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d o c e
Las fotografías eran una expresión de su propia persona, de lo que pensaba y lo que sentía.
Había una pared completa en su habitación dedicada a su más amado hobbie. Todas eran sobre atardeceres, parques pintados de otoño, copos de nieve; flores de brillantes colores.
La razón por la que Akaashi era la única persona que había entrado a su habitación, era porque sobre todo eso, predominaba una persona con ojos de linterna, cejas perfectamente arqueadas y cabello bicolor.
Él era el único que sabía lo mucho que le gustaba Bokuto Kotaro.
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