Cap.7

Mis ojos se abrieron de repente por el terrible sonido de tacones en la planta baja combinándose con sonidos de platos y otros bastantes complejos.

7:39 a.m.

Me metí a la ducha y comencé mi ritual del aseo personal.
30 minutos después estaba saliendo del baño con mi cuerpo envuelto en una toalla. Me vestí rápidamente con un short negro de tiro alto, una blusa holgada de tirantes, la cual tenía un atrapa sueños gris por estampado, y mis tenis converse.
Bajé las escaleras y, como suponía, había un par de mujeres en la cocina, todas yendo y viniendo de un lado al otro, corriendo con un par de platos en manos cada una, todas llevando platillos sencillos y muy bien decorados.

Me acerqué a mi madre despacio quedando a una distancia prudente y evitando estorbarle alguna de todas las mujeres que se encontraban en nuestra cocina.

- Mamá, ¿Crees que Dani esté despierto?-le pregunté, recargandome en el marco de la puerta.

- No sé, cariño.-dijo mi madre de forma dulce.

- ¿Y papá?

-Sigue durmiendo, ¿Porqué?

-Es que no tengo mi licencia de conducir y tampoco un chofer que me lleve al edificio de Peter-Unos pasos sonaban en las escaleras, me volví hacia estos y ví a mi hermano mayor descendiendo por ellas. "Hablando del rey de Roma..."-Hola, Dan, buenos días.

-Hola, pequeña-dijo el castaño en pijamas dandome un beso en la frente.

- Dani de mi vida...

- No

- ¡Anda!-insistí.

- ¿Qué quiere la bebé está vez?- dijo tomando una manzana del cuenco de frutas que había a mi lado.

- ¿Me llevas al edificio de Peter?-dije, casi implorandole con mis ojos de perrito. Me miro neutro.

- Adelantate, iré por las llaves del auto.

- ¡Si!- chillé abrazandole.

***

- Listo- dijo estacionandose frente al edificio.

- Gracias, hermanito-dije abiendo la puerta de su auto rojo.

- Si quieres que venga por ti me llamas-dijo él.

- Claro-dije despidiendome de él con un beso en la mejilla.

- No hagas nada que no haría yo- dijo una vez que estaba fuera del auto.

- ¡Puf! Entonces puedo hacer de todo- dije graciosa.-Adiós, peludo.

-Adiós, pequeña.-dijo y se alejó rápidamente.

Entré por el gran portal del edificio, me aproximo al acensor.

Piso 7.

Al abrirse las puertas metálicas mis pasos fueron en automático al fondo del pasillo.

B612.

Al tercer toque se abrió la puerta dejando ver a un guapo chico.

-Reachel...

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