Había pasado una semana desde la última vez que habían visto a sus amigas, comenzando todos a preocuparse y el arrepentimiento por no acompañarlas esa tarde a casa florecía en ellos. El primer día, o sea el lunes, creyeron que les estaban haciendo una broma de hacer faltazo grupal entre ellas, o les había surgido una situación de emergencia. Pero al otro día, cuando vieron que no llegaban y las madres comenzaban a llamarlos, se dieron cuenta que algo iba mal.

El jueves de esa misma semana salió en las noticias las fotos de ellas siete; Lalisa Manoban de diecisiete años. Im NaYeon de dieciocho años. Bae Joonhyun de diecinueve años. Kim Hyuna de diecinueve años. Jung Wheein de dieciocho años. Shin YuNa de dieciséis años. Nicha Yontararak de dieciocho años. Todas desaparecidas, sin dejar rastros.

Claro que los chicos se preocuparon por sus amigas, y a su vez fueron los primeros sospechosos porque todos en el colegio cuando dieron sus declaraciones decían que ellos se la pasaban todo el tiempo en compañía de ellas. Hasta llegaron a decir que ellos siete habían sido los causantes de todas las desapariciones de Seoul.

Una completa locura, claro está.

Los siete dieron sus testimonios y justamente todos concordaban con ser inocentes, no había ni una sola pista de que ellos pudieran haberlas secuestrado. A los oficiales ninguno le pareció que estaba mintiendo, menos cuando veía en los ojos de los adolescentes las lágrimas y la súplica por encontrar a sus amigas.

Pero los oficiales eran tan corruptos que simplemente usaron los papeles con la información de las chicas para hacer estúpidas anotaciones y obscenos dibujos en la parte de atrás. Ni siquiera movieron un dedo para buscarlas, así que los chicos decidieron que empezarían la búsqueda ellos solos, todo para encontrar a sus amigas con las que compartieron momentos únicos.

⎯ ¿Qué se encontraba haciendo Lisa el finde semana?⎯ preguntó YoonGi.

Estaban en la casa de NamJoon, sobre la mesa tenían hojas, mapas, fotos de sus amigas y todo lo posible que pudiera llevarlas a ellas.

⎯ Estaba en su casa, supongo.⎯ respondió JungKook dudoso. Él estaba verdaderamente destrozado por la desaparición de su única mejor amiga, con la que convivió desde que literalmente eran bebés y la amaba como su hermanita menor aunque ella fuera más grande por tan solo meses. Ni siquiera podía pensar en la posibilidad de que haya salido con un chico o algo.

⎯ ¿En sus clases de baile?⎯ consultó HoSeok exasperado. Tal vez si podían encontrar a una encontrarían a las otras siete, o por lo menos a todas las otras chicas desconocidas que también desaparecieron.

De tan solo pensar en la desesperación y la horrible sensación de ellas al estar en un lugar que no conocen, con miedo y extrañando a su familia le partía el alma a Jung. No podía ni pensar en cómo se sentirían los familiares de aquellas chicas.

⎯ No, las tiene los martes, miércoles y jueves. Este finde semana no tenía nada, lo más probable es que haya estado en su casa haciendo nada.⎯ JungKook limpió la lágrima que cayó, JiMin al instante fue a abrazarlo con fuerza.

⎯ Bien, si no tenemos más información de Lisa pasemos a otra. Minnie.⎯ Dijo YoonGi serio, aunque se mostrara así detestaba la situación, una de las chicas que pertenecía a su grupo de amigos era su prima y la estaba buscando por cielo y tierra.

Todos miraron a NamJoon, él era el que más convivía con Yontararak, o como todos le decían, Minnie. Eran compañeros en casi todos los trabajos, y para estudiar siempre estaban juntos porque la información se les copiaba mejor en el cerebro. Fuera de eso, también tenían sus salidas y momentos amigables fuera del estudio.

⎯ Los sábados tiene sus clases de equitación, pero los padres le preguntaron a sus entrenadores y al parecer ella nunca llegó.⎯ soltó la información, los chicos asentían mientras escuchaban con atención.⎯ Eso podría llevarnos a que desapareció el sábado por la mañana, porque después de ahí no hubo más información de ella.

YoonGi anotó en una hoja blanca el nombre de la chica y a su costado escribió "sábado por la mañana", simplemente para tener un registro de la última vez que las vieron.

⎯ YuNa.⎯ el de pelo color menta miró a JiMin.

