Mi padre se enterara de esto
-¡Por favor no, yo no se que decir!- gritaba Draco tomado del marco de la puerta con fuerza mientra Dumbledore lo empujaba al interior de la clase.
-¡Señor White, su clase empezo hace 10 minutos, entre ahora!- hablo el director.
Maldiciendo el chico entro al salon, este maldijo mientras observaba a los alumnos.
-Son todos suyos- sonrio McGonagall y salio del salon.
-Sin tidis siyis- hablo Draco- Demonios
La puerta se cerro detra de McGonagall, el rubio se giro con lentitud a los estudiantes de quinto grado que esperaban el inicio de la clase.
-Bueno...- hablo y camino hacia el escritorio- Mi nombre es...- el rubio se quedo callado pensando un apellido pues su padre estaba en ese salon...-Draco Malgoy.
-¿Malgoy?- pregunto Lucius niño y fruncio el ceño.
-Si, ese- contesto Draco- En esta clase iniciaremos con el libro- alzo el libro de pasata gruesa que estaba a su lado-Y van...
-Es es de Historia- señalo un niño pelinegro hacia la portada del libro
Draco observo el libro, y si, efectivamente era de Historia, regreso su vista al niño.
-Nunca dije que ibamos a usar este libro, pequeño demonio- contesto Draco a lo que el niño fruncio el ceño.
-Me llamo, Snape, Severus Snape-contesto el pelinegro.
-Oh si, el niño raro del grupo- hablo un gryffindor con lentes y riendo.
-Dejalo tranquilo James- hablo una chica a su espalda.
-No te metas Lili- contesto este.
-Me meto cuando yo quiera Potter- contesto la pelirroja.
Una rubia observaba la discusion con aburriemiento.
-Los sangre sucia discutiendo, que rareza- murmuro.
-Callate Narcissa- pidio Lili con los ojos entrecerrados.
La rubia solto una risa.
-¿Tu y cuantos mas Evans?- pregunto en tono burlon.
Draco observaba la pequeña discusion que se habia montado en el salon. Se cruzo de brazos mientras los veia.
-Exacto amigo-hablo un chico castaño- Ponte comodo.
El rubio lo observo. Luego su vista regreso a los chicos.
-No necesito a nadie mas Black, yo sola puedo-se arremango las mangas enseñando los puños.
Antes de que la chica se le arrojara, Draco actuo con rapidez tomandola del brazo para detenerla. Esta lo miro con odio y desden soltandose del agarre del chico.
-No se meta, profesor- hablo Narcissa y lo barreo con la mirada.
-No quiero problemas Black- hablo Lili con los brazos cruzados- Mejor hazle caso al profesor y dejemos las cosas como estan.
La rubia sonrio con satisfaccion y observo a Draco.
-Debe aprender a meterse en donde no le importan profesor- le dijo Narcissa e hizo una mueca- No le conviene meterse en problemas con mi familia.
Antes de que Draco articulara una palabra la rubia se alejo de el. Un chico se acerco a ella y el rubio supo quien era de inmediato. Lucius Malfoy.
-¿Estas bien?- pregunto con cierta preocupacion el rubio.
-Si, estot bien Lucius- contesto la rubia y una pequeña sonrisa se le escapo- Gracias.
Lucius sonrio y dirigio su vista a Draco. El rubio camino hacia el.
-Profesor- hablo Lucius con una sonrisa- Debe aprender que no tiene que meterse en donde no le importa o si no...
-¿Tu padre se enterara de esto?-pregunto Draco con una ceja alzada- Si, conozco esa frase.
Lucius abrio la boca y luego la cerro haciendo una mueca.
-Se lo advierto, profesor- señalo el niño y sonrio vuendolo de arriba a abajo.
¿Su padre lo barria con la mirada? Ja, luego que seguia ¿Marcos madurando?
-No te preocupes Lucius, no me metere contigo, a los Malfoy no les gusta la competencia- lo observo y se acerco a el- Pero... mi padre tambien se enterara de esto.
Lucius abrio la boca pero Draco no dejo que hablara.
-La clase termino, pueden irse- hablo Draco para interrumpir al chico.
El rubio rodo los ojos y salio de aula no sin antes darle una mirada de desden a Draco.
-¿Que se cree ese oxigenado?- se pregunto a si mismo Draco cuando estaba solo- Solo por ser un Malfoy se cree superior a...
El rubio alzo la vista.
-Que estupido soy- murmuro Draco- Soy un Malfoy y era igual que el.
Una planta carnivora llamo su atencion. Volteo de un lado a otro revisando que no hubiera nadie.
Lentamente metio la mano entre la boca de la planta, esta solo respiraba.
-Una simpre planta no puede lastimarme- sonrio y movio sus dedos dentro de la planta.
Y se cerro.
-¡No, no, no y no!-grito con desesperacion- ¡Planta sucia inmunda suelta mi mano!
Pero la planta no hacia el minimo intento de abrir.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top