Una chica de Gryffindor quién Roxanne no conocía terminaba de repartir los libros.

-Bien- habló Neville con una sonrisa- ¡Ahora a preparar el abono que esas plantas no creceran solas!

Jean hizo una mueca observando la tierra, odiaba ensuciarse, odiaba que su cabellera estuviera toda espongada y sin brillo.

Ya se imaginaba las palabras de su abuelo ¡Tienes el cabello horrible Jean, estas desheredara!

La rubia hizo una mueca y empezó a preparar los que el profesor ó mejor dicho su tio pedía.

-¡Tío! ¿Dónde pongo esto?-pregunto Albus alzando unas semillas.

-Señor Potter, en la tierra por favor ya ya te dige que en clase soy profesor no tio- pidió Neville con una sonrisa.

-Si claro tio-contestó Albus y siguió haciendo sus cosas, Neville hizo una mueca de disgusto.

Neville caminaba de un lado a otro del salón  con las manos en la espalda mientras escuchaba las maldiciones de los chicos.

-Con un demonio, lo que me faltaba- murmuro Victoria cuando rego agua al piso.

-Odio esto- murmuro Scorpius observandose la manos llenas de tierra- Mi padre se enterara de esto.

Neville observó a los alumnos con atencion, cada uno estaba concentrado en su planta y ninguno hablaba cosa que le agradó.

A lo lejos Damian Nott estaba entretenido pero no con las plantas sino con otra cosa que Neville a los lejos no podia ver. Camino con lentitud hacia el chico quien tenía el celular y buscaba algo.

-Nott, el telefono- puso su mano Neville hacia el chico, este enarco una ceja.

-¿Para qué o que?- preguntó sin entender.

-No se puede usar celulares en clase, politicas de Hogwarts- contestó y este esperaba el telefono.

Damian le dio el celular con frustración y se giró a la planta mostrando una mueca de asco.

-"Acaso preguntó ¿Cuánto excremento puedo comer sin morirme?"- preguntó el buscador del telefono.

Neville observó el dispositivo muggle y luego al chico que cruzados de brazos lo observaba.

-¿Eso es lo que has estado buscando toda la clase Nott?- preguntó Neville sin poder creerlo.

-Si, por que si se lo hubiera preguntado no me hubiera contestado- contestó y sonrió.

Neville negó lentente observando al chico.

-10 punto menos para Slytherin- habló Neville y varias serpientes gruñeron enojadas y empezaron a gritarle al Damian.

La clase transcurría normal mientras Neville regañaba a estudiantes y les gritaba enojado. Albus rodo los ojos con fastidio, la planta no quedaba y eso le molestaba, observo a la ventana que tenía al lado dejando ver la cancha de Quiddich e hizo una mueca recordando que su equipo perdió. A lo lejos, Madame Hooch recogia una escoba y lo dejaba en objetos perdidos.

-Que estupido- habló hacia James quién le enarco una ceja-Un tonto dejo su escoba en el patio de Quiddich.

James se acercó a la ventana y fruncido el ceño, lentamente se giro hacia su hermano.

-Es tu escoba- le dijo, Albus negó de un lado a otro.

-No, eso no puede se posible, yo la deje en...- su frase quedó en el aire y abrió los ojos como platos

Observó como Madame Hooch, termineba de meterla en una bolsa.

-¡No! ¡Profesora!- gritó Albus desde la ventana- ¡No se la lleve!

-¡Albus Severus Potter Weasley ¿Qué estás haciendo?!-preguntó Neville acercándose al muchacho.

-Mi escoba, mademe Hooch la ha tirado, debo ir por ella- habló con rapidez el chico, se giro a la ventana con rapidez y observó como la maestra se alejaba del lugar

-De ninguna manera Albus, estas en mi clase, luego vas por ella

-Pero...

-Sin peros- sentenció Neville

Albus abrió la boca con preocupación.

-¡Es mi carroza!- gritó Albus desde la ventana-¡No se la lleven!

