El fin de semana al fin había llegado y con ello la tranquilidad de los estudiantes al culminar con éxito su semana. Varios estudiantes de los otros años tomaban el tiempo para salir a las afueras del castillo a desayunar y tomar el poco sol que el invierno dejaba.

-¿Estas bien?- pregunto Albus Potter chasqueando los dedos frente a Hyperon Malfoy quien parpadeo de inmediato- Te vez preocupado.

-No-nego el rubio intentando convencerse que todo estaba bien- Solo casi no dormí anoche

James Potter quien estaba detrás del periódico de El Profeta lo bajo con una sonrisa divertida.

-¿Victoria no te dejo dormir anoche?

La mencionada dejó su jugo de zanahoria de lado y miró a Hyperon. El rubio por su parte cerró los ojos maldiciendo a James, sabía lo que se aproximaba por parte de su novia.

-Tu y yo ya no nos vimos después de la cena y no llegaste a dormir...

Maldita seas James Potter, ahora entiendo por que mi padre odio tanto al tuyo en su juventud penso Hyperon con los ojos cerrados.

-Estuve haciendo tarea hasta tarde- explicó el rubio intentando que sonara muy normal.

-¿Encerio?- pregunto Phoenix Malfoy, su pequeña hermana- ¿En dónde? Porque yo estuve hasta tarde en la biblioteca y nunca te vi, tampoco estabas en el dormitorio porque llegué a buena hora.

Ya matame Merlin rogo Hyperon ante la mirada de Victoria sobre el. Si la mirada de la chica fuera una pistola el rubio ya hubiera muerto.

-Uy, Hyperon esta mintiendo- río Luis Zabbini mirandolo.

-¿Con quien estuviste anoche?- exclamo Victoria golpeando la mesa.

No ahora por favor rogó Hyperon mirando a la chica.

-¡No llegaste a dormir y no estuviste haciendo tarea hasta tarde!

Víctor Riddle se giro hacia Hyperon mirandolo fijamente. Sabia que si ni hablara podía tener en menos de una hora frente a el al mismísimo Víctor Riddle Black, el hijo de Lord Voldemort.

-Creo que mi pequeño hermano tuvo una aventura anoche...- río Scorpius hundiendo más a Hyperon.

Vamos Scorpius, échale más leña al fuego, total ya siento las llamas del infierno. Si no muero por Victoria morire por su padre y castrado.

-Hyperon...-hablo con autoridad Aerys, a su lado Lili Potter observaba atentamente.

Hyperon se pasó una mano por el cabello revolviendolo, luego fijo su vista en Victoria quien esperaba una explicación.

-Si, no llegué a dormir anoche a mi dormitorio...

-¡Lo sabia!- exclamo Victoria interrumpiendolo- ¡Me estas engañando!

-Porque...-alzo la voz el chico para calmarla sutilmente sin decirle "Maldicion, déjame explicarte"- Paso un accidente en el baño anoche, encontré a Teddy herido y me encargué de curarlo puesto que la enfermeria ya permanecía cerrada y el se rehusó a ir.

-¿Herido?

Hydra posó su vista en Hyperon. Ambos se miraron fijamente recordando que Teddy le había jurado que no hablara pero había dicho mucho y no había marcha atras.

-Si, lo encontré herido y...

-¿Esta bien? ¿Quien lo hizo?- insistió Hydra levantando ma voz.

-No lo sé, no me lo dijo pero...

-¿Pero? ¿¡Pero?! ¿Hay un pero?- pregunto en voz más alta Hydra haciendo que varias miradas se posaran en ella.

Hyperon miró de un lado a otro mirando las miradas curiosas, Arya se percató de ello y se giró a ver a todos:

-¡No metan sus narices en donde no les importa, hijos de Voldemort!

-Lo llevé a enfermería, Pomfrey debe estar curandolo.

Hydra se levanto de la mesa y abandonó la sala a paso apresurado. No necesitaba más palabra de Hyperon diciendo que estaba bien, solo debía ir a verlo.

***

La enfermeria era tal vez el tercer lugar más frío de todo Hogwarts. El primero era el bosque prohibido y el segundo el corazón de Voldemort

Su paso se detuvo al mirar la única camilla ocupada, Teddy observó la puerta e Hydra corrió a abrazarlo.

-Hyperon nos contó todo.

Teddy pasó su brazo por el cuerpo de la chica y está le sonrio.

-Se que le has de ver rogado que no nos dijera nada, pero ya sabes, tenía la presión de todos.

Teddy asintio, sabía como era su familia cuando de saber algo secreto se trataba. Sonrio imaginando a Hyperon negando sobre alguna chica bajo la acusación de Victoria.

-¿Quien fue?- pregunto Hydra.

Teddy la observo y nego.

-No quiero hablar de ello

Hydra lo observo atentamente sentada en el borde de la camilla, sus ojos platas brillaban con intensidad gracias a la oscuridad del lugar. La chica observó atentamente a Teddy, su tez blanca, sus largas pestañas, algunas pequeñas pecas que adornaban su rostro y sus labios rosados.

Nego internamente. No podía besarlo. Era su mejor amigo. Pero ¿Y si lo hacía? ¿El le respondería?

-¿Estas bien?- pregunto Teddy ante el silencio de Hydra

La rubia asintio con la cabeza tomando una decisión, nunca había sido esas chicas valientes con los chicos como Victoria y Scarlett lo eran, pero nada perdía con intentarlo.

Merlin, matame ante mis ideas sexosas pensó Hydra.

La rubia actuó rápido y junto sus labios con los del chico quien por segunda vez en su vida habia sido sorprendido por Hydra, debatiendo si seguir o frenar a la chica Teddy se quedó rígido, luego la primer opción gano pasando su mano por la cintura de Hydra y acercandola a el. El frío que antes Teddy había tenido cambió de inmediato, sintio como su cuerpo comenzaba a calentarse poco a poco.

Hydra se acomodó sin dejarlo de besar haciendo que con los movimientos de ambos la falda de la chica se levantara de más.

-¡Por Merlin!

Ambos chicos se separaron de golpe sobresaltados al escuchar la voz de Madame Pomfrey, quien roja de la cara se tocaba el pecho de forma dramatica.

La mujer dio media vuelta y comenzó a regañarlos.

-Teddy acomodate ese pantalón y tu Hydra esa falda.

Estos con manos temblorosas tomaban sus cosas sin llegarse a ver. Hydra no necesitaba verse para saber que estaba más roja que el cabello de los Weasley.

-Si Albus Dumbledore se enterará de esto...

-Pero no lo haras- hablo Teddy mirando a la mujer, esta lo miro- ¿Verdad Pom?

Pomfrey miró hacia la entrada y luego regresó su vista a Teddy; esta nego con la cabeza y se alejó del chico intentando no sonreír ante la locura de dos adolescentes enamorados.