Cr. img: A quien corresponda

ATENCIÓN

Esta parte contiene lemon y el uso de drogas.

Ya saben... lo normal con estos mens~

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TaeHyung tuvo que llevar la caja negra al departamento, como si fuera algo de gran importancia en lugar de simplemente contener un equipo de tatuaje. Por alguna razón, parecía que era realmente importante, casi algo parecido al Santo Grial. Debajo de su camisa, su tatuaje comenzaba a picar de manera bastante molesta bajo la delgada capa de plástico adhesivo que Hide había envuelto sobre él, y TaeHyung sabía que muy pronto también lo haría su hombro. Era solo cuestión de tiempo para que la morfina comenzara a desaparecer nuevamente. Había estado disfrutando del adormecimiento bastante feliz, pero una vez más volvería a sentir incomodidad y náuseas, temblar y sacudirse. Todo se iría a la mierda.

Se le pasó por la cabeza, cuando el elevador comenzó a ascender, que ninguno de los dos le había preguntado a JiMin si quería un tatuaje. Por otra parte, tampoco le habían dado una opción. ¿Diría que no a la sugerencia? ¿JiMin realmente se negaría? Y si lo hacía, ¿entonces qué? ¿JungKook simplemente lo dejaría, trataría de persuadirlo? ¿O era posible que TaeHyung solo necesitara ayudarlo a contenerlo lo suficiente como para atarlo a una silla para que JiMin no tuviera otra opción? Pensó que era muy probable que JungKook intentara persuadirlo para que cambiara de opinión en lugar de recurrir a tácticas físicas, o al menos eso esperaba. Aunque tales actos eran perfectamente normales para JungKook, TaeHyung pensó que nunca amenazaría voluntariamente a JiMin.

Estrangularlo hasta la muerte tal vez, pero no amenazarlo.

TaeHyung sintió que sus dedos se movían ligeramente y por eso miró hacia abajo para mirar su mano. Era extraño mirar sus dedos y ver las letras negras en sus nudillos, sabiendo que estarían allí dentro de una hora, estarían allí cuando se despertara mañana. Los tatuajes pueden no ser permanentes, pero en el futuro previsible lo serían. Era aún más extraño mirar el tatuaje y descubrir que le gustaba bastante. No como el loto, eso era... diferente. Pero "BABY" era bueno, le gustaba ese.

TaeHyung acababa de mirar a JungKook cuando las puertas del ascensor se abrieron, por lo que dejó que el joven saliera al pequeño pasillo para abrir la puerta de la suite. La vista interior no era para nada inesperada. JiMin estaba acostado sobre la cama boca abajo, con una botella de champán en el suelo junto a la cama y una copa en la mano. En la cama, junto a su codo, había un frasco abierto de medicamentos, acostado de costado, de modo que algunas de las píldoras se habían derramado sobre las sábanas. Presumiblemente Valium, y a juzgar por la expresión serena del otro hombre, un par de ellos ya habían sido ingeridos.

—Mmm —ronroneó JiMin mientras bajaba la copa—. Mira quién finalmente está en casa, Wangbi, es papá. —El gato estaba al otro lado de la suite y no parecía importarle en absoluto—. ¿Día ocupado?

—Muy ocupado —respondió JungKook mientras se quitaba la chaqueta y la dejaba sobre la barra de la cocina. Luego comenzó a enrollarse las mangas hasta los codos mientras cruzaba la suite para llegar a la cama. Se sentó en el borde del colchón y extendió la mano para recoger el frasco de pastillas—. ¿Cuántos de estos has tomado, hmm?

—Tres —dijo JiMin mientras movía su lengua alrededor de su boca, que parecía estar seca—. Creo.

—No más Valium esta noche. —JungKook agarró la tapa de la botella de las sábanas y procedió a atornillarla—. Un poco más y estarás fuera de combate. —A juzgar por la expresión de JiMin, TaeHyung pensó que eso era exactamente lo que había estado esperando—. TaeHyung, trae la caja y hagámoslo. —JiMin le preguntó a qué se refería con eso, ojos todavía bastante adormilados—. Vamos a hacerte un tatuaje, bebé.

—¿Un... un tatuaje? —preguntó JiMin mientras miraba la caja negra en su mano—. Cariño, dijiste que no puedo hacerme un tatuaje.

