Después de pensar cual sería la prueba práctica perfecta para su candidata, Ethan le pidió a su alumna que fuera a su cubículo después de las 2:00 pm, justamente cuando había pocas personas circulado los pasillos.
Ella se alegró por su llamado, muy al fondo sabía que se debía por el trabajo que había entregado.

***

Las horas pasaron rápidamente, Ella se despidió de sus amigas para dirigirse al área de profesores, cuándo llegó frente al cubículo 321 tocó la puerta.

—Pase y tome asiento por favor—le pidió Ethan cortésmente, se puso de pie para dirigirse a uno de los estantes de su cubículo—.El motivo por el cual le dije que viniera se debe a su impresionante respuesta al trabajo teórico que presentó. Debo decir que tiene buenas aptitudes para esta ciencia—le comentó dándole la espalda, donde sólo se escuchaba el ruido de metal acompañado de un leve quejido de animal.

Ella sonrió levemente por su cumplido y su curiosidad aumentaba cada vez más.

—Es un honor que un maestro como usted alague mi trabajo. Muchas gracias profesor Coleman—respondió orgullosa de su trabajo.

Él, se dio media vuelta con un recipiente de metal entre sus manos. Lo colocó sobre el escritorio para que su alumna lo mirará más de cerca: se trataba de un ave agonizando dentro del recipiente.

—Es por esa razón, que necesito hacerle una prueba práctica. Tomelo como un 30% de la clase—le mencionó mirando sus ojos cafés—. Lo que debe hacer es poner en práctica la teoría presentada en su trabajo—le recordó al tiempo que le mostraba un bisturí.

Ella sonrió levemente para disimular la ansiedad que sentía por abrir el pequeño cuerpo de la ave. No se había sorprendido por la prueba que le estaba pidiéndo, ya que ella sabía su gran secreto. Ellos tenían algo en común: les fascinaba asesinar.

Ella, Pasó su lengua para humeder sus labios, se sentía inquieta y con ganas de ver sangre entre sus dedos. Luego tomó el bisturi, se acercó a la Ave e hizo un corto vertical en su pecho. El pequeño corazón de la ave se visualizaba entre su pequeño interior, con precisión buscó la arteria aorta encargada de distribuir sangre a las arterias del cuerpo, cuanto la cortó el oxígeno dejo de fluir, finalizando así con la vida del animal. Ethan quien la miraba en todo el proceso, sonrió con satisfacción de su buen trabajo.

—Felicidades ha pasado la prueba práctica—le mencionó Ethan, tomando el recipiente para colocarlo sobre el estante principal—.Ahora puede retirarse—le pidió regresando a su asiento.

Ella, con el ceño fruncido lo miró con enojó. Estaba esperando una propuesta de su parte, necesitaba con urgencia pertenecer a las "actividades"que el realizaba, ya que su cuerpo y mente le podía a gritos asesinar a alguien de una forma divertida.

—¿Eso es todo profesor Coleman?, porque no nos quitamos las máscaras de una vez; se lo que hace y estoy dispuesta a todo para ayudarlo en su colección de huesos—le dijo sin pudor alguno.

Ethan, se sorprendió por su atrevido comentario, tocó su barbilla para analizar la respuesta que estaba rebotando en su cabeza. Pensó que lo ideal era involucrarla en sus proyectos, ya que alguna manera se había enterado de su colección. Además ella le había demostrado su frialdad con esa pobre ave; no obstante no sabía si tenía las mismas habilidades para asesinar a un ser humano: tenía que comprobar si podía con dicha asignación.

—Antes de darle una respuesta, necesito que haga una segunda prueba práctica, pero esta vez el conejillo de india será una persona que yo elija—le respondió sin apartar su mirada—. ¿Acepta mi propuesta?—le preguntó seriamente.

Ella se inclinó un poco más hacia el escritorio para responderle.

—Acepto, será un placer asesinar por usted profesor Coleman—contestó con una sonrisa llena de maldad.

—Entonces le daré los detalles de lo que quiero que haga, preste atención—le dijo Ethan emocionado por el juego que estaba apunto de comenzar.

Ella, escuchaba atenta a sus palabras. Por dentro saltaba de la alegría, no solo por ser la elegida, sino porque le iba a demostrar al hombre que amaba su verdadera personalidad: estaba completamente segura que pasaria la segunda parte de la prueba sin problemas.