Maldita sea, faltan sólo cinco horas para el concierto. Estoy literalmente temblando.

—¿Estás lista? —Me preguntó Harry por teléfono.

—Dios mío, sí.

—Paso por ti en una hora, estate lista y no olvides los pases.

—Está bien.

—Bueno, te veo al rato, ¡adiós!

—¡Adiós! —Le dije.

Escuchaba aún su respiración del otro lado de la línea.

—Cuelga tú primero — Me dijo.

—No, cuelga tú primero —Le contesté.

Esto era muy ridículo y cursi.

—Pip pip pip.

—¿Harry?

—Pip pip pip.

—¿Sigues ahí?

—Pip pip pip.

Oh, el idiota sí me colgó.

Una hora más tarde un claxon sonó fuera de mi casa, yo ya estaba lista y tenía una pequeña mochila con los boletos y una hamburguesa mientras entrábamos a la arena. Me asomé por la ventana y vi a Harry en su auto platicando con alguien más. Me despedí de mi mamá y salí de la casa. Frunci el rostro al ver a una chica con Harry, ella conducía. Era rubia y tenía ojos verdes, sinceramente era muy linda. ¿Es normal que esté sintiendo celos?. Caminé hasta el auto y Harry salió.

—¡Hola! —Me dijo.

Me dio un abrazo y un pequeño beso.

—Entra —Me dijo.

Entré en los asientos traseros y Harry entró situándose a mi lado. La chica me sonrió por el retrovisor.

—Hola, soy Gemma, tú debes ser Nereida.

Rayos, seguro era novia de Harry, pero el me había dado un beso, oh ahora estoy especulando.

—Sí — Le di una sonrisa forzada.

—Ella es mi hermana —Dijo Harry.

Oh, ahora me sentía patética, mucho. Gemma encendió el auto y lo puso en marcha.

—Harry me ha platicado mucho de ti.

Miré a Harry y sonreí, el tenía el ceño fruncido.

—Espero que cosas buenas —Le dije a Gemma.

—Si supieras, se la pasa hablando de...

—Gemma —Dijo Harry como queriendo que pare de hablar.

—De que ama como huele tu cabello, y bueno ahora lo compruebo, es un aroma muy lindo, ¿qué champú usas?

—Gemma —Le llamó Harry apretendo la boca.

—Y también me ha contado de como le gusta tu personalidad y tu...

—Gemma, ¿puedes callarte? —Le preguntó Harry.

Gemma rodó los ojos y sonrió, luego se encogió de hombros y siguió manejando.

—Por cierto, ¿por qué colgaste hace rato?—Pregunté.

—Oh, me dijiste que colgara yo primero.

—Eres tan idiota Harry —Le dijo Gemma.

—¿Por qué? —Le preguntó él, ofendido. —Nadie entiende a las mujeres, si les hacemos caso se enojan y si no también.

—Se supone que debes seguir el juego pero tu eres cero romántico.

—Yo puedo ser romántico —Dijo Harry —Ponme a prueba.

—Bien, dile algo lindo a Nereida —Dijo Gemma.

Harry pensó un momento.

—Bien aquí voy, tus ojos son como dos faros que iluminan mi vida, tu alma es la que quiero a mi lado, sin ti mi vida está destruida, no me dejes, mejor vamos por un helado. —Recitó Harry. —Acabo de inventar eso y dices que no soy romántico.

Gemma río y sacudió su cabeza.

—Mi hermano es un idiota, ¿lo sabías? —Me preguntó Gemma y yo asentí.

—Genial, la pones en mi contra.

Media hora después, Gemma nos había dejado en la Arena haciendo fila para poder entrar. La fila era larguísima. Harry había comprado unas galletas con chispas de chocolate.

—¿Me das? —Le pregunté.

—Toda la noche — Me respondió.

Levanté una ceja.

—¿Toda la noche, qué? —Pregunté.

—Ay Nere —Me dijo abrazandome por la cintura —Eres tan inocente.

—Yo no soy inocente —Le dije molesta.

—Eres tierna cuando te enfadas, pero también eres endemoniadamente sexy.

—Y tú...

Harry me calló dándome un corto beso.

—¿Crees que puedes besarme cuando se te da la gana?

Harry asintió y me dio otro beso. Luego se separó de mi y me sonrió.

—Idiota —Le susurré y él rió.

—¿Quieres que te cuente un chiste? —Preguntó.

—No.

—Oh, ya no estés enojada sólo porque te dije que eres inocente.

Rodé los ojos.