⎯ Fuimos a tomar un helado el domingo por la tarde, no estuvimos mucho tiempo.⎯ contestó.⎯ Ella me dijo que su primo la estaba esperando a unas cuadras de donde estábamos, pero no me dejó acompañarla para dejarla con él, y aunque insistí millones de veces terminó enojandose y gritando que la deje sola.

Los chicos se confundieron ante eso. YuNa siempre fue tierna y nunca trataría así a alguien, menos al chico que le gustaba. JiMin era conciente de el gusto que ella tenía por él, pero no le correspondió porque ya le gustaba alguien más, y aparte de que él tiene dieciocho mientras ella tiene (o tenía) dieciséis.

Tan solo dieciséis años, era una niña, no querían ni imaginarse como la debía estar pasando su pequeña amiga asustadiza.

⎯ ¿Algo más?

⎯ Me dijo que me amaba mucho y que no importaba que no correspondiera sus sentimientos, pero para ser sincero no le tomé importancia porque siempre me lo dice.⎯ respondió el más bajito.

⎯ Okey...igual lo anotaré por las dudas, capaz puede ser una pista.⎯ YoonGi escribió para después leer el nombre de la otra chica.⎯ HyunA.

Todas las miradas cayeron en HoSeok y él se encogió un poco en su lugar. Solo los chicos sabían que él tenía un enamoramiento por la chica mayor del grupo, pero nunca se lo quería decir por cobarde, y ahora no podría hacerlo porque no sabían si la encontrarían.

O al menos si la encontrarían viva.

⎯ No...no sé nada de ella, lo último fue que tenía doble turno en el trabajo el sábado, se disculpó por eso porque yo la había invitado a una...⎯ carraspeó.⎯ cita.

⎯ Encima que al fin te animas a invitarla a una cita desaparece, que feo ser tú.⎯ comentó SeokJin y los demás lo miraron mal por la broma tan estúpida y fuera de lugar que hizo. Se movió incómodo y habló nuevamente.⎯ Lo siento.

⎯ NaYeon.⎯ soltó YoonGi con un nudo en la garganta.

Le dolía en el alma que su pequeña prima este desaparecida, siempre supo lo difícil que era para ella socializar pero cuando al fin pudo hacerlo salió de abajo del ala de su primo para comenzar a tener una amistad más unida al menor de los Kim; TaeHyung.

⎯ Salimos el sábado y el domingo fui a verla a su show de ballet.⎯ dijo TaeHyung. YoonGi estaba ahí así que podía confirmar las palabras de su amigo.⎯ Ella simplemente no apareció, todos nos preguntaban si sabíamos de su paradero pero claramente no teníamos idea. La llamamos incontables veces porque pensamos que capaz le había dado pánico escénico, siendo eso algo tonto porque se presentó muchísimas veces, pero no perdíamos nada con llamarla. Ella no contestó a ninguna, ni siquiera los mensajes le llegaban.

No era necesario que YoonGi anote nada, él estuvo presente y tenía el día domingo grabado en su mente como uno de los días en los que sintió más angustia y ansiedad por no encontrar a su primita entre los bailarines.

Y aunque él quisiera anotar algo, simplemente por si alguno de los chicos quería leer para tener más informe de la chica, no podía. Sus ojos se empañaban, la mano le temblaba y su respiración comenzaba a agitarse, para que después venga el ataque de ansiedad.

⎯ Wheein.

⎯ No me habla hace semanas.⎯ confesó SeokJin, estaba muy triste por el motivo tan tonto por el cual ni hablaban.⎯ Según ustedes es porque está celosa de que yo haya aprobado para entrar a la universidad, pero no creo que sea eso, se me hace un motivo muy estúpido.

SeokJin se negaba a creer eso, pero siendo el mejor amigo de la chica bien sabía de lo envidiosa que ésta era. Siempre tuvo envidia de todo y todos, quería todo para ella, sea bueno o malo, pero lo quería. Y detestaba la idea de que alguien tenga más atención de la que ella tenía.

Los chicos ya no hablaban más del tema, si él mayor se resignaba a entender que el motivo por el cual Wheein se enojó con él era por envidia no podían hacer nada. Sabían que le dolía porque SeokJin no quería que su mejor amiga se sienta así con él, él no tenía la culpa de haber aprobado, fue solo suerte.

⎯ Irene...⎯ leyó a la última.

