25 de mayo.

          Estaba temblando desde hace casi media hora, cuando salí junto a Harry de mi casa. Habíamos parado por un sándwich en Subway y luego seguimos el camino. Hoy era el primer día de los cursos para entrar a la universidad y esta muy nerviosa.

—Tranquila, nena —Me dijo Harry —No tienes por qué estar nerviosa, puedes sentirte mal después.

—Lo sé, es solo que... siento algo, cómo una opresión en el pecho.

—Bueno, sé que causo eso en ti cuando estoy a tu lado, no exageres —Bromeó.

—Hablo enserio Harry, ¿y si no me concentro o aprendo? ¿y si le caigo mal a los maestros y después la llevan contra mí todo el año? ¿y si hay chicas más listas y bonitas que yo y nadie se junta conmigo? ¿y si...?

—En primera; eres una chica sumamente inteligente para aprender todo, en segunda; eres una chica muy agradable y aplicada, al menos hasta donde yo sé, le caeras bien a los maestros, y en tercera; repito, eres sumamente inteligente y eres hermosa, debes saberlo —Dijo él, acariciando mi muslo mientras ponía atención a la carretera —Vas a conseguir muchos amigos ahí, eso sí, si algún chico anda detrás de ti, dímelo para golpearlo.

          Me reí. Harry sabía como tranquilizarme. Su tacto me provocaba cosquillas, así que lo aparte y él sonrió.

         Luego de un par de minutos llegamos a la universidad, era enorme y tenia edificios muy altos. Harry se bajó del auto y abrió mi puerta, luego caminamos hasta el jardín de la entrada y nos sentamos ahí mientras esperabamos que dijeran que podíamos pasar. Él comió un poco de su sándwich y justo cuando lo terminó, un señor de algunos cincuenta años llamó a todos para que entraran.

          Fuimos por mi mochila al auto de Harry, preguntándome porqué no la baje antes, y le di un pequeño beso. Él me sonrió y me atrajo a sus brazos en un abrazo lleno de humor y cariño. Luego de que me soltó me aleje caminando escuchando como gritaba:

—Camina por la sombrita para que no te derritas, bombón —Dijo y yo sólo rodé los ojos y seguí caminando hasta el salón de clases donde darían los cursos.

          Al llegar al salón, escuché una voz masculina diciendo mi nombre, frunci el rostro y miré a todos lados. Me topé con un chico de algunos tres centímetros más bajos que yo y con el cabello castaño alborotado.  Louis me sonrió y yo frunci aún más el rostro.

¿Debía acercarme a él?

          Yo no solía hablarle en la preparatoria, exceptuando la vez que me felicitó en mi cumpleaños (un encuentro incómodo, debo recordar). Pero tampoco conocía a nadie más aquí y no había visto por ningún lado a Niall, tal vez había tocado en otro salón, así que me acerqué con duda a Louis, quien hizo más grande su sonrisa.

          Me senté en la silla al lado de él, en un pupitre compartido. Nunca me habían gustado este tipo de asientos, sentía que la otra persona, fuese quien fuese, invadía mi espacio personal.

—Me alegra verte, no sabía que entrarías aquí, no conozco a nadie, me sentía un poco intimidado —Confesó.

—¿Intimidado? ¿Tú? —Pregunté y él rió.

—Sé que nunca hablamos en la preparatoria y que veías que vestía de modo rebelde, pero creo que he decidido dejar esa faceta atrás, aunque sigo siendo igual de sarcástico — Lo dijo como si fuera una broma.

—Bueno, tienes razón, nunca hablamos y todos te etiquetaban como el chico abusivo...

Su ceño se fruncio y parecía un poco triste.

—¿El chico abusivo? yo nunca le hize nada a nadie, solamente decían eso por como vestía y con las personas que me juntaba, los que no me conocían me etiquetaban así sin darme la oportunidad de que les mostrara como era en realidad —Dijo frunciendo los labios —De echo, no es por ser yo, pero al menos creo que soy buena onda.

—Lo siento —Dije apenada.

—¿Por qué?

—Yo era una de esas personas que te etiquetaba así —Dije mordiendo mi labio — Pero ya he visto que eres una buena persona, incluso cuando te acercaste a felicitarme en mi cumpleaños.

—Sí... esa vez trataba de hacer amigos.

          El profesor entró y nos dijo que abrieramos el cuadernillo que nos habían otorgado. El profesor era muy gruñón y esperaba que no me tocara alguna clase con él cuando ya iniciaramos clases. Suspiré al pensar que estos eran apenas los cursos, que de hecho no creo que me sirvan de nada.

—Pss, ¿me puedes prestar un lápiz? —Preguntó un chico en otro pupitre.

—Eh... no tengo uno extra —Le dije.

—Puedes partir el tuyo a la mitad —Dijo.

—Amigo, no se a qué vienes a la universidad si no puedes cargar con un lápiz — Le dijo Louis —Deja que se concentre.

—Baje la voz, joven —Dijo el profesor —Esto es la universidad, no un mercado.

—Eso es lo que precisamente le decía a mi compañero de aquí al lado, no puede cargar un simple lápiz y tiene que molestar a mi compañera —Le dijo él —Jesucristo, estamos en la universidad y él no puede tener un lápiz.

—No hay que hacer tanto alboroto —Le dijo el profesor a Louis y luego miró al chico del otro pupitre—Y usted muchacho, vaya a consegui un lápiz y deje que sus demás compañeros se concentren.

          El chico rodó los ojos y salió del salón. Louis rió por lo bajo y siguió trabajando en su cuadernillo.

—No era necesario hacer tanto alboroto —Repetí las palabras del maestro a Louis en voz baja.

—Bueno, tal vez esa era la etiqueta con la que me conocían en la preparatoria y lo confundían con ser abusivo —Dijo.

—¿A qué te refieres? —Pregunté.

—Soy el rey del alboroto —Contestó Louis volviéndose a concentrar en su cuaderno.

***

          Había descubierto que Louis podía llegar a ser más inteligente que yo, al menos en Ciencias, había resuelto ecuaciones  químicas en la mitad de tiempo que yo. Y en español había respondido a todas las analogías, también en la mitad de tiempo que yo. Aunque en matemáticas él me pidió un poco de ayuda pero después contestó todo él solo.

          Al terminar por fin el primer día de los cursos él se quedó esperando afuera del salón de clases, mientras yo guardaba mis cosas. Cuando salí el me sonrió tímidamente.

—Yo... iba a preguntarte si podíamos salir algún día — Me dijo.

          Era una escena tierna ver a alguien, que había caracterizado siempre como rudo, ser tímido. Hize una mueca.

—Louis, yo... tengo novio —Le dije —Lo siento.

—¡Oh, ya lo sé! —Él rió — No me refería a salir, en ese sentido. Me refería a una salida como amigos.

          Bueno, podía hacer nuevos amigos, Harry me dijo que debía e iba a hacerlo, y por el momento no conocía a nadie más que a él. Aunque yo tuviera novio podía salir con otros chicos como amigos. Eso no tenía nada de malo. Asentí y el sonrió.

—Te parece ¿mañana? —Preguntó.

—Claro —Le respondí.

—¿A qué hora te va bien?

—Después de salir de los cursos supongo...

—Genial, entonces nos vemos mañana — Dijo con una sonrisa y asentí.

          Caminé hasta la salida de la universidad y mi celular vibró. Era un mensaje de Harry que me decía que estaba afuera esperándome. Cuando llegué hasta él le di un golpe juguetón en el hombro.

—No tenías por qué recogerme —Le dije dándole un pico.

—Mhm... —El murmuró contra mis labios—No puedo creer que hace dos días cumplimos cinco meses de novios —Dijo aprentandome más contra él.

          Tenía uno de sus brazos rodeando mis hombros y el otro en mi cintura, luego ocultó su rostro en mi cuello. Me encantaba cuando me abrazaba así. Simplemente ne encantaba. Levantó su cabeza y me dio una sonrisa.

—Me encanta tu perfume —Dijo.

—Gracias —Le respondí —Después de todo tu me lo regalaste hace dos días.

          El asintió y abrió la puerta de su auto para que yo entrara. Luego él entró unos segundos después por la puerta del conductor y puso el auto en marcha.

—¿Sabes? —Le dije —Me reencontré con alguien en los cursos.

—¿A sí? —Preguntó interesado.

—Sí... alguien que tal vez no te agrade —Le dije —Y me invitó a un paseo, como amigos obviamente.

         Y lo decía de verdad, incluso si yo le llegara a gustar a Louis, que dudo que sea así, a mi no me atraía él, admitía que es guapo, pero a mi solo me gusta mi novio, Harry. No lo cambiaría por alguien más.

Su rostro se fruncio.

—¿Louis? —Preguntó adivinando.

—¿Cómo supiste? —Cuestione sorprendida.

—Es la única persona que he conocido por tu parte y que no me agrada, como dijiste —Explicó — Aún así ¿por qué te invitó?

—Tu dijiste que iba a conseguir muchos amigos, hasta ahora he conseguido uno —Le dije.

—¿Tu aceptaste? —Asentí ante su pregunta y él continuó hablando algo molesto —Bueno, no puedo prohibirte que salgas con un amigo, y fingire que estoy felíz con eso aunque por dentro esté ardiendo en celos.

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Quiero un novio como Harry, que me diga piropos bonitos y me diga bombón. Y cuando quiera ser imponente y se ponga celoso, en su lugar se vea tierno. Ah.

-¿Qué piensan sobre Louis?

-¿Podrían pasarse por mi fic Angelic Organics? Es de Harry :)

Subo muy pronto, las adoro xx.

Capítulo dedicado a @AgusMusic ♥