—Bien, cuentalo, aunque sé que no me reiré.

Harry arrugó su nariz ofendido.

—Bien, está una nuez, un brócoli y un hongo, y la nuez dice; soy una nuez y parezco un cerebro, el brócoli dice; soy un brócoli y parezco un árbol y luego el hongo dice; soy un hongo y no me gusta éste juego.

Lo miré fijamente, obvio no le entendí.

—No entendí —Le dije.

Él río.

—Y luego dices que no eres inocente.

—¿por qué?

—¿De qué tiene forma el hongo? —Me preguntó.

—De... no sé.

—Olvidalo —Dijo riéndose.

Miré mi celular, faltaban aproximadamente dos horas para que comenzara aún. Harry tarareaba una canción que se me hacía conocida.

—¿Qué tarareas? —Pregunté.

—Una canción de Nemo que modifique.

—¿Modificaste?

—Sí, ¿recuerdas esa de "Nadaremos"? —Preguntó.

—¿La de Doris?

Él asintió: —Pues yo le cambié la letra.

—¿Y cómo va?

—Vas a decir que soy un pervertido vulgar.

—Sólo dime cómo va.

—Así — Me dijo —¿Si la vida te derrota qué hay que hacer?, follaremos, follaremos, en la cama, cama, cama, ¿que hay que hacer?, follar foll...

— Es suficiente —Lo interrumpi —Eres un pervertido vulgar.

Él se rió mostrando sus hoyelos.

—Soy un hombre, ¿qué mas quieres?

—¿Que los hombres no piensan en otra cosa más que en sexo?

—Sí, en la comida. —Respondió

—Aparte de eso...

—Pues cuando te veo a ti pienso en besarte.

Rodé los ojos y decidí cambiar de tema.

—¿Alguna vez te has perdido? —Pregunté.

—Sí — Me dijo de manera tierna — En tu mirada.

Sonreí y le pasé la mano por el cabello, él cerró los ojos, parecía un pequeño gato cuando lo acaricias.

Finalmente pasaron dos horas y ya estabamos en nuestros asientos. Santo cielo, primera fila. Y después del concierto los vería en persona. Las luces se apagaron y yo grité, Harry se rió de mi expresión.

—Damas y caballeros —Se escuchó una voz.

Jake entró al escenario sonriendo y casi me desmayo. ¡Lo estaba viendo en persona! No lo puedo creer.

—Muchas gracias por estar aquí, de verdad.

Otra voz se escuchó y estaba segura de que era Danny. Él entró al escenario igual de sonriente. Maldita sea, amo su cabello. Lewi entró corriendo y lanzó una especie de grito.

—Hoy es una noche muy...

—Tarde —Le corrigió Jake y varios rieron.

—Bueno, una tarde muy especial para nosotros porque...

—Es nuestro primer concierto y es en nuestra ciudad natal, ¡arriba Manchester!— Dijo Charley entrando al escenario.

—Ese chico se robó mi corte de cabello —Dijo Harry en mi oído señalando a Charley.

—Pero si tienes el cabello mucho más largo.

—Cuando lo tenía corto hace como un año lo tenía en ese estilo.

Primero cantaron Wait on me. Y oh mi dios. La arena comenzó a cantar a coro. Creo que era mi canción favorita. Harry tarareaba las canciones porque no se sabía la letra. Luego cantaron My and my broken heart. Harry sí cantó está. Después cantaron Make out. Harry me tomó por la cintura y cantó en mi oído:

—I just want to hold your hand,
I just want to pull you closer,
Baby do you feel like I do,
Baby if you hang around,
I can see it going down,
And get a little freaky with you.

Me preguntaba si Harry sabía que tenía una hermosa voz. Cantaba tan suave y afinado. Siguieron cantando el álbum completo Let the road. Y más tarde al término del concierto, un guardia subió al escenario e indicó a dónde debían ir los que tenían pases a backstage.

Seguimos a el guardia por un pasillo, había varias personas por detrás de nosotros y algunas cuantas por delante. Yo estaba temblando, Harry me acarició el brazo y me dijo que me tranquilizara si no me desmayaría antes de conocerlos.

Pasaron veinte minutos y llegamos hasta adelante en la fila, el guardia nos dio unas indicaciones y nos hizo pasar. Primero vi la cabellera rubia de Danny y la espalda de Jake. Los cuatro se voltearon a vernos y sonrieron. Yo casi corro, pero decidí no fangirlear mucho porque pensarían que estoy loca y me acerqué caminando rápido a ellos, los abraze a los cuatro mientras ellos me saludaban.