La clase se giro al castaño que gritaba desde la ventana. Neville enojado mando al chico a dirección por su mal comportamiento.

-¿Pero por que?- preguntó de nuevo Elian.

Neville respiro con rapidez, ese chico lo mataria de un infarto.

-Es imposible Elian, no es cierto que al tirarte un eructo y una flatulencia a la vez moriras de descomposicion- contestó Neville sin dejarlo en ver.

Elian hizo una mueca de no estar convencido.

-¿Y si estornudamos con los ojos abiertos?-  preguntó Victoria- ¿Se nos saldrán los ojos?

-Dame paciencia Merlin, por que si me dan fuerzas los mato- murmuro Neville observando el piso y alzo la vista con una sonrisa finguida- Es imposible estornudar con los ojos abiertos.

-Pobre Neville- murmuro Fabiola  al lado de Roxanne, esta reia- El pobre se arrojará un dia de la torre  de astronomía, y en la carta suicida dira " Me mate por que no soporto las preguntas estúpidas de mis alumnos".

Ambas chicas reían mientras que Neville seguia haciendo corajes.

-¿Te sabes el chiste de no y yo tampoco?- preguntó Roxanne observando a su compañera.

-No

-Yo tampoco- contestó la otra riendo.

Fabiola negó con lentitud y rio, mientras hacían la mezcla una chispa de fuego cayó en el libro de Roxanne, este se empezó a quemar poco a poco.

-A veces creo que Neville nos quiere matar, pero no puede por ser familia- río la pelinegra- Que raro...huele a quemado.

-Creo que James esta pensando mucho y se le esta quemando el cerebro- río la pelirroja.

Un gritó hizo que todos se giraran a la mesa de los chicas, un libro se estaba quemando y Roxanne gritó de miedo.

-¡Mi libro!- grito intentando detener el fuego.

-¡Fuego! ¡Fuego!- gritó Víctor y señaló la mesa de las chicas.

El profesor dejo de discutir con el chico centrando su atención al fuego.

-¡Mis plantas!- gritó Neville alzando sus manos, tomo su varita y empezó a apagar el fuego con agua.

Cuando el fuego se apagó, una capa de humo cubría el salón haciendo toser a todos.

-¿¡Estan bien pequeñas?!- pregunto Neville.

-Si, un poco intoxicados pero no importa- contestó Fernanda O'Donell.

Neville abrazaba sus plantas mientras que los estudiantes afirmaban que estaban bien.

-¿Pero seguros que estan bien?- insistio Neville observando sus plantas.

-¡Qué si estamos bien, no nos vamos a morir si es lo que quieres!- contestó a gritos Alina y se cruzó de brazos.

-¡A ustedes no les preguntó!- contestó Neville observando a los chicos- Me refiero a  plantas, los bellas y hermosas plantas- habló hacia las plantas verdes y las abrazaba.

Neville dejo sus plantas y observo a sus alumnos.

-¿Quién fue?- preguntó cruzado de brazos.

-Lamentó haberme tirado una flatulencia, creí que no te darías cuenta- habló Albus e hizo una mueca junto con el grupo.

-No me interesa tu flatulencia Potter- contestó Neville- Me refiero al incendio.

Todos se empezaron  a ver y por instinto observaron a Roxanne quién abrió la boca con indignación.

-No fui yo- contestó moviendo sus manos- Podré romper los aros de Quiddich, hacer que la barba de Hagied se incendie y hasta que volemos por los aires por culpa de una dimamita, pero por primera vez en la vida, no fui yo.

Fabiola dio una paso al frente con una mueca.

-Fui yo profesor, lo siento- contestó la chica con una mueca.

Neville observó a la chica y luego a Roxanne.

-Hubiera crei que fui Weasley-contestó- 100 puntos menos para Gryffindor.

La chica iba a protestar pero mejor negó e hizo una mueca.

-Al menos no fue tan grave- se consolo la chica y Neville le mando una mirada reprobatoria.