Prólogo: Un Viaje a Tierras Desconocidas.

En berk han desaparecido un grupo de niños. Niños que fueron buscado por días por sus padres sin éxito aparente.

Hasta que un día, recibieron cartas, cartas de un desconocido ser que aseguraba que los niños estaban bien, que no pasaban peligro aparente a dónde los llevo.

Así los mantuvo comunicados unos días hasta que apareció una puerta que permitía a los padres ir a dónde sus hijos, quienes habían visto escenas de las vidas de sus padres en el pasado, antes de llevarse bien actualmente.

Aunque esos niños no fueron los únicos en viajar a ese lugar.

«Madre, hemos visto al abuelo.»

Sigrid, Nuffink y Zephyr Hofferson Haddock
Fredrik Halvorsen
Yessenia y Rogelio Inggerman Thorthon
Brad Thorthon
Pauline Jorgerson
Sigurd

🌑🌑🌑

—Por favor, tomen asiento en lo que hago llegar al resto… —una voz vino desde el techo, asustando a los pocos que se encontraban ahí.

La mayor del grupo, Zephyr Hofferson Haddock, miro a las demás personas, logro reconocer a algunos mientras sus hermanos se mantenían detrás de ella asustados.

Si no le fallaba, uno era su tío abuelo Gober, manos intercambiables y hábil herrero, una era su abuela disfrazada aún para que nadie la reconociera.

— Disculpe, usted es… ¿Stoick The Vast Haddock? —preguntó la joven al hombre algo temerosa.

— Si lo soy, ¿Quién me busca?—pregunto el hombre de barba girándose a ver a la joven, aunque el pobre casi se infarta retrocediendo unos pasos al ver a la niña.— ¿... Valka? —murmuró sorprendido.

— Papá, ¿Estás bien?—preguntó una niña acercándose a donde el, por la estatura, debe tener unos 15 años.

— Hicca…—llamo el, mientras la más joven seguía sin comprender la situación en la que se hayan todos.

— Habrá tiempo.

.....

Una serie de gruñidos se escuchó junto a golpes dar contra el suelo. Algunos lograron reconocerlos y daban suspiros de alivio, pero otros se tensaron al ver a quienes eran sus enemigos naturaleza.

—Auch... —un joven de cabellos azabache y rasgos de dragones de alzó, dejando ver sus alas negras, mientras una cicatriz rondaba la base de las mismas, su cola, que finalizaba en aleta, mostraba una cicatriz cercana a una de las mismas.

Mas seres con aspecto de lagarto se levantan y sacudían sus escamosos cuerpos, agitando suavemente sus alas al sentirlas entumecidas y uno que otro dando gruñidos de confusión o buscando a sus compañeros.

Antes que el de cabello negro reaccionara, un grupo de tres niños lo jalo hacia ellos rápidamente y lo sentaban cerca de ellos. Al tiempo que los demás niños se iban levantando del piso y sacudían sus ropas.

—Son más majestuosos de cerca.—murmuro un niño de rubios cabellos viendo a los seres escamosos.

—Y tiene razón mamá, no atacan si no muestras armas con las cuales puedas dañarlos.—dijeron dos hermanos, gemelos al parecer, al mismo tiempo.

—Brad, Yessenia y Rogelio, silencio...—dijo un niño rubio limpiando el tisne de su cara y una niña rubia con ojos azules, se aferraba a las ropas de su hermana.

Los hermanos Thornton, Tuffnut y Ruffnut, se miraron entre sí al ver el parecido aterrador que tenían con los tres niños, pareciera que les esculpieron la misma cara y algunas facciones a ellos mismos.

Asher, el hijo de Margareth y Julios Hofferson se vio un aterrador parecido en el niño rubio y la niña pequeña que empezó a jugar con sus peluches de dragones una vez calmada. Aunque, si se quedó asombrado al ver a la mayor, la única castaña del trío, quien portaba unos bellos ojos azules y la belleza de la chica de quién se hayaba enamorado en silencio. Miro a Hicca que seguía tratando de hace reaccionar a su padre junto a Gober, quien terminó echándole agua encima y recibiendo la mala mirada del jefe.