—Cambié de opinión —replicó JungKook cuando TaeHyung dejó la funda sobre el colchón—. Solo uno pequeño, podrá cubrirse. —JiMin miró la caja y luego levantó la mirada para mirarlo directamente. TaeHyung sostuvo sus ojos e intentó descubrir lo que estaba pensando, pero fue difícil. Entre las pupilas dilatadas de JiMin y su falta de concentración debido a su dolorido hombro, realmente no podía decirlo—. Tanto TaeHyung como yo tenemos uno, muéstrale.

—Ba... by —leyó JiMin, frunciendo el ceño ligeramente antes de deslizar los ojos para mirar la mano de JungKook en el colchón a su lado—. Slut... —Por un momento no dijo nada, se quedó quieto en la cama y solo miró sus manos. Luego levantó su copa de champán y tomó un sorbo—. ¿Qué soy yo?

—Doll —comentó JungKook cuando extendió la mano y colocó su mano en su cabello, acariciando su cabeza lentamente.

—¿Estás borracho, cariño? —preguntó JiMin con una risa repentina, los labios levantados lo suficiente en las esquinas para parecer una sonrisa genuina para la mayoría. TaeHyung pensó que se veía bastante asustado.

—No, solo me siento... jodidamente fantástico —declaró JungKook antes de reír, esa misma risa que hacía que su nariz se arrugase de manera infantil—. Me siento jodidamente fantástico, bebé.

—¿Por qué? —preguntó JiMin mientras se sentaba lentamente en posición vertical, liberando su mano y moviéndose para ponerse cómodo. TaeHyung escuchó el suave sonido de la suave piel de sus muslos frotándose—. ¿Por qué te sientes tan fantástico, cariño?

—Todo está saliendo tan perfectamente —respondió JungKook con esa amplia sonrisa cuando TaeHyung abrió la caja negra para él—. Kim JinTae estará muerto en los próximos dos días por intentar asesinarme, gracias a Bae. Lee YooChun quedará atrapado en nuestra red lo suficientemente pronto y esa rata chillará cuando lo atrapemos. —JiMin observó a JungKook recogiendo la pistola del tatuaje y colocándola sobre el colchón al lado de la botella de Valium—. Y finalmente, la respuesta a todos mis deseos se hará realidad. Kim JinWoo será un hombre muerto.

—...¿Vas a asesinar a los dos Kim? —preguntó JiMin con voz suave, casi un susurro. JungKook asintió vigorosamente con una sonrisa. TaeHyung tomó el papel de transferencia de la caja y esperó para ver si el otro hombre se negaría, le diría que no quería el tatuaje. Pero JiMin simplemente se movió para colocar su mano sobre su rodilla. Así que preparó sus dedos para JungKook, aplicando cuidadosamente cada tira de papel lo más recta posible para despegar y dejar el diseño atrapado en el bálsamo—. Querido, ¿no crees que eso es... imprudente?

—Mmm. —JungKook observó el proceso de preparación—. JinWoo también fue imprudente, pero hay una diferencia: yo no fallaré. Voy a matarlos para no tener que preocuparme por ser imprudente.

—¿Papá lo aprobó? —preguntó JiMin mientras levantaba la copa de champán nuevamente. Cuando JungKook confirmó que este era el caso, casi escupió los restos y tragó con fuerza—. ¿Qué piensas, Tae? ¿Crees que es imprudente?

—Uh... —TaeHyung levantó la vista de su mano por un momento, presionando con los dedos la primera "L" en su piel—. Creo que corre el riesgo de enojarlo, sí. Pero también podría atraerlo, hacerlo más fácil de eliminar. —JiMin se humedeció los labios antes de dejar el vaso sobre el colchón—. Pero creo que... —Retiró la transferencia y preparó la última—. Cualquier hijo de puta que quiera a JungKook muerto tendrá miedo si el puto de Kim JinTae desaparece del mapa.

JiMin hizo un ruido suave ante esto, con una expresión bastante sombría cuando extendió su mano libre para jugar con su bata de baño. TaeHyung retiró la transferencia final, luego JungKook se estiró para agarrar su muñeca y colocarla con fuerza sobre su propia rodilla.

—¿Qué hiciste hoy? —preguntó TaeHyung de la nada cuando JungKook puso en marcha la pistola de tatuajes, el zumbido vibrante muy fuerte y resonando en las paredes. Ante su pregunta, JiMin giró la cabeza para mirarlo, expresión momentáneamente confundida—. Ya sabes, mientras estábamos haciendo negocios, ¿qué hacías?