La chica, JooHyun, era más cercana a YoonGi porque tenían un carácter similar. No sonreían mucho, se tomaban las cosas en serio, amaban dormir y les gustaba la tranquilidad. Hasta habían veces en las que solo se juntaban en la casa del otro para dormir o estar tranquilos escuchando el ruido de la lluvia.

⎯ ¿Sabes algo de ella?⎯ preguntó el menor del grupo con los ojitos llenos de lágrimas, sentía que estaba en alguna clase de pesadilla interminable.

⎯ Nada. Saben que Irene apenas toma el teléfono, aparte de que casi nunca hablamos por ahí más que para invitarnos al otro a dormir o pasar una tarde calmados.⎯ suspiró frustrado.

Los segundos se hicieron minutos y los minutos se hicieron horas, y mientras los chicos seguían ahí descartando todos los lugares posibles de en dónde podrían encontrarse sus amigas. Habían visto los papeles una y otra vez, leyendo chats por si les habían dicho a dónde irían, recordar las palabras de los padres en los testimonios.

Pero no llegaban a ningún lado más que tachar lugares imposibles de que ellas estén. Habían descartado las casas de todos, incluyendo de familiares. Negocios públicos, escuelas, lugares de deportes, y hasta fuera de Seoul ya que la única que tenía auto era HyunA, pero no se lo había llevado.

Intentaron sacar conclusiones de que tal vez decidieron irse de Seoul porque se cansaron de la sociedad, de sus problemas, familias o hasta de ellos mismos, y no sabían cómo decírselos así que recurrieron a escaparse. Pero era imposible, sus cosas seguían aquí, ninguna tenía dinero suficiente para irse a otra ciudad o hasta otro país, y dos eran menores de edad así que las otras cinco podían correr el riesgo de caer presas, y no creían que quieran eso.

⎯ El único lugar que queda es la casa de Presmut.⎯ comentó JiMin.

Presmut. El nombre de la calle que YuNa de tan solo oírlo era capaz de salir corriendo. A todos les daba miedo ese lugar, las pocas veces que pasaron salía un olor completamente asqueroso de ahí dentro, y hasta podrían jurar que escucharon gritos y llantos.

Hace muchos años, antes de que ellos nacieran, habitaba una familia en esa bella casa. Un padre, una madre, dos hijas y un hijo. Ante todas las personas eran la familia más feliz y unida del mundo, pero de puertas para dentro había otro cuento totalmente distinto.

Nunca supieron bien qué sucedió, solamente un día llegó una llamada a la policía del padre de la familia diciendo que había ocurrido un asesinato. Cuando los policías llegaron encontraron todos los cuerpos mutilados, sangre por todos lados y cosas rotas, era un verdadero horror.

Cuando llevaron las pocas partes de los cuerpos que seguían intactas hicieron una autopsia, en todas salieron las huellas del padre de la familia. Así que para cerrar el caso dijeron que había enloquecido y asesinó a todos, para después suicidarse él. Desde entonces, la casa perdió todo su brillo y alegría, pasando a ser un lugar oscuro y que apenas veías tenías ganas de irte corriendo para no volver más.

⎯ Yo no pienso entrar ahí.⎯ se negó SeokJin. Sí, amaba a las chicas, pero su vida estaba primero.⎯ ¿Nunca olieron el olor que sale de ahí? Parece de...

⎯ Putrefacción.⎯ completó TaeHyung con una mueca de seriedad.

⎯ Pues no me interesa, yo quiero recuperar a mi mejor amiga.⎯ habló JungKook rompiendo en llanto nuevamente.

⎯ Entonces iremos mañana.⎯ acordó HoSeok, haciéndose el valiente, pero la realidad era que por dentro quería refugiarse en los brazos de su madre y no salir más de ahí.

⎯ Mañana no podemos, nosotros tres entrenamos y ustedes ayudan a sus padres en el negocio.⎯ dijo JiMin, los demás asintieron.

⎯ Entonces el sábado.

⎯ Será Halloween.⎯ recordó SeokJin y todos lo miraron con el ceño fruncido.⎯ Los espíritus salen a buscar nuevas víctimas, ¿Qué les cuesta esperar un día más? El domingo iremos.

⎯ ¿De verdad quieres recuperar a las chicas?⎯ preguntó molesto YoonGi. SeokJin asintió después de unos largos segundos que se hicieron eternos.⎯ Entonces iremos el sábado, sin reproches.