clint, junto al resto de la policía, evacuan a la población reuniéndola en el ayuntamiento. Pero realmente cada vez parece más difícil contener a los robots y en ningún momento han dejado de subir, por lo que los civiles empiezan a sufrir los estragos. Así que al final ellos terminan reuniendo esfuerzos para acelerar la evacuación.
—La siguiente oleada no tarda en llegar. Stark, ¿qué tienes? —cuestiona Rogers luego de conducir a un gran grupo de personas hacia el refugio.
—Pues nada. Bueno, tal vez un modo de volar la ciudad —declara el playboy con evidente preocupación —. Eso evitará que golpee la superficie si pueden salir de ahí.
—Quiero una solución, no una ruta de escape —responde Steve.
—El radio de impacto crece a cada segundo, hay que tomar una decisión —insiste Tony.
—Cap, esta gente no irá a ningún lado —dice Natasha interviniendo en la plática —, si Stark sabe cómo volar esta roca...
—No hasta salvarnos —insiste Steve interrumpiendo a la pelirroja.
—¿Salvarás a estas personas, pero sacrificarás a las de abajo? —cuestiona ella con preocupación.
—No me iré de esta roca con civiles en ella —reitera el ojiazul.
—No dije que nos fuéramos. Hay peores formas de irse. ¿Dónde más hallaré una vista igual? —pregunta ella mirando hacia el horizonte.
—Me encanta que te guste, Romanoff —la voz de Nick Fury se escucha por un altoparlante, obteniendo que los gemelos y Elizabeth salgan del ayuntamiento para observar dicha hazaña —, porque se pondrá mejor.
Un magnífico helicarrier se eleva hasta su altura, provocando que las personas se acerquen a las ventanas para ver aquella maravillosa nave. Pietro Maximoff se emociona mientras corre hacia la orilla con la intención de apreciarlo con mayor precisión.
—Hermosa, ¿no? La recuperamos con apoyo de unos viejos amigos y está sucia, pero ayudará —declara Fury con alegría.
—Fury eres un hijo de perra —murmura Rogers sin poder evitarlo, ante aquella ayuda tan oportuna y necesaria.
—Uhhh, ¿con esa boca besas a Elizabeth? —se mofa el moreno —. Creo que deberías considerar el mal vocabulario que tiene Rogers, Agente Miller —agrega manteniendo la burla en su voz.
La chica no puede evitar sonrojarse, al igual que Steve, ambos se miran con cierta incomodidad. La sonrisa en Natasha se ensancha, mirando a ambos sin poder evitarlo. Se siente un poco tonta al nunca intentar emparejarlos, pues se había propuesto encontrarse alguien a Steve y justo ahora se da cuenta que ella estuvo frente a sus narices todo el tiempo.
—¿Esto es SHIELD? Cuestiona Pietro Maximoff sin dejar de observar la nave.
—Los que SHIELD siempre debió ser —responde Elizabeth con emoción, evocando todas las historias que Peggy le contaba.
—No está tan mal —murmura el peliblanco.
—Que todos suban —ordena Rogers cuando los salvavidas llegan a ellos.
Lo que no esperan, es que la oleada dicha por el Capitán se abalance contra las naves salvavidas, sin embargo, James Rhodes llega para apoyarlo y junto a Tony, quienes destruyen aquellos robots que ponen en riesgo la maniobra de rescate.
Las demás naves salvavidas aterrizan en otras zonas de la ciudad, donde el resto de los Vengadores, ayudados por los agentes de la extinta SHIELD, empiezan a evacuar a la población que han resguardado. Todo procede de manera rápida, que por un momento creen que han solucionado todo, hasta que la declaración de Thor retoma toda su atención.
—¡Thor, tengo un plan! —exclama Stark sin dejar de apoyar a las naves a llegar al helicarrier.
—Se acaba el tiempo. Vienen por el núcleo —declara el asgardiano.
—Rhodey, que las demás personas suban al helicarrier —dice Stark dirigiéndose a Máquina de Guerra —. Vengadores, hora de ganarnos el sueldo.
Thor y Visión ya se encuentran en la iglesia protegiendo el núcleo, luego de ellos llega Stark y unos segundos después, Pietro Maximoff, quien se une a la batalla. Steve aparece unos minutos más tarde, seguido de él Elizabeth, para que después lleguen Clint y Wanda.
Steve mira que Elizabeth limpia de mala gana sus ropas llenas de polvo, y luego acomoda las armas entre sus manos. Puede notar algunos cuantos raspones en su rostro, algunos más llamativos que otros.
—¿Estás bien? —le pregunta y ella asiente soltando un suspiro.
—Fue como pasar del cero al diez en un segundo, pero se siente bien estar enteramente de vuelta —declara y le sonríe, Steve no puede evitar devolverle el gesto y luego retomar su semblante serio.
—Romanoff, dime que Banner y tú no están jugando a las escondidas —dice Tony por el intercomunicador, ante la demora de la pelirroja y aquel hombre verde.
—Relájate, cara de metal. No todos volamos —replica ella, llegando unos minutos después —. ¿Situación?
—Esta es la situación —responde él mientras señala el botón el cual acciona la función de aquella máquina —. Si Ultrón se apodera del núcleo, perdemos —murmura con seriedad.
Justo en ese momento, Ultrón se acerca acompañado de algunos robots que parecen respaldarlo.
—¿Es lo mejor que tienes, Ultrón? —dice Thor en tono retador hacia el susodicho.
Aquel ser levanta uno de sus brazos, casi de inmediato, cientos de robots se agrupan alrededor de él, demostrando el ejército que tiene a su servicio.
—Tenías que decirlo —murmura Steve mirando al asgardiano con molestia.
—Esto es lo mejor que tengo —responde por fin Ultrón —. Esto es justo lo que quería. Todos ustedes contra todo lo que soy, ¿cómo se supone que van a detenerme?
—Pues, el viejo ya lo dijo: juntos —declara Ironman.
Y así, da inicio esta batalla.
¡Gracias por leer! <3
No olvides votar y dejar tu comentario :D
1691/3050
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top