—No puedo creer que tenga hijos... y para colmo naciste mujer.—dijo Snotlout, el primo de Hicca, quien recibió la mala mirada de la castaña de ojos verdes.

—Cielos, esta versión de mi papá es un completo cretino, agradezco que al menos mi mamá lo hizo cambiar.—dijo la chica.

—Al menos, imagina si conservará aún esa actitud, Pauline.—dijo Zephyr acomodando su cabello por detrás de su oreja y se acercaba a su abuelo, tomándolo de la mano.— Me presento, soy Zephyr Hofferson Haddock I, tu nieta.—se alejo corriendo mientras su hermanita la seguía, a quien tomo entre sus brazos rápidamente.—¡Mamá! — grito asustada al ver a Hicca al borde de desmayarse, aunque el chico de cabello negro se le acercó y le echo aire encima, dándole leves golpes en el rostro para que reaccionara.

—Ya no exageres.— dijo el chico dragón mientras Hicca iba reaccionando.

—¿Y era necesario darme cachetadas?

—Cachetada es esto....— dijo mostrando su ejemplo, cacheteando a un Nightmare Monster hasta derribarlo de su lugar.— Y lo que hice fue darte leves golpes.

—Muchacho, ¿que eres tú realmente?—pregunto Gober, mientras el miraba a Hicca varias veces esperando alguna señal.

.....

El chico de cabello negro se hayaba detrás de los dragones casi parecido a el luego de confesar que era realmente. Mientras que Hicca buscaba explicarle a su padre sin éxito.

Fue hasta que Stoick recibió un bastonazo por parte de un jinete que estaba cerca de un Storm Cutter rojo.

—Si me dejas explicarte.

—¡¿que me vas a explicar?! ¡¿que te aliste con el enemigo?!

—¡No, no es eso, es que yo...!

Antes que Stoick dijera más, volvió a ser golpeado por la misma persona en la cabeza, quien claramente no se veía de buen humor a pesar de llevar una máscara.

—¡Déjala que te explique! ¡Al menos permíteme hablar antes de que la juzgues!—le recriminó la persona, haciendo a varios callarse ante lo intimidante que se escuchaba y más con los dragones detrás suyo, por la voz, supieron que era una mujer.

—Gracias... —sonrio Hicca a la persona un poco.— Mira, es un poco difícil de explicar, no se ni por dónde empezar, pero fue gracias a el que me pude dar cuenta que los dragones no tiran a matar como se dice... Me tarde en dar cuenta, que son criaturas maravillosas que no debemos matarlos, podemos convivir con ellos sin necesidad de guerra.

Stoick se quedó callado escuchándola, aunque se sorprendió un poco por como ella acariciaba a un Deadly Nader como si fuese una oveja.

—¿Y porque nos atacan? —pregunto un vikingo, a quienes los otros jóvenes reconocieron como el padre de Fredrik.

—Eso aún no lo tengo claro, pero los dragones que yo he visto, se comportan como animales de compañía.

Y con eso dicho los otros jóvenes desconocidos se presentaron en cierto orden.

—Como ya dije, yo soy Zephyr, la mayor de los tres hermanos Hofferson Haddock, el es mi hermano Nuffink y mi hermanita Sigrid.

(luego que todos los demás se presentarán y me dió flojera escribir, se empezó lo mero bueno)

Luego de una larga charla, fue que los hermanos Ingerman se acercaron a la máquina, siguiendo las instrucciones, lograron activarla poniendo la primera cinta que empezó a reflejar una cuenta regresiva

«... 3... 2... 1...»

Ante ellos apareció el título de la película y la aldea de Berk en todo su esplendor, mientras el sol se asomaba para dar anuncio a un nuevo día.

«Cómo Entrenar a Tu Dragón: El Despertar La Jinete del Furia Nocturna».

Varios se quedaron sorprendidos.

La joven Hicca pedía a gritos salí de ahí urgentemente.