—Tomé drogas y dormí toda la mañana —respondió JiMin en un tono bastante plano. JungKook ni siquiera parpadeó ante esto, pero TaeHyung tuvo que apartar la mirada de su rostro. Demasiado para un intento de conversación—. Tae, ¿te sientes bien? ¿Todavía te duele el hombro?

—Sí, y mis tatuajes —respondió mientras observaba a JungKook siguiendo la curva de la "D" en su dedo. El otro hombre no había hecho nada más que entrecerrar los ojos ante el dolor—. Yo, eh, he estado esperando todo el día por... una dosis. —JiMin le hizo un ruido de simpatía y luego le dijo que fuera a buscar el kit que YoonGi había traído a la suite. El kit en el que ni siquiera estaba la morfina.

Así que TaeHyung se puso de pie y cruzó la suite, asegurándose de que JiMin no estaba mirando mientras rápidamente sacaba el estuche de la chaqueta de JungKook y se agachaba para agarrar la caja médica de un estante bajo. La abrió para deslizar el estuche dentro y luego la cerró de nuevo, llevándola a través de la suite. Cuando volvió a sentarse en la cama, JungKook había terminado la "O" y le tendió la máquina. TaeHyung puso la caja abajo para aceptar la pistola y procedió a sostener la mano de JiMin sobre su rodilla.

—¿Duele? —preguntó mientras miraba las dos letras negras completas, pasando la pistola sobre su dedo anular.

—No, he sentido cosas peores —dijo JiMin con un suave movimiento de cabeza—. No duele, Tae, no te preocupes. —TaeHyung bajó la pistola y comenzó la primera "L", solo teniendo que tatuar las cuatro líneas simples. Mientras lo hacía, JungKook abrió la caja médica y comenzó a preparar una jeringa de morfina para él. Afortunadamente para JiMin, se las arregló para no comenzar a temblar ante la idea y joder su tatuaje. Cuando terminó, apagó la máquina y la dejó caer en la caja sin importarle—. Dijiste tatuajes, ¿dónde está el otro, Tae?

—Quítate la camisa, TaeHyung, muéstrale —ordenó JungKook.

TaeHyung extendió la mano para comenzar a desabotonarse la camisa con su brazo bueno, luchando hasta que JiMin extendió la mano para ayudarlo. Un momento después, lo estaba liberando y vio cómo los ojos de JiMin se clavaban en el tatuaje. Sus ojos se abrieron ligeramente mientras lo miraba, claramente sorprendido. TaeHyung comenzó a quitar la película adhesiva para liberar su piel, tirándola a un lado sin preocuparse. Después de un minuto, JiMin pareció volver a la realidad. Ahora su piel finalmente era libre para respirar, ya no estaba oculta debajo de las capas que le causaban picazón.

—Ahora pertenece a Haedogje Pa —dijo JungKook cuando comenzó a llenar la jeringa—. A papá le gustó mucho.

JiMin no habló, sino que simplemente estudió su pecho en silencio, el tatuaje y los puntos en su hombro. TaeHyung no sabía realmente por qué estaba mirando, pero pensó que podría ser solo una mezcla de sorpresa y tal vez... tal vez algo así como lástima. Realmente no sabía por qué, pero esa era la sensación que parecía venir de él. TaeHyung había estado involucrado en actividades delictivas durante aproximadamente tres meses y, sin embargo, tendría una cicatriz permanente en su piel (y más en su mente), y estaba marcado contra sus propios deseos. Una etiqueta en su piel que era como una marca de propiedad. Como un jodido esclavo sexual. Cuando TaeHyung miró la mano de JiMin, vio exactamente lo mismo, las letras negras en su piel bronceada. Era suficiente para hacerlo sentir bastante enfermo, pero no había nada que pudiera hacer al respecto ahora.

¿No había encontrado la idea de tatuarlo bastante emocionante en primer lugar? "Doll" justo allí en sus nudillos, como si no fuera tan jodidamente obvio que él era uno. ¿No era eso técnicamente lo que ambos eran?

Simples juguetes.

—Finalmente eres oficialmente mío, TaeHyung —declaró JungKook mientras sacudía la jeringa y luego se movía en la cama para acercarse a él. TaeHyung extendió su brazo, cerrando los ojos y esperando la aguja desgarrar su piel.

Puta marca de propiedad.