Platicamos un poco y les hize algunas preguntas que me mataba por saber sobre ellos. Les pedí una foto y un guardia la tomó para que Harry pudiera salir en ella también.

—Dos minutos —Nos anunció uno de los guardaespaldas.

—Muchas gracias por venir esta noche — Dijo Charley.

—Bueno, la verdad no me hubiera sido posible verlos sin la ayuda de él, su nombre es Harry.

Todos miraron a Harry, este tenía el rostro fruncido y miraba fijamente a Danny. Danny me miraba a mi.

—Un minuto.

—Ya debemos irnos, amor —Dijo Harry remarcando la última palabra.

Aquí viene el Harry celoso. Danny dejó de verme a mí para ver a Harry, después miró el suelo.

—Sí — Dije haciendo una mueca.

—Esperamos volver a verlos —Dijo Lewi.

—Sí, esperamos volver a verte —Dijo Danny.

Harry tomó mi mano y me encaminó hasta la puerta.

—¡Los amo! —Le grité a los cuatro.

—¡Nosotros a ti! —Me dijeron todos antes de que saliera por la puerta.

Seguramente no me aman pero dicen eso. Aún así. ¡Dijeron que me amaban!. Miré a Harry que seguía sin hablar.

—¿Qué sucede? —Le pregunté.

—Ese idiota no dejaba de mirarte.

—¿Qué? ¿de qué hablas?

—El rubio.

—¿Danny? —Pregunté —¿Danny me miraba? ¡oh mi dios, debí de haber venido más presentable!

Harry rodó los ojos.

—Bueno, no voy a permitir que un idiota arruine mi noche contigo.

—Danny no es un idiota.

—Para mi sí.

Ahora yo rodé los ojos. Fuimos hasta un área verde de la Arena, estaba comenzando a oscurecer pero aún había luz.

—Tengo sed, ¿quieres una limonada? —Me preguntó Harry.

Yo asentí mientras me sentaba en el césped. Él fue hasta un puesto de limonada. Un chico llegó y se sentó a mi lado en el césped. Lo miré confundida y él me sonrió.

—Tal vez esto te suene raro pero... mis amigos me están diciendo que estoy horrible y por eso nunca consigo novia, no, no creeas que te voy a pedir eso —Dijo tímidamente señalando a dos chicos que estaban a unos metros —Sólo quiero saber si me puedes dar tu más sincera opinión, ¿crees que soy atractivo?

Primero lo miré tratando de no reír. Pero bueno, luego lo miré bien. No era el hombre más guapo del mundo pero tampoco era feo.

—Supongo que sí — Le dije.

El chico sonrió.

—Entonces, ¿por qué no estás besandome?—Preguntó.

—¿Perdón?

El chico se abalanzó hacia mi tumbandome en el piso y me besó. Lo empuje tratando de quitarmelo de encima.

—¡Apartate! —Le dije.

—Sabes que quieres besarme.

Me trató de besar de nuevo pero giré mi cabeza.

—¡Que no, quitate!

Se escuchó un golpe y de pronto ya no sentí su peso encima de mi. El chico estaba tirado en el suelo tocándose el ojo. Me giré para ver a Harry con la mandíbula apretada y sus manos hechas puños, el vaso de cartón donde tenía la limonada se doblaba.

—Al parecer no escuchaste que ella te dijo que no —Le dijo Harry.

—¡Este es un asunto entre ella y yo! —Dijo el chico. —¡¿Quién eres tú para interferir?!

—Resulta que soy su novio, imbécil —Le respondió Harry.

El chico me miró con ojos de sorpresa.

—¿Por qué no me dijiste que tenías novio?

—Ni siquiera tiene por qué decirtelo —Respondió Harry por mi. — ¿Te puedes ir o quieres que te de otro golpe?

El ojo del chico comenzaba a ponerse morado. Pero aún así se levantó y trató de golpear a Harry, sólo que Harry fue más rápido y le lanzó una patada en sus partes bajas. El chico cayó de nuevo al suelo, los otros dos chicos que se suponía eran sus amigos fueron a ayudarlo.

Harry me ofreció una mano para que me levantara del suelo y caminamos rápidamente hacia su auto. Gemma lo había dejado en el estacionamiento de la Arena después de dejarnos en la entrada. Cuando lo encontramos, Harry abrió la puerta del copiloto para que yo entrara y segundos después él entró por la parte derecha en el asiento del conductor.

—Es increíble, no te puedo llevar a ningún lado porque viene un idiota a tratar de quitarme el puesto.