Cuandola droga inundó su sistema, TaeHyung descubrió que no le importaban en absolutolos tatuajes o la propiedad. Él solo quería ser arrastrado por esas cálidasolas de placer y por eso echó la cabeza hacia atrás con un profundo suspiro.Escuchó a los otros dos hombres moverse: guardando todo el equipo. Permanecióen su lugar por un momento, sintiendo que la molesta picazón en toda su piel sedesvanecía y lo dejaba entumecido y cálido, y cuando dejó caer la cabeza y miróhacia la cama, vio a JiMin arrodillado en el acto de desatar su bata de baño.  TaeHyung lo miró por un momento antes de girar la cabeza para mirar a través de la suite. El hombre más joven estaba bebiendo la mayor parte de una copa de champán y debe haber visto algo en su rostro porque soltó una carcajada.

¿Qué, bebé?

—...Nada —respondió TaeHyung con un suave movimiento de cabeza. Había tenido algo en mente, un pensamiento de algún tipo, pero acababa de desaparecer; claramente no era importante—. Estoy contento de que... que le guste a tu papá y no me quiera muerto por matar a sus hombres.

—Mataste a traidores, no a sus hombres.

—Ahora soy oficialmente Haedogje Pa...

—Esta noche es casi como tu iniciación —dijo JungKook con una copa de champán vacía en la mano—. Una noche de celebración, deberías obtener una recompensa especial.

—Recuéstate, bebé. —JiMin casi le ronroneó cuando la bata se deslizó por sus hombros para caer sobre las sábanas—. Vamos a cuidar de ti.

TaeHyung no sabía realmente cómo terminó de espaldas, los otros dos hombres le quitaron la ropa para que no tuviera que hacerlo, simplemente lo hicieron. Al menos no hubo dudas mientras trataba de hacerlo con su brazo herido. A la par que miraba hacia el techo, JiMin también ayudó a JungKook a desnudarse, tirando de su camisa mientras lo besaba y riéndose contra sus labios cuando los dedos del otro hombre le recorrieron la espalda y las caderas. La camisa aterrizó en el suelo con un sonido susurrante y luego los dedos de JiMin tiraron con fuerza de su cinturón para poder abrirlo y ayudarlo a quitarse los pantalones.

—¿Cómo vamos a cuidar a Baby? —preguntó JungKook mientras ambos se subían al pie de la cama, de rodillas junto a sus muslos—. Tantas opciones...

—Hmm. —JiMin se movió un poco en la cama, con los ojos recorriendo su cuerpo antes de decidirse por su erección aún endurecida—. Tengo una gran idea. ¿Slut?

Cuando dijo esto, JungKook pareció detenerse por un momento, un leve momento de confusión o tal vez que no le gustó oírlo a través de él. Pero luego se relajó de nuevo y giró la cabeza para mirar a JiMin. A juzgar por su expresión, en realidad había disfrutado escucharlo decir eso. ¿Tal vez en realidad había sido un escalofrío?

—Baby merece algo especial, ¿no? —JiMin se inclinó para presionar sus labios contra su oreja—. Chúpalo. —Oh, hubo un nuevo estremecimiento, casi un temblor que corrió por su cuerpo. Desde su ángulo, con la cabeza apoyada en la pila de almohadas, TaeHyung lo vio comenzar a excitarse, su propia polla temblando con una contracción suave. Notó que ninguno de los dos le había preguntado qué quería, pero, de nuevo, la mayoría de las veces no lo hicieron. TaeHyung les permitió tomar todas las decisiones, solo disfrutaba participar independientemente. Además, estaba demasiado drogado para realmente importarle. JungKook podría hacerle una mamada, podría subir a su regazo y montarlo como uno de los viejos videos pornográficos de JiMin, o podría darle la vuelta y follarlo. Simplemente no le importaba en este punto.

—...Nunca he hecho eso antes —respondió JungKook después de un momento de reflexión—. No cuenta ese día en el club de striptease como una verdadera mamada, más que solo un beso descuidado.

—Podemos hacerlo juntos, te enseñaré —dijo JiMin con la boca aún presionada contra la oreja. Se llevó una mano al pelo y la movió hacia atrás para poder empujar ligeramente el cuello—. Baby tiene que tomarlo con calma ahora mismo, debemos hacer todo el trabajo duro por él.

TaeHyung no esperaba que JungKook permitiera que el otro hombre lo tratara de esa manera, de una manera casi dominante con sus palabras y acciones, sin embargo, no se resistió y lo dejó empujar la cabeza hacia abajo para que tuviera que cambiar de posición, poniéndose de rodillas y en sus codos. JungKook agarró su polla, envolviendo sus dedos alrededor de su base con fuerza para poder ver el tatuaje con claridad inicial: S.L.U.T. Verlo fue algo divertido, pero sobre todo bastante atractivo, incluso erótico. El menor lo miró por un momento, con el pulgar presionando su parte inferior. Luego bajó la cabeza para presionar un beso contra la cabeza de su polla.

JiMin se movió para comenzar a plantar besos con la boca abierta en la parte inferior del estómago mientras JungKook experimentaba, pasando de lamer como un gatito a tomar la cabeza entre sus labios por unos segundos. Casi como si fuera demasiado cauteloso para realmente llevarlo a su boca por completo.

—Te ves bonito, Slut —dijo TaeHyung, con la respiración ligeramente agitada cuando JiMin le mordisqueó la cadera con fuerza y ​​luego se mordió los labios. JungKook acababa de tomarlo en su boca de nuevo y ante sus palabras sus labios se movieron, convirtiéndose en una sonrisa que hizo que su cabeza se deslizara hacia un lado de su boca y tocara su mejilla. Verlo sonreír de esa manera fue suficiente para hacer que TaeHyung se agachara y agarrara su cabello, forzándolo a bajar su longitud por varias pulgadas. La mano de JungKook se apretó alrededor de su base, retorciéndose ligeramente de una manera que causó que un maravilloso latido se clavara en la boca de su estómago—. Te ves más bonito ahora.

JiMin levantó la cabeza ligeramente para mirarlo, con la boca aún arrastrada por el estómago hasta el ombligo. La vista de JungKook tirando rápidamente su cabeza hacia atrás lo hizo reír suavemente, un cálido aliento contra su piel. Sin embargo, el estímulo inicial pareció hacerlo sentir más confiado porque JungKook abrió más la boca y trató de engullirlo. TaeHyung giró la cabeza hacia atrás contra la almohada con un suave gemido al sentir la boca del otro alrededor de él. La boca de JungKook estaba caliente y húmeda, su lengua temblaba a lo largo de su parte inferior mientras tomaba un par de pulgadas. Se quedó a esa profundidad, meneando ligeramente la cabeza, pero sin profundizar. A veces sus dientes rozaban contra él y la sensación era extrañamente agradable.

—Bien, estás engullendo lapolla tan bien, Slut —alabó JiMin mientrastambién extendía la mano y empujaba la cabeza de JungKook y lo hacía tragar másde su longitud. TaeHyung sintió las arcadas a su alrededor,  sus ojos se cerraron, con fuerza los dedos de su mano libre que sujetaron las sábanas antes de moverlas para hundir sus dedos en su muslo externo—. Pero necesitas aprender a compartir.

JungKook se retiró justo a tiempo para que una ligera fuga de líquido preseminal se deslizara por la comisura de su boca y goteara por su barbilla. JiMin se lanzó hacia adelante, con la lengua afuera para lamer su semen y luego también estaba besando su cabeza. TaeHyung apenas podía creerlo y los vio a los dos luchando por compartir su polla, con las lenguas juntas.

—Deberían... deberían besarse —bromeó. JiMin gimió sin aliento contra su longitud, la lengua lamiendo su parte inferior para tocar los labios de JungKook y luego ambos intentaron besarse. TaeHyung se mordió el labio inferior, mirándolos besarse alrededor de su polla; nada más que labios que se rozaban o lenguas que se enredaban y lamían.

—Mi... mierda, tengo una mejor idea. —TaeHyung logró tartamudear—. Una idea más sucia.

—¿Sucia? —preguntó JungKook, los labios contra su cabeza manchados de saliva y semen. Su voz hizo que vibraciones recorrieran su longitud hasta su base, pequeños temblores placenteros—. ¿No somos lo suficientemente zorras para ti en este momento, Baby?

—Tengo una idea mejor, unaque sé que te gustará —respondió TaeHyung. Elhombre más joven lo miró con ojos curiosos y grandes mientras JiMin continuabaplantando besos a lo largo de su longitud—.  Te llenarás por completo, Doll y yo podemos llenarte.

La comprensión en la cara de JungKook fue un tesoro absoluto para ver.

TaeHyung se movió sobre el colchón para ponerse de rodillas, moviéndose para permitir que JungKook se acostara. Instintivamente abrió los muslos para él, las caderas se levantaron de la cama para presentarse casi con entusiasmo. JiMin se levantó de la cama para recoger la botella de lubricante, mostrando una ligera confusión ante este cambio de eventos. TaeHyung aplicó una cantidad generosa y luego movió su dedo medio e índice hacia su entrada antes de deslizarlos dentro. Cuando sus dedos se hundieron profundamente, JungKook emitió un sonido suave.

—Sube a las almohadas —explicó TaeHyung mientras continuaba abriéndolo con los dedos, aflojándolo con cada movimiento y golpe de sus nudillos contra él—. Slut te va a mostrar que no necesitas enseñarle.

—¿En serio? —preguntó JiMin, deslizándose sobre la cama de rodillas. JungKook observó su erección con gran interés—. No puedo esperar a que me muestre. —TaeHyung se alineó con su entrada y deslizó sus dedos para poder hundirse en él. Tuvo que levantar las piernas de JungKook, las manos debajo de las rodillas para mantenerlo en la posición perfecta.

JungKook tuvo que apoyar su peso sobre sus codos para poder llevar a JiMin a su boca, con la cabeza torcida en un ángulo algo incómodo. TaeHyung sintió que sus muslos se apretaban y vio que los músculos de su estómago también lo hacían. JiMin tuvo que mover las caderas hacia él lentamente en lugar de dejar que se balanceara sobre su polla, con los dedos fuertemente anudados en su cabello, porque JungKook no podía moverse mucho en su posición actual.

TaeHyung recordó su broma esa noche en la otra habitación, sobre JiMin uniéndose y amordazándolo con su polla. El hecho de que ahora se hubiera convertido en realidad fue suficiente para casi hacerlo reír, pero logró contenerse.

Entre el golpeteo de sus caderas contra la parte superior de los muslos de JungKook y la succión descuidada de su boca cuando JiMin se mecía contra él, con la mano firme en la parte posterior de su cabeza, TaeHyung apenas pudo distinguir los ruidos que JungKook estaba haciendo. Era difícil hacer mucho ruido alrededor de la polla del otro hombre, pero cada vez que aumentaba el ritmo lo escuchaba gruñir en el fondo de su garganta; sintió sus muslos apretarse bajo sus dedos. Cuando TaeHyung disminuyó la velocidad y embistió profunda y lentamente, JungKook casi gimió, la respiración escapó de su nariz en pequeños jadeos.

—Oh, Slut. —JiMin casi le gruñó—. Apre... aprendiste muy bien de mis videos. —Los párpados de JungKook se agitaron ante esto y gimoteo—. Te verías tan bien frente a una cámara también. —TaeHyung aceleró el paso para poder empujar más fuerte y los ruidos que JungKook hizo alrededor de la polla de JiMin lo hicieron jadear por la sorpresa. Esta podría haber sido la primera vez que JiMin había experimentado algo así, ya que él solía hacer mamadas. TaeHyung no se sorprendió en absoluto al ver que sus caderas comenzaban a encontrar un mejor ritmo, balanceándose casi como una ola contra la cabeza de JungKook—. ¿No es así, Baby?

—Tan... buena putita —coincidió TaeHyung, el elogio hizo que JungKook gimiera de nuevo. JungKook finalmente había conseguido lo que había anhelado, esa falta total de poder y vulnerabilidad total. Era sumiso en todos los sentidos y, sin embargo, tenía la sensación de que era dominante de alguna manera. Era como si el conocimiento de que estaba dando todo el placer lo estimulara y lo volviera más entusiasta. Porque lo estaba haciendo tan bien que TaeHyung decidió que también se merecía una recompensa y soltó su muslo con una mano para comenzar a masturbarlo.

JungKook en realidad liberó a JiMin por un momento, una serie de gemidos se escaparon antes de que el otro hombre agarrara su cabello con más fuerza y ​​volviera a forzar su boca a engullirlo. Debido a que necesitaba apoyarse sobre sus codos, JungKook no podía tocarse a sí mismo, pero dependía por completo de que TaeHyung se lo diera.

—Si chupas bien a Doll, Slut, te lo daré —prometió TaeHyung, moviendo su agarre hacia su cabeza para masajearlo con su pulgar. Podía sentir a JungKook temblando contra él, con los muslos apretados contra su cintura—. Muéstrale cuánto aprendiste de él, ¿eh?

JungKook hizo un intento muy bueno de hacer una mamada tan buena como JiMin, que TaeHyung supuso merecía una recompensa por el esfuerzo. De hecho, logró equilibrar su peso con un codo para poder tomarlo en la mano y masajear su base mientras JiMin controlaba su cabeza, chupando y gimiendo alrededor de su pene para que JiMin sintiera pequeñas vibraciones deliciosas provenientes directamente de su estómago. Entonces TaeHyung pensó que se había ganado una paja bastante provocativa y ​​lenta solo para evitar que se emocionara demasiado.

JiMin salió de su boca justo a tiempo, envolviendo su mano alrededor de sí mismo y bombeando con fuerza varias veces. Todavía tenía su otra mano enganchada en el cabello de JungKook y cuando eyaculó con un suave gemido, lo hizo en toda su cara. TaeHyung observó, casi hipnotizado, cómo su semen salpicaba la boca y las mejillas de JungKook. Algunas motas lograron aterrizar en otro lugar, a través del puente de su nariz e incluso en sus pestañas. La vista de JungKook cerrando los ojos con sorpresa fue suficiente para causar un latido profundo en la boca del estómago de TaeHyung.

JungKook parecía una puta y era absolutamente hermoso.

TaeHyung lo forzó a otra posición, agarrando sus muslos y moviéndolos, bajándolos y abriéndolos de par en par, permitiéndole avanzar hacia una mejor posición. Las rodillas de JungKook estaban presionadas contra su pecho, bloqueadas en su lugar por sus antebrazos. El ángulo hizo que el hombre más joven agarrara la almohada con una mano para hundir sus dedos en ella y se agachara con la otra para agarrar su propia polla.

—Ah, ah, oh. —Cada ruido que salía de los labios de JungKook era sin aliento, ahogando pequeños gritos de placer—. Mierda, Baby, t-tú... —TaeHyung bajó la cabeza, esforzándose tanto como pudo para poder lamer la boca, las mejillas y limpiar el semen de JiMin. JungKook sacó su propia lengua, rozándola contra la suya desesperadamente—. Eres tan jodidamente bueno.

TaeHyung podía sentir que su hombro comenzaba a protestar por todo el movimiento, por lo que no quiso provocar más al otro hombre. Encontró el ángulo perfecto y golpeó sus caderas contra él, sintiendo a JungKook sacudiéndose debajo de él. El colchón crujía ruidosamente por la fuerza, pero apenas lo oyó bajo los ruidos que salían de la boca de JungKook. El hombre más joven se estaba sacudiendo tan fuerte y rápido como pudo, y JiMin se las arregló para alcanzar y colocar su mano sobre la suya. Un calor punzante comenzaba a extenderse hacia arriba y era casi tan cálido y placentero como la morfina y TaeHyung sintió que alcanzaba su punto máximo.

—Mi-mierda, me vendré, estoy... —TaeHyung embistió y sintió esa avalancha inundando su sistema cuando JungKook gritó debajo de él, todo su cuerpo tembló mientras lo golpeaba su orgasmo. Se quedó dentro de él durante su clímax y luego se retiró y se movió para colapsar en la cama junto a él. TaeHyung cerró los ojos y respiró hondo varias veces, con el corazón acelerado en el pecho y los vestigios de su placer aun palpitando en la boca del estómago.

—JiMin, Tuh... TaeHyung —dijo JungKook con una voz desigual y sin aliento. TaeHyung volvió a abrir los ojos para mirar el espejo del techo antes de girar lentamente la cabeza para mirar a los otros dos hombres. JungKook estaba acostado boca arriba como él, con el pecho subiendo y bajando rápidamente y la piel cubierta de sudor y semen. JiMin todavía estaba de rodillas a su lado, mirándolo con curiosidad. Después de algunas respiraciones más rápidas, sus labios se levantaron en las esquinas con la sonrisa más extática.

—¿Qué, Juh... JungKook? —TaeHyung logró preguntar, su propia voz sin aliento y débil.

—Los amo.

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Naaaaaambre tremenda confesión, no? jajaja sorry, Ali anda súper animada~

Sólo para avisarles que mi beta terminó de revisar los capítulos restantes y ya tengo en mi poder las versiones a publicar. Sin embargo, pa' no desgastar las balas, seguiré con la programación semanal de que cada sábado estaré subiendo un cap :B

Pero bueno, espero les haya gustado y nos leemos!

Cuídense~

AliPon fuera~*~*