—¿El puesto? —Le pregunté —¿Qué puesto?

Él se encogió de hombros y comenzó a conducir. Llevábamos algunos minutos en silencio cuando él lo rompió.

—¿Eres virgen?.

Esa pregunta me desconcerto totalmente.

—¿Qué?

—Que si eres virgen.

—¿Por qué quieres saberlo?

—Curiosidad —Me dijo.

—Pues no —Le respondí.

Él condujo más despacio.

—¿No qué?

—No lo soy —Le dije.

Él arqueo una ceja.

—¿No me habías dicho que sí?

—De echo no te dije si lo era o no, sólo evadi el tema porque no te conocía y no iba a darte esa información.

Él asintió.

—¿Y con quién la perdiste?

—¿De verdad estás preguntándome eso?

—Sí.

—Con el único novio que he tenido.

—¿Hace cuánto?

—¿Es una especie de interrogación sobre mi vida sexual?

Harry asintió.

—¿Y cómo para qué quieres saberlo?

—Simple curiosidad —Me respondió.

Rodé los ojos.

—Como hace ocho meses, cuando acababa de cumplir los diescisiete—Le dije.

Él hizo cuentas con sus dedos.

—¿Cumples en febrero?

Asentí.

—¡Genial, yo igual, el primero! ¿y tú?

—El once.

—¿Y cuántas veces lo hiciste con él? —Me preguntó volviendo al tema.

—¿Que mierda Harry? ¡deja de preguntar ese tipo de cosas!

Seguramente yo estaba sonrojada porque el se rió.

—Bueno, somos... ¿qué somos? —Preguntó.

—Conocidos — Le dije y el rió.

—Bueno, como buen conocido debo de saberlo.

—Dos —Le respondí —Y ya no voy a responder nada.

—Una más — Me dijo — ¿Te arrepientes de ello?

—En realidad no, fue muy lindo todo —Le dije.

—¿Y por qué rompieron? — Me preguntó dando un sorbo a su limonada.

—¿Quién dijo que rompimos?

Él escupió el líquido de su boca y yo solté una carcajada.

—Era broma, cuatro meses después rompimos, ya no congeniabamos.

—Gracias a Dios —Susurró Harry.

—¿Y tú cuándo fue tu última vez? —Le pregunté.

—Hace cómo seis meses.

—¿Era tu novia o un ligue de una noche?

—Fui a una fiesta y me emborrache, me puse caliente y de un momento a otro...

—Oye para, yo no te pregunté eso, no necesitas explicarmelo.

—Siento que debo hacerlo —Me dijo —Como decía, de un momento a otro estaba en una habitación con una chica y bueno, sí fue de una noche, aunque me sorprende porque yo no soy de ese tipo.

—Ah.

—¿Y cuándo fue la última vez que besaste a alguien? —Preguntó Harry.

—Hace como media hora, el chico que me besó. —Le dije.

—Aparte de él.

—A ti, hace como dos horas.

—Aparte de mí también —Dijo sonriendo con orgullo.

—Pues a un chico en la preparatoria, hace como un mes y medio.

Harry fruncio su rostro.

—¿Cuando ya me conocías?

Asentí.

—¿Por qué? —Me preguntó, ¿molesto?.

—Por que sí, no tengo novio, puedo besarme con quien quiera —Le dije —Bueno, tampoco soy una puta, pero sí.

Harry frenó y se detuvo en medio de la calle. Se quitó el cinturón de seguridad y se acercó a mí, puso una de sus manos en mi nuca y me dio un beso firme.

¿Les había dicho cuánto me gustaban sus labios?, pues se los digo de nuevo, me encantan. Susurró algo que no entendí y se separó de mí.

—¿Qué? —Le pregunté.

Volvió a acercarse basándome de nuevo y murmuró una vez más contra mis labios:

—Nere, ¿quieres ser mi novia?

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¡Capítulo largo! (creo), más te vale decir que sí, Nereida.

¡Hey!
Ojalá les haya gustado. (Por si alguien no lo sabía, Rixton es una banda real, no es demasiado conocida pero sí, su música es hermosa)

Pregunta: ¿Cuál es su canción favorita? (Puede ser de 1D o de cualquier otro artista), la mía es "Thousand of years" de Christina Perri.

Si quieren que les dedique un capítulo, comenten este párrafo, lo dedicare según el orden en que comenten. (Varias me han pedido que les dedique pero soy pesima con mi memoria y no recuerdo quién fue)

¡Voten y comenten!

Las adoro, subo pronto